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Carta al embajador Arturo McFields Yescas: Lección de dignidad. De Paolo Luers & “Seguir guardando silencio y defender lo indefendible es imposible”. Del embajador de Nicaragua
Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, sábado 26 marzo 2022Muy estimado Arturo:Que el embajador de un país gobernado por una mafia, como tu patria Nicaragua, use los micrófonos de la Organización de Estados Americanos para denunciar, sin titubeo y sin ninguna ambivalencia, la dictadura, es una muestra muy inusual de dignidad. Es exactamente lo que hiciste el día de hoy, 23 de marzo 2022. Normalmente, nadie en América Latina pone atención a los discursos en la OEA, pero esta intervención tuya va a sonar como bombazo en muchas casas presidenciales del continente, donde los funcionarios, una vez seducidos por la cercanía al poder, se vuelven defensores de cualquier barbaridad que sus ‘líderes’ cometen. Y aquí, en El Salvador, algunos funcionarios no van a querer verse en el espejo esta noche. “Todas las puertas se me cerraron”, dijiste en tu discurso, luego de contar que durante meses propusiste la liberación de los presos políticos. Me vienen a la mente los ministros del gabinete de Bukele que, en confianza, muy en privado, en muchas ocasiones expresaron: “Yo sé que esta fue una decisión muy mala, pero la tomó el presidente, y no hay espacio para discutir.” Un ejemplo: ¿Cuándo vamos a escuchar a la ministra de relaciones exteriores públicamente, dando la cara al país, expresando su incomodidad con el autoritarismo, la improvisación ligerea y los exabruptos del presidente? ¿Cuándo? Seguramente no antes de cobrar sus $250 millones... “Denunciar la dictadura de mi país no es fácil, pero seguir guardando silencio y defender lo indefendible es imposible”, dijiste ante la OEA. En El Salvador ni siquiera los ministros y altos funcionarios que al fin ya no aguantaron y renunciaron se han atrevido a hablar. Se fueron calladitos, tragándose sus frustraciones, y nadie levantó la voz. Tu dijiste, en voz alta y ante las cámaras del continente: “Tengo que hablar, aunque tenga miedo; tengo que hablar, aunque mi futuro y el de mi familia sean inciertos; tengo que hablar, porque si no lo hago, las piedras mismas van a hablar por mi.” Te honra. Y es un mensaje a los funcionarios -en tu propia Nicaragua, pero también en El Salvador y Venezuela. El silencio es cómplice - y tu te atreviste a romperlo. No sólo el silencio sobre Nicaragua, también el silencio sobre Ucrania y los crímenes de Rusia que la invade. Como última acción en tu cargo publicaste hoy un comunicado que seguramente habrá dado úlcera a Daniel Ortega: “La Misión Permanente de Nicaragua ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) tiene el honor y deber patrio de sumarse en respaldo a la declaración La Situación en Ucrania leída en el Consejo Permanente de la OEA el pasado 25 de febrero de 2022.En nombre del pueblo y gobierno de Nicaragua, condenamos enérgicamente la guerra de agresión injustificada, las violaciones flagrantes a los derechos humanos, el asesinato de inocentes y la invasión a un país libre. La guerra no provocada contra el pueblo ucraniano merece nuestra mas firme y unánime condena. Washington D.C.,23 de marzo de 2022.” No hace falta decir que Daniel Ortega había dado instrucción de votar en contra de esta resolución, igual que en Naciones Unidas. ¿Cuándo un diplomático salvadoreño va a decir en público que es una locura peligrosa cómo el presidente de El Salvador provoca tensiones con Estados Unidos, con los países de la Unión Europea y Canadá, coqueteando con el dictador ruso Vladimir Putin? Claro que muchos de los funcionarios de cancillería están espantados, pero solo lo expresan en pláticas confidenciales “off the record”, que solo sirven para conciliar su cargo de conciencia. Para terminar tu discurso, dijiste algo alentador: “La gente de adentro del gobierno y la gente de afuera está cansada, cansada de la dictadura y sus acciones. Y cada vez van a ser más los que digan ‘basta’.” Tal vez sea cierto en el caso de Nicaragua. Ojalá, tu lo sabrás mejor que yo. En el caso de El Salvador, estoy más pesimista, viéndoles las caras a los oportunistas cínicos que rodean a Bukele, felices de ser parte del espectáculo y de la piñata. Temo que tendremos que seguir el camino de Nicaragua a la dictadura hasta el final... Pero tal vez, el paso valiente que diste -de la vergüenza y la complicidad a la dignidad y la resistencia- puede animar a algunos en El Salvador a romper el silencio. Gracias, Arturo. Te saludo Paolo LuersPalabras del embajador de Nicaragua Arturo McFields Yescas al Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos OEA. 23 de marzo 2022.Wilfredo Miranda Aburto@PiruloAr·3h#URGENTE Arturo Mcfields se le voltea al régimen en la OEA: “Denuncio a la dictadura de Nicaragua” (Más video)divergentes.comArturo Mcfields se le voltea al régimen en la OEA: “Denuncio a la dictadura de Nicaragua”“Tomo la palabra el día de hoy en nombre de más de 177 presos políticos y más de 350 personas que han perdido la vida en mi país desde el año 2018”, dijo el diplomático, quien hasta hace poco era...1844Carlos F Chamorro@cefeche·3h"Hablo en nombre de miles de servidores públicos, civiles y militares, que son obligados por el régimen a repetir consignas, porque si no lo hacen pierden su empleo" Declaración del embajador de Nicaragua ante la OEA, Arturo Mcfields, denunciando a la dictadura Ortega Murillo.Citar TweetOEA@OEA_oficial · 3hPalabras del Embajador de #Nicaragua Arturo McFields Yescas al Consejo Permanente de la #OEA9121289Wilfredo Miranda Aburto@PiruloAr·3h#URGENTE Arturo Mcfields se le voltea al régimen en la OEA: “Denuncio a la dictadura de Nicaragua” (Más video)divergentes.comArturo Mcfields se le voltea al régimen en la OEA: “Denuncio a la dictadura de Nicaragua”“Tomo la palabra el día de hoy en nombre de más de 177 presos políticos y más de 350 personas que han perdido la vida en mi país desde el año 2018”, dijo el diplomático, quien hasta hace poco era...1844Carlos F Chamorro@cefeche·3h"Hablo en nombre de miles de servidores públicos, civiles y militares, que son obligados por el régimen a repetir consignas, porque si no lo hacen pierden su empleo" Declaración del embajador de Nicaragua ante la OEA, Arturo Mcfields, denunciando a la dictadura Ortega Murillo.Citar TweetOEA@OEA_oficial · 3hPalabras del Embajador de #Nicaragua Arturo McFields Yescas al Consejo Permanente de la #OEA9121289Tomo la palabra, el día de hoy, en nombre de más de 177 presos políticos y más de 350 personas que han perdido la vida en mi país desde el año 2028. Tomo la palabra en nombre de los miles de servidores públicos de todos los niveles, civiles y militares, que hoy son obligados por el régimen de Nicaragua a fingir, a llenar plazas y a repetir consignas, porque si no lo hacen, pierden su empleo. Denunciar la dictadura de mi país no es fácil, pero seguir guardando silencio y defender lo indefendible es imposible. Tengo que hablar, señor presidente, aunque tenga miedo; tengo que hablar, aunque mi futuro y el de mi familia sean inciertos; tengo que hablar, porque si no lo hago, las piedras mismas van a hablar por mi. Días antes de anunciar nuestro retiro de la OEA, tuvimos una reunión en cancillería con un equipo de asesores presidenciales. En este encuentro, yo sugerí que se liberar por lo menos unos 20 presos políticos de la tercera edad y a otros 20 presos comunes cuya salud merecía y merece esta consideración. Esto sería, les dije, algo humanitario y políticamente inteligente, ya que nadie debe morir en la cárcel - y menos siendo inocente o por falta de atención médica adecuada, o no tener atención médica del todo. Nadie me hizo caso, señor presidente. En este momento se me dijo: “No vamos a tomar nota de este comentario. Vos sabés lo que puede pasar, y acordá que la derecha, entre más se le da, más quiere. Esto es lo que se me dijo en este momento. En el gobierno, nadie, nadie escucha - y nadie habla. Intenté varias veces, durante varios meses, pero todas las puertas se me cerraron. Como ex-miembro del cuerpo de paz de Noruega, siempre creí que el diálogo, la diplomacia no eran tan importantes en tiempos de paz y democracias robustas. La diplomacia es necesaria en momento difíciles, en momentos complejos de crisis democráticas, como en mi país, sin embargo lo que me he encontrado en estos meses, lo que pasa en mi país, supera mis pocas capacidades diplomáticas. Desde 2018, Nicaragua se convirtió en el único país en Centroamérica, y probablemente en América Latina.... (Arturo McFields es interrumpido por el embajador Méndez, secretario general adjunto de la OEA, que preside la sesión y objeta que el embajador nicaragüense esté hablando sobre asuntos más allá de Nicaragua) Nicaragua se convirtió en el único país de Centroamérica donde no hay periódicos impresos, no hay libertad de publicar un simple tuit de un comentario en las redes sociales, no hay un organismo de Derechos Humanos, ni uno solo, no existe, todos fueron cerrados, expulsados o clausurados. No hay partidos políticos independientes, no hay elecciones creíbles, no hay separación de poderes, sino poderes fácticos. Este año se ha comenzado a confiscar las universidades privadas y se ha cancelado 137 ONGs -católicos, evangélicos, ecologistas... ¡Operación Sonrisa!, señor presidente... y la lista sigue creciendo. 170 mil nicaragüenses han huido del país, y otros están huyendo, mientras que yo estoy hablando en este momento. Señor presidente, para terminar quiero decir: Aunque pareciera que todo está perdido y que el panorama está nublado este día de hoy, yo creo firmemente, como le he dicho al secretario Almagro, que hay esperanza. Lo que dicho a mucha gente: Creo que hay esperanza. Quiero decirles que la gente de adentro del gobierno y la gente de afuera está cansada, cansada de la dictadura y sus acciones. Y cada vez van a ser más los que digan basta, porque la luz, la luz siempre puede más que las tinieblas; porque el amor es más fuerte que el odio; porque se puede engañar a la gente por un tiempo, pero no todo el tiempo. Dios a veces tarda, pero nunca, señor presidente, Dios nunca olvida. Muchas gracias.
Making America Stupid
(Op-Ed Columnist, New York Times)Imagine for a minute that attending the Republican convention in St. Paul, sitting in a skybox overlooking the convention floor, were observers from Russia, Iran and Venezuela. And imagine for a minute what these observers would have been doing when Rudy Giuliani led the delegates in a chant of “drill, baby, drill!”I’ll tell you what they would have been doing: the Russian, Iranian and Venezuelan observers would have been up out of their seats, exchanging high-fives and joining in the chant louder than anyone in the hall — “Yes! Yes! Drill, America, drill!” — because an America that is focused first and foremost on drilling for oil is an America more focused on feeding its oil habit than kicking it.Why would Republicans, the party of business, want to focus our country on breathing life into a 19th-century technology — fossil fuels — rather than giving birth to a 21st-century technology — renewable energy? As I have argued before, it reminds me of someone who, on the eve of the I.T. revolution — on the eve of PCs and the Internet — is pounding the table for America to make more I.B.M. typewriters and carbon paper. “Typewriters, baby, typewriters.” Of course, we’re going to need oil for many years, but instead of exalting that — with “drill, baby, drill” — why not throw all our energy into innovating a whole new industry of clean power with the mantra “invent, baby, invent?” That is what a party committed to “change” would really be doing. As they say in Texas: “If all you ever do is all you’ve ever done, then all you’ll ever get is all you ever got.” I dwell on this issue because it is symbolic of the campaign that John McCain has decided to run. It’s a campaign now built on turning everything possible into a cultural wedge issue — including even energy policy, no matter how stupid it makes the voters and no matter how much it might weaken America. I respected McCain’s willingness to support the troop surge in Iraq, even if it was going to cost him the Republican nomination. Now the same guy, who would not sell his soul to win his party’s nomination, is ready to sell every piece of his soul to win the presidency. In order to disguise the fact that the core of his campaign is to continue the same Bush policies that have led 80 percent of the country to conclude we’re on the wrong track, McCain has decided to play the culture-war card. Obama may be a bit professorial, but at least he is trying to unite the country to face the real issues rather than divide us over cultural differences.A Washington Post editorial on Thursday put it well: “On a day when the Congressional Budget Office warned of looming deficits and a grim economic outlook, when the stock market faltered even in the wake of the government’s rescue of Fannie Mae and Freddie Mac, when President Bush discussed the road ahead in Iraq and Afghanistan, on what did the campaign of Senator John McCain spend its energy? A conference call to denounce Senator Barack Obama for using the phrase ‘lipstick on a pig’ and a new television ad accusing the Democrat of wanting to teach kindergartners about sex before they learn to read.” Some McCain supporters criticize Obama for not having the steel in his belly to use force in the dangerous world we live in today. Well I know this: In order to use force, you have to have force. In order to exercise leverage, you have to have leverage.I don’t know how much steel is in Obama’s belly, but I do know that the issues he is focusing on in this campaign — improving education and health care, dealing with the deficit and forging a real energy policy based on building a whole new energy infrastructure — are the only way we can put steel back into America’s spine. McCain, alas, has abandoned those issues for the culture-war strategy. Who cares how much steel John McCain has in his gut when the steel that today holds up our bridges, railroads, nuclear reactors and other infrastructure is rusting? McCain talks about how he would build dozens of nuclear power plants. Oh, really? They go for $10 billion a pop. Where is the money going to come from? From lowering taxes? From banning abortions? From borrowing more from China? From having Sarah Palin “reform” Washington — as if she has any more clue how to do that than the first 100 names in the D.C. phonebook? Sorry, but there is no sustainable political/military power without economic power, and talking about one without the other is nonsense. Unless we make America the country most able to innovate, compete and win in the age of globalization, our leverage in the world will continue to slowly erode. Those are the issues this election needs to be about, because that is what the next four years need to be about. There is no strong leader without a strong country. And posing as one, to use the current vernacular, is nothing more than putting lipstick on a pig. (New York Times, 14 de septiembre)
A Speech to the Delegates
My fellow Americans, it is an honor to address the Democratic National Convention at this defining moment in history. We stand at a crossroads at a pivot point, near a fork in the road on the edge of a precipice in the midst of the most consequential election since last year’s “American Idol.” One path before us leads to the past, and the extinction of the human race. The other path leads to the future, when we will all be dead. We must choose wisely. We must close the book on the bleeding wounds of the old politics of division and sail our ship up a mountain of hope and plant our flag on the sunrise of a thousand tomorrows with an American promise that will never die! For this election isn’t about the past or the present, or even the pluperfect conditional. It’s about the future, and Barack Obama loves the future because that’s where all his accomplishments are. We meet today to pass the torch to a new generation of Americans, a generation that came of age amidst iced chais and mocha strawberry Frappuccinos®, a generation with a historical memory that doesn’t extend back past Coke Zero. We meet today to heal the divisions that have torn this country. For we are all one country and one American family, whether we are caring and thoughtful Democrats or hate-filled and war-crazed Republicans. We must bring together left and right, marinara and carbonara, John and Elizabeth Edwards. On United we stand, on US Airways, there’s a 25-minute delay. Ladies and gentleman, I never expected to be speaking before you today. Like so many of our speakers at this convention, I come from a hard-working, middle-class family. I was leading a miserable little life, but, nevertheless, overcame great odds to live the American Dream. My great-grandfather fought in Patton’s Army, along with Barack Obama’s great-grand uncles’ fourth cousin once removed. As a child, I was abandoned by my parents and lived with a colony of ants. We didn’t have much in the way of material possession, but we did have each other and the ability to carry far more than our own body weights. When I was young, I was temporarily paralyzed in a horrible anteater accident, but I never gave up my dream: the dream of speaking at a national political convention so my speech could be talked over by Wolf Blitzer and a gang of pundits. And today we Democrats meet in Denver, a suburb of Boulder, a city whose motto is, “A Taxi? You Must be Dreaming.” And in Denver, we Democrats showed America that we have cute daughters who will someday provide us with prestigious car-window stickers. We heard Hillary Clinton’s ringing endorsement of “the weak-looking thin guy who’s bound to lose.” We heard from Joe Biden, whose 643 years in the Senate make him uniquely qualified to talk to the middle class, whose family has been riding the Acela and before that the Metroliner for generations, who has been given a lifetime ban from the quiet car and who is himself a verbal train wreck waiting to happen. We got to know Barack and Michelle Obama, two tall, thin, rich, beautiful people who don’t perspire, but who nonetheless feel compassion for their squatter and smellier fellow citizens. We know that Barack could have gone to a prestigious law firm, like his big donors in the luxury boxes, but he chose to put his ego aside to become a professional politician, president of the United States and redeemer of the human race. We heard about his time as a community organizer, the three most fulfilling months of his life. We were thrilled by his speech in front of the Greek columns, which were conscientiously recycled from the concert, “Yanni, Live at the Acropolis.” We were honored by his pledge, that if elected president, he will serve at least four months before running for higher office. We were moved by his campaign slogan, “Vote Obama: He’s better than you’ll ever be.” We were inspired by dozens of Democratic senators who declared their lifelong love of John McCain before denouncing him as a reactionary opportunist who would destroy the country. No, this country cannot afford to elect John Bushmccain. Under Republican rule, locusts have stripped the land, adults wear crocs in public and M&M’s have lost their flavor. We must instead ride to the uplands of hope! For as Barack Obama suggested Thursday night, wherever there is a president who needs to tap our natural-gas reserves, I’ll be there. Wherever there is a need for a capital-gains readjustment for targeted small businesses, I’ll be there. Wherever there is a president committed to direct diplomacy with nuclear proliferators, I’ll be there, too! God bless the Democrats, and God Bless America!(New York Times)
What's behind the atack on Michello Obama
The First Lady has been subject to vicious attack by Republicans over her travel costs and her use of governmental aircraft, despite the fact that she has paid for a substantial portion of it herself...Simply put, there are some in this country who cannot stand the idea of women and people of color in positions of power, and there are cynical power mongers who don't mind pushing their buttons to keep the political pot boiling. And they are not above exaggeration and outright lies to prove their nonexistent point. Para leer la columna completa: http://www.huffingtonpost.com/jim-kennedy/whats-behind-the-attack-o_b_674690.html
Castresana: un confuso fuera de combate
Con la salida de Carlos Castresana de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) se evidenció el estilo ambiguo de Naciones Unidas, cuya política consiste en hacer saltar las alarmas para enseguida satisfacerse con recomendaciones burocráticas y volantazos incoherentes. Es difícil que, estando contaminada por la realidad guatemalteca y la vaguedad ideológica de Nueva York, la CICIG desbarate los aparatos criminales que defienden sus intereses en el corazón del Estado. Además, los enemigos de la CICIG juegan con las cartas marcadas. Trafican al amparo de una red de infiltrados, asesinos y parásitos. Mantienen boyante un negocio cimentado en la colonización del servicio público.El empuje de Carlos Castresana para enfrentarse a la mafia decayó al portarse como el boxeador que, ante el inminente choque con un peso pesado, desperdicia su fuerza en nimiedades. El yerro de Naciones Unidas: su debilidad por la prensa, una relación de amor-odio que aleja a sus enviados de la discreción estratégica y hace brotar malquerencias que pasan factura.El 12 de enero pasado, Castresana afirmó que Rodrigo Rosenberg concibió su propio asesinato para vengarse de Álvaro Colom y sus allegados. Al final, la bomba que el vídeo prometía estallar resultó un globo melodramático. Gracias a la CICIG, el presidente guatemalteco pudo envalentonarse ante la conspiración. Sin embargo, esta ayuda simboliza el haraquiri de su independencia. Porque si la teoría sobre el caso Rosenberg es categórica, chirría un defecto: resolver en tiempo récord el asesinato de Rosenberg, no así el caso Musa (Khalil y Marjorie fueron ametrallados en abril de 2009 a raíz de una disputa que, según el suicida, involucra a la élite política). Hasta hoy, ignoramos quién ordenó sus muertes.Dos meses después de aquella rueda de prensa, el ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala solicitó y obtuvo la prórroga del mandato de la CICIG. Aunque su presupuesto no surge del erario local ni de la ONU, sino de las donaciones de 16 países, sólo el Gobierno Colom puede requerir prolongaciones. Semejante débito condiciona la labor de la CICIG. De ahí que en su hoja de resultados no figure ningún pez gordo. En la captura del ex presidente Alfonso Portillo, es obvio que el reclamo de EE UU fue determinante. Que la CICIG se adjudique el éxito da señales de confusión sobre su objetivo y sus prácticas.Con la última designación del fiscal general ardió Troya. La Constitución establece que su nombramiento recae en el presidente de la República, quien lo escoge entre seis candidatos calificados por autoridades judiciales, académicas y gremiales. Para Castresana, el grueso de los aspirantes incumplía la idoneidad o representaba al crimen organizado. Peor: sospechó de la propia Comisión de Postulación.En las circunstancias actuales, ¿a quién iba a elegir Álvaro Colom? Al aliado que pare las embestidas en su contra. Ante esa coyuntura, Castresana dimitió asegurando que era objeto de una campaña negra. ¿Esperaba que los criminales jugaran limpio? "Le estamos mirando la cara al monstruo, y le sostenemos la mirada", dijo. Los capos respondieron con hechos: "Pero no nos puedes sostener el pulso". Aquí reaparece el caso Rosenberg. Precisamente, Mario David García -el periodista radial que recomendó al desesperado grabar su testimonio- ventiló el rumor de que el fiscal español tenía amoríos y favoritismos profesionales con una joven abogada jamaicana. García, de trayectoria golpista, se dio el lujo de entrevistar a un supuesto portavoz de la esposa de Castresana. Esta pedrada, calumniosa o no, es la predilecta para defenestrar incómodos.Sorprende que la CICIG reproduzca a ratos la conducta de Rosenberg: denunciar sin probar. Mientras el muerto jura que Colom y su entorno asesinaron a los Musa, el jefe de la CICIG acusó al fiscal general electo, Conrado Reyes, de proteger los intereses de organizaciones ilícitas. Esa imputación emplazaba a Castresana, no a las salas de prensa ni al despacho presidencial, sino a los tribunales de justicia.La Corte de Constitucionalidad revocó el 10 de junio el brevísimo periodo del ahora ex fiscal general Conrado Reyes. Los magistrados mediaron en una situación que empieza a desbordarse para desgracia de un país brutalizado por la violencia.De ser cierta la adscripción de Reyes, era la ocasión para acreditar in fraganti que el Estado guatemalteco está plagado de mafiosos. En este contexto, las reacciones complotistas son inevitables, incluyendo contestaciones sanguinarias, como esas cuatro cabezas mensajeras que aparecieron en la capital, o el secuestro y descuartizamiento de una funcionaria de presidios.Carlos Castresana tiró la toalla precipitadamente. El Departamento de Asuntos Políticos no podía barajar, veloz y en frío, una lista de sustitutos. Si ya tenían en mente un reemplazo -Francisco Dall'Anese, el fiscal general de Costa Rica-, el encuentro con el secretario general Ban Ki-moon se trató de una remoción.Los capos de la mafia apenas mostraron las orejas del lobo a Castresana. Si Francisco Dall'Anese acepta la servidumbre mediática y extralimita los privilegios de su cargo, pregonando más que apretando, también habrá mordido el polvo.(El País/Madrid. El autor es escritor guatemalteco, autor de El cálculo egoísta: inmigración y racismo en la España del siglo XXI.)
Funes, Ortega y la izquierda
El Presidente de El Salvador, Mauricio Funes, declaró a la revista brasileña Veja que “la gran cuestión de la izquierda de hoy ya no es sólo hacer un Gobierno popular, democrático y volcado a la distribución de la renta”. Esas son las “prioridades que marcan diferencias con las derechas”, puntualizó el mandatario salvadoreño, quien ganó la elección presidencial como candidato del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), un casi clon del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) de Nicaragua, pero advirtió el presidente Funes que para “hacer viable la justicia social es preciso adoptar un modelo que apueste en el crecimiento y la estabilidad macroeconómica”. Y además, agregó, “es preciso ser responsable, y eso significa tener las cuentas en orden y el déficit público bajo control”. Pero si esos requisitos —que más bien son virtudes gubernamentales— son los que, según Funes, definen a un gobierno de izquierda en relación con otro de derecha, entonces debemos convenir en que el régimen de Daniel Ortega no es de izquierda. Lo cual es, precisamente, lo que han dicho invariablemente los miembros del Movimiento Renovador Sandinista (MRS) y de numerosas organizaciones de la sociedad civil que se identifican como izquierda democrática. En realidad, no hace falta ubicarse en ningún alineamiento ideológico para reconocer que el régimen orteguista no es popular ni democrático; que no redistribuye la renta de manera equitativa, ni promueve la justicia social, ni ha adoptado “un modelo que apueste al crecimiento y la estabilidad macroeconómica”, del que habla el mandatario de izquierda de El Salvador, Mauricio Funes. Ortega más bien ha quebrantado el modelo de crecimiento que tanto le costó construir a los gobiernos democráticos de los 16 años anteriores al 2007. Además, Ortega ha impuesto el desorden en las cuentas del Estado y el descontrol del déficit público, y está a punto de poner fin a la precaria estabilidad macroeconómica que depende de la ayuda financiera internacional, la cual ha sido suspendida y se puede perder definitivamente, por culpa del fraude electoral que el gobierno de Ortega perpetró el año pasado. Pero al margen de lo que diga el Presidente salvadoreño —quien es obvio que se ha alineado con la izquierda democrática latinoamericana—, la verdad es que Daniel Ortega igual que los hermanos Castro de Cuba, Chávez de Venezuela, Correa de Ecuador y Morales de Bolivia, son gobernantes de izquierda. Como de izquierda son Lula da Silva de Brasil, Michelle Bachelet de Chile y Tabaré Vázquez de Uruguay, con la salvedad de que éstos últimos son de la izquierda democrática y reformista, mientras que los primeros son de la izquierda salvaje y autoritaria, enemiga de la libertad y la democracia. Es el mismo caso de la derecha, en la cual hay sectores y gobernantes ejemplarmente democráticos, como también los hay o los hubo terriblemente represivos, como por ejemplo las criminales dictaduras militares de Centro y Suramérica. Se dice que en la actualidad, la evolución y la modernización política comienza con el acuerdo social de que tanto las derechas como las izquierdas deben ser democráticas. Es decir, que ya sea de derecha o de izquierda, el gobierno tiene que ejecutar su programa sin desvirtuar las instituciones de la democracia y sin atentar contra los derechos y las libertades de nadie. Se trata de un acuerdo social que en aquellos países donde todavía no se ha podido salir de la etapa poscolonial, como es el caso de Nicaragua, podría parecer un sueño o una utopía, pero que es perfectamente posible y en muchos países es ya una realidad, imperfecta pero objetiva, como los mencionados Chile o Uruguay. En todo caso, en Nicaragua el problema no es que el gobierno de Ortega sea o no de izquierda. El problema radica en que se trata de un régimen antidemocrático, el cual desde enero de 2007 viene socavando las instituciones básicas de la democracia y atropellando las libertades y los derechos fundamentales de las personas consagrados en la Constitución y en las convenciones internacionales de derechos humanos. Y además, el Gobierno de Daniel Ortega ha provocado una grave recesión económica, que ya casi es una crisis general, agravada por la corrupción gubernamental más descarada que se ha conocido en toda la historia nacional. Es absolutamente irrelevante que el régimen de Daniel Ortega sea de izquierda o no. El problema es que se trata de un desgobierno que está conduciendo al país hacia la ruina económica, política y moral.
LA POLARIZACIÓN LE ESTÁ RESTANDO VIABILIDAD AL PAÍS
La confrontación política irracional e irresponsable entre los dos partidos políticos mayoritarios, que buscan rentabilidad electoral para ambos partidos, mediante la concentración del poder en los polos extremos y la marginación del resto de actores, tiene un alto costo para la población y va en perjuicio de la viabilidad futura del desarrollo económico y social de El Salvador. A este fenómeno perverso se le llama “polarización” en El Salvador.Perverso porque no existe voluntad de concertar y ponerse de acuerdo en las cosas fundamentales de las políticas públicas y en los problemas urgentes que están desesperando a la población y obligándolos a emigrar.Uno de los acuerdos urgentes que necesita el país, es un acuerdo fiscal pactado entre todos los actores políticos, económicos y sociales, que evite llegar a una crisis económica de graves consecuencias y a su vez posibilite dar el salto cualitativo para alcanzar niveles sostenidos de crecimiento con equidad.El Salvador necesita aumentar, racionalizar y controlar el gasto público, para atender los graves problemas de pobreza e inseguridad ciudadana, las grandes demandas sociales insatisfechas de la población y solventar prudentemente los desequilibrios fiscales acumulados.La inversión en bienes públicos aumenta el beneficio de la población, aumenta la productividad de los trabajadores y empresarios, vuelve más competitivo al país, atrae la inversión privada y logra una inserción exitosa en el mercado internacional. Esto permite condiciones favorables para la estabilidad política y la paz social en el largo plazo.El problema delicado en las finanzas públicas es que para atender las obligaciones ya existentes (vencimientos de bonos y pago de pensiones) y atender los grandes déficit sociales entre el 2008 al 2014, el gobierno necesita recursos adicionales por $9,600 millones, que no los puede cubrir con los ingresos corrientes, con los niveles actuales de carga tributaria del 13.4% del PIB y tasas de crecimiento de la economía del 4.5%.En buenas cuentas, en el tiempo que le falta al actual gobierno y el del próximo gobierno, van a necesitar un promedio anual adicional de $1,373 millones. Si el país ya se encuentra en el límite prudente de endeudamiento público, solo le queda obtener más ingresos por la vía de aumentar la recaudación con los actuales impuestos, haciendo que paguemos todos, todo lo que tenemos que pagar; refinanciando deuda que no pueda pagar; gastando en forma eficiente y transparente; combatiendo la corrupción y muchas otras medidas de sana administración pública. Si todo esto no le alcanza deberá evaluar la creación de nuevos impuestos para llegar a niveles de carga tributaria del 20% del PIB, que es lo que el país necesita.El punto central es que cualquier partido que llegue al gobierno no podrá gobernar solo, ni estar “saltando” permanentemente a la oposición política para atender los problemas fiscales.Si no somos capaces de alcanzar acuerdos básicos en materia fiscal, antes de que caliente más la campaña electoral, el país quedará entrampado y entrará en crisis, independientemente de quien gane las elecciones. Si a esto se le agrega que no se atiendan las graves deficiencias y la falta de confianza en el sistema electoral, de cara a unas elecciones reñidas y confrontativas, solo nos queda esperar fuertes reacciones de violencia social que restarían aún más a la viabilidad futura del país.
Chávez que ladra no muerde
Como en la fábula del pastorcito mentiroso, el presidente de Venezuela grita una y otra vez que ya viene el lobo a comerse sus ovejas. El lobo, para él, es el Imperio Norteamericano, pero éste no vendrá a comérselas con sus propias fauces, sino que usará una especie de mano larga: Colombia. Sería mi país, definido por Chávez como "el Israel de América del Sur", el encargado de atacar a la Revolución Bolivariana, ayudado por los gringos pero con un Ejército comandado por Álvaro Uribe Vélez, el viejo amigo de Bush. La misma cantilena chavista se repite cada tanto, con una cadencia cíclica, así con Obama se haya vuelto mucho menos verosímil. Desde que es presidente ya van cinco veces en que Chávez "congela" las relaciones con Colombia y cada vez el embajador venezolano tiene que hacer las maletas para regresar a su país, acompañado por una estela de funcionarios....(lea artículo completo en EL PAÍS)
Nuevos valores para una nueva civilización
En el Foro Social Mundial de Belém, se concluyó que las alternativas al neoliberalismo y a la construcción del ecosocialismo no se engendran en la cabeza de los intelectuales o de programas partidarios, sino en la práctica social, a través de luchas populares, movimientos sindicales, campesinos, indígenas, étnicos, ambientalistas y comunidades de base.Para gestar tales alternativas se exigen al menos cuatro actitudes. La primera una visión crítica del neoliberalismo. Éste profundiza las contradicciones del capitalismo, en la medida en que la expansión globalizada del mercado estimula la competitividad comercial entre las grandes potencias; desplaza la producción hacia regiones donde se puedan pagar salarios irrisorios; estimula el éxodo de las naciones pobres hacia las ricas; introduce tecnología de punta que reduce los puestos de trabajo; vuelve a las naciones dependientes del capital especulativo; e intensifica el proceso de destrucción del equilibrio ambiental del planeta.La segunda actitud: organizar la esperanza. Encontrar alternativas es un trabajo colectivo, puesto que no surgen de la cabeza de intelectuales iluminados o de gurús ideológicos. De hay la importancia de dar consistencia organizativa a todos los sectores de la sociedad que esperan otra cosa diferente de lo que se ve en la realidad actual, desde agricultores que sueñan con trabajar su propia tierra a jóvenes interesados en la preservación del medio ambiente.La tercera actitud es rescatar la utopía, el neoliberalismo no trata solamente de destruir las instancias comunitarias creadas por la modernidad, como la familia, el sindicato, los movimientos sociales y el Estado democrático. Su proyecto de atomización de la sociedad reduce la persona a la condición de individuo desconectado de la coyuntura socio-política- económica en la cual se inserta, y lo considera mero consumidor. Por lo mismo se extiende también a la esfera cultural. Como diría Emmanuel Mounier, el individualismo es opuesto al personalismo. Pascal fue enfático: “El Yo es odioso”.En su apogeo el capitalismo lo mercantiliza todo: la biodiversidad, el medio ambiente, la responsabilidad social de las empresas, el genoma, los órganos arrancados a los niños, etc. y hasta nuestro mismo imaginario. Un ejemplo trivial es lo que se gasta en la compra de agua potable envasada industrialmente, dejando de lado el viejo y buen filtro de cerámica o incluso la recogida del agua limpísima de lluvia después de un minuto de precipitación.Sin utopías no hay movilizaciones motivadas por la esperanza, ni posibilidad de visualizar un mundo diferente, nuevo y mejor.Cuarta actitud: elaborar un proyecto alternativo. La esperanza favorece la emergencia de nuevas utopías, que deben ser traducidas a proyectos políticos y culturales que señalen las bases de una nueva sociedad, eso implica el rescate de los valores éticos, del sentido de justicia, de las prácticas de solidaridad y compartimiento, y del respeto a la naturaleza, en suma, se trata de un desafío también de orden espiritual, en la línea de lo que pregonaba el profesor Milton Santos, de que debemos priorizar los “bienes infinitos” y no los “bienes finitos”.El proyecto de una sociedad ecosocialista alternativa al neoliberalismo exige revisar, después de la caída del muro de Berlín los aspectos teóricos y prácticos del socialismo real, sobre todo desde el punto de vista de la democracia participativa y de la preservación ambiental.El ecosocialismo se caracterizaría por la capacidad de incorporar el concepto y las prácticas de igualdad social y desarrollo sustentable a partir de experiencias de los movimientos sociales y ecológicos, así como de la revolución cubana, del levantamiento zapatista de Chiapas, de los asentamientos del MST, etc.Es vital incluir en el proyecto y en el programa los paradigmas emergentes actuales, como ecología, indigenismo, ética comunitaria, economía solidaria, espiritualidad, feminismo y holística.Este sueño, esta utopía, esta esperanza que llamamos ecosocialismo no es sino la continuación de las esperanzas de aquellos que lucharon por la defensa de la vida como Chico Mendes y Dorothy Stang, dos luchadores cristianos que dieron sus vidas por la causa de los pobres, de los explotados, de los indígenas, de los trabajadores de la tierra y de los pueblos de la selva. (Traducción de J.L.Burguet)- Frei Betto es escritor, autor de “Cartas desde la cárcel”, entre otros libros.
Verdadera oposición. De Erika Saldaña
Erika Saldaña, ex presidenta del Centro de Estudios Jurídicos CEJPublicado en EL DIARIO DE HOY, 26 agosto 2019 En El Salvador estamos acostumbrados a que la oposición política se resista a todo lo que diga el gobierno solo porque sí, limitándose a criticarlos o simplemente llevarles la contraria aunque las propuestas sean buenas. A eso se han cerrado, a ser una oposición sin propuestas. Muchos de sus integrantes parece que actúan de manera reactiva y dispersa, basándose en la coyuntura nacional semanal y haciendo críticas sin mayor reflexión. No han sido una verdadera oposición.La existencia y garantía de la diversidad de pensamiento es primordial en un Estado de Derecho. Esta se representa fundamentalmente a través de los partidos políticos. Así, los grupos que realizan la función de oposición política a los gobiernos de turno son importantes, pues se constituyen como un mecanismo de control del poder y una garantía de la pluralidad de ideas. En El Salvador tenemos décadas sin que exista una verdadera oposición política, que sea propositiva, constructiva y que no rechace propuestas gubernamentales con la simple finalidad de entorpecer el trabajo del Ejecutivo.Cuando el FMLN era oposición hizo propuestas que al llegar al gobierno las olvidó por completo; ahora se enfrasca en defender los errores de sus dos gobiernos. En los últimos diez años en los que ARENA era el contrapeso al gobierno del FMLN, se dedicó a ser una oposición reactiva sin tener una batalla definida por la ciudadanía, sin objetivos claros y sin presentar alternativas concretas a los problemas de país.Los partidos de oposición no pueden justificarse en ese calificativo para simplemente llevar la contraria sin dar mucho pensamiento a sus actuaciones.Una oposición política propositiva es sana en cualquier república democrática. Para que ésta tenga un sentido valioso debe ser crítica, pero también ayudar a avanzar con propuestas constructivas para el país. Como lo manifestó la Sala de lo Constitucional en una de sus más recientes resoluciones, la diversidad de opiniones, la pluralidad de valores, criticidad de pensamiento y la competencia permanente de visiones alternativas, dejan de ser males o peligros para el desarrollo social y se reconocen como valores indispensables para el progreso de la civilización humana.En este caso, para el progreso de nuestro país.No es posible que ARENA y el FMLN pretendan mantener su línea de trabajo tal y como lo han venido haciendo las últimas décadas. No pueden seguir defendiendo lo indefendible al interior de sus filas, ni resistirse a reconocer los yerros del pasado; deben buscar limpiar cara de los actos reprochables que se gestaron durante sus gobiernos. La grandeza de cualquier persona radica en hacerse responsable de sus errores y corregir verdaderamente el rumbo de su camino. Esto incluye a los partidos políticos y a sus integrantes.Necesitamos un cambio radical de pensamiento en los partidos que hacen oposición. En el año previo a la época electoral es el momento propicio para que los partidos pongan sus barbas en remojo y corrijan el rumbo que han llevado en los últimos años; además, que tengan apertura a la renovación de caras e ideas. Las personas que llevan años incrustadas en las dirigencias deberían ceder el espacio a personas nuevas que den aire fresco a los pensamientos tradicionales dentro de dichos institutos políticos.Los partidos políticos como ARENA y el FMLN deberían estar conscientes de las lecciones del pasado 3 de febrero. La población ya no está dispuesta a hacerse del ojo pacho por los errores cometidos por sus funcionarios y representantes, sino que pasarán la factura en las urnas. La renovación de pensamiento y de la forma de trabajo ya no es opcional, es una obligación si quieren sobrevivir como partidos a las próximas elecciones.
EL SALVADOR, DEMASIADO RESUMIDO
El 10 de agosto del presente año, la Prensa Gráfica publicó, en su edición especial para los jóvenes salvadoreños (elaborada en ocasión de la celebración del Día de la Juventud, 12 de agosto), el artículo de opinión “El Salvador en resumen” donde se hace una reflexión “macro” sobre la situación de los jóvenes en el país. Su autor, José Carlos Dutriz tiene 19 años, es estudiante de periodismo e hijo de José Roberto Dutriz, principal accionista y director ejecutivo de ese mismo periódico.Uno de los puntos al que refería este artículo es el tema de la educación moral y los valores. De acuerdo al joven José Carlos, esta innegable responsabilidad debe estar en manos de los padres. Estoy de acuerdo, aunque yo creo, además, que le corresponde también al Estado la transmisión de esos valores en la escuela como parte de un proceso de aprendizaje y socialización del ser humano en su crecimiento.Pero lo que hay que recordar aquí, es que la situación de la mayoría de nuestros jóvenes, no es una familia integrada por los dos padres, sino familias segregadas por la masiva emigración hacia Estados Unidos en busca de trabajo. Que hay una masa de jóvenes que, aunque reciben las remesas de sus familiares, se vuelven improductivos sin ninguna motivación más que viajar hacia Norteamérica en un futuro cercano. Otros muchos se unen a las pandillas.No podemos hablar de responsabilidades que recaen en el núcleo familiar, cuando este casi no existe.Es cierto, cuando en el artículo se afirma que una de las herramientas más poderosas para sacar al país adelante es la educación, que nuestra población necesita conocer conceptos políticos básicos para poder elegir, para poder emitir su voto.El problema aquí son los jóvenes que simplemente no pueden ir a la escuela, los que desertan de la educación, porque tienen la obligación de ir a trabajar para mantener a sus familias. La pobreza que no deja más elección que trabajar o, simplemente, no se come. El problema son los jóvenes que reciben la "otra" educación en la pandilla, una familia que les enseña los “antivalores” que sirven para sobrevivir día a día con la realidad de las calles de nuestro pequeño país.Yo también creo que los jóvenes deben estudiar lo que quieren, pero para llegar ahí, lo primero es que el Estado les proporcione esas oportunidades sin tener que preocuparse por las necesidades mínimas para sobrevivir. El problema es a nivel nacional, a nivel de un gobierno que debe asegurar el acceso a la educación y garantizar la calidad de los contenidos que se dan en las aulas. Un gobierno que debe conseguir que estas familias no emigren dándoles oportunidades de trabajo a todos para que dejemos de exportar gente.En el artículo se habla de jóvenes profesionales preparados, pero antes debemos asegurar que los niños y niñas vayan a la escuela primaria y terminen su bachillerato. Después hablemos del ingreso a la educación “superior”. Superior resuena entre los jóvenes sin oportunidades como un eco vacío, como el último escalón de una larga escalera imposible de subir.La “sobreproducción de graduados en ciertas carreras, elegidas por tradición o por perspectivas de lucro” que menciona Juan Carlos Dutriz en su artículo, no es debida a la mala elección de nuestros jóvenes, a nivel individual, sino a que la oferta académica de la educación superior es limitada y obsoleta. A eso, y a que una vez finalizada la carrera no se encuentra acceso al mercado laboral, condicionado por nuestra economía impulsadora de mano de obra barata y no especializada.Finalmente, el artículo se refiere al tema de la libertad de expresión, o "derecho fundamental de todo individuo de expresar sus ideas libremente, por tanto sin censura", según al artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos. Sin duda el nivel de libertad de expresión que hemos logrado los salvadoreños después de los Acuerdos de Paz es enorme en comparación con la represión que existía durante y antes de la guerra civil. Pero esta idea de libertad de expresión es corta. Hay que seguir desarrollando este derecho recuperado en los Acuerdos. Hoy en día, es evidente que en las redacciones de este país se censuran notas periodísticas objetivas y de gran calidad de investigación por no seguir la línea editorial del propietario del periódico. Cualquier lector de periódicos puede observar que las notas periodísticas peor sustentadas, y más sospechosas de estar intencionadamente sesgadas, no suelen llevar firma de ningún periodista.Yo creo que podemos decir que en un país hay libertad de expresión en la medida que los espacios de difusión (en nuestra sociedad, los medios de comunicación) están distribuidos equitativamente entre personas diversas, con condiciones y pensamientos diversos sin prevalencia de una sola posición, política, económica, étnica, territorial, etc. Es una mala señal, entonces, que quien reciba la posibilidad de escribir la primera de las notas de opinión de una edición de un periódico dedicada a los jóvenes, sea el hijo del dueño.
Carta al los fanáticos: A la larga siempre pierden. De Paolo Luers
El apoyo popular no es eterno. Me permito a adaptar a la actualidad la famosa frase de Abraham Lincoln: “Puedes fanatizar a todos por un tiempo - y a algunos todo el tiempo, pero no puedes fanatizar a todos todo el tiempo.” El audio de la Carta: Carta-Irán.mp3Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, jueves 27 octubre 2022Amigos:Todo comenzó el 13 de septiembre 2022, cuando una muchacha de 21 años, llamada Masha Amini, fue arrestada, golpeada y matada por la ‘Policía Moral’, porque anduvo sin el ‘hijab’ - el velo que la ley islámica obliga a las mujeres a usar para cubrir su pelo. Si alguien cree que no existe tal cosa monstruosa como una ‘Policía Moral’, está equivocado: existe en Irán. Es una policía religiosa, que vigila la moda, las costumbres y el comportamiento moral de los iraníes, especialmente de las mujeres, las muchachas y las niñas. Masha AminiDesde el día que la ‘Policía Moral’ asesinó a Masha Amini, la ‘República Islámica de Irán’, mejor dicho la dictadura de los mullahs, enfrenta las protestas más sostenidas y masivas de su triste historia. Comenzó con miles de mujeres jóvenes saliendo a las calles, quemando sus velos, reclamando libertad. Luego se incorporaron sus madres, las abuelas y las niñas en la escuelas. Luego se unieron a la protesta hombres, trabajadores, sindicalistas. Surgieron huelgas. Como Masha Amini y muchas otras víctimas de la represión eran parte de la minoría kurda en el oriente del Irán, el movimiento por la autonomía del pueblo kurdo se unió también a las protestas.Las protestas se han convertido en rebelión y revelan que los fanáticos han perdido el apoyo popular que les permitió,durante décadas, ejercer el control total de la sociedad iraní. El fanatismo se desinfló – y como respuesta el régimen, como siempre hacen los autoritarios, recurre a la represión. 234 personas han muerto, muchas de ellas mujeres jóvenes, incluyendo 29 niños.Lo que comenzó como una protesta contra imposiciones religiosas y se convirtió en un movimiento de las mujeres por sus derechos, está desembocando en un movimiento popular que se dispone a derrumbar el sistema autoritario. A la par del grito ‘Mujer. Vida. Libertad’ de las mujeres, retomado ahora por todos, las multitudes gritan: ‘Libertad para Ucrania’. El apoyo político y militar de Irán a la invasión rusa en Ucrania se ha convertido en el otro gran tema de las movilizaciones populares. La gente entiende que esto va a empeorar la crisis económica-social que sufre el país. Y así se cierra el círculo: antes del asesinato de Masha Amini, las esporádicas protestas eran de carácter económico, ahora son integrales: contra el desempleo y el hambre, contra la imposición religiosa, por los derechos de las mujeres, por libertad, contra el envío de drones y cohetes iraníes a Rusia, provoca sanciones internacionales, que causarían más crisis social. Ahora, es una lucha por un cambio de régimen.Mujer sin velo frente de una masiva marcha de protesta hacia el cementerio de Aichi en Saqez,donde está enterrada la mujer asesinada Mahsa Amini. Foto: AFP Los fanáticos están perdiendo. Perdieron el apoyo popular mayoritario, que al principio sostuvo su régimen. Están perdiendo el control social – y van a perder el poder. Es un ciclo político, que siempre se repite en la historia de los sistemas autoritarios que se basan en sus mecanismos de fanatizar a las masas. No son sostenibles, porque el fanatismo no es sostenible. Cuando la persuasión ya no funciona, entra la represión. La represión provoca resistencia. Cuando la represión selectiva ya no alcanza para detener la resistencia, se vuelve masiva. Tanto en Irán y en el Kurdistán como en Ucrania y también en Rusia, al fin van a consolidarse la libertad y la democracia. Putin y los mullah iraníes no se van a poder salvar mutuamente. Los regímenes obsoletos, aunque son cómplices, no suman. Tampoco suman los gobernantes en otras latitudes, que coquetean con ellos porque comparten su desprecio al Estado de Derecho. Más bien refuerzan mutuamente sus debilidades. Así que hay que decir a los fanáticos -los de allá y acá- que el apoyo popular no es eterno. Me permito a adaptar a la actualidad la famosa frase de Abraham Lincoln: “Puedes fanatizar a todos por un tiempo - y a algunos todo el tiempo, pero no puedes fanatizar a todos todo el tiempo.”Saludos,
Alemania año cero
Aviñón. Desde 1947, año de su fundación por el actor y director de escena Jean Vilar, esta ciudad provenzal celebra un festival cuyo signo parece ser el de la renovación o la muerte. Este verano, hay música de rock ejecutada con instrumentos primitivos, orquestas en las que todos los músicos tocan al mismo tiempo, desarmonías conducentes a una nocacofonía. Hay improvisaciones y actuaciones espontáneas en las calles; disfraces y muñecos. También, reposiciones de la obra juvenil de Bertold Brecht, Baal, que invierte la vieja tradición (Shakespeare, los teatros No y Kabuki) de que sean hombres quienes toman los papeles femeninos. Ahora, una actriz, Clotilde Hesme, es quien interpreta al joven héroe como si fuese un hombre fatal. Una adaptación teatral de la gran novela de Robert Musil El hombre sin cualidades, usa teatro y cine para confrontar al intelectual vienés de fin de época, Ulrich, con su Némesis, el criminal Moos-burger, la cara del futuro.Protegerse del futuro: tal es la intención fallida y terrible de Christoph Marthaler en una obra situada en una estación de trenes, donde el régimen nazi practica la eugénesis contra niños, exterminados en silencio por la locura totalitaria. El director pretende que sean los espectadores quienes den palabras al texto. La obra es en silencio.La protección del futuro. También es tema de la extraordinaria puesta en escena del director Falk Richter y la coreógrafa Anouk van Dijk, Trust, una palabra que significa "confianza" pero también unión de empresas monopólicas. ¿Darle "confianza" a un mundo dominado por sociedades anónimas? La respuesta de Richter y Van Dijk se plantea primero como acción teatral visible.Los actores no pueden mantenerse en pie. Caen, se levantan, chocan unos contra otros. Vuelven a caer, mientras un coro de un solo joven (nadie en la compañía tiene más de 30 años) propone un texto que no puede "encerrarse" sino que como texto participa, por más constante que sea, de la fragilidad de los cuerpos que quisieran apoyarse los unos a los otros y no pueden: los actores se apoyan, se separan, se arropan, caen, se levantan, se van a otra parte, a donde sea...Lo terrible es que ya no hay "otra parte". Ya no hay Samoa para Robert Louis Stevenson ni México para Artaud ni Tahití para Gauguin. El mundo moderno, globalizado, ha exterminado los refugios de antaño. Moribundo, André Breton le dijo a Luis Buñuel, "¿Se da cuenta? Ya no hay la-bas, otra parte". Los actores de Trust, sin embargo, buscan esta "otra parte", fuera de la fatalidad social del movimiento sin fin, en la pareja. No pueden. Lasparejas también están fatigadas de ser ellas mismas.Lo más fatigante, parece decirnos la obra, es tratar de cambiar el sistema actual. Parejas, finanzas, sociedad: todo está atrapado en el movimiento sin sentido, sin fin. No es cierto que el sistema pueda cambiar (Trust extrema el significado de la China Popular). A veces, parece que cae. Es un engaño. Vivimos en un sistema en crisis perpetua, porque esa es su razón de ser. Sólo cambian las mentiras. La confianza en este mundo es pura des-confianza, ausencia de Trust. No se confía en la economía, ni en el dinero, ni en el poder ni, al cabo, en la persona misma: la que somos o la que queremos ser.Esta obra nos habla a todos en todas partes. Pero es una pieza alemana, y como tal nos obliga a remontarnos a la revolución cultural de las vanguardias alemanas posteriores a la Primera Guerra Mundial y anteriores al ascenso de Hitler. Solo que el arte crítico de George Grosz, Brecht y Weil, Kokoschka y Fritz Lang, Elsa Lasker-Shüler y Karl Kraus y los expresionistas, era un desesperado intento de cambiar la historia gracias al arte y estaba situado entre dos catástrofes: la Primera Guerra Mundial y el arribo de Hitler al poder. Venía de la caída del imperio del Kaiser, contra el creciente antisemitismo que nutrió a Hitler, de los fracasos del comunismo alemán, del terror de las "clases altas" a la social democracia, de la primacía de la clase militar prusiana (los Junkers), de las ambiciones coloniales del Kaiser.Pero hoy, ¿se compara el Gobierno de Ángela Merkel a las catástrofes del pasado? La respuesta ha de ser negativa, la señora Merkel parece una ama de casa (Hausfrau) inteligente y modesta, parte de un sistema democrático que ha convertido a Alemania en la principal potencia exportadora de Europa.No hay, así, en Trust una rebelión explícita contra el sistema. Hay un cansancio del sistema. Hay la fatiga de ser como somos, y lo más fatigante sería cambiar el sistema actual. Quizás esto es lo que nos dice la obra. Tenemos un sistema castrante, fatigado, indeseable, pero no tenemos con qué sustituirlo. El fin de la Guerra Fría dio fin a la rivalidad ideológica Este-Oeste. En su lugar, aparecieron las pugnas religiosas y raciales ocultas por la Guerra Fría. Pero el sistema lo absorbe todo: la riqueza del Occidente, el trabajo migratorio desprotegido, la pobreza del sur, incluso, al cabo, el fanatismo religioso. Fatiga: más y más trabajo, para no perecer. Más y más trabajo, para no pensar.Se acabaron las utopías. Todo es virtual, el dinero como el amor. La nueva solidaridad significa el abandono de la cólera, no tener cólera hacia los demás, y no saber dirigir la cólera más allá de nuestro propio aislamiento. Chocamos con otros. Caemos. Nos levantamos. Volvemos a caer. La libertad es una ilusión: somos libres sólo para escoger uno entre varios productos. Somos libres para votar a fin de no perder lo que ya poseemos. Somos libres para publicitarnos a nosotros mismos vía el Facebook y adquirir ahí amigos, no reales, sino virtuales.La cólera de Falk Richter y Anouk van Dijk parece dirigida al hecho de que nada cambia, por más esfuerzos que se hagan. Todo, hoy, sigue igual, a menos que estalle la Bomba H. El egoísmo, el individualismo y el narcisismo gobernarán nuestras vidas, nuestros amores y amistades, nuestro trabajo. ¿Qué hay, entonces? La respuesta es la puesta en escena que estamos viendo en el patio del Liceo Saint-Joseph de Aviñón. El trabajo visible, abierto, de un grupo de actores y danzantes, que no repiten exactamente la obra llamada Trust, sino que la improvisan, se niegan a encerrarla en un texto previo, rehúsan el texto sagrado, recogen el trabajo de los ensayos...¿Es bastante? Es decir: ¿crear la obra es, aunque inútil, la única respuesta?Salgo con mi mujer a las calles de Aviñón. Entramos a Gardenia, una obra sobre la soledad del cabaret. Vemos Cabra, en la que una sola actriz, mitad niña, mitad animal, vive la noche del lobo y prefiere ser devorada que regresar al establo. Vemos un espectáculo que mezcla sin discriminación al fútbol, a Madonna, al barroco, a un travesti humillado.Y desembocamos en México, en La casa de la fuerza, en la que tres mujeres viajan a Ciudad Juárez para ser asesinadas. Es Chejov para el siglo XXI: "Pornografía del Alma", dice la actriz española y directora de la obra, Angélica Liddell.Alemania, año cero. ¿México, año cero?(El País/Madrid)
Carta a los diputados: Manténganse firmes. De Paolo Luers
Publicado en MAS! y EL DIARIO DE HOY, 27 junio 2020Estimados 61 diputados que superaron el veto presidencial:Hicieron lo correcto. El miércoles el presidente vetó el decreto legislativo 661, que daba el marco legal a las políticas contra la epidemia y a la reapertura económica y el jueves ustedes superaron el veto. Pronta y cumplida legislación...El presidente había solicitado a la Asamblea un decreto legislativo para declarar el estado de emergencia y diera fuerza de ley a las medidas sanitarias y las fases de reapertura. Ustedes se lo dieron, pero incluyen algunas cláusulas de transparencia y rendición de cuentas. Al presidente no le gusta ni la transparencia ni la rendición de cuentas, y por esto vetó la ley que él mismo había solicitado. Como es un mentiroso compulsivo (es decir, que no puede de otra manera), comenzó a decir que la Asamblea lo había dejado sin instrumentos legales para combatir la epidemia y manejar la reapertura...Ahora, como ustedes superaron el veto con mayoría calificada, el asunto va a la Sala de lo Constitucional. Ya que Asamblea y Presidencia tienen opiniones contrarias sobre la constitucionalidad del decreto 661, los magistrados van a tomar la decisión definitiva. Ellos tienen, según la Constitución, la última palabra, le guste o no al presidente.Pero la cosa se complicó cuando el presidente mandó a la Asamblea, junto a su veto, un escrito solicitando nuevamente una ley que decreta el estado de Excepción. Según las sentencias de la Sala, solo si la Asamblea declara Estado de Excepción se puede limitar o suspender temporalmente derechos y garantías constitucionales de los ciudadanos. Y esto lo necesita el gobierno, ya que su plan es declarar una nueva cuarentena domiciliar obligatoria y tener las medidas represivas para imponerlas a la población. Superando el veto presidencial, la Asamblea abrió el camino para que la Ley Especial de Emergencia por el COVID-19 (decreto legislativo 661) pueda entrar en vigencia si la Sala así lo decide. Entonces, ¿qué van a hacer ustedes con la Ley de Estado de Excepción que solicitó el presidente? El país no puede tener al mismo tiempo una Ley de Emergencia y una Ley de Estado de Excepción. Lo más lógico y coherente hubiera sido mandar de un solo a archivo la solicitud del presidente, porque el marco legal que la Asamblea está dando para combatir el COVID-19 y para abrir la economía ya está definido en el decreto 661. Según la Ley de Emergencia, no se justifica limitar los derechos constitucionales de la ciudadanía ni mucho menos someterla un medidas represivas y punitivas. Punto. Me imagino que no procedieron a superar el veto y al mismo tiempo desechar la solicitud del presidente por dos razones: porque no querían tensionar más la relación con el Ejecutivo y con el hombre iracundo que lo preside, y porque no pueden asumir como hecho que la Sala va a sentenciar a su favor.En algún momento, les va a tocar decidir sobre lo que el presidente solicita, que equivale a más cuarentena y suspensión de la apertura económica, más represión, más familias con hambre, más desempleo. Van a tener que decirle al presidente que no tendrá las facultades para hundir al país. Decidieron hacer primero otra ronda de consultas con expertos médicos, de epidemiología, economía y derechos humanos. Tal vez estas consultas vuelvan más legítima su decisión, pero no la pueden cambiar. Tampoco la pueden cambiar los berrinches y amenazas del presidente. Queden firmes en asegurar que nadie pueda usar la epidemia para romper el Estado de Derecho. Saludos,
La mentalidad de corto plazo. De Manuel Hinds
Publicado en EL DIARIO DE HOY, 6 septiembre 2019Entre todas las interrogantes que plantea la creciente crisis en Argentina, una de las más intrigantes es ¿por qué le siguen prestando a Argentina si esta crisis de impago es la novena del país y la tercera en los últimos 20 años? ¿Si, más intrigante todavía, es la segunda en dos años? ¡Hace sólo un año que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le hizo el salvataje más grande de la historia (no de Argentina sino del mundo) y hoy ya está en crisis otra vez! Argentina es ya, con mucho, el mayor deudor del FMI. Aproximadamente la mitad de los préstamos de la institución se han dado a Argentina.¿Cómo es que el FMI y los mercados privados siguen prestándole? Puede ser que se requiera de una asesoría psicológica para contestar esta pregunta, pero hay una razón económica que ayuda a explicar este comportamiento aparentemente absurdo: los incentivos en las instituciones financieras estimulan un comportamiento que irracional desde el punto de vista de las instituciones mismas pero racional desde el punto de vista de los personajes que las manejan día a día.En los últimos años, muchas instituciones se han centrado en la generación inmediata de rendimientos como el criterio para juzgar a los gerentes y ejecutivos. No muchos sedan cuenta de que este énfasis en el corto plazo genera incentivos perversos para el rendimiento de la institución en el largo plazo porque, para los que manejan las instituciones, los rendimientos positivos de una mala operación financiera se presentan inmediatamente, y los negativos mucho más tarde en el futuro. Para el momento en el que estos últimos se presentan, los que hicieron la operación ya se han movido a otra posición, o a otra institución, o se han vuelto demasiado poderosos para que una mala decisión del pasado los afecte.Observe el caso de Christine Legarde, que fue la que autorizó la operación de salvataje del año pasado, comprometiendo 57 mil millones de dólares del FMI en un programa obviamente mal diseñado que fracasó en apenas un año. Para cuando el escándalo se empezó a generar la semana pasada, cuando la gente comenzó a preguntar quién metió esta pata en el FMI, ella ya estaba encaminada a ser la presidenta del Banco Central Europeo, en un proceso que ya está demasiado adelantado por razones geopolíticas para que sea echado para atrás. La rapidez con la que Argentina procesa nuevas crisis hizo que por poco la agarrara la puerta (¿quién iba a imaginarse que la siguiente crisis sería en un año?), pero no la agarró.Bueno, el FMI está sujeto a presiones políticas. Pero, ¿y el sector privado? ¿Cómo es que regresa una y otra vez a prestarle fondos a Argentina? El entusiasmo por prestarle ha sido tan grande que hace un par de años, en 2017, Argentina emitió un bono pagadero a 100 años, y la demanda por los bonos (el deseo de financiar a Argentina) superó por bastante la cantidad que el país había deseado tomar prestada. Hoy esos bonos tienen un precio de 54 centavos por cada dólar que los financieros dieron al país.Este comportamiento insano de los prestamistas se explica en gran parte porque los gerentes y ejecutivos que diseñan y hacen los préstamos, y los que recomiendan su compra, reciben sus emolumentos en el momento en el que el préstamo se concreta, no cuando se paga. De esta forma, los préstamos que ahora no se están pagando generaron comisiones, bonificaciones, pagos de servicios, utilidades, etc., que, cuando hablamos de las magnitudes en las que Argentina aumentó su deuda en los últimos años, hicieron millonarios a muchos. Los compradores últimos de los bonos (que no necesariamente son los mismos que los diseñaron) pagaron estas comisiones muy felices. No es hasta hoy que descubren que lo que pagaron era para perder enormes cantidades, para ellos y sus clientes.Esto es sólo un ejemplo más de lo tontas que son esas estrategias de medir el éxito por la supuesta rentabilidad inmediata de cada operación o persona. Esta sustitución de la evaluación estratégica de largo plazo por los resultados de corto plazo fue la caída de General Electric y es la causa de la crisis de Boeing, por ejemplo. ¿Habrá que esperar muchas crisis más para que la gente lo vea?
Ganó el futuro. Ganó la esperanza. Ganó el progreso. Discurso completo de aceptación de la candidatura presidencial
La unidad se hizo más fuerte, porque quedó claro que son mucho más las cosas que nos unen que aquellas que nos separan. Hemos elegido un camino que requiere del esfuerzo de todos, el compromiso de todos, la confianza de todos. De los que votaron y de los que no votaron, de quienes nos acompañaron con su voto y de quienes se irán sumando al camino del progreso. El domingo vivimos una fiesta popular de participación. El contraste está muy claro. De un lado está el pueblo diciendo con su voto que es tiempo de seguir hacia adelante. Del otro lado, un gobierno que se aferra al poder y utiliza el sistema judicial para amenazar y meter miedo. Yo al gobierno nacional le digo: no se equivoquen. Recuerden que el poder es un préstamo que nos da el pueblo y tiene fecha de vencimiento. Mientras más abusen del poder, mayor serán las ganas de los venezolanos de poner la mirada en el futuro para seguir adelante. Estamos unidos para progresar, para avanzar, para crecer. El progreso nos incluye a todos y nos necesita a todos. Hasta ahora, fuimos parte de una competencia electoral. A partir de ahora, tenemos el compromiso de construir el mejor equipo con un solo objetivo en mente: Lograr que los venezolanos tengamos una vida mejor. La unidad es algo mucho más grande que ponernos de acuerdo los candidatos y los partidos. Si algo debe quedarnos claro y debemos interpretar adecuadamente, es que el pueblo nos dijo que nosotros somos parte de la unidad, pero no somos toda la unidad. Lo que hace fuerte la unidad está allá afuera, en el corazón y la mente de cada venezolano que quiere una vida mejor. No nos equivoquemos. Con su voto, el pueblo dejó claro que quiere ir hacia adelante. Es un camino de más trabajo y menos política. De más resultados y menos promesas. De hacer más y hablar menos. Somos un país con más futuro que pasado, por eso no podemos quedarnos mirando atrás. Somos un país con más futuro que presente, por eso no podemos quedarnos parados donde estamos hoy. Los venezolanos dijeron que no están conformes con el presente que tenemos ni con el pasado que hemos vivido. Igual que tú, yo creo que los venezolanos merecemos más. Tenemos demasiados años escuchando que nuestro país está en crisis. Tenemos demasiado tiempo esperando. Es tiempo de trabajar para solucionar la crisis. El camino que proponemos es más compromiso y menos poder. Generosidad y No egoísmo. Justicia y No privilegios. Verdad y nada de mentiras. Es abrir nuestros ojos, nuestros oídos y nuestros corazones para escuchar y tomarnos en serio las necesidades de nuestro pueblo. La discusión entre el presente y el pasado, lo que hace es construir cercas para separarnos y dividirnos. Todos somos venezolanos y eso es lo que importa. Un país dividido es un país débil y queremos tener un país fuerte. Nuestro compromiso es derribar todas las cercas que dividan, porque estamos aquí para construir puentes que unan tus problemas con las soluciones. Nuestra mirada está puesta en el futuro. Nos sentimos comprometidos, porque hoy el camino se hace más grande y convoca a todos los que queremos una vida en la que haya tranquilidad y progreso. Lograr esa vida mejor es posible y juntos la vamos a alcanzar. Cuando se confía, se avanza. Cuando se confía, se quiere. Cuando se confía, se logra. El camino que hemos elegido no necesariamente es el camino más fácil, pero con frecuencia sucede que no siempre el camino más corto y más fácil es el que nos lleva al lugar que realmente buscamos. Hemos elegido un camino que requiere del esfuerzo de todos, el compromiso de todos, la confianza de todos. De los que votaron y de los que no votaron, de quienes nos acompañaron con su voto y de quienes se irán sumando al camino del progreso. Llegó el momento de abrirle las puertas al futuro, para que podamos vivir una vida en la que el único requisito que se te exija, sea tu necesidad y tu esfuerzo, sin importar tu forma de pensar. El camino que hemos elegido, es el camino del progreso para todos por igual. Sin egoísmos, sin privilegios, sin exclusiones. No será fácil, pero estamos convencidos de que tendremos éxito. Somos muchos queriendo una vida mejor. Somos muchos dispuestos a poner nuestro esfuerzo. Juntos tenemos la fuerza para superar el miedo y las amenazas. Juntos tenemos las ganas para hacer realidad nuestros sueños. Tenemos una meta y la vamos a alcanzar. Porque cuando se hacen las cosas bien, pasan cosas buenas. Nuestro objetivo es lograr que haya progreso para todos por igual. Nuestro compromiso es que todos tengan acceso a los bienes que son para todos. Somos amigos de multiplicar oportunidades y enemigos de los privilegios. Creemos en el derecho que cada quien tiene a pensar por sí mismo. Creemos que el gobierno debe ser un orientador, no un controlador. Creemos en el trabajo en equipo con el esfuerzo privado, sin expropiar empleos, convirtiendo el petróleo en un recurso que debe funcionar desde los venezolanos, por los venezolanos y para los venezolanos, y así tener una economía fuerte, con muchas empresas que produzcan muchos productos de la mejor calidad, para que haya progreso para todos por igual. Creemos en el derecho que cada quien tiene a pensar por sí mismo y por eso enfrentamos cualquier forma de dominación, sumisión y explotación, sin importar de donde provenga. Creemos en la capacidad y el talento creador del venezolano y estamos comprometidos a impulsar su progreso sin importar la forma de pensar. Nuestro gobierno será el gobierno del empleo. Porque quien tiene un empleo de calidad, camina tranquilo hacia el progreso. Tener programas sociales que ayuden a quienes lo necesitan es bueno, pero lograr que en cada familia haya por lo menos una persona con empleo de calidad es mejor. Para lograr esto, es necesario que el esfuerzo público y el esfuerzo privado trabajen en equipo. Nuestro gobierno será el gobierno de la educación. La experiencia de gobierno en Miranda nos ha demostrado que la educación es una palanca poderosa para el progreso. Donde hay educación, hay tranquilidad. Donde hay educación, no hay espacio para la violencia. Donde hay educación hay futuro. Donde hay educación, nadie se queda atrás. Nuestro gobierno será para todos. El autobús del progreso tiene sus puertas abiertas. Cabemos todos, para beneficiarnos todos. Sin requisitos, Sin exigencias. Nuestro compromiso es que nadie se quede atrás. Lo único que vamos a dejar son los errores del presente y del pasado. Todos cometemos errores. Lo importante es que seamos capaces de reconocerlos, para corregirlos y seguir adelante. Hoy asumimos ante los venezolanos el compromiso de mantener la mirada en el futuro. Ni quedarnos mirando atrás. Ni quedarnos parados donde estamos hoy. Mi compromiso contigo es luchar contra la injusticia que se esconde detrás de los privilegios que benefician a pocos a costa de perjudicar a muchos. Mi compromiso es usar el poder para servir al pueblo con prudencia y sin egoísmo. Es mantener mis ojos, oídos y corazón siempre alerta a las necesidades del pueblo, y así garantizar Tranquilidad, Orden y Progreso para todos por igual. Mi compromiso contigo es no perder ni un minuto en conflictos, peleas y descalificaciones, porque yo sé que el pueblo gana poco con las discusiones y las peleas. En cambio gana mucho cuando nos ponemos de acuerdo para acercar las soluciones a los problemas. Mi prioridad será construir y sumar, porque para avanzar debemos estar unidos. Juntos tenemos la fuerza para lograr lo que queremos. Mi compromiso contigo es que nunca más estés obligado a ponerte una franela de algún color o a inscribirte en un partido para que te tomen en cuenta. Es tiempo de que puedas pensar por ti mismo y tener la tranquilidad de que el único requisito sea tu necesidad y tu esfuerzo. Todas las energías que tengo, todo mi esfuerzo, lo pondré en ganarme tu confianza y la confianza de todos los venezolanos. El 7 de Octubre tenemos una cita que nos compromete. Ese día nos tocará elegir entre dos caminos: el camino del progreso que tú quieres ó el camino del socialismo que el gobierno quiere para ti. El camino del progreso nos convoca a todos. La fuerza para recorrerlo está dentro de ti y de millones que piensan y sienten como tú. Juntos tenemos las ganas. Juntos tenemos la fuerza para hacer realidad ese camino. Cuentas conmigo. Cuento contigo.(El Universal/Caracas)
Nicaragua, Honduras and hypocrisy
LAST YEAR, leftist Honduran President Manuel Zelaya sought to stage an illegal referendum as part of a bid to overturn a constitutional ban on his reelection. The country's supreme court ordered his arrest by the army, which then overstepped legal bounds by deporting him. Led by its leftists, the Organization of American States rushed to denounce the "coup" and expel Honduras. Despite subsequently holding a presidential election recognized as constitutional, free and fair, the country has not been readmitted to the regional forum. OAS members signed a special charter nine years ago committing themselves to defend democracy; in Honduras's case, they have been -- to say the least -- hyper-vigilant. But what of neighboring Nicaragua? There, President Daniel Ortega, who, like Mr. Zelaya is a leftist populist, has used blatantly illegal decrees, the manipulation of court rulings and mob violence by his supporters to clear the way for his reelection, even though it is explicitly prohibited by the constitution. The reaction of the OAS? Utter silence. OAS Secretary General Jose Miguel Insulza rushed to validate a dubious claim by leftist Ecuadoran President Rafael Correa that a dust-up he had with protesting police on Sept. 30 amounted to a coup attempt. But Mr. Insulza had nothing to say about a ruling the same week by a self-styled supreme court, composed entirely of members of Mr. Ortega's Sandinista movement, that ordered the electoral authority to accept him as a candidate. Mr. Ortega's assault on Nicaragua's constitution makes both Mr. Zelaya and the Honduran army look timid. The former Marxist dictator lost four consecutive elections beginning in 1990 and has never received more than 38 percent of the vote. But he engineered a constitutional change that allowed his election by a plurality in 2006. When the Congress refused to overturn a ban on his reelection, he turned to the court, which issued an obviously political ruling last year. This year the terms of two justices expired, raising the possibility that the ruling would not hold up. Mr. Ortega issued a decree extending their terms. When it was pointed out that this was unconstitutional -- Congress must approve the appointment of judges -- the regime reprinted the constitution during a summer recess and inserted a provision allowing the judges to remain in place. The expired judges, meanwhile, named seven other Sandinistas to places on their "court," since the remaining judges refused to recognize them. It was that body that decreed that Mr. Ortega cannot be denied a place on the 2011 presidential ballot. The Obama administration has condemned these manipulations. But what of the champions of democracy in Honduras, such as Brazil's Luiz Inácio Lula da Silva, or Cristina Fernández de Kirchner of Argentina? No comment. Which raises the question: Was it really democracy that they were defending in Honduras?(The Washington Post)
No es solo nuestra culpa, presidente Bukele. De Oscar Martínez
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, en una conferencia de prensa en San Salvador el 2 de julio de 2019 CreditJosé Cabezas/ReutersOscar Martínez, reportero de El FaroPublicado en EL NEW YORK TIMES/ES el 12 de julio 2019EL SALVADOR — El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, dijo algo acerca de las miles de personas que se van hacia Estados Unidos que ningún presidente de Centroamérica había pronunciado con esa claridad: “Es nuestra culpa”. Lo dijo en referencia a Óscar y Valeria Martínez, padre e hija salvadoreños que se convirtieron en ícono de la tragedia migratoria tras aparecer ahogados en la ribera del río Bravo.La frase de Bukele es meritoria al haber sido pronunciada en una región de migrantes, donde muchos políticos prefieren decir que todo está bien en sus países, que estos prosperan a ritmo galopante, incluso que no hay desplazamiento forzado. Y también refleja una nueva posición sobre el tema, pero se trata de un discurso conveniente para la clase política antiinmigrante de Estados Unidos.Habría que corregir al presidente: es nuestra culpa, pero no solo nuestra culpa. No hay ningún líder reciente en Centroamérica que, además de reconocer su culpa, exija con contundencia respeto para sus ciudadanos que migran y ponga su voz en beneficio de sus denuncias y su tragedia humanitaria. Bukele aún tiene una oportunidad de ser el primero en esto.En el tema migratorio, los gobiernos centroamericanos suelen actuar como paracaidistas en la tragedia. Cuando aparece una foto como la de Óscar y Valeria; cuando ocurre una masacre como la de agosto de 2010, en el estado mexicano de Tamaulipas, donde 72 personas que migraban hacia el norte fueron acribilladas por Los Zetas; cuando una caravana tras otra atraen la atención mundial, los gobernantes de estos países aparecen y dicen algo. Usualmente hacen llamados estériles a que la gente no migre. Les aseguran que en el camino pondrán en riesgo sus vidas, como si estos pueblos forjados en la migración no lo supieran en carne propia.En realidad, Centroamérica también persigue a sus migrantes. El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, envió en varias ocasiones a sus policías antimotines a detener el paso de caravanas. El gobierno guatemalteco ha bautizado como Operación Gobernanza a la instalación de retenes militares en la ruta interamericana para capturar migrantes, en su mayoría salvadoreños y hondureños.Sí, Bukele hizo algo muy poco habitual entre los mandatarios centroamericanos, pero en otro sentido es igual que el resto de los líderes del Triángulo del Norte. Si hay algo que unifica el discurso de todos los presidentes de la región respecto a la migración es la incapacidad de criticar con contundencia las posturas antiinmigrantes de los gobiernos de Estados Unidos y México.En México, los migrantes centroamericanos son extorsionados por autoridades desde hace décadas. México, actualmente, implementa una política migratoria que obliga a decenas de miles de personas a caminar por montes en el sur del país, expuestos a violaciones y asaltos. El presidente de Estados Unidos nos llamó “países de mierda” y amenazó a la región con cortar toda ayuda si no detiene a más centroamericanos en Centroamérica. Los gobiernos de la región responden, cuando ocurre el extraño caso, con tímidas declaraciones en las que ocupan verbos como “lamentar”, “exhortar”, “sugerir”.La admisión de toda la culpa no ha sido la única frase de Bukele que será música para los oídos de algunos de los políticos estadounidenses más conservadores. El 8 de mayo, Bukele dijo en Washington a un grupo de congresistas: “Estamos alineados, ustedes no tienen que comprarnos para que estemos alineados porque pensamos de manera similar”. En esa ocasión, como respuesta al congresista republicano Ted Yoho, quien cuestionó el uso del dinero que Estados Unidos entrega a El Salvador, Bukele comparó a su país con un hijo que está dejando las drogas y a Estados Unidos con un papá que podría darle una oportunidad más y ayudarlo.Yoho respondió a Bukele: “Tengo tres hijos y es lo que hacemos todo el tiempo: te voy a ayudar una vez más. Y creo que esta nación te ayudará”.Aquello pareció una teatralización del problema que generan los discursos pusilánimes de los gobernantes centroamericanos ante Estados Unidos. Esa falsa idea de que en Centroamérica somos como hijos desastrosos de un padre magnánimo que por más que nos ayuda no logra componernos. Ese padre, siguiendo con la metáfora absurda, ha sido un déspota y en gran medida el culpable del desastre de hijos que tiene.En El Salvador, por ejemplo, la violencia actual y la migración están directamente relacionadas con la guerra civil. Las grandes oleadas de salvadoreños en California llegaron huyendo de ese periodo de doce años que dejó más de 75.000 muertos. Las pandillas que ahora provocan que miles de salvadoreños huyan de la región nacieron allá, no muy lejos de Hollywood, con jóvenes que buscaban huir de una guerra patrocinada y sostenida por Estados Unidos. Llegaron, en el caso salvadoreño, en vuelos de deportados a un país destruido por esa guerra.Miles huyen del norte centroamericano porque la violencia es extrema; miles migran porque la vida es precaria. Y eso es así porque sus gobiernos son corruptos y la mayoría de sus partidos políticos, máquinas de enriquecer a sus dueños. Pero también porque Estados Unidos ha tenido una incidencia directa en las decisiones de múltiples gobiernos centroamericanos. En muchas ocasiones, esa incidencia ha terminado en catástrofe.Decenas de muertes de migrantes en la actualidad se deben a la decisión de gobernantes estadounidenses que amurallaron grandes tramos de su frontera y presionaron a México para que militarizara la suya. Hay mujeres que son violadas en los montes mexicanos y niños moribundos perdidos en el desierto estadounidense, en buena medida, gracias a que políticos de ambas naciones han decidido dejarles esas rutas peligrosas como única opción.Sostener que los gobiernos centroamericanos no tienen parte de la culpa y que su corrupción no es factor clave en la migración es de cínicos o mentirosos. Pero decir que Estados Unidos no tiene otra parte de la culpa y de la responsabilidad de mejorar estas sociedades es de miopes o cobardes.El presidente Bukele realmente hará un cambio de discurso ante el fenómeno de la migración si incluye esta última parte. Ha habido decenas de gobiernos centroamericanos que se disputan el primer lugar como el más genuflexo ante Estados Unidos, y eso no ha generado que el trato hacia los migrantes mejore. Es momento de completar el discurso, presidente, y dejar de contribuir a que Estados Unidos siga creyendo que es solo nuestra culpa.Lea también la columna de Paolo Luers: ¿Mea Culpa?
Es la hora de la política
Escribo estas notas en Roma, horas antes de partir para Washington, donde el día 15 de noviembre voy a participar en la reunión de líderes mundiales, mientras la comunidad internacional está evaluando aún los daños provocados por la más grave crisis financiera desde 1929. Las respuestas a los desafíos actuales no pueden provenir de los especialistas, que durante tres décadas han aplicado las recetas que nos han llevado al actual colapso de la economía mundial. Lo que necesitamos son otros consejos, provenientes de hombres y mujeres con acusada sensibilidad social, preocupados por la producción, por el empleo y por un orden global más equilibrado y democrático. Como dije en mi reciente discurso ante la Asamblea General de la ONU, ha llegado la hora de la política. El pensamiento neoconservador y recetas como las del Consenso de Washington consagraron la autorregulación de los mercados, la hegemonía del capital especulativo y la práctica inutilidad del Estado. El predominio de semejantes ideas encubría en realidad una actividad especulativa sin precedentes, que provocó una separación prácticamente total entre las esferas productiva y financiera. La economía global se transformó poco a poco en un enorme casino.La crisis financiera ha obligado a los fundamentalistas del liberalismo a rendirse a la evidencia de su propio fracaso y a implorar la acción del Estado para evitar un posible agravamiento. De repente, la intervención estatal dejó de ser abominable y pasó a ser indispensable para los defensores de la tesis falaz –y durante mucho tiempo, poco cuestionada– de que el mercado es virtuoso por definición y capaz de regularse a sí mismo. El electorado de Estados Unidos –epicentro de la crisis– se ha manifestado a favor del cambio en las recientes elecciones. El capital político de Barack Obama refleja el apoyo popular a una propuesta de variación de rumbo que sea dictado esencialmente por la política, y no por los mercados. Representa también la condena de una práctica y de un discurso que en los últimos tiempos fueron dominantes, hasta el extremo de impedir que las adecuadas medidas correctoras pudieran ser tomadas por los Gobiernos de los países involucrados, a pesar de las múltiples señales de descontrol del sistema financiero. Esperemos que el nuevo equipo gubernamental sepa escuchar el mensaje de las urnas. La cuenta que hemos de pagar a causa del descontrol especulativo es muy elevada, y los trabajos de reconstrucción serán arduos. La participación de los líderes políticos en esta tarea resultará crucial. Nuestra actuación ha de estar a la altura de la gravedad de las circunstancias y de la magnitud del desafío que supone edificar un nuevo orden financiero internacional. Tal arquitectura ha de ser capaz de evitar que vuelvan a producirse los desmanes que nos han conducido hasta aquí, y cuyo impacto en la economía real amenaza el empleo, el poder adquisitivo, los ahorros y el sueño de una casa propia y de una jubilación tranquila para centenares de millones de personas en todo el mundo. El cambio del sistema financiero internacional exige una coordinación de los sistemas reguladores nacionales, y pasa necesariamente por el aumento de la participación de los países en desarrollo en los procesos decisorios de gobierno global y en instituciones como el FMI y el Banco Mundial. Estos dos organismos deben ser reformados (o refundados) como parte de un profundo cambio de los mecanismos de gobierno del sistema económico-financiero internacional, que durante mucho tiempo se ha dedicado a velar por un orden mundial asimétrico. De esta manera se imponían recetas de austeridad, de impacto social negativo, a los países en desarrollo, que no eran seguidas por los países desarrollados en situaciones semejantes. Ya no podrá ser posible que ciudadanos, países e instituciones internacionales tengan que obedecer leyes y reglas, mientras que el sistema financiero está mal regulado o, lo que es peor, no está regulado en absoluto. En Brasil ya dábamos antes de la crisis, y seguimos dándosela ahora, una atención prioritaria a la promoción del desarrollo con vistas a la disminución de las desigualdades sociales y regionales, basado en la responsabilidad fiscal y en bases económicas sólidas, que ponen a nuestro país en condiciones de atravesar la actual turbulencia sin comprometer la evolución económica positiva de los últimos años. En casi seis años de gestión se han creado más de diez millones de empleos estables y, sólo entre enero y septiembre de este año, dos millones noventa y siete mil. A lo largo de ese periodo, veinte millones de personas han logrado superar el umbral de la pobreza absoluta. Nuestra vitalidad económica se sustenta también en una fuerte política de inclusión social por medio de inversiones estatales en educación y en salud, así como mediante programas de redistribución de la renta como el Fome Zero (Hambre Cero), liderado por la Bolsa Família, que atiende actualmente a once millones de familias, el equivalente a cuarenta y cuatro millones de personas. A escala regional, la democratización de los países latinoamericanos abre espacios para la ampliación del diálogo político y para la concreción de proyectos conjuntos en materia de integración económica y de infraestructuras. América del Sur no quiere soluciones aisladas para la crisis. Quiere más integración. La visión política común que orienta tales opciones ha ofrecido resultados concretos a los agentes económicos y a los ciudadanos en lo que se refiere al aumento significativo, a lo largo de las últimas décadas, del intercambio comercial, de la construcción de cadenas productivas que atañen a países vecinos y de la ampliación de las infraestructuras viarias y energéticas, por citar algunos ejemplos. En este sentido, nos sirven de estímulo los éxitos del proyecto de integración europea, una obra de construcción de la paz de las más duraderas y de mayor alcance social. La historia ofrece múltiples ejemplos de liderazgo y de osadía políticos capaces de inspirarnos para esa tarea de reconstrucción a la que tenemos que enfrentarnos sin demora. Con la voluntad política y una racional generosidad por parte de los líderes políticos mundiales, podremos llegar a la conclusión de la Ronda de Doha, un paso importante en las medidas anticrisis que han de ser adoptadas. Con todo, lo fundamental es llevar adelante, como en otros momentos históricos, un cambio radical de la arquitectura financiera del mundo. Nos es necesaria una previsibilidad económica para reconstruir la economía mundial sobre nuevas bases, de manera que el mundo de las finanzas esté al servicio de la producción agrícola, industrial, científico-tecnológica y cultural, y no al contrario, como hasta ahora ha venido ocurriendo. Los países en desarrollo, como Brasil, están dispuestos y en condiciones de asumir sus responsabilidades en este esfuerzo colectivo. Luiz Inácio Lula da Silva es presidente de Brasi.Este artículo es la introducción a la presentacion de los 100 personajes del ano 2008, publicada por El País.)
"Chávez comprendió a tiempo que las FARC le restaban"
(entrevista con el director de Tal Cual, de Francisco Tumi Guzmán)¿Por qué en el continente se siente que la Operación Jaque ha sido no solo una batalla colombiana sino una que involucra a toda Sudamérica?En cierta forma el conflicto de Colombia tiene un talante internacional mucho mayor que el que tenía, por ejemplo, el levantamiento de Sendero Luminoso en el Perú. En Colombia, otros gobiernos, incluso europeos, han participado en el esfuerzo pacificador, con vistas al canje humanitario de rehenes, de modo que sus características van más allá de lo puramente doméstico. Por eso el conflicto con las FARC está tan internacionalizado.Me refería a que todo el mundo ha volteado la mirada a Caracas para ver cómo el rescate ha impactado en Hugo Chávez. ¿Comparte usted la idea de que el presidente venezolano quedó en el bando de los perdedores?No, porque Chávez tuvo el acierto casual --digámoslo así-- de que, poco tiempo después de haber tomado partido por las FARC y llegado, incluso, al extremo de proponer que se les concediera el estatus de beligerante, se desmarcó de ellas y no solo les pidió que liberaran sin condiciones a todos los secuestrados sino que cuestionó la lucha armada y declaró a esta "fuera de orden" --esos fueron los términos que expresó--. Dijo que las FARC estaban históricamente fuera de época. Es decir, se desmarcó de manera muy tajante.¿Cree que, después de su prolongada ambigüedad frente a las FARC, su desmarque sea creíble?Eso lleva a una discusión sobre cuáles son sus reales intenciones, pero, en el momento en que lo hizo, tanto el Gobierno de Colombia como otros gobiernos del continente expresaron su satisfacción. Uribe no se puso a pensar cuáles serían las intenciones de Chávez y por qué razón estaría haciendo eso sino que declaró su satisfacción ante aquel gesto. ¿Por qué? Porque obviamente cuando Chávez hace eso, Correa también lo hace, y luego Evo Morales.Habló hace un momento de las reales intenciones de Chávez. ¿Cuáles son frente a esta nueva situación de las FARC?Debe de estar pensando mucho sobre esto. Anteriormente había dos factores que podían influir en su ánimo: En primer lugar, él sabe lo que ninguno de nosotros sabe acerca de lo que hay en esa computadora [la del jefe guerrillero 'Raúl Reyes', muerto en territorio ecuatoriano], y entonces, obviamente, hizo un gesto dirigido a tratar de atemperar la conflictividad con el Gobierno de Colombia, para tratar de que esa computadora no siga expulsando documentos comprometedores. Y en segundo lugar, Chávez tiene también que haberse dado cuenta --en un cierto momento-- de que él estaba asociándose con unos perdedores.¿Desde antes del rescate de los rehenes?Desde antes del rescate era claro que los de las FARC eran unos perdedores. Perdieron a su líder máximo por muerte natural; antes les habían matado al segundo, 'Raúl Reyes', que era el más activo de la guerrilla en el escenario internacional; luego, uno de los miembros del secretariado fue asesinado por uno de sus escoltas; se entregó una comandante muy conocida junto con un grupo de guerrilleros; el ritmo de entrega a las Fuerzas Armadas llegó a 200 guerrilleros mensuales; las FARC pierden el control territorial cuando las Fuerzas Armadas Colombianas cambian de táctica y salen a disputar el territorio; las han acorralado en la selva, allá en la frontera con ustedes, también en la frontera con el Ecuador.¿Eran demasiado descrédito para Hugo Chávez?Chávez percibió que las FARC ya no tienen ninguna popularidad, ni siquiera en Venezuela, entonces, pragmático como es, se las sacudió. Fue incluso más allá de pedir la liberación de los secuestrados; fue hasta el punto de cuestionar la lucha armada. Creo que para Chávez la jugada comenzó a ser obvia cuando se dio cuenta de que para él, más que un activo, como llegó a pensar en un momento, las FARC eran una hipoteca. Tras el éxito de la Operación Jaque, su primera reacción fue de militar: "Me quedé frío". Es decir, sintió asombro ante la perfección de la operación militar. De inmediato felicitó a Uribe y seguramente este domingo, en su programa, hablará sobre esto.¿Qué le aportaban las FARC antes de que cambiara de opinión?Él probablemente pensaba antes que las FARC podían formar parte de su esquema continental de lucha contra el imperio, etc., toda esa retórica típica de él, pero a partir de cierto momento aparentemente comienza a comprender que la relación con las FARC no le da nada sino que, más bien, le resta. No olvidemos que en Venezuela estamos en un proceso electoral y que estas elecciones de noviembre de este año son de importancia capital tanto para Chávez como para la oposición.¿No está minimizando la visión chavista de encabezar un movimiento continental?Sobre eso también hay que tener claro que se trata de mucho ruido y pocas nueces. La idea de que Chávez puede ser el líder de un bloque continental contra los gringos es una ilusión. Hay mucho ruido, mucha declaración, mucha retórica, pero en la práctica se puede constatar con muchísima facilidad que las agendas políticas de Brasil, de Uruguay, de Chile e incluso de Argentina, con relación a Estados Unidos, no son las de Chávez. Ni de Correa, tampoco. Y, por supuesto, tampoco es la del Perú. De modo que eso que se llama la internacional chavista no va más allá de Bolivia, Nicaragua y Cuba, que son los cuatro países que integran el ALBA.Junto a opositores internos en cada país, como Humala.Por supuesto. Hay movimientos en América Latina que responden a Chávez e, incluso, que son financiados por él. Tengo la impresión de que, en general, son los movimientos de ultraizquierda los que se identifican con Chávez. Humala no proviene de la izquierda; es un movimiento muy peculiar, más bien una especie de nacionalismo fascistoide, pero que, a fin de cuentas, se relaciona con Chávez. En términos generales, Chávez tiene eco en la ultraizquierda del continente, que es muy ruidosa, muy activa, pero muy pequeña y se mueve más bien en partes marginales de su respectivo país. Es decir, son fuerzas que en sus propios países tienen poco eco.¿Qué impacto tendrá la Operación Jaque en la oposición venezolana, de la que usted forma parte?Yo creo que Chávez viene debilitándose lenta y sostenidamente desde hace algún tiempo. No se está desplomando ni muchísimo menos, pero viene debilitándose. Todavía no sabemos qué efectos han producido en la opinión pública de Venezuela los acontecimientos en Colombia. Chávez ha tenido el acierto de desmarcarse a tiempo y a lo mejor el éxito colombiano no lo afecta tanto. Si hubiera mantenido la postura anterior a su desmarque, probablemente el impacto habría sido devastador. Pero en este momento yo no creo que ese impacto sea devastador. En cualquier caso, ha venido debilitándose progresivamente. Y en este país polarizado, obviamente en la oposición venezolana la Operación Jaque ha producido un efecto de entusiasmo.¿Cuál cree que sea el efecto en la porción chavista del país?En el mundo chavista --ya no en Hugo Chávez, sino en el mundo chavista-- ha habido reacciones bastante estúpidas. La televisora del Estado, que está confiscada por el partido de Chávez, ha difundido cosas insólitas, por ejemplo que la operación fue un montaje, que estaba preparada, etc. Ha sido una reacción de despecho y de resuello por la herida que tal vez refleja lo que internamente el movimiento siente. Sin embargo, yo diría que en todo el país, entre los opositores al presidente y los partidarios del presidente, hay una reacción de satisfacción y de disfrute frente a la operación realizada para el rescate de los rehenes, pues, repito, las FARC no tienen ninguna popularidad en Venezuela. Eso explica el desmarque de Chávez.¿Tiene Álvaro Uribe asegurada la re-reelección si se la propone?En Colombia hay una situación paradójica: desde un punto de vista popular, Uribe tiene ahora una fuerza enorme. Probablemente, si se llegara a ese supuesto referéndum para decidir si se repite la anterior elección o no, Uribe lo ganaría clamorosamente. Sin embargo, en el mundo político colombiano la idea no goza de simpatía: ni en lo que queda del Partido Liberal, ni en lo que queda del Partido Conservador, ni en las nuevas formaciones políticas.Eso no le suele interesar mucho a alguien que desea reelegirse.En Colombia, a diferencia de Venezuela, hay claramente una élite política a la izquierda y a la derecha que no comparte para nada la idea de la re-reelección. La noche que Uribe habló acerca de su enfrentamiento con la Corte Suprema, yo estaba en Bogotá en casa de Belisario Betancourt, que es uribista no reeleccionista y que estaba reunido con cuatro precandidatos del uribismo a la presidencia, pues en el uribismo tampoco tiene simpatía la idea de la reelección.¿Cómo pueden impedir ellos que Uribe se re-reelija?Algunos señalaron que ni siquiera el propio Urbe está muy convencido de la bondad de una reelección. Por otro lado, si el problema es la continuidad de la política de Uribe, en su propio entorno hay gente que tiene la absoluta perspectiva de continuarla. De manera que dudo de que la reelección se concrete en Colombia.Lo que sí es claro es que para las FARC este golpe ha sido casi de muerte.La operación se llamó Jaque, no Jaque Mate. Las FARC todavía tienen miles de hombres bajo las armas, muchísimo dinero, muchísimos recursos, pero al mismo tiempo están política y militarmente muy golpeadas. Dudo mucho de que tengan capacidad de recuperación militar. En Colombia todo el mundo habla ya, desde antes de este último golpe, del "post conflicto". Dicen que esto puede tardar dos o tres años más.¿Qué va a ocurrir primero en el continente: el desmantelamiento final de las FARC o el triunfo de la oposición venezolana?Un triunfo de la oposición venezolana estaría planteado para las elecciones presidenciales del 2012. De modo que pueden ser procesos que coincidan en el tiempo.
PERCEPCIÓN JURÍDICA DE LA DESINSCRIPCIÓN DE LOS CANDIDATOS A LA PRESIDENCIA
El presente trabajo pretende hacer una reflexión eminentemente jurídica sobre el retiro de los candidatos del Partido Demócrata Cristiano, PDC; como del Partido de Conciliación Nacional, PCN; para las valoraciones políticas, bueno...La Constitución de la República establece que para ser elegido presidente de la República se requiere: ser salvadoreño por nacimiento, hijo de padre o madre salvadoreño; del estado seglar, mayor de treinta años de edad, de moralidad e instrucción notorias; estar en el ejercicio de los derechos de ciudadano, haberlo estado en los seis años anteriores a la elección y estar afiliado a uno de los partidos políticos reconocidos legalmente.En ese sentido, las solicitudes de inscripción de candidatos a Presidentes y Vicepresidentes, deben presentarse personalmente, ante la Secretaría del Tribunal Supremo Electoral, dichas solicitudes serán consideradas inmediatamente por el Tribunal, el cual deberá resolver dentro de los tres días siguientes a su presentación.Resulta que, tanto los candidatos del PDC como del PCN, fueron debidamente inscritos por el Tribunal Supremo Electoral en vista que cumplieron los requisitos establecidos en el ordenamiento jurídico vigente. Sin embargo, hace poco escuchamos a los dirigentes de dichos institutos políticos anunciado que “retiraran la inscripción” de sus candidatos, por diversas razones.Vale la pena aclarar, que en el ordenamiento jurídico electoral vigente, en lo que se refiere a la inscripción de candidatos a Presidentes y Vicepresidentes, no existe la figura de la “des-inscripción de candidatos”, sino que únicamente existe la figura de la “sustitución de candidatos”, que se da por causa de muerte o alguna incapacidad legal o física que sobrevenga al candidato ya inscrito.Frente a lo anterior, es válido preguntarse si el Tribunal Supremo Electoral puede desincribir a los candidatos y cuáles serían las implicaciones jurídicas de ello. En primer lugar, es necesario recordar que el Tribunal Supremo Electoral, como parte de la administración pública, se encuentra vinculado al principio de legalidad, el cual la Sala de lo Contencioso Administrativo lo entiende de la siguiente manera: “Sobre el particular, Marienhoff plantea en su Tratado de Derecho Administrativo, “La actividad de la administración pública se concreta en hechos y actos jurídicos y no jurídicos, cuya validez depende de que la actividad correspondiente haya sido desplegada por el órgano actuante dentro del respectivo círculo de las atribuciones legales. Este círculo de atribuciones legales determina la capacidad legal de la autoridad administrativa”. (Sentencia del día treinta de marzo de mil novecientos noventa ocho. Ref. 20-T-96)”; es decir, en este caso el artículo 79 del Código Electoral establece cuáles serán esas atribuciones y no considera como una de ellas la figura de la “des-inscripción de candidatos”, en ese sentido, el Tribunal Supremo Electoral, una vez inscritos los candidatos únicamente puede sustituirlos por las causales antes señaladas, pero no “des-inscribirlos”.Una de las consecuencias de “des-inscribir a los candidatos”, es que dicho acto carezca de validez o inclusive se pudiera hablar que fue inexistente, ya que de acuerdo a la Sala de lo Contencioso Administrativo: “La administración pública encuentra su accionar circunscrito a los parámetros que establece la ley. El hecho de que la administración tenga estrictamente delimitados, su forma y campo de acción, idealmente implicaría que ésta se ajustare siempre a dichas limitantes, y por tanto sus actuaciones deberían ser siempre legales. Sin embargo, en la práctica la Administración se aleja de tales parámetros, por consiguiente, el mismo legislador plantea como consecuencias ante este supuesto, las nulidades, la inexistencia de los actos dictados, etc. (Sentencia del día treinta de marzo de mil novecientos noventa ocho. Ref. 20-T-96)”;”Finalmente, otra de las implicaciones que ocasionaría, es que, en las papeletas de votaciones para las elecciones del 15 de marzo aparecerían las banderas de los partidos políticos que posean candidatos inscritos en el Tribunal, esto de conformidad al artículo 239 del Código Electoral.
Chirajito y los planes de gobierno
A mi generación le tocó reírse y divertirse con Chirajito, el insigne payaso del recordado programa Jardín Infantil. Sus ocurrencias y en especial su capacidad de improvisación entretenían a miles de niños salvadoreños. Chirajito es tan versátil que incluso ha sido candidato a diputado por el partido PLD y ha sido consultado en la elaboración del plan de gobierno de Rodrigo Ávila.Los equipos técnicos de los principales partidos en contienda han trabajado en la elaboración de sendos planes para sus candidatos. Sin embargo, vale la pena preguntarse si las figuras en contienda conocen lo que realmente están proponiendo en estos documentos. Confirmando el viejo adagio de “pan y circo”, los candidatos muestran una gran habilidad para la improvisación, proponiendo medidas que no aparecen en sus detallados planes de gobierno y que no han sido analizadas por sus equipos técnicos.Dos ofertas de este tipo han sido propuestas públicamente por Rodrigo Ávila y Arturo Zablah. La primera de financiar viviendas con los recursos de los fondos de pensiones, utilizando las instituciones públicas como el Fondo Social de la Vivienda, el Banco Hipotecario y el Banco de Fomento. La segunda de eximir del pago del impuesto sobre la renta a todos las personas naturales que ganen menos de US$1,000 mensuales.A los políticos se les olvida con facilidad que los fondos de pensiones pertenecen a las personas que han ahorrado esos recursos y que el principal criterio de inversión de esos recursos debe ser la seguridad. Cristina Kirchner sucumbió a la tentación de apoderarse de los ahorros de los cotizantes para financiar al sector público y serán los futuros pensionados los que sufrirán las consecuencias de esa decisión. Por otro lado, la experiencia de Fannie Mae en Estados Unidos muestra el peligro de expandir el crédito hipotecario hacia quienes no tienen capacidad de pago. Los cotizantes al sistema de ahorro para pensiones debemos de tener una profunda desconfianza de que nuestro ahorros se destinen para fines políticos en vez de seguir los criterios de seguridad y rentabilidad.Es verdad que a nadie le gusta pagar impuestos, pero también es verdad que no nos gusta tener que parar la inversión en educación, o dejar de mantener las carreteras, o dejar de apoyar a las familias en extrema pobreza. Estas serían algunas de las posibles consecuencias de eximir del impuesto sobre la renta a aquellos que ganen menos de US$1,000 al mes.¿Sabía usted que el 97% de los inscritos en el Sistema de Pensiones tienen un salario menor a US$1,030 mensuales? Las declaraciones de personas naturales al Impuesto sobre la Renta de años pasados muestran que el 86.4% de los contribuyentes ganó menos de $1,000 al mes. Es obvio que la base tributaria, el número de salvadoreños a quienes se le cobra el Impuesto sobre la Renta, se reduciría al mínimo con esta medida y se crearían grandes distorsiones. Esto a pesar de que el plan de gobierno propone ampliar la base tributaria y “Preservar el sistema impositivo de manera simple, eficiente, con el mínimo de distorsiones”.En términos de recaudación esta propuesta implicaría perder un tercio de la recaudación total de impuesto sobre la renta a las personas naturales. Aunque no dispongo de cifras actualizadas, mi estimado es que se podrían perder unos $85 millones de dólares anuales en recaudación, alrededor del 0.4% del PIB. Esto equivale a más del 13% del presupuesto total de gasto corriente e inversión del Ministerio de Educación. ¿Cuántas escuelas nuevas se dejarían de construir? ¿Cuántos maestros se dejarían de contratar?¿Alguien ha pensado en el costo de oportunidad de estos recursos?La política no debería ser “Jardín Infantil”. Basta ya de improvisaciones temerarias que generan desconfianza y preocupación.Rafael Barraza es economista y ex-presidente del Banco Central de Reserva de El Salvador. Actualmente es Director General de la Escuela Superior de Economía y Negocios.http://chiribisco.wordpress.com/2009/02/05/chirajito-y-los-planes-de-gobierno/
Cuba, un cambio sin venganza
En la madrugada del 13 de julio de 1989, el general Arnaldo Ochoa, su ayudante el capitán Jorge Martínez, mi padre el coronel Antonio de la Guardia y su subordinado el mayor Amado Padrón fueron abatidos por las balas de un pelotón de fusilamiento cerca de la playa de Baracoa, al oeste de La Habana.Por no haber denunciado o injuriado a su hermano Antonio, mi tío el general Patricio de la Guardia fue condenado a 30 años de prisión. Así concluía la parodia del conocido proceso Ochoa-De la Guardia, en el que, acusados de corrupción y tráfico de drogas, fueron llevados ante los tribunales un grupo de oficiales de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y el Ministerio del Interior. Sus "abogados defensores" fueron impuestos por el propio Estado cubano y todos eran oficiales de la Seguridad del Estado. Ninguna prueba material pudo ser mostrada contra los inculpados. En tan sólo un mes -pues mi padre fue detenido el 13 de junio del mismo año- se desarrolló la investigación, el proceso judicial y el cumplimiento de las sentencias.Dos versiones pueden adelantarse para explicar tanta urgencia. Una: los servicios norteamericanos de lucha contra el tráfico de drogas estaban al tanto de supuestas operaciones de narcotráfico lanzadas desde La Habana, y Fidel Castro, para limpiar su imagen, utilizó a estos oficiales como chivos expiatorios. Otra, la más creíble: estos oficiales cansados de guerrear en distintas latitudes -algunos de ellos acababan de regresar de la guerra de Angola-, bajo la influencia de los aires de perestroika que soplaban desde la Unión Soviética y, sobre todo, ante la permanente crisis de la situación cubana y la ausencia de las libertades más elementales, comenzaron a criticar (esto me consta) en sus círculos más allegados a la dirección del país. Teniendo en cuenta su nivel de responsabilidad militar y temiendo que sus comentarios pudieran llegar a convertirse en una corriente de opinión en el seno de las Fuerzas Armadas, Fidel y Raúl Castro decidieron sacrificarlos.En todo caso, espero que algún día la historia y una verdadera justicia aclaren lo sucedido. Ahora hay que decir que el proceso Ochoa-De la Guardia fue un episodio más de esta siniestra farsa en la que los cubanos somos víctimas y actores desde hace 49 largos años.Hoy nuestra responsabilidad está en el futuro. Hoy y mañana pedir venganza sólo puede generar más violencia. Fue pidiendo venganza como comenzó el drama en 1959. ¿O es que acaso se puede olvidar, aunque yo aún no había nacido, a un pueblo fanatizado pidiendo "paredón" para los victimarios del régimen recién derrocado del dictador Batista?No, ni a esa ni a esta Cuba podemos volver ni en sus formas ni en sus métodos.Hace cerca de un mes, la escritora cubana Zoé Valdés mostraba en su blog el testimonio del suplicio del escritor René Ariza, injustamente encarcelado en Cuba, a partir de 1971, durante ocho años y que murió en el exilio en 1994. El testimonio es conmovedor, pero lo preocupante son las conclusiones de la escritora. Valdés afirma que "todos los militares (cubanos) sin excepción deberían pedir perdón, a coro, en la plaza de la Revolución, y sus hijos deberán callarse para siempre". Aparte de este concepto escalofriante de "justicia" maoísta que la escritora reivindica, en la que unas personas son obligadas a pedir perdón en la plaza pública, asombra el que se permita también exigirnos a los hijos de los militares que callemos para siempre. Yo, por supuesto, no pienso hacerlo.Parece que la escritora cubana tiene una insaciable necesidad de darse un lustre de anticastrista visceral de toda la vida, luego de haber sido diplomática cubana en París durante los años 80 y alta funcionaria del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfica (ICAIC). Recientemente publicó en España un ensayo titulado La ficción Fidel en el que, además de comenzar con un "yo acuso" e incluir numerosas exageraciones, falsificaciones y errores históricos, pretende enlodar la memoria de mi padre, que fue fusilado, y de mi tío, condenado a 30 años de reclusión. Por cierto, menciona a este último dos veces como si también hubiera sido ejecutado.Zoé Valdés, que en su libro llega a caracterizar a los cubanos como "corderos", es emblemática de un sector minoritario de la oposición cubana que, en mi opinión, compromete el futuro de mi país con este tipo de planteamientos. La mayoría de los cubanos, en efecto, simplemente quiere construir un futuro donde todos podamos hablar. Donde los que se fueron antes, los que nos fuimos después y los que se quedaron, todos juntos propongamos una Cuba mejor.Pienso que el discurso de la venganza, de los ajustes de cuentas y de las falsedades históricas sólo sirve para alimentar a los que desde el poder en La Habana se esfuerzan en frenar la dinámica de cambio que se ha instalado en los cubanos.Hace ya dos años que Fidel Castro abandonó el poder. Su hermano, el actual presidente Raúl Castro, anunció cambios de concepto y estructurales para enfrentar la aguda crisis económica, política y social que vive Cuba. Por el momento se han visto pocos resultados. Sin negar que la firma por Cuba del Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y también el de Derechos Civiles y Políticos de las Naciones Unidas tiene su importancia, así como la tienen algunas de las tibias medidas que ya permiten a los cubanos entrar en los hoteles, comprar un DVD o contratar una línea de telefonía celular. Por lo demás, una necesaria valorización de los salarios también está en curso. ¿Suficiente? Por supuesto que no, pero la existencia de una dinámica de cambio es innegable. No obstante, no puede olvidarse que la liberación de más de 300 prisioneros por delito de opinión es un reclamo urgente.Sería doloroso que, una vez más, las promesas sean incumplidas y los cubanos pierdan la esperanza. De momento, creo, todos los pasos que se den en el sentido del diálogo político, como lo acaba de hacer la Unión Europea, son positivos, pues alimentan esa dinámica de cambio. Y ojalá la próxima Administración estadounidense siga esa misma senda. Y sobre todo, que los dirigentes cubanos sean, por fin, sensibles a los deseos de su pueblo.Desde hace 18 años vivo en el exilio y mi dolor sigue intacto, pero me esfuerzo por llevarlo con nobleza y dignidad, como tantas otras víctimas. Por eso quiero que en mi país el odio y la intolerancia sean, por fin, solo parte del pasado.(El País, Madrid)
Catholicism as Antidote to Turbo-Capitalism
The collapse of Communism in the East two decades ago did not provide much of an opening for the Catholic Church to influence economic policy, but perhaps the near-collapse of Western capitalism will. Two German authors — one named Marx, the other his patron in Rome — are certainly hoping so. The first is Reinhard Marx, archbishop of Munich and Freising, who has written a best seller in Germany that he cheekily titled “Das Kapital” (and in which he addresses that other Marx — Karl — as “dear namesake”). The second is Pope Benedict XVI, who last week published his first papal encyclical on economic and social matters. It has a more gentle title, “Charity in Truth,” but is based on the same essential line of thinking. Indeed, Archbishop Marx had a hand in advising the pope on it, and a reading of the archbishop’s book helps explain the intellectual context in which the encyclical was composed. The message in both is that global capitalism has raced off the moral rails and that Roman Catholic teachings can help set Western economics right by encouraging them to focus more on justice for the weak and closely regulating the market. Unlike the 19th-century Marx, who thought organized religion was a trick played on the impoverished in order to control them, Archbishop Marx and other Catholics yearn for reform, not class warfare. In that, they are following a long and fundamental line of church teaching. What is different now is that some of them see this economic crisis as a moment when the church’s economic thinking just may attract serious attention. Archbishop Marx has already drawn a following in Germany by arguing that capitalism needs, in a grave way, the ethical underpinnings of Catholicism. The alternative, he argues, is that the post-crisis world will fall back into furious turbo-capitalism, or, alternatively, experience a renaissance of Marxist ideology based on atheism and class divisions. “There is no way back into an old world,” Archbishop Marx said in a recent interview, before the encyclical was issued. “We have to affirm this world, but critically.” Catholic voices have long had influence on the debate in the West about social justice, but never as much as the church would have wished. That reflected the enduring challenge of devising alternative policies, rather than simply criticizing secular authorities. Pope John Paul II, a Pole with an intuitive feel for Communism’s injustices, was an important voice in bringing that system down. But he had to watch in the 1990s as Eastern Europe embraced Communism’s polar opposite — a rather pure form of secular capitalism, instead of any Catholic-influenced middle way. “John Paul II was often very clear what he was against: He was against unbridled capitalism and the kind of socialism of the Soviet sphere,” said John Allen, the National Catholic Reporter Vatican watcher. “What he was for was less clear.” Now Archbishop Marx, who at 55 occupies an ecclesiastical perch once held by Benedict, is trying to wriggle out of that intellectual straitjacket. With his talent for turning a provocative phrase, he has more in common stylistically with the evangelist St. Paul or the philosophes, who popularized Enlightenment thought, than with Karl, who ground out his dense texts from exile in London. After beginning his book puckishly by addressing Karl Marx personally, the archbishop races through 200 years of Western economic history in a way that pays tribute to Karl’s core analytical conclusion — that capitalism embodies contradictions that threaten the system itself. But he also makes it clear he is no Communist. He admires Wilhelm Emmanuel von Ketteler, a 19th-century writer who put Catholic theory into practice as a member of Germany’s first national Parliament in 1848, and later became a bishop and a fervent critic of Karl Marx. The gregarious Archbishop Marx has cut a profile in the German business community for his willingness to walk into a roomful of executives and raise the roof. (“Are you marionettes?” he once asked a manager who protested that markets sometimes dictate unethical actions.) In his book, which was published last fall, he offers a vision of a world governed by cooperation among nations, with a vibrant welfare state as the core of a market economy that reflects the love-thy-neighbor imperatives of Catholic social thought. On the first point, Archbishop Marx is in good, cosmopolitan company; many officials, from New York to London to Beijing, are calling these days for a world in greater regulatory harmony, though the specifics may be hard to agree upon. He sounds considerably more German when exhorting the world to create, or recast, the welfare state. People need the welfare state before they “can give themselves over to the very strenuous and sometimes very risky games of the market economy,” Archbishop Marx said. The burdens of aging, illness or unemployment “need to be borne collectively,” he added. In support of his argument, the archbishop calls for a “global social market economy,” based on a concept familiar to Germans as the model for their own postwar system. Of course, the archbishop says he realizes that a European’s ideal of welfare states and border-straddling institutions might not have universal appeal. At the end of his book, he quotes Jean-Claude Juncker, the prime minister of Luxembourg, who has said, “I approve of the notion that Europe sees itself, unpretentiously, as a model for the world, but the consequence of that is that we would have to constantly change that model because we are not the world.” Neither, he might have added, is the Roman Catholic church.(The New York Times)
"Aquí la voluntad del Jefe es la única Constitución vigente"
Habitualmente ponderado y cuidadoso con los adjetivos, cuando se trata de caracterizar al Gobierno, Pedro Nikken parece haber dejado atrás la mesura propia de los juristas, espoleado, entre otras razones, por la medidas adoptadas contra los diarios El Nacional y Tal Cual. Pero el ex presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos no se ahorra palabras para condenar a la IV República, cuyo “pecado es haber hecho las cosas tan mal que el pueblo se entregó en manos de un militar frenético que conduce al país por una senda de odio y destrucción: “la foto de El Nacional no era falsa, no estaba trucada y se dejó constancia de que había sido tomada en diciembre por un fotógrafo furtivo. Era dura y creo que a nadie le gustó verla, pero refería una realidad concreta. Me hizo recordar una reflexión de la Corte Europea de Derechos Humanos, según la cual para la actividad periodística es legítima, en ocasiones, la exageración e incluso la provocación. -Era una provocación. -Una provocación respecto a una realidad. Venezuela está siendo presa de la violencia social en una situación, señalaba Roberto Briceño León, para mofa del señor Izarra, inexplicable si en verdad ha habido progreso social. -Si luego de 11 años de gobierno las políticas sociales funcionaran los índices de criminalidad deberían haber bajado. -Así es. La situación social es patética por la pobreza y la marginalidad. Se ha creado una atmósfera de odio y desprecio por el otro, reina la impunidad y no hay ninguna razón para que quien quiera meterse a malandro no consiga trabajo. Ese es el único mercado de trabajo abierto. Gonzalo Barrios dijo que aquí no había razones para no robar. Y eso está ocurriendo. Las únicas razones para no delinquir serían los principios y el respeto espontáneo a la ley. Pero si al irrespeto por el otro y la negación de todo lo que no soy yo, unimos la impunidad, tenemos esos resultados. -¿Se creó esa realidad “por combustión espontánea”?-Fue creada por el clima de polarización, condimento esencial del actual proceso político.-¿Ese contexto justifica la publicación de la fotografía?-Así es. Se trata de una expresión de la situación que vive el país, transmitida bajo la forma de periodismo gráfico. Puede haber, hay, una dosis legítima de provocación. Pero si no fuera así, el sistema democrático de libertad de expresión, consagrado en la Constitución y en convenios internacionales, permite adoptar medidas ulteriores porque no es “preventivo” sino represivo. Quien comete un abuso debe responder por él, pero luego de la publicación porque la censura, que es el mecanismo preventivo, está prohibido. La única medida de censura previa autorizada es la de los espectáculos públicos. También la Lopna hace referencia a publicaciones que pudieran tener imágenes violentas y en ese caso la portada se tapa..-El argumento es que se debe garantizar la integridad mental de los niños.-El interés del niño es la mampara para proteger el interés del Gobierno. Lo que está en juego no es el bienestar del niño, que debería pasar porque se encuentre bien informado. ¿O es que los niños no son personas con todos los derechos? Esa es una conquista de la Convención sobre Derechos del Niño planteados en la Lopna.-¿No se refieren las leyes que protegen a los menores a horarios solo vigentes para medios audiovisuales?-En materia de publicaciones gráficas la única referencia es la que cité: ciertas portadas deben taparse. Pero ese no es el caso. Aquí se trata de que no solo se quiere ocultar la realidad a los niños sino a todos, porque esa realidad molesta a quienes tienen la responsabilidad de que vivamos en una sociedad distinta. -Si la intención de publicar la fotografía consistía en provocar un debate sobre la violencia, un tema que no interesa a la cúpula del poder ¿cómo puede calificarse la reacción del Gobierno? -El objetivo se logró y eso es bueno ante una indiferencia total. Ya nada importa. En los barrios populares no es extraño que la gente se tope con un cadáver en la calle cuando sale a trabajar. Todo eso se ha convertido en una suerte de aceptación que estaba requiriendo un sacudón a la conciencia, así sea con la brutalidad de una foto tan ruda como esa. El efecto es positivo y legítimo porque nos estamos adormeciendo ante la realidad. Creo que lo único malo del periódico es no haberla publicado antes.-El Juez, sin embargo, rectificó parcialmente.-El juez no solo cometió un abuso sino un exabrupto porque no se puede calificar de otra manera presentar una decisión que lo prohíbe todo y a todos, incluso a Vea y demás diarios del oficialismo. Creo que vino un llamado de arriba advirtiéndole que se le había ido la mano. Y eso expresa otra parte de la realidad. Es evidente la frecuencia con que los jueces son destituidos por emitir decisiones que disgustan al Gobierno. El colmo fue el caso de la jueza Afiuni, quien tomó una decisión ajustada a derecho y una hora después asaltaron el tribunal, se la llevaron presa y ahí sigue, luego de que el Presidente vociferara exigiendo 30 años de prisión. En esas circunstancias ¿qué juez se atreve a contradecir al Gobierno? -¿Reciben órdenes o tratan de adivinar lo que se quiere que decidan?-En el caso de El Nacional, como se trataba de una solicitud de la Defensoría del Pueblo y del Ministerio, el juez supuso que detrás de todo eso estaba Chávez y lanzó una decisión ultrosa y de alcances inverosímiles. Es grave que uno tenga razones para imaginarse cómo la decisión fue dictada pensando que ese era el deseo del Alto Gobierno. Solo que como éste concluyó que se le había ido la mano, el juez retrocedió. Pero la rectificación parcial no resuelve el problema porque a dos periódicos (Tal Cual y El Nacional) se les mantiene la medida. Eso nos indica cómo todo está dirigido a satisfacer lo que él piensa, es la voluntad del Jefe, la única Constitución que rige en Venezuela.-Si Chávez es el comandante en jefe de las FAN, jefe del Parlamento, del Poder Judicial y demás poderes, ¿no termina siendo una especie de monarca?-Aquí no solo la democracia está en peligro, sino el concepto mismo de república. Esta insurgió, en los tiempos modernos, como parte de la abolición del absolutismo. Es, por tanto democracia, separación de poderes y una serie de factores para abolir el poder absoluto de los reyes. Pero el concepto de república moderna se pone en riesgo cada vez que aparece una monarquía, no precisamente constitucional ni democrática sino una monarquía con toda la barba de las monarquías tradicionales, donde el poder se concentra en el monarca.-¿El rey Caribe y su monarquía llanera y tropical?-Para eso no hace falta una Casa Real, (aunque a veces parece que la hubiera), ni que la Corona se herede. Esos rasgos no están establecidos en todos los reinos. La esencia de la monarquía está en la concentración absoluta del poder en cabeza de una persona.-En la Corea del socialismo “real”, el hijo heredó el poder que le dejó el padre.-Sí. Sobre eso se podría conversar mucho. Stalin, por ejemplo, llegó a la conclusión de que Rusia no podía ser gobernada sino por un zar y él actuó como tal, ejerciendo el poder con tanta o mayor ferocidad que sus antecesores. En Venezuela los poderes públicos son como las Fuerzas Armadas: obedientes y no deliberantes.-¿Se puede cambiar esa situación por métodos democráticos?-Es imposible por métodos no democráticos, y hay que insistir en los democráticos hasta la saciedad. Las elecciones del 26S nos van a colocar en una situación complicada porque si la oposición, con el PPT, saca más votos que el Gobierno y obtiene un número menor de diputados por la manipulación de los circuitos, se plantea una tremenda crisis de legitimidad. Es obvio que eso podría influir en los resultados de las presidenciales, pero entre una y otra elección se puede generar una crisis política muy fuerte porque en ese escenario quienes creen en la salida de fuerza tendrían en sus manos el argumento de la ilegitimidad. Para el Gobierno es preferible lidiar con un parlamento de oposición antes que con uno mayoritario no representativo de la mayoría. Ojalá que el resultado desfavorable al Gobierno se traduzca en una mayoría de oposición, porque eso plantearía un nuevo esquema y ya veríamos como reacciona el Presidente, ante esa correlación de fuerzas. (El Universal / Venezuela)
Sobre las des-inscripciones
Quiero escribir algunas ideas sobre las "des-inscripciones". En verdad ese hecho político es violatorio de todo el órden jurídico político salvadoreño. Yo soy de los responsables de la Ley electoral con que fuimos a las elecciones de 1982 para elegir a la Constituyente que hizo la Constitución de 1983. Varios artículos de la Constitución los escribí de mi puño y letra. Si querés soy uno de los responsable de porque el TSE (antes CCE) está constituido por representantes de partidos políticos. Como sacamos a los militares de la política. La deuda política. Etc. Pero vamos con la "des inscripción". Ni los Partidos Políticos ni el TSE tienen facultades para hacerlo. Es que el hecho de ser miembro de un Partido Político ( ya sea porque formemos uno o nos incorporemos a uno ya constituido Art. 72 N° 2 Cn) es un derecho de la persona humana que al alcanzar los 18 años se convierte en ciudadano; y siendo este titular de la soberanía (recordemos que la nuestra es popular Art. 83 Cn) la forma de ejercerla es eligiendo u optando al ejercicio de un cargo público. Optar a una candidatura (Art. 72 N° 3 Cn) es otro derecho de la persona convertida en ciudadano. Pero esto solo puede hacerlo a través de un Partido Político (Art. 85 Cn). Esto lo dejamos así para que ningún ejercito (de hecho o de derecho) no pudieran nunca poner presidentes, diputados, alcaldes, etc. Cuando en 1980 nos mataban (los dos bandos) a los que nos metíamos en política y presumíamos de democráticos dejamos como las únicas dos posibilidades de "sustituir" (nunca "des inscribir" peor retirarse de unas elecciones) la muerte y las incapacidades posteriores a la inscripción. Es que esto hay que verlo en función de la población electoral que es la que sufre el agravio del engaño cuando después que ha trabajado por un candidato resultan que eran mentiras. Esto es una estafa electoral que para quienes respetamos los derechos cívicos es grave. Es un irresponsable el que procede de esa manera y respecto de él se puede pensar cualquier cosa. Más grave es el hecho respecto del que ni cuenta se dio como lo desinscribieron. Tiene todo el derecho de deducirles responsabilidad civil, constitucional y hasta penal a quienes le causaron tal agravio.(Carta a Siguiente Página)
A clear and present danger to Free Speech
THE so-called Shield bill, which was recently introduced in both houses of Congress in response to the WikiLeaks disclosures, would amend the Espionage Act of 1917 to make it a crime for any person knowingly and willfully to disseminate, “in any manner prejudicial to the safety or interest of the United States,” any classified information “concerning the human intelligence activities of the United States.” Although this proposed law may be constitutional as applied to government employees who unlawfully leak such material to people who are unauthorized to receive it, it would plainly violate the First Amendment to punish anyone who might publish or otherwise circulate the information after it has been leaked. At the very least, the act must be expressly limited to situations in which the spread of the classified information poses a clear and imminent danger of grave harm to the nation. The clear and present danger standard has been a central element of our First Amendment jurisprudence ever since Justice Oliver Wendell Holmes Jr.’s 1919 opinion in Schenk v. United States. In the 90 years since, the precise meaning of “clear and present danger” has evolved, but the animating principle was stated brilliantly by Justice Louis D. Brandeis in his 1927 concurring opinion in Whitney v. California. The founders “did not exalt order at the cost of liberty,” wrote Brandeis; on the contrary, they understood that “only an emergency can justify repression. Such must be the rule if authority is to be reconciled with freedom. Such ... is the command of the Constitution. It is, therefore, always open to Americans to challenge a law abridging free speech and assembly by showing that there was no emergency justifying it.” On the other hand, the First Amendment does not compel government transparency. It leaves the government extraordinary autonomy to protect its own secrets. It does not accord anyone the right to have the government disclose information about its actions or policies, and it cedes to the government considerable authority to restrict the speech of its own employees. What it does not do, however, is allow the government to suppress the free speech of others when it has failed to keep its own secrets. We might think of this like the attorney-client privilege. If a lawyer reveals his client’s confidences to a reporter, he can be punished for violating that privilege — but the newspaper cannot constitutionally be punished for publishing the information. There are very good reasons why it makes sense to give the government so little authority to punish the circulation of unlawfully leaked information. First, the mere fact that such information might “prejudice the interests of the United States” does not mean that that harm outweighs the benefit of publication; in many circumstances, it may be extremely valuable to public understanding. Consider, for example, classified information about the absence of weapons of mass destruction in Iraq. Second, the reasons that government officials want secrecy are many and varied. They range from the truly compelling to the patently illegitimate. As we have learned from our own history, it is often very tempting for government officials to overstate their need for secrecy, especially in times of national anxiety. A strict clear and present danger standard — rather than an unwieldy and unpredictable case-by-case balancing of harm against benefit — establishes a high bar to protect us against this danger. And finally, a central principle of the First Amendment is that the suppression of free speech must be the government’s last rather than its first resort in addressing a problem. The most obvious way for the government to prevent the danger posed by the circulation of classified material is by ensuring that information that must be kept secret is not leaked in the first place. Indeed, the Supreme Court made this point quite clearly in its 2001 decision in Bartnicki v. Vopper, which held that when an individual receives information “from a source who obtained it unlawfully,” that individual may not be punished for publicly disseminating the information “absent a need ... of the highest order.” The court explained that if the sanctions now attached to the underlying criminal act “do not provide sufficient deterrence,” then perhaps they should be “made more severe” — but “it would be quite remarkable to hold” that an individual can constitutionally be punished merely for publishing information because the government failed to “deter conduct by a non-law-abiding third party.” This is a sound solution. If we grant the government too much power to punish those who disseminate information, then we risk too great a sacrifice of public deliberation; if we grant the government too little power to control confidentiality at the source, then we risk too great a sacrifice of secrecy. The answer is thus to reconcile the irreconcilable values of secrecy and accountability by guaranteeing both a strong authority of the government to prohibit leaks and an expansive right of others to disseminate information to the public. (The New York Times. Geoffrey R. Stone is a professor of law at the University of Chicago and the chairman of the board of the American Constitution Society)
Cable de la embajada norteamericana en San Salvador: Lo bueno, lo malo y lo feo
VZCZCXYZ0007PP RUEHWEBDE RUEHSN #0708/01 2092039ZNY SSSSS ZZHP 282039Z JUL 09FM AMEMBASSY SAN SALVADORTO RUEHC/SECSTATE WASHDC PRIORITY 1438INFO RUEHZA/WHA CENTRAL AMERICAN COLLECTIVE PRIORITYRUMIAAA/USCINCSO MIAMI FL PRIORITYRUEKJCS/JOINT STAFF WASHINGTON DC PRIORITYRUEKJCS/SECDEF WASHDC PRIORITYRHEHNSC/NSC WASHINGTON DC PRIORITY S E C R E T SAN SALVADOR 000708NOFORNSIPDISE.O. 12958: DECL: 07/21/2019TAGS: PGOV PREL ESSUBJECT: EARLY IMPRESSIONS OF FUNES GOVERNMENTREF: SAN SALVADOR 653Classified By: Charge d'Affaires, for reasons 1.4 (b) and (d)¶1. (C) Summary: Some eight weeks into the FunesAdministration, we are beginning to see more clearly thetrends and factions inside the GOES. President MauricioFunes' non-FMLN campaign support group, the Friends ofMauricio, is largely in control of the economic apparatus ofEl Salvador. Similarly, Defense is in the hands of aformerly-retired, recently-promoted military officer andFriend of Mauricio, Brigadier General David Munguia Payes.FMLN hard-liners are at the helm of the security andintelligence apparatus. Foreign policy is in the hands of aloyal FMLN member, but has thus far been characterized bypragmatism and outreach to the U.S. Assistance programsbroadly mirror the rest of the relationship, with mostprograms moving forward successfully but some police andsecurity programs under review. The Funes GOES has madepoverty eradication its highest priority. End Summary.--------The Good--------¶2. (C) The Funes Administration inherited two seriouseconomic problems. First, the Salvadoran economy likelyentered recession in late 2008, driven by falling remittancesand declining exports because of the U.S. recession. Second,the government was effectively broke ) and in many casesbehind on its bills ) because of declining tax revenues andthe Saca Administration’s lavish, election-year subsidies.So far, the government has chosen to seek new funding fromthe World Bank, Inter-American Development Bank, andInternational Monetary Fund, rather than from sources likeVenezuela. The government's "Anti-Crisis Plan" likewiseappears to consist primarily of increased funding forexisting social programs. These programs, however, willlikely do little to boost the economy, where recoveryultimately depends on the recovery in the U.S.¶3. (C) Since June 1, Salvadoran foreign policy has also beencharacterized by pragmatism. Foreign Minister Hugo Martinezstepped into the chair at the OAS General Assembly in SanPedro Sula just hours after assuming his new role; heimpressed both the U.S. delegation and Salvadoran observerswith his performance. Since then, the main foreign policyissue faced by the GOES has been Honduras. In the hoursafter President Zelaya's expulsion to Costa Rica, bothMartinez and Funes reached out to the Embassy and toWashington to coordinate what has been a reasonable,responsible approach to the crisis on their northern border.On Funes' first day in office he recognized Cuba, butbalanced this by meeting Secretary Clinton and the USDEL tohis inauguration. FMLN hardliners, particularly VicePresident Sanchez Ceren, would prefer an ALBA-esque foreignpolicy and carry out a parallel FMLN agenda, but they are notpermitted to wreck relations with traditional partners.Ambassadorial appointments are being made in a deliberate,unhurried fashion, and have not raised concerns; indeed,keeping former FM Francisco Lainez in place at the OAS sentan early signal of continuity.¶4. (C) On foreign assistance, USAID reports good cooperationacross the board, save for some difficulties in publicsecurity. (More on that below.) The GOES has voiced strongsupport for continuing USAID programs and has indicated it isin agreement with USAID's strategic goals for El Salvador.The Funes Administration has elevated to Vice Minister theMFA position responsible for coordinating foreign assistanceprograms and has called for the formulation of a globalcooperation strategy. The GOES is actively leveraginginternational donors to address its near-term anti-crisisplan. In charge of both economic policy and donorcoordination is Alex Segovia, the President's Chief ofCabinet. Segovia, a kind of super-minister, is the mostpragmatic and least ideological figure in the GOES.¶5. (C) The GOES just reaffirmed its continued interest inUSAID's programs for improved tax collection, health sectorreform and a diagnostic of the education system. MCC's rateof implementation continues to gain speed, in large degreebecause of the efforts of local partner FOMILENIO's Director,Jose Angel Quiroz. We successfully pushed back against amove by Funes to replace Quiroz in the early days of hisgovernment, arguing that another disruption in FOMILENIOmanagement would set back MCC's program by months, if notmore. It was Segovia, in his role as FOMILENIO BoardChairman, who convinced Funes to leave Quiros in place. Thenew GOES has shown great interest in the MCC indicators;Segovia just wrote a warm letter to MCC CEO Rodney Bentrecommitting the GOES to the indicators and all other MCCcriteria.¶6. (C) Military-to-military cooperation continues at a temposimilar to that before Funes took office. The USNS Comfortrecently spent 11 days anchored offshore and saw more than19,000 Salvadoran patients. We have three other MedicalReadiness Training Exercises scheduled for 2009 and a fullslate of DOD/SA-funded training for members of the SalvadoranArmed Forces (ESAF). Additionally, the MOD has requested USGsupport to conduct a National Security Strategy (NSS)workshop with the intent to get Cabinet level and Assemblypersonnel involved in the GOES process to develop their ownNSS. Appointment of retired Colonel Munguia Payes asMinister of Defense, as well as mid-ranked active dutycolonels to most key command positions, has createddiscomfort in ESAF ranks. However, the Minister of Defenseis an institutionalist and is focused on maintaining theESAF's apolitical professionalism. The Minister and the ESAFare loyal supporters of the president, and eager to continuelongstanding mil-to-mil relationships with the U.S.-------The Bad-------¶7. (S) Salvadorans across the spectrum link Manuel Melgar,now Minister of Public Security and Justice, to the 1985 ZonaRosa attack which killed four off-duty U.S. Embassy MarineSecurity Guards and other Americans and Salvadorans.Melgar's nomination appears to have been based less on hispublic security credentials than on the hard-line FMLN'sinsistence that they control public security. This was their"pound of flesh" in exchange for "Friends of Mauricio"controlling the economy. Melgar's presence as Minister hasresulted in a distancing from the USG, a far cry from theclose relationship we enjoyed with his predecessor. Lawenforcement cooperation has not been frozen, but fullimplementation of the Merida Initiative is now contingentupon guidance from Washington regarding how best to workaround Melgar. Just as disappointing is the cynical messageit sends to a high-crime society like El Salvador when thePresident names as Minister of Public Security an individualwith blood on his hands.------------And the Ugly------------¶8. (C) Traditional feuds between the Salvadoran right andleft and modern feuds between Funes and the FMLN are playingout in other contexts. Over two weeks after the legaldeadline (June 30) to appoint five new magistrates to theSupreme Court, the Salvadoran Legislative Assembly remaineddeadlocked as the governing FMLN and ARENA-led oppositioncoalition could not reach agreement on a list of names.(Note: Supreme Court appointments require a 2/3supermajority, thus demanding ARENA and the FMLN support anynominee. End note.) Naming a new Attorney General (whichalso requires a 2/3 Assembly vote) became linked to theSupreme Court selections and the entire process ground to ahalt. The Supreme Court was made whole July 16 when a dealwas struck between Funes, the FMLN, and opposition on a slateof nominees. Public and private negotiations continue overthe new Attorney General.¶9. (S/NF) El Salvador's intelligence service (OIE) in thehands of orthodox FMLN member Eduardo Linares could becomeugly, depending upon how much leeway Funes allows him toaccept advice, training, money, and personnel from Cuba orVenezuela. To date Linares has behaved cautiously, firstseeking to get his arms around his own organization, which,to be fair, had previously considered the FMLN as its primarytarget.-------------------------------------Pursuing U.S. Interests Going Forward-------------------------------------¶10. (C) Eight weeks on, we are roughly where we expected tobe. We have enjoyed excellent cooperation in most areas withthe GOES, but lost some ground in other areas, especially lawenforcement. Given the inconsistent performance ofSalvadoran law enforcement in good times, it has been hard todiscern a difference in performance, or crime statistics,since June 1. Our assistance priorities, and continued traderelationship, seems closely aligned with the FunesAdministration's own goals. Foreign policy priorities willsometimes diverge, although our problems are likely to beless with the official GOES policies than with the FMLN's ownparallel policies. The Embassy's approach with the FunesAdministration will continue to be engagement across theboard, even with Public Security, up to and including theDeputy Minister. Our objective is to strengthen theinstitutions of Salvadoran democracy, regardless of who is inpower. Civil society, media, and the business sector take aparallel and complementary approach. ARENA did not disappearJune 1 and its reorganization and regrouping is proceeding.It promises to remain a significant opposition during theentire five years of the Funes Administration.BLA
Tierra de redentores
No uno sino dos fantasmas recorren la historia independiente y moderna de América Latina: el culto al caudillo y el mito de la Revolución. Los pensadores liberales del siglo XIX abjuraron de ambos. En Facundo -su obra clásica sobre el telúrico caudillo Facundo Quiroga, "sombra terrible" de las pampas-, Sarmiento recreó al prototipo del poder personal en el siglo XIX latinoamericano, el dueño de vidas y haciendas, hombre de horca y cuchillo, símbolo de Barbarie opuesta a la Civilización. Publicada en 1845, aquella obra tuvo una brillante descendencia, primero en el Nostromo de Conrad y más tarde en una larga sucesión de novelas sobre dictadores: Tirano Banderas de Valle-Inclán, El Señor Presidente de Miguel Ángel Asturias, Oficio de difuntos de Arturo Uslar Pietri, Yo, el Supremo de Augusto Roa Bastos y las dos antitéticas creaciones de García Márquez y Vargas Llosa: El otoño del Patriarca y La Fiesta del Chivo. Por lo que hace a la Revolución, a pesar del influjo romántico de la Revolución Francesa, en el siglo XIX el concepto se entendió como una ruptura ilegítima y violenta del orden legal. En ese mismo sentido lo emplea Conrad para describir a su turbulenta Costaguana: la Revolución como la otra vertiente de la Barbarie. Pero al despuntar el siglo XX, con el advenimiento de la Revolución mexicana y la bolchevique, una lenta trasmutación comenzó a operar en la realidad y la imaginación de nuestros países: la crítica del caudillo se transformó en culto al hombre fuerte, al héroe providencial; y la Revolución adquirió el prestigio de una nueva aurora de justicia para los pueblos.En la larga vigencia del culto heroico y el mito de la Revolución convergen dos autores clásicos: Thomas Carlyle y Carlos Marx. Al ensayista e historiador escocés se debe la idea de que la historia no tiene más sentido del que le confiere la biografía de los "Grandes Hombres", en particular la de los inspirados "héroes" políticos como Oliver Cromwell o el Doctor Francia, que prescindieron de las instituciones democráticas por considerarlas una parafernalia inútil. (Varios tiranos latinoamericanos como el venezolano Juan Vicente Gómez, a quien un reconocido historiador llamó "Hombre de Carlyle", siguieron ese libreto). A propósito de la Historia de la Revolución Francesa de Carlyle, Carlos Marx (que lo admiraba) escribió en 1850: "Le corresponde el crédito de haber combatido en la arena literaria a la burguesía... de una manera, por momentos, revolucionaria". El problema -agregaba Marx- es que "a sus ojos, la apoteosis de la Revolución se concentra en un solo individuo... Su culto a los héroes... equivale a una nueva religión". Pero también Marx creía que la apoteosis de la Revolución se concentraba en un solo protagonista ... colectivo: el proletariado, las masas. Y ese culto, con el tiempo, "equivalió" también a "una nueva religión". El siglo XX probó que las simpatías entre ambos pensadores eran mayores que sus diferencias: solo se requería la aparición de un héroe carlyleano que asumiera la Sagrada Escritura de Marx. Ese personaje fue Lenin, y tras él irrumpieron en la escena varios otros: "El Dios trascendente de los teólogos...", escribió Octavio Paz, "baja a la tierra y se vuelve 'proceso histórico'; a su vez, el 'proceso histórico' encarna en este o aquel líder: Stalin, Mao, Fidel".La sacralización de la Historia en la persona de un héroe produce la figura política de los "redentores". En América Latina el proceso tuvo antecedentes populares en la guerra de independencia mexicana y en los movimientos mesiánicos de Brasil (que Vargas Llosa recreó en su clásica novela La guerra del fin del mundo), pero su versión moderna -a mi juicio- nace del agravio contra Estados Unidos a partir de la guerra de 1898. Todavía Martí, el último liberal del XIX, pudo soñar con una constelación de repúblicas americanas, orientadas al progreso y respetuosas entre sí. Pero las actitudes imperiales del "monstruo" en cuyas entrañas había vivido (y cuya democracia y dinamismo había admirado) terminaron por decepcionarlo. Con su muerte murió también el proyecto de una América homogénea e igualitaria. Había que imaginar y construir otra América, distinta y opuesta a la del Norte. Movido por ese agravio, el pensador uruguayo José Enrique Rodó publicó en 1900 un opúsculo que influyó en el destino político e intelectual de "Nuestra América". Se titulaba Ariel y postulaba un "choque de civilizaciones" entre la superior espiritualidad de Hispanoamérica y la "barbarie" materialista de Estados Unidos.Conforme avanzó el siglo, las más diversas corrientes ideológicas (el nacionalismo, el anarquismo, el socialismo, el marxismo, el indigenismo y aun el fascismo) fueron deudoras, en diversa medida, del idealismo "arielista" y encarnaron en personajes con ideas o actitudes "redentoras", como las del mexicano José Vasconcelos (que quiso ser presidente para "salvar a México" y vio en América Latina la cuna de una "Raza Cósmica") o las más terrenales del peruano José Carlos Mariátegui (que profetizó la convergencia revolucionaria entre el marxismo y el indigenismo). Tras la guerra civil española, América Latina se escindió entre fascistas y socialistas (con poco espacio para los liberales) pero a ambas corrientes las vinculaba aquel resentido desprecio contra el yanqui. Hasta un personaje ajeno al universo de los libros como Eva Perón, la "santa de los descamisados", lo albergaba.En 1959, cuando el Ariel seguía siendo lectura obligada en las escuelas del continente, una santísima dualidad de redentores apareció en el escenario y cumplió la profecía de Rodó: Fidel y el Che. Mi generación los veneró. Debido a ellos, la Revolución -palabra mágica, concepto histórico, promesa de redención social- volvía a adquirir, acrecentado, el viejo hechizo de la Revolución mexicana o rusa. Era fácil adoptarla: una pasión excitante, un libreto sencillo y una inmediata gratificación del narcisismo moral. Y era imposible evadirla: estaba en las aulas y los cafés, en las páginas literarias, los suplementos culturales y la oferta editorial. La filiación de izquierda había dejado sus ámbitos habituales de la primera mitad del siglo XX (los sindicatos, las infinitas sectas, los partidos subterráneos o proscritos) para refugiarse en el mundo de la cultura y la academia, donde se volvió hegemónica. Y como el neotomismo en tiempos coloniales, la doctrina marxista alcanzó el rango de canon irrefutable.En el verano de 1968 estalló en México un movimiento estudiantil que, si bien tenía orígenes de izquierda, no se proponía una Revolución sino la apertura de espacios de libertad en un sistema cerrado y autoritario. Vacunándose contra una hipotética conjura comunista (que creía inminente), el 2 de octubre el Gobierno masacró a decenas de estudiantes en la plaza de Tlatelolco. Nunca olvidamos el agravio. Unos tomaron las armas y se incorporaron a la guerrilla urbana o rural, otros practicaron la guerrilla ideológica en la redacción de los periódicos y revistas o el trabajo editorial y académico. Otros más fueron activistas en organizaciones obreras y campesinas. Sin embargo, comparada con la radicalización armada de muchos países de América Latina, la mexicana fue relativamente débil. Tras el golpe de Estado en Chile, de Guatemala a la Patagonia, al menos dos generaciones de estudiantes y profesores universitarios quisieron emular al Che Guevara. Muchos perdieron la vida a manos de los feroces Gobiernos militares -algunos, como el argentino, verdaderamente genocidas- que aparecieron en la región.A raíz de la matanza de Tlatelolco, Octavio Paz, nuestro poeta mayor, había renunciado a la Embajada de India. Sus jóvenes lectores esperábamos su regreso para encabezar un partido revolucionario de izquierda. Pero Paz pensó que la batalla central de América Latina era de ideas y debía librarse en el ámbito de la literatura. Por eso hizo algo insólito: hace exactamente 40 años, el 1 de octubre de 1971, fundó la revista Plural y en ella puso casa a la disidencia de izquierda en México y Latinoamérica.Tener a Paz de vuelta era como tener cerca a Orwell, Camus o Koestler, los antiguos hechizados, los grandes desencantados de la Revolución. Paz hizo entre nosotros lo que los disidentes del Este (Kolakowski, Havel, Sajarov) hacían en sus países: criticar a la izquierda totalitaria real desde la izquierda democrática posible. Mi generación no lo entendió así, y lo atacó sin tregua. Paz venía de un periplo político que nos era casi desconocido. Aunque sabíamos algo de su participación en la guerra civil española, ignorábamos la historia de su paulatino desencanto con el régimen soviético. En 1971, a raíz del caso Padilla (reedición caribeña de los Procesos de Moscú, admirablemente recreada por Jorge Edwards en Persona non grata), varios escritores latinoamericanos y españoles (Vargas Llosa, Juan Goytisolo y el propio Paz, entre otros) marcaron sus distancias definitivas con Castro. Pero los universitarios radicales, armados o no, permanecieron por muchos años -y algunos por siempre- fieles a la Revolución y a su caudillo.Para Paz, la lectura del Archipiélago Gulag en 1974 fue el punto de quiebre definitivo. Allí terminó por confrontar la naturaleza totalitaria del socialismo soviético y, para su sorpresa y sosiego, redescubrió el viejo ideario liberal del siglo XIX, el de su propio abuelo. Paz, en una palabra, se volvió plenamente demócrata. No era una hora temprana en su vida -cumplía 60 años- pero aún era tiempo para prevenir a los jóvenes latinoamericanos sobre los peligros del redentorismo político en el que convergían el culto al poder (ya sea del caudillo o del presidente omnímodo) y el mito de la Revolución: "La gran Diosa, la Amada eterna, la gran Puta de poetas y novelistas". No quisieron escucharlo. La querella de Paz con la izquierda continuó hasta su muerte, en abril de 1998. Incluyó polémicas, descalificaciones, insultos y hasta amenazas de muerte. En 1984 su efigie fue quemada por una turba a unas calles de su casa, frente a la Embajada de Estados Unidos en México, por haber cometido la herejía de pedir elecciones en Nicaragua.Su trinchera fue la revista Vuelta, heredera de Plural, que apareció de diciembre de 1976 a septiembre de 1998 y circuló ampliamente por el mundo de habla hispana. (Tránsfuga de mi generación, lo acompañé en su aventura). Trinchera es la palabra exacta, porque Vuelta no se ocupaba académicamente de la historia política de América Latina: Vuelta quería cambiar esa historia. Por eso, en la arena de las ideas postulaba la democracia y combatía las lacras derivadas del culto al caudillo y el dogmatismo ideológico: el militarismo, el populismo, el presidencialismo, el estatismo, la guerrilla. Naturalmente, la revista fue prohibida lo mismo en la Argentina de Videla que en la Nicaragua de los sandinistas (no se diga en el Chile de Pinochet o en la Cuba castrista). Los principales escritores del idioma para quienes la libertad ha sido un valor supremo escribieron en sus páginas. En Vuelta, Mario Vargas Llosa publicó su estrujante reportaje sobre la Matanza de Uchuraccay (documento irrefutable contra el fanatismo guerrillero) y los principales ensayos de su travesía liberal. En Vuelta, Gabriel Zaid reveló la naturaleza elitista y universitaria (no campesina, ni obrera, ni espontánea, ni social) de las guerrillas salvadoreñas. En Vuelta, Guillermo Cabrera Infante explicó por qué el suicidio ha sido la ultima ratio de expresión política en la Cuba de Fidel.En 1989 la batalla de las ideas parecía ganada. En París, con motivo de la recepción del Premio Tocqueville, Paz habló de dos "portentos de una nueva era que, quizás, amanece: ...el ocaso del mito revolucionario en el lugar mismo de su nacimiento... y el regreso a la democracia en América Latina". Tenía razón en recordar que el acta de fundación de los países iberoamericanos en las primeras décadas del siglo XIX había sido precisamente la democracia liberal -entendida en un sentido amplio, republicano y constitucional-. Parecía un milagro que todos los países de América Latina (salvo Cuba) estuviesen a punto de volver al origen democrático, pero el milagro fue real y muy pronto se consolidó. Significativamente, muchos detractores de la democracia (sin mayor explicación) se volvieron súbitos demócratas. No obstante, en 1994, la Historia -ese teatro sorprendente- puso en escena una nueva representación revolucionaria: una rebelión indígena vagamente inspirada en las ideas de Mariátegui. Ocurría al sur de México, en el Estado de Chiapas. La encabezaba un sacerdote que profesaba la "Teología de la liberación" (el obispo Samuel Ruiz) y un guerrillero enmascarado (el subcomandante Marcos) que, emulando al Che, fumaba pipa, recetaba medicinas y escribía cuentos. Ante esta resurrección, Paz entró en un estado de perplejidad y así murió.El Réquiem por la Revolución había sido prematuro. La tensión entre Revolución y Democracia seguía desgarrando a América Latina. Mientras la democracia se consolidaba, el posmarxismo seguía imperando en no pocas universidades del continente (y hasta en algunas norteamericanas). Y a principios del siglo XXI, en Venezuela, el mito revolucionario reencarnó en un esperpento político extraído de Valle-Inclán. En su discurso inaugural, Chávez vituperó a la "maloliente" democracia y en su desempeño -como dicta Carlyle- buscaría reducir la historia venezolana a su biografía personal. Marx había escrito: "Todos los grandes hechos y personajes de la historia universal aparecen, como si dijéramos, dos veces... una vez como tragedia y la otra como farsa". Chávez, es cierto, sería una caricatura de Fidel, pero una caricatura con cientos de billones de petrodólares en la cartera y un carisma diabólico: un caudillo posmoderno, un redentor por Twitter.Como tragedia y como farsa, los fantasmas redentores del poder y el dogma siguen rondando la vida latinoamericana. Ningún empeño por exorcizarlos se compara al de Mario Vargas Llosa. Su liderazgo intelectual y moral ha sido indiscutible. En sus obras, como expresó el comité que le otorgó en 2010 el Premio Nobel, Vargas Llosa ha construido una "cartografía de las estructuras de poder y el reflejo de éstas en la resistencia del individuo, en su rebelión y su derrota". Su tema central -su obsesión, su misión- ha sido la minuciosa y apasionada crítica de ese poder: el poder de los fanatismos de la identidad (racial, nacional, ideológica, religiosa) y el poder de los dictadores militares o revolucionarios, los "Chivos" del continente, a quienes detesta por razones casi genéticas. En ese sentido, su trayectoria contrasta con la de Gabriel García Márquez, el otro gran novelista latinoamericano en cuya obra no es difícil advertir una marcada veneración por el hombre fuerte a partir de la cual se comprende su prolongado servicio a la Revolución cubana y a su amigo, el redentor inmortal.El mesianismo político latinoamericano nació en 1898 en Cuba, cristalizó en Cuba en 1959, y definirá su destino en Cuba, en un futuro cercano. El hechizo de la Revolución fue tan grande como lo es ahora el desencanto y la pesadumbre de las generaciones sacrificadas en el altar de un caudillo vitalicio. Ojalá llegue la hora de la reconstrucción y la reconciliación, la hora de la libertad: obra de demócratas, no de redentores.(El País/Madrid)
“Los empresarios somos vigilantes de nuestras libertades y de la institucionalidad democrática”
DISCURSO EN EL CONGRESO INDUSTRIAL 2010 (14 octubre 2010) Señoras y Señores: Antes de iniciar quiero manifestar nuestras sinceras condolencias y oraciones para la familia de nuestra recordada doña Thelma Davidson de López, merecedora del premio ASI 2010 por su destacada carrera industrial. En nombre de la Junta Directiva de la Asociación Salvadoreña de Industriales, tengo el honor de presidir ante tan distinguida audiencia, nuestro Sexto Congreso Industrial 2010 denominado “Fomentando el Desarrollo Económico y Social del País”. Hacemos un público agradecimiento a INSAFORP, institución que nos acompaña y apoya en nuestro Congreso Industrial y en nuestras actividades de capacitación. Quiero agradecer a todos nuestros patrocinadores por su apoyo para llevar a cabo este importante evento para la industria salvadoreña. También quiero agradecer a nuestros expositores, entre ellos pequeños, medianos y grandes empresarios, instituciones de gobierno, embajadas y organismos internacionales acreditados en nuestro país. También quiero agradecer al equipo de trabajo de la ASI, a nuestros asesores y colaboradores, a quienes aprovecho para agradecer por su esfuerzo y dedicación, en especial por la preparación y montaje de este evento. Y finalmente pero no menos importante, un especial agradecimiento al trabajador industrial salvadoreño, por su incansable esfuerzo y valentía, llevando diariamente el sustento de su familia a pesar de las adversidades. Su trabajo es la fortaleza de nuestra economía. ASI Y LA INDUSTRIA La Asociación Salvadoreña de Industriales, en sus más de 50 años de existencia, se ha consolidado como el referente de la industria salvadoreña. Representamos a los empresarios y trabajadores de 23 sectores industriales y agroindustriales que conforman nuestra gremial. Hemos asumido con entusiasmo y responsabilidad el reto de reactivar nuestra industria nacional, fomentando la competitividad y productividad, y generando nuevos empleos que nos permitan contribuir al bienestar social y económico de nuestro país. Generamos 275,000 empleos directos de los cuales 135,000 son mujeres. Por cada empleo directo generamos aproximadamente 3.5 empleos indirectos en otros sectores de la economía, incluyendo sectores agrícola y agropecuarios. Juntos, empresarios y trabajadores, producimos el 23% del PIB y el 92% de las exportaciones. Aportamos el 30% de las cotizaciones del Seguro Social y el 23% de los ingresos tributarios que percibe el Estado en concepto de impuestos. Inyectamos a la economía aproximadamente $910 millones de dólares en salarios y prestaciones, y otros $4,500 millones de dólares en compras de bienes y servicios a otros sectores. Por ejemplo, consumimos el 40% de la energía eléctrica, el 30% del transporte, el 14% de la agricultura, el 30% del sector construcción, y el 17% de los servicios del gobierno. Somos sin duda el motor de la economía y la verdadera fábrica de empleos. DESEMPEÑO ECONOMICO Sin embargo, vemos con desaliento el pobre desempeño de nuestra economía. Mientras los demás países de la región Centroamericana empiezan a dar muestras de una recuperación económica significativa, en nuestro país se vislumbra apenas una leve recuperación menor al uno por ciento. Con la proyección de crecimiento mas baja en toda Centroamérica, y con la inversión privada más baja de toda Latinoamérica. Estamos conscientes, que la actual coyuntura internacional, nos plantea retos económicos difíciles, al mismo tiempo que la coyuntura nacional nos plantea grandes retos sociales y políticos. Pero mientras los salvadoreños nos enfrascamos en discusiones infértiles sobre modelos económicos y políticos, otros países se posicionan para tomar ventaja de la recuperación económica mundial, logrando avances tecnológicos e industriales importantes y crecimientos significativos en sus economías. ESTABILIDAD Y GOBERNABILIDAD La industria requiere de grandes inversiones de capital y financiamiento a mediano y largo plazo. Por lo tanto es muy susceptible a la incertidumbre económica y política. Solo se logra atraer inversiones cuando existe un clima de estabilidad, confianza y seguridad jurídica. Pero en cada período electoral se pone en juego nuestra democracia y nuestras libertades. Vemos como se negocia la aritmética legislativa traicionando la voluntad de los votantes. Vemos como un partido de gobierno actúa como oposición. Entonces, para los que no somos militantes partidarios, estos acontecimientos políticos trascienden nuestra comprensión y generan incertidumbre. Incertidumbre que se agudiza ante la polarización en próximas elecciones. Es evidente que no podemos generar las condiciones apropiadas para el desarrollo económico y social en medio de este clima de incertidumbre, hostilidad e intolerancia. Por lo tanto, los sectores productivos instamos a los actores políticos y funcionarios públicos, a despojarse de sus intereses partidarios y a buscar responsablemente un clima de seguridad, confianza y optimismo, para que podamos trabajar y generar los empleos que nos permitirán el tan anhelado desarrollo social. Pedimos la oportunidad de hacer lo que sabemos hacer bien, TRABAJAR, pero en un ambiente de paz, seguridad y estabilidad para todos. ACUERDO DE NACION Así como el conflicto armado demandó la determinación de todo el pueblo salvadoreño para la firma de los Acuerdos de Paz, de la misma manera, la crisis actual nuevamente nos exige la misma determinación para lograr acuerdos que permitan la gobernabilidad, pero dentro del marco constitucional vigente y con respeto a la democracia representativa. No podemos permitir que se siga utilizando nuestra frágil democracia para promover intereses partidarios, ni para promover sistemas de gobierno contradictorios a la misma democracia que nuestra Constitución garantiza. Democracia que nos permite las libertades fundamentales para el desarrollo humano y social. Esta gestión nos obliga a ser vigilantes de nuestras libertades e institucionalidad democrática, a ser críticos de la gestión política y gubernamental, y a buscar el diálogo y la discusión transparente de los problemas y soluciones que nos afectan. RESPETO A EMPRESARIOS Respetamos la firmeza y convicción, con la que el señor Presidente de la Republica, pretende defender los principios y libertades democráticas. Sin embargo, ese respeto y confianza se debilitan con cada ataque injustificado y desmedido en contra del sector privado. Nosotros no somos adversarios ni militantes partidarios. Coincidiremos con todos aquellos que defiendan y promevan los principios fundamentales de la libre empresa. Ya basta de acusaciones y discursos de intolerancia en contra de los empresarios. No se puede exigir confianza a los empresarios mientras continue su acoso y desprestigio. Por que tan empresario es el dueno de la ruta de buses que sufre los ataques de la delincuencia, como lo es el industrial mas grande que sufre las extorsiones y amenazas. Empresarios somos todos. Y debemos sentirnos orgullosos de nuestra iniciativa, de nuestro esfuerzo y de nuestro trabajo. No permitamos que nadie nos averguence de ser empresarios! Pero no permitamos tampoco que ningun empresario evada sus obligaciones laborales y sociales, sus obigaciones tributarias, y su responsabilidad social. Los empresarios somos generadores de oportunidades, de inversión y de empleos. También somos generadores de cambio. Pero necesitamos reglas claras y seguridad. Necesitamos el liderazgo de un Presidente que coordine su gabiente de gobierno en forma efectiva, un gabinete conformado por funcionarios capaces y profesionales, comprometidos con el país y no con sus propios intereses partidarios. El mayor legado histórico que este gobierno puede heredar a nuestras futuras generaciones, es el fortalecimiento de nuestra democracia y de las instituciones que precisamente garantizan la libertad, la justicia, la gobernabilidad y la alternabilidad. FUERZA ARMADA En este sentido, aplaudimos la iniciativa del señor Presidente de apoyar y fortalecer nuestra Fuerza Armada como garante de nuestra soberanía, nuestra libertad y nuestra democracia. Solo aquellos que pretenden aprovecharse de la ingobernabilidad pueden proclamar la eliminación de tan respetada y disciplinada institución al servicio de los salvadoreños. CORTE SUPREMA Con la misma certeza, rechazamos cualquier intento que busque debilitar la autoridad, la independencia o la institucionalidad de la Corte Suprema de Justicia. Aun cuando podamos diferir con algunas de sus resoluciones, debemos aceptar y reconocer la máxima autoridad de la Corte Suprema de Justicia en temas constitucionales. Corresponde a la Asamblea Legislativa, legislar responsablemente y en total apego a nuestra constitución. Por tal razón, exhortamos a nuestros honorables diputados a despenalizar la libertad de opinión y libertad de prensa sin perjuicio al honor y dignidad de las personas. Sin libertad y justicia no puede existir democracia. AGENDA INDUSTRIAL En medio de toda esta turbulencia política, en la ASI tenemos claro que nuestra misión primordial como gremial se enfoca en fomentar la competitividad de los sectores productivos y la representatividad industrial, buscando un clima de seguridad, confianza y libertad para que cada salvadoreño, pequeño o grande, desarrolle toda su creatividad, su laboriosidad y su espíritu emprendedor, que son la base de nuestro desarrollo económico y social. No hay reto mas grande para nuestra nación que lograr un crecimiento sostenible de nuestra economia. Y como nuestra economia y el desarrollo social dependen principalmente de la generación de empleos, el enfoque primordial de nuestra gestión debe ser para proponer y apoyar programas y políticas que creen nuevas oportunidades de inversión y de empleo. Ahora más que nunca, es importante que los sectores productivos e instituciones de gobierno, busquemos las oportunidades para trabajar juntos, para lograr un significativo avance en la generación de empleos que estimulen el crecimiento economico, y que permitan un mejor nivel de vida y de bienestar para todos los salvadoreños. Es por ello, que como sector industrial hemos iniciado un proceso de consultas bajo la coordinación de la Secretaría Técnica de la Presidencia, para la elaboración de una Política de Fomento Industrial, que apoye e incentive la producción nacional como catalizador del crecimiento económico. Entre nuestra agenda de fomento industrial hemos propuesto la creación de una Agencia de Desarrollo Industrial, con participación interinstitucional, que coordine los esfuerzos de inversión, reconversión y desarrollo industrial, de la misma manera que PROESA coordina los esfuerzos de promoción de inversión extranjera y EXPORTA coordina los esfuerzos de promoción de exportaciones. Hemos propuesto además una preferencia para productos nacionales en las adquisiciones del sector público, preferencia aplicable únicamente bajo las misas condiciones de precio y calidad. Adicionalmente, estamos lanzando nuestra campaña de concientización para promover el consumo preferencial de productos nacionales, lo cual contribuye directamente a la generación de empleo en nuestro país. Hemos lazando nuestro programa de bienestar laboral para diagnosticar, asesorar y capacitar a los empresarios y trabajadores en las mejores prácticas de seguridad industrial, bienestar laboral y cumplimientos de legislación laboral y requerimientos de CAFTA. FINANCIAMIENTO En el tema de financiamiento, nuestro sistema financiero refleja altos niveles de liquidez que no están siendo canalizados a los sectores productivos. Es urgente desburocratizar los trámites internos para la aprobación de créditos y facilitar la tramitología y requerimientos de la Superintendencia del Sistema Financiero para acceso a créditos, especialmente para la pequeña y mediana empresa. Insistimos en implementar un Fondo de Desarrollo Industrial, como parte de la implementación de la banca de desarrollo de segundo piso, que permita a los empresarios de todo tamaño acceder a fuentes de financiamiento a tasas competitivas para proyectos industriales. En muchos casos, los proyectos de inversión o las líneas de capital de trabajo no cuentan con las garantías apropiadas, lo que hace indispensable la implementación del Fondo de Garantías como parte de la banca de desarrollo. CALIDAD Una de las áreas prioritarias para los industriales es la urgente aprobación de la Ley del Sistema de Calidad y Productividad, que actualmente se encuentra en discusión en la honorable Asamblea Legislativa. También vemos indispensable fomentar y facilitar la integración de las pequeñas y medianas empresas en las cadenas productivas para lograr un crecimiento incluyente y reducir la pobreza. De la misma manera, es necesario apoyar a los micro empresarios para lograr fortalecer su crecimiento e incorporación al sector formal. ENERGIA ELECTRICA El tema energético cobra vital importancia para el sector industrial en vista que la energía eléctrica es uno de los costos más altos de toda industria. No podemos ser competitivos en un país con energía cara. Con la creciente demanda de energía se vuelve prioritario asegurar el suministro de energía eléctrica a precios competitivos. En este sentido se vuelve urgente concluir la construcción de la presa hidroeléctrica El Chaparral y desarrollar los proyectos de repotenciación de los generadores de las presas del Cerrón Grande y 5 de Noviembre, así como la inversión en el desarrollo de nuevas tecnologías y fuentes de energía renovable como la energía termosolar. Simultáneamente, debe revisarse el marco regulatorio para concesionar la construcción y operación de nuevos proyectos hidroeléctricos o geotérmicos privados o público-privados que nos provean de energía a precios competitivos. En el tema de subsidio eléctrico, este debe enfocarse exclusivamente para aquellos hogares que consumen 99 Kw o menos y destinar el excedente para proyectos de eficiencia energética, como focos ahorradores de nueva tecnología, que ayuden a estos hogares de escasos recursos a reducir su gasto eléctrico. Ante la creciente demanda de energía, hemos planteado la necesidad de decretar normas y requerimientos técnicos para todo equipo eléctrico producido o importado al país, con plazos de implementación, para hacer uso más eficiente de la energía eléctrica que producimos. Hemos lanzado nuestro programa de eficiencia energética para ayudar a las empresas a diagnosticar, capacitar y diseñar sus propios proyectos de mejora energética que les permitan mayores eficiencias y ahorros significativos en su factura eléctrica. Esto mismo, acompañado de nuestra campaña publicitaria de ahorro y eficiencia energética que nos permita reducir cualquier creciente demanda innecesaria y hacer mejor uso de nuestros recursos naturales. CAPACITACION En el tema de capacitación y tecnología, exhortamos a las universidades e institutos técnicos a trabajar juntos para alinear las carreras y programas de estudio con las verdaderas necesidades de la industria, a manera de asegurar a los profesionales un trabajo digno. No podemos seguir graduando jóvenes que no encuentran empleo mientras nuestras industrias no encuentran jóvenes capacitados en las áreas industriales. Es urgente el desarrollo e investigación de nuevas tecnologías para lo cual el sector académico debe trabajar conjuntamente con el sector industrial y con instituciones internacionales en el montaje de laboratorios de investigación especializados para cada rama industrial. Como industriales debemos comprometernos a la capacitación continúa y permanente de nuestra fuerza laboral para permitirles acceder a mejores oportunidades de trabajo, y que permitan a la industria alcanzar mejores niveles de calidad y productividad. En este tema, hemos abierto nuestro nuevo Centro de Formación Industrial donde capacitamos a jóvenes a quienes les garantizamos un puesto de trabajo en alguna de las empresas del sector industrial. TRATADOS COMERCIALES En el tema de acceso a nuevos mercados, apoyamos la iniciativa del Ministerio de Economía de armonizar los tratados existentes para su mejor aprovechamiento Debemos buscar acuerdos comerciales solamente con aquellos países que ofrecen verdaderas oportunidades de acceso a nuestros productos, lo cual genera empleos en NUESTRO PAIS. En ese sentido, exhortamos a los gobiernos centroamericanos, a no buscar la firma de tratados comerciales unilateralmente, ni por razones puramente políticas o diplomáticas, sino en forma conjunta como región y con el interés genuino de promover el comercio y las exportaciones, sin afectar a los sectores productivos más vulnerables. Debemos distinguir entre relaciones comerciales y relaciones político diplomáticas. No es cuestión ideológica. Estamos dispuestos a acompañar al gobierno, en aquellos viajes de promoción comercial a países con libertad económica, que puedan ofrecer a nuestras industrias la seguridad jurídica y garantías de pago en sus transacciones de comercio internacional. En este sentido, vemos con expectativa la implementación un acuerdo de garantías bancarias y pronto pago para nuestros agremiados que exportan a Cuba. Sobre el mismo tema de comercio exterior, proponemos reforzar el Vice-Ministerio de Economía con una Oficina de Defensa Comercial y una legislación apropiada para proteger a la industria nacional de las importaciones de países con subsidios y prácticas de comercio desleal, que destruyen fuentes de empleo en nuestro país. UNION ADUANERA E INTEGRACION CENTROAMERICANA Adicionalmente, en nuestra agenda para la reactivación de la industria, consideramos urgente cumplir con un calendario de trabajo para concretar el proceso de Unión Aduanera y liderar la Integración Económica Centroamericana. La integración Centroamericana y la Union Aduanera no son una meta puntual sino un proceso permanente de promoción de la libre circulación de mercancías y de facilitación del comercio. No quiere decir necesariamente eliminar fronteras sino de simplificar y facilitar, pero con los debidos controles fiscales para evitar el contrabando y triangulación de mercancías no originarias de la región. Debemos reconocer que el proceso de integración aún enfrenta múltiples retos y desafíos. El sector empresarial ha avanzado de manera más acelerada en la expansión de sus operaciones y aprovechamiento de encadenamientos productivos regionales. Aplaudimos la labor de nuestro Ministro de Economía, actual presidente pro-tempore del Consejo de Ministros de Economía de la región, encaminada a definir acciones concretas y metas específicas para lograr avances calendarizados y significativos en el proceso de integración. Es imprescindible que nuestro gobierno no permita actos arbitrarios que osbtaculicen el comercio de nuestros productos, como barreras no arancelarias o procedimientos aduaneros unilaterales, que restringen nuestras exportaciones y nos restan competitividad. INCENTIVOS Para que nuestro país sea atractivo para los inversionistas, es indispensable replantear un esquema de incentivos a la inversión, totalmente compatibles con la Organización Mundial de Comercio (OMC), y enfocados exclusivamente a aquellas industrias dispuestas a invertir y a apostarle al futuro de nuestro país. Incentivos basados en la inversión para la reconversión industrial, eficiencia energética, generación de nuevos empleos, maquinaria y equipo de ultima tecnología, tecnologías intangibles como desarrollo de software, o que fomenten la integración de las PYMES a la cadena productiva, entre otros. No estamos pidiendo subsidios ni gangerias. Pedimos la oportunidad de ser competitivos. Pedimos eliminar los obstáculos, actos arbitrarios y trámites burocráticos que nos restan competitividad. Finalmente, entre las restantes propuestas, exhortamos al Ministerio de Hacienda a hacer efectiva la devolución del IVA a los exportadores en el plazo indicado por la ley, así como gestionar la eliminación del impuesto del 5% aplicable al transporte de carga. ACCIONES CONCRETAS Nuestras propuestas no son nuevas. Lo que es nuevo es la voluntad de las diferentes instituciones de trabajar juntos en una agenda común para la reactivación de la industria. Voluntad que el gobierno debe convertir en actuaciones concretas de apoyo a los sectores productivos. Le tomamos la palabra al Señor Presidente en su iniciativa de fortalecer el tejido productivo nacional, pero a casi 18 meses de su gestión esperaríamos ver acciones más concretas de fomento a la producción nacional. Su ausencia este día, y la de algunos de sus funcionarios, puede ser interpretada como falta de interés y compromiso con la industria salvadoreña. Señoras y Señores,Para finalizar, queremos patentizar nuestro reconocimiento a todos aquellos empresarios, pequeños, medianos y grandes, por su esfuerzo día a día, que se las ingenian sin quejarse para salir adelante ante las adversidades, obstáculos y amenazas. A aquellos salvadoreños trabajadores y emprendedores, ahora les decimos no es necesario marcharse lejos, porque creemos que en este país también tenemos oportunidades. Ahora más que nunca, el Sector Productivo se encuentra unido y comprometido por sacar adelante nuestro país. Los exhorto a que miremos hacia adelante con optimismo, con fe, y con determinación, y que sigas trabajando para forjar juntos un mejor futuro para nuestros hijos. Muchas gracias y que Dios bendiga nuestro querido El Salvador.
Reclaiming America’s Soul
“Nothing will be gained by spending our time and energy laying blame for the past.” So declared President Obama, after his commendable decision to release the legal memos that his predecessor used to justify torture. Some people in the political and media establishments have echoed his position. We need to look forward, not backward, they say. No prosecutions, please; no investigations; we’re just too busy. And there are indeed immense challenges out there: an economic crisis, a health care crisis, an environmental crisis. Isn’t revisiting the abuses of the last eight years, no matter how bad they were, a luxury we can’t afford? No, it isn’t, because America is more than a collection of policies. We are, or at least we used to be, a nation of moral ideals. In the past, our government has sometimes done an imperfect job of upholding those ideals. But never before have our leaders so utterly betrayed everything our nation stands for. “This government does not torture people,” declared former President Bush, but it did, and all the world knows it. And the only way we can regain our moral compass, not just for the sake of our position in the world, but for the sake of our own national conscience, is to investigate how that happened, and, if necessary, to prosecute those responsible. What about the argument that investigating the Bush administration’s abuses will impede efforts to deal with the crises of today? Even if that were true — even if truth and justice came at a high price — that would arguably be a price we must pay: laws aren’t supposed to be enforced only when convenient. But is there any real reason to believe that the nation would pay a high price for accountability? For example, would investigating the crimes of the Bush era really divert time and energy needed elsewhere? Let’s be concrete: whose time and energy are we talking about? Tim Geithner, the Treasury secretary, wouldn’t be called away from his efforts to rescue the economy. Peter Orszag, the budget director, wouldn’t be called away from his efforts to reform health care. Steven Chu, the energy secretary, wouldn’t be called away from his efforts to limit climate change. Even the president needn’t, and indeed shouldn’t, be involved. All he would have to do is let the Justice Department do its job — which he’s supposed to do in any case — and not get in the way of any Congressional investigations. I don’t know about you, but I think America is capable of uncovering the truth and enforcing the law even while it goes about its other business. Still, you might argue — and many do — that revisiting the abuses of the Bush years would undermine the political consensus the president needs to pursue his agenda. But the answer to that is, what political consensus? There are still, alas, a significant number of people in our political life who stand on the side of the torturers. But these are the same people who have been relentless in their efforts to block President Obama’s attempt to deal with our economic crisis and will be equally relentless in their opposition when he endeavors to deal with health care and climate change. The president cannot lose their good will, because they never offered any. That said, there are a lot of people in Washington who weren’t allied with the torturers but would nonetheless rather not revisit what happened in the Bush years. Some of them probably just don’t want an ugly scene; my guess is that the president, who clearly prefers visions of uplift to confrontation, is in that group. But the ugliness is already there, and pretending it isn’t won’t make it go away. Others, I suspect, would rather not revisit those years because they don’t want to be reminded of their own sins of omission. For the fact is that officials in the Bush administration instituted torture as a policy, misled the nation into a war they wanted to fight and, probably, tortured people in the attempt to extract “confessions” that would justify that war. And during the march to war, most of the political and media establishment looked the other way. It’s hard, then, not to be cynical when some of the people who should have spoken out against what was happening, but didn’t, now declare that we should forget the whole era — for the sake of the country, of course. Sorry, but what we really should do for the sake of the country is have investigations both of torture and of the march to war. These investigations should, where appropriate, be followed by prosecutions — not out of vindictiveness, but because this is a nation of laws. We need to do this for the sake of our future. For this isn’t about looking backward, it’s about looking forward — because it’s about reclaiming America’s soul.(The New York Times)
Democracia fallida
En Nicaragua, como se sabe, desde el Pacto Alemán-Ortega (1999-2000) todos los poderes del Estado están integrados por miembros escogidos directamente por los dos caudillos. Desde esas fechas, ambos acordaron repartirse por parte iguales todas las instituciones. De manera que cada órgano del Estado está integrado públicamente por dos bancadas, una que obedece directamente a Alemán y otra a Ortega. En estas condiciones se ejerce la Justicia, se fabrican o negocian los fallos, se “organizan” las elecciones y la lectura de sus resultados, en la fallida democracia Nicaragüense.Apenas iniciado el período presidencial de Daniel Ortega (enero 2007), sus operadores políticos plantearon públicamente que el presidente iniciaría tempranamente las negociaciones con su socio Arnoldo Alemán, a fin de introducir en el parlamento un proyecto de Reformas a la Constitución, cuyo eje central sería la reforma del artículo 147 CN, que de manera expresa prohíbe la reelección continua y que inhibe cualquier pretensión del Presidente Ortega al próximo período.Durante todo el año 2008 la opinión pública conoció una y otra vez los términos del mercadeo político entre ambas fuerzas, que conduciría de manera invariable a la introducción en el parlamento del proyecto de reformas y su aprobación. Sin embargo, el año concluyó sin reformas en el espacio autorizado para hacerlo, el Parlamento.Resulta que las acciones fraudulentas que acompañaron el proceso de elecciones municipales de noviembre de 2008, que hicieron perder al liberalismo más de 40 alcaldías, debilitó las capacidades de maniobras de Alemán en su propio partido, cuyas bases, líderes intermedios y no pocos dirigentes nacionales, exigían una inmediata actitud de ruptura de la política de pactos de Alemán con Ortega.El fraude en las elecciones municipales --que muchos denunciaron, incluso, como concertado con Alemán-- limitó la capacidad de transacción de Alemán. Ni siquiera las amenazas del Presidente de mandarlo nuevamente a la cárcel hicieron posible el acuerdo sobre las reformas. Las presiones internas e internacionales que reclamaban solución al fraude bloquearon --al menos temporalmente-- las posibilidades de negociar un nuevo Pacto.Los procedimientos del poder absolutoSin previo acuerdo con Alemán no existía ninguna posibilidad de presentar y aprobar en el parlamento las reformas buscadas por Ortega. La situación súbitamente quedó congelada. “Que diga qué quiere el Dr. Alemán, si quiere negociar otro pacto, pero las reformas deben darse”, reclamaba públicamente el principal operador político de Ortega y vicepresidente de la Corte Suprema de Justicia.El impasse temporal y la imprudencia de algunos dirigentes sandinistas como Tomás Borge proclamando una virtual candidatura de Rosario Murillo ante la eventual imposibilidad de la candidatura de Ortega, dejaron entrever demasiado temprano qué ambiciones y fisuras podrían poner en riesgo la armonía y la unidad del danielismo. En el círculo íntimo del presidente sonaron fuertes las alarmas. Se estaba poniendo en entredicho la eterna candidatura de Daniel, su proyecto personal y político.Súbitamente y ante el asombro de todo el país, el lunes 19 de octubre, seis miembros de la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, tres propietarios y tres suplentes, todos ellos danielistas, daban a conocer el fallo de un supuesto recurso de amparo que habría sido introducido por el presidente y sus alcaldes. Nadie en el país conocía del supuesto Amparo introducido horas antes ante el Consejo Supremo Electoral y que ahora había sido conocido por la Sala Constitucional con la notoria e inexplicable ausencia de los tres miembros propietarios del partido Liberal de Arnoldo Alemán.En el más absoluto secreto, en menos de 48 horas hábiles, dos poderes del Estado habían conocido y evacuado un Recurso de Amparo de trascendencia nacional e internacional. La Sala Constitucional informaba a la sorprendida clase política y a la boquiabierta opinión pública, que el Presidente y sus alcaldes pueden presentarse como candidatos, si así lo desean, para las próximas elecciones. Por la unanimidad de estos seis miembros, la “Corte” --pero de Ortega-- había fallado a favor de los supuestos recurrentes. Sin que nadie se diera cuenta, la Constitución venía de ser reformada por un insólito, ilegal e ilegítimo procedimiento.Democracia de Pan y MiedoEl golpe de mano de Ortega, sin duda, había calculado bien los riesgos y sobretodo las debilidades del adversario. En la semana anterior, la última encuesta nacional confirmaba que éste es un gobierno sin partidos políticos de oposición. Estos últimos, todos juntos, no superan actualmente el 20% de respaldo de la opinión pública. La actitud política de los ciudadanos está como nunca fragmentada, dividida y sobretodo desmovilizada y sin liderazgo alternativo. Daniel Ortega, que no logra aumentar su caudal de respaldo, en el tercer año de gestión, al menos parece conservar sus niveles históricos de apoyo. La encuesta nacional confirmó una vez más, el desprecio de los ciudadanos por su actual clase política y las instituciones del Estado, de la que sólo se salvan Ejército y Policía.El Presidente tenía la absoluta certeza, que en el ámbito nacional, el fallo, un golpe de Estado a la Constitución, no tendría de inmediato ninguna reacción importante que lo pusiera en peligro. Hasta ahora, además, el menor intento de movilización de la oposición, se ha encontrado con las fuerzas de choque danielistas, que vapulean, agreden y sacan de circulación a quien ose salir a las calles, si no es para apoyar al gobierno. El cálculo previó matemáticamente el silencio y el miedo.Al tercer año de la proclamada “nueva revolución” Nicaragua sigue siendo el segundo país mas pobre del hemisferio. En estas condiciones, para la mayoría pobre, el pan, es muchísimo mas importante que la democracia y eso lo sabe muy bien el danielismo. El empleo – cuando se tiene – hay que preservarlo como un tesoro más importante que la Constitución. Si en algo Daniel es insuperable, es en su dominio de los temores y fantasmas de los pobres, que en Nicaragua son la mayoría.Por ello, en medio de la crisis económica, el gobierno hace esfuerzos, con su política social, para garantizarse el respaldo de una buena parte de los más pobres. Los programas conocidos como Hambre Cero, Usura Cero, las mejoras en educación y salud, son políticas públicas clientelares. Abiertamente orientadas a sostener el caudal electoral de apoyo al régimen.Estas políticas, se entrelazan con aquellas --más sustantivas-- destinadas a favorecer a los más ricos. Nunca el capital financiero criollo y el sector empresarial, han gozado de tanta estabilidad como ahora. Capitalistas y gobernantes marchan increíblemente de la mano, bajo la orientación estratégica de los programas del FMI. En el tercer año de “revolución” ni un solo pelo ha sido tocado al Capital. Al contrario, Ortega incluso paga sin falta a los banqueros una deuda interna fraudulenta, así tenga que disminuir la inversión en salud o educación. El presidente sabe que los intereses de toda esa gente están al menos por ahora, de su lado.Los sectores más representativos del capital nunca como ahora se han sentido más seguros, con un Presidente, otrora dirigente revolucionario, convertido ahora con sus allegados en nuevos e importantes empresarios y que administran de forma totalmente PRIVADA – y sin control de nadie - el fondo generoso de cooperación venezolano que supera los 500 millones de dólares.La clase política pactista y corrupta comenzando por Alemán vacilan a la hora de poner en peligro los privilegios acumulados. El fallo de la Corte curiosamente es la mejor puerta de entrada a una nueva candidatura de Alemán a la presidencia en 2011. Los sectores medios, como siempre, presos del temor y del miedo. Primero de la crisis global y sus consecuencias locales en la economía. Temerosos de perder empleos y estabilidad prefieren el silencio. Inmovilizadas, víctimas de pánico, por las amenazas públicas de las fuerzas de choque del danielismo.Al interior del FSLN, salvo honrosas excepciones, lealtad y disciplina política van de la mano con el puesto de trabajo en el sector público o en las organizaciones sociales. Más abajo, el acceso al crédito, a los beneficios de los programas sociales, pasan por el filtro vigilante de los Consejos del Poder Ciudadano, que dirige la esposa del Presidente.En suma, en el plano interno, la correlación de fuerzas es por ahora adversa a la democracia. Por la derecha, porque buena parte de sus principales intereses están representados en las políticas sustantivas del gobierno. Por la izquierda, porque de entrada Ortega ha mantenido un feroz cerco que ha impedido hasta ahora construir fuerzas alternativas de izquierda con acumulado suficiente para enfrentársele.En verdad, el que Daniel Ortega pueda o no ser candidato en 2011 no ha sido ni debería ser un asunto esencial. El peligro real para Nicaragua es que una reelección más, una segura reedición del fraude, sólo pueden conducir al resurgimiento de sistemas dictatoriales. El peligro real es el establecimiento del autoritarismo, es la construcción de una nueva casta dinástica. Es la privatización absoluta del Frente Sandinista. Es la implantación de un régimen basado en el miedo y las amenazas de la represión. Son los intentos por politizar y subordinar a Ortega, a las fuerzas armadas. Es imponer la corrupción de las instituciones como forma de la democracia. Es en definitiva, el mantenimiento del mismo orden económico con retorica populista.Por todo lo anterior es la hora de la resistencia.(El Nuevo Diario, Nicaragua. La autora fue comandante sandinista, viceministra de la Presidencia y Ministra de Asuntos Regionales en los años 82-90. Ahora dirige el movimiento opositor Movimiento por el Rescate del Sandinismo.) //
Los premios Pulitzer de periodismo 2009
Public Service Las Vegas Sun, and notably the courageous reporting by Alexandra Berzon Breaking News Reporting Staff of The New York Times Investigative Reporting David Barstow of The New York Times Explanatory Reporting Bettina Boxall and Julie Cart of Los Angeles Times Local Reporting Detroit Free Press Staff, and notably Jim Schaefer and M.L. Elrick Ryan Gabrielson and Paul Giblin of East Valley Tribune, Mesa, AZ National Reporting Staff of St. Petersburg Times International Reporting Staff of The New York Times Feature Writing Lane DeGregory of St. Petersburg Times Commentary Eugene Robinson of The Washington Post Criticism Holland Cotter of The New York Times Editorial Writing Mark Mahoney of The Post-Star, Glens Falls, NY Editorial Cartooning Steve Breen of The San Diego Union-Tribune Breaking News Photography Patrick Farrell of The Miami Herald Feature Photography Damon Winter of The New York Times Pulitzer Prize Board MembersThe board overseeing the prizes
Spain considers prosecuting U.S. officials for torture
It is an interesting legal question: Can a Spanish criminal court prosecute U.S. officials for laying the groundwork for the torture of Spanish citizens held at Guantanamo Bay? A Spanish judge, Baltasar Garzon, has ordered an inquiry into whether six senior Bush administration officials -- including former Atty. Gen. Alberto R. Gonzales -- were responsible for "an authorized and systematic plan for torture," according to a court document. Times editorial writer Marjorie Miller asked British barrister and law professor Philippe Sands, author of the book "Torture Team: Rumsfeld's Memo and the Betrayal of American Values," to explain the legal underpinnings of such a procedure.The Spanish case targets the government lawyers -- including former Atty. Gen. Alberto R. Gonzales -- whose legal opinions laid the groundwork for so-called harsh interrogations. Why the lawyers?When the administration decided to move to aggressive techniques, it seems they turned to lawyers who could be relied upon to sign on. They systematically excluded from the process those lawyers who would have given contrary advice. But for the lawyers, these abuses, this torture, would not have happened. So the administration got bad advice from lawyers; they didn't have to take it. Why does that make the lawyers guilty?The lawyers appear to have been part of a plan to subvert the law. First the administration fixed on a policy of cruelty, then they found the lawyers to sign off on it. On my reading, the lawyers acted not in the service of providing fearless, independent legal advice, but provided support to a predetermined policy of abuse. In that way, they became complicit in a policy of torture.Is there legal precedent in going after the lawyers?There is legal precedent. The precedent includes U.S. military tribunals in Germany in the 1940s. More recently, you've got actions in Britain, Spain and the United States where lawyers, for example, designed money-laundering schemes intended to subvert rules that criminalize money laundering. There are plenty of cases to show that, where lawyers act in a way to subvert the rules, they can themselves become complicit in crime. Still, why not the torturers or the top political leaders?I focused on the lawyers because I wanted to understand the circumstances in which they became complicit, but of course it goes even higher. As of April 29, the case in Spain has taken a broader and more extensive turn. Judge Baltasar Garzon will look at the Bush Six and all those individuals who bear responsibility for the policy of torture and abuse. The case will look not just at the "framers of the legal decision," as President Obama put it. It will look at those higher up and perhaps also those lower down who contributed to the implementation of the decision.Why is Spain involved?It is based on abuse allegedly meted out on five Spanish nationals or residents. The legal basis in Spanish law is the prohibition under the 1984 Torture Convention and of the Geneva Conventions of torture and of inhuman and degrading treatment. The United States is a party to those treaties and, therefore, is bound by its commitments. The complaint is based squarely on these international laws, as well as Spanish laws. Would legal action in the U.S. take precedence over the Spanish case?That's a crucial question. I have no doubt that if the United States were to carry out its own investigation, foreign judges would back off. The question, therefore, is what sort of investigation would achieve that objective? Does it have to be a formal criminal investigation, or could it be a congressional or other inquiry that might have the power to make certain recommendations? I think it's an open question, but the reality is that if the Obama administration were to give a green light to a full non-criminal inquiry, a sort of blue ribbon truth commission that some have proposed, and if that group had the power to make recommendations as to whether crimes were committed, it would probably have the effect of suspending foreign investigations, at least until it announced its conclusions. Why did you take on this issue?I am a lawyer. I teach international law, but I am also a practicing lawyer. I spend half my time advising governments on issues, some of which are extremely sensitive. I see my role as a lawyer to advise government what the limits of their actions are: to help them achieve what they want to achieve, but not just to sign on the dotted line. I am acutely aware of the responsibility of lawyers. What the documents that emerged suggested to me was that those lawyers had abdicated their professional responsibilities. I wanted to understand how that happened. I could not understand how these lawyers essentially had rubber-stamped a policy of cruelty. In my view, they had ceased to act as lawyers.(The Los Angeles Times)
Hugo pulverizado
Las estimaciones de los analistas, tanto del lado del oficialismo como de la oposición, fueron atinadas en la mayoría de los casos, como se comprobó luego del primer boletín del CNE. Pero del lado de los voceros del Gobierno, empezando por el Presidente, sólo se gritaron durante la campaña mentiras y exageraciones sobre la gran victoria que obtendría el PSUV en estos comicios regionales y municipales. "Los vamos a pulverizar", chillaba a cada rato el Presidente refiriéndose a la oposición, y para risas y mamaderas de gallo de los venezolanos, apenas pudo pulverizar a sus antiguos aliados civiles y compinches militares. De manera que aquí cabe muy bien el refrán de que la culpa no es del ciego sino de quien le da el garrote. Y el garrote lo entregaba bien engrasado el propio Chávez. Estas gobernaciones "rescatadas" de manos de los mentados "traidores al chavismo" no constituían ni habían constituido en el pasado territorios de la oposición, ni mucho menos. En todo caso, tanto Sucre como Aragua se trataba de dos gobernadores regionales cuyos liderazgos y mandatos eran anteriores a la llegada del chavismo al poder. Cuando Chávez inventó la trampa de "relegitimarse" para así prolongar indebidamente su tiempo en la presidencia, tuvo que permitir la reelección de todos los gobernadores, y así se hizo. Desde ese momento se dio inicio a una alianza política que se mantuvo por años, y que sólo se rompió cuando Chávez les quiso pasar militarmente la aplanadora a la hora de escoger a sus dos candidatos. Ahí no hubo consulta alguna. Ni Didalco Bolívar ni Ramón Martínez aspiraban a la reelección, de manera que en Aragua y en Sucre ganaron los candidatos más apreciados por los votantes, como era lógico, y los venezolanos hoy deben respetar ese criterio mayoritario. Entonces, ¿quién pulverizó a quién? Quizás, a lo mejor, o tal vez, se pulverizaron entre ellos. Pero el Presidente de la República no impidió que la oposición pulverizara a Diosdado Cabello, el hombre que le cargaba el maletín a Chávez y lo esperaba, pacientemente, en la parte de afuera de las reuniones mientras Chávez cuadraba alianzas con la oligarquía. Como para que no hubiera testigo militar de sus trapisondas. A su hombre de confianza no le bastó el paraguas presidencial y le llovieron tantos votos en contra que provocaron un deslave en el corazoncito de Hugo. Ojitos lindos se volvió ojitos feos. Y en Petare ahora resulta que los votos de la clase media son venenosos, le hacen daño a la revolución bolivariana, no tienen el equivalente real e igualitario respecto a los otros votos de los venezolanos. Según el "demócrata" Hugo Chávez, sólo su gente "sabe votar", y el resto del país sufraga a tientas y a locas, guiado por las malas influencias de los medios de comunicación, de la CIA o de la oligarquía y los terratenientes. ¿Y cuantos terratenientes hay en Petare? ¿Y cuantos ladrones y corruptos hay en el PSUV y en Pdvsa? Sería bueno saberlo.
DIÁSPORA HISTÓRICA
Este pasado veinte de febrero, queda marcado en los anales históricos de la diáspora centroamericana que reside en los Estados Unidos de América, como el despertar de un nuevo gigante dormido. Ese gigante es la nación de centroamericanos de la clase pobre, compuesta por héroes campesinos, obreros y estudiantes, que por dos siglos en las fronteras centroamericanas, han sufrido las iniquidades del desprecio social, las opresiones antidemocráticas, las angustias de la pobreza y las frustraciones de sueños truncados debido a la ignorancia que produce la falta de educación. La mayoría de políticos centroamericanos, han aplicado a nuestras sociedades, políticas públicas que producen mas inmigrantes a este país y eso nos fortalece, porque cada día somos una nación más grande y con mayores recursos, y como tal, es nuestra responsabilidad histórica, adoptar un compromiso político de unidad, el cual, nos produzca definir que ahora es nuestro turno histórico de incidir en el destino de las patrias que amamos y que con nuestros sacrificados dólares ayudamos a construir y desarrollar. Debemos utilizar los medios democráticos en nuestro poder para trascender e incidir políticamente en el destino de nuestros países, así, en este siglo podremos instituir junto a aquellos representantes democráticamente electos en las fronteras centroamericanas nuestra visión y nuestra aspiración de crear una Centroamérica próspera, innovadora, educada y democrática, que sea líder y ejemplo en el continente. El precedente histórico más importante de la recién celebrada primera cumbre internacional de la diáspora centroamericana en la Organización de Estados Americanos - OEA, consiste en la muestra de responsabilidad política establecida por los organizadores, quienes patrióticamente han asumido el compromiso, de hacer a un lado las ideologías políticas y favoritismos o indiferencias partidarias, que dividen a los centroamericanos en el exterior y como diáspora buscamos estrechar nuestras manos a los servidores públicos que representan a la nación centroamericana y velan por los intereses de nuestras familias en Estados Unidos y en las fronteras patrias. Este hecho de altura política, lo demostró el acto remarcable, de entrega del premio excelencia presidencial de parte del director del octavo sector del partido político salvadoreño Alianza Republicana Nacionalista – ARENA, Dr. Eduardo López-Rajo, al excelentísimo presidente de la república de El Salvador, Dr. Elías Antonio Saca, premio que recibió el embajador de ese país, Lic. Rene León y que consecuentemente, de parte este su servidor, se entregó el mismo premio en reconocimiento a la excelencia presidencial, al histórico líder revolucionario y excelentísimo presidente de la república de Nicaragua, José Daniel Ortega Saavedra, premio recibido en su nombre por el embajador Lic. Denis Moncada. Este gesto simboliza lo que como lideres centroamericanos nos proponemos y que consiste en manifestar que todos somos importantes para conquistar nuestros ideales por romper las cadenas de la pobreza, de la dependencia internacional, de la corrupción institucional, del crimen organizado y la violencia social, entre muchos otros. El presidente Saca y el presidente Ortega, simbolizan el antagonismo político en la región que nos vio nacer y aquí la diáspora ha descubierto que ese antagonismo ideológico es sano, si los intereses del pueblo que lideran se anteponen a los intereses particulares de sus partidos políticos y abren las puertas a la gobernabilidad democrática. El éxito de este proyecto político, que encierran las cumbres centroamericanas que desarrollaremos en los próximos años, no puede ser medido en un solo evento, sino en la trascendencia del trabajo que hemos iniciado y que esperamos brinde en un futuro próximo con la colaboración de nuestros gobiernos, la seguridad migratoria que millones esperan en este país, la oportunidad de invertir con confianza nuestros ahorros en Centroamérica y así contribuir a la creación de empleo y desarrollo económico, la satisfacción de ser altamente educados y no permitir que la ignorancia limite nuestros sueños en la vida, pero sobretodo fortalecer la democracia que para las nuevas generaciones de Centroamericanos es un regalo precioso, otorgado por el derramamiento de sangre de cientos de miles de héroes que ofrecieron el más sublime sacrificio humano en la búsqueda y conquista de la Libertad, el respeto y la justicia. Este es un momento histórico para la diáspora centroamericana en Estados Unidos. Los mozos obreros convertidos en empresarios, las sirvientas convertidas en maestras, los campesinos convertidos en activistas comunitarios, los estudiantes convertidos en políticos y cada uno de aquellos centroamericanos que se encuentran en el proceso de alcanzar sus sueños, son los que conforman al gigante que ahora despierta. Los invito a que se conviertan en lideres de la diáspora, a que se interesen por su destino, y que sean próceres de la nueva Centroamérica que deseamos constituir en el siglo XXI. El ideal de Francisco Morazán, por instituir una República Centroamericana vital y progresista, es una realidad vivida cada día por la diáspora, no como república, sino como nación. Aquí hemos descubierto que no somos paisanos guatemaltecos o hondureños o salvadoreños o nicaragüenses o ticos, sino que todos somos hermanos, somos centroamericanos, en búsqueda de las mismas aspiraciones, exitosos en nuestras mismas conquistas y victimas de las mismas iniquidades de una sociedad que aún no nos asimila y respeta como nos merecemos, pero que nos da la oportunidad de vencer la pobreza y contribuir al desarrollo de Centroamérica. Somos una diáspora histórica y ahora existe un liderazgo que representa esos ideales, los organizadores de la histórica primera cumbre internacional de la diáspora centroamericana tuvimos la satisfacción y trascendental oportunidad de reunir a un grupo representativo de alto poder político y empresarial centroamericano, ellos ahora conocen lo que la diáspora aspira y se han comprometido a construir juntos una nueva nación.
Nueva Ley de Educación en Venezuela
(El Universal, Caracas)
Lo que Obama debió decir a América Latina
El discurso de Barack Obama en Santiago de Chile, anunciado como un gran acontecimiento que marcaría el nacimiento de una nueva era de las relaciones entre Estados Unidos y América Latina, se quedó, para desilusión de los anfitriones, en un vacío mensaje de buenas intenciones que reincidía en los tópicos más frecuentes y esquivaba los verdaderos temas pendientes para un presidente norteamericano en esta región. Para que el discurso pronunciado ayer hubiera servido verdaderamente para sorprender a los latinoamericanos y convencerles de que Obama, que mañana concluye su gira en El Salvador, traía realmente un nuevo espíritu al continente, debía de haber incluido tres ingredientes esenciales que se echaron desgraciadamente en falta. -La aceptación de responsabilidades por el pasado. América Latina no necesita humillar al presidente de Estados Unidos. Este continente no busca venganza ni el gozo romántico de hacer claudicar al imperio. Mientras Estados Unidos estaba en otros asuntos, la mayoría de la sociedad latinoamericana ha evolucionado hacia el modernidad y el pragmatismo. Nadie está volviendo la vista hacia el pasado. No necesitan que Obama se lo recuerde. Pero mirar hacia el futuro no debe de ser interpretado por Estados Unidos como una excusa para esconder su pasado. Todos, los del sur y los del norte, necesitan reconciliarse con la historia americana. Cualquier presidente de Estados Unidos que verdaderamente quiera pasar página tiene antes que encontrar una forma de asumir públicamente la responsabilidad de su país en el apoyo a regímenes militares que sembraron de cadáveres la región en la segunda mitad del siglo pasado y condenaron a América Latina a un duro y prolongado declive económico y moral. El Palacio de la Moneda de Santiago era el lugar perfecto para hacerlo, pero Obama no se atrevió. -El levantamiento del embargo a Cuba. No se puede denunciar en cada discurso la excepcionalidad antidemocrática de Cuba en la región sin aportar ninguna solución novedosa. La única posible, como hasta el propio Obama ha reconocido indirectamente, es el levantamiento del embargo económico. El embargo es una medida arcaica que solo sirve hoy para satisfacer el ánimo revanchista del exilio más fanático y como justificación barata por parte del régimen de Castro. Su eliminación permitiría generar un estado nuevo de presión sincera de parte de toda América Latina a favor de la democracia en Cuba. -La condena del Gobierno de Hugo Chávez. Con la mención de las dos condiciones precedentes, Obama se hubiera cargado de razón para hacer una imprescindible crítica al sistema chavista. En lugar de eso, optó por no mencionarlo en absoluto. La Casa Blanca, como antes con George Bush, se justifica diciendo que si critican a Chávez se le regala un protagonismo que no merece. A estas alturas, ese es un argumento dudoso. Pero aunque así fuese, Obama no puede pronunciar un discurso exponiendo su doctrina sobre América Latina sin aludir a la anomalía que representa Chávez, no por su presunto izquierdismo, sino por el peligro que significa para la democracia en la región. El riesgo para las ya relativamente maduras democracias de este continente no es el retroceso a regímenes militares; es su degeneración hacia sistemas de democracia formal pero con métodos corruptos y prácticas autoritarias, como las que ya han ido creciendo a la sombra de Venezuela. Hoy no basta con que Obama elogie la democracia latinoamericana; es preciso que defina qué modelo de democracia respalda. Su esfuerzo de Santiago es, pues, una gran oportunidad perdida. Y quién sabe cuándo habrá otra. Afortunadamente, América Latina ha demostrado estos años que se sabe valer muy bien por sí misma, sin la presencia de Washington. Pero sería ridículo pensar que una mayor colaboración con Estados Unidos no resultaría de gran beneficio para todos. Es dudoso que eso ocurra durante esta Administración, que en esta gira está demostrando un profundo desconocimiento sobre la realidad de América Latina. Escucharon a Obama el lunes cuatro presidentes chilenos, Patricio Aylwin, Ricardo Lagos, Eduardo Frei y Sebastián Piñera. Cualquiera de ellos, de derecha, centro o izquierda, le podría haber escrito un magnífico discurso. El que de verdad lo hiciera debe de llevar mucho tiempo lejos de estas tierras.(El País/Madrid)
La situación del empleo en El Salvador
Siempre supone un cambio grande dejar el colegio e iniciar la vida universitaria o laboral. Cuando pasamos por ahí hay muchos elementos a considerar, pero tal vez el más importante es ¿Qué quiero ser cuando sea grande?, o sea ¿qué trabajo quiero hacer? Los que tienen la posibilidad de elegir y plantearse cuál es la mejor alternativa, son la minoría, los demás tratan de hacer lo mejor con lo que tienen. Si tienes el privilegio de plantearte qué estudiar siempre tienes muchas variables a considerar. ¿Cuál es la universidad que me conviene?, ¿cuál es la carrera que debería de elegir? Y por supuesto te planteas, si estudio algo que me dé dinero o estudio lo mío, lo que de verdad me gustaría ser, si es que son distintos, que normalmente sucede. Es difícil responder a esta pregunta. La verdad es que la situación laboral no es fácil, en las carreras más tradicionales y supuestamente en las que más fácilmente se puede hacer dinero como Medicina, Leyes, Contaduría o Administración de Empresas hay una sobresaturación de profesionales. En las carreras más alternativas no hay muchos espacios para moverse. A esta disyuntiva hay que plantearse que la oferta universitaria es limitada; aunque hay muchas universidades, la mayoría ofrece las mismas carreras y, por su puesto, da preferencia para lo que tiene más demanda: Ingeniería Industrial, Administración de Empresas y Leyes. Las carreras alternativas son difíciles de encontrar y hay unos pocos ejemplos en El Salvador (Fotografía, Artes plásticas, etc.). Esta claro, la mayoría de las universidades son negocios y como todo negocio están interesados en ser lo más rentable posible. Así que ahí simplemente se reproducirán el fenómeno de sobresaturación. Es complicado el asunto del empleo, ya que no solo es difícil conseguir uno, sino también es difícil sobrevivir con el salario de uno. Al revisar los periódicos es claro que las profesiones más demandadas son las relacionadas a la administración y al mercadeo. Uno de cada tres anuncios en los periódicos es para un puesto en ventas (investigación propia). Es claro que el sector servicios es el oferente principal en el mercado de empleo. Habría que ver qué pasaría en El Salvador con una disminución en las remesas y por tanto una disminución en el comercio, sería una situación todavía más complicada y frustrante para los profesionales. Habría todavía menos espacios. Habría que ver que pasa con subida en el precio de los alimentos y la energía, ¿esto favorece el comercio y la inversión?, habría que ver pasa si El Salvador se vuelve políticamente inestable. Según un estudio de FUNDE sobre el desempeño económico y el empleo en El Salvador, en el país hubo un 6.8% de desempleo abierto en el año 2004. Y se ha mantenido más o menos estable desde 1991. Pero tal vez el dato más interesante es que el desempleo del sector con más años de estudio (más de 13 años) ha aumentado del 6% en 1994 a 10.2% en 2004. Este es un fenómeno que llama poderosamente la atención y que debería requerir un mayor análisis. Otro dato importante para analizar es el porcentaje de empleo, hay casi un 50% de trabajadores en el sector informal, un 35% en subempleo y un 56% sin seguro social. Así el panorama laboral de El Salvador es malo y no muy alentador para las nuevas generaciones. Ante esta realidad, poco es lo que ha hecho el gobierno, que al parecer su estrategia de atraer mayor inversión ha dado resultados discutibles. De una inversión millonaria para construir un hotel de playa se consiguen solo unos 250 empleos directos, eso difícilmente ayudarán a revertir estas tendencias. La empresa privada es parte importante del problema, ya que piensan que para mantener sus márgenes de ganancia lo tienen que hacer a costa del bienestar del empleado. La mentalidad empresarial es “maximicemos ganancias reduciendo costos” y estos costos son la mayor parte del tiempo los salarios de los empleados. Esta realidad no es exclusiva de El Salvador, en España, han aumentado, cada vez más, los años que pasa un profesional desempleado para conseguir empleo a partir de su fecha de graduación. El promedio varía según profesión pero son hasta 10 años. La diferencia con El Salvador es que, al conseguir empleo, tienen asegurado un buen nivel de ingresos y beneficios sociales. El problema de países como España es que cada victoria sindical supone más dificultades para los jóvenes de conseguir ingresar a ese estatus. En El Salvador la pregunta es cuál es el camino que tenemos que tomar; pues no podemos seguir con la tendencia actual, donde las oportunidades se encuentran en las actividades ilegales. El sector informal, por definición, se encuentra en la ilegalidad de un sistema de mercado, donde no hay declaración de impuestos, donde se usurpa la vía pública, etc.; la migración, otra oportunidad para muchos que no es legal; y por último, los robos, las extorsiones, las drogas, la prostitución, etc. Algunas de las alternativas que en El Salvador nos deberíamos de plantear son por ejemplo la del gobierno actual, el cual nos dice que falta personal bilingüe y técnico. Como no le pueden pedir a las universidades que fomenten este tipo de formación, plantean la necesidad de tener sus propias formas de capacitación. Ejemplo de esto son los MEGATEC que proponen capacitación especializada en demanda. Esta solución es limitada, ya que abarca una esfera del problema nada más. Las soluciones de otros países son las bolsas de empleo estatales, que consisten en proveer medios para que la gente pueda sobrevivir mientras el estado los ayuda a encontrar plazas laborales, estas soluciones son complicadas y necesitan una fuerte inversión estatal. También dan pie a que la gente se aproveche del sistema. La inversión en investigación es otro camino posible. Al fomentarla se crean nuevas alternativas de empleo y el motor es el desarrollo de las capacidades, así las universidades y desde la academia se pueden desarrollar nuevas tecnologías que puedan ser nuevas fuentes de empleo. El punto final es que existen alternativas para tener un panorama más alentador, pero la estrategia del gobierno y la empresa privada tienen que cambiar. Buscando nuevas alternativas, de preferencia fomentando la investigación. Así la alternativa para estas y futuras generaciones no es alentadora, más bien parece muy complicado. Así es difícil que la juventud no opte por buscar alternativas y cambio, ojala que se de. Ojala que este cambio llegue porque sino muy difícilmente lograremos progresar como país y tener estabilidad social. El trabajo es una necesidad social y psicológica para que las personas puedan convivir mejor. Esperemos que en esta época electoral, las promesas, compromisos o como le quieran llamar tomen seriamente en cuenta esta necesidad y no sean solo discursos demagógicos y retóricos sobre un problema grave de nuestro país.
La reflexión de los 100 días. De Manuel Hinds
Publicado en EL DIARIO DE HOY, 11 septiembre 2019Hay tres maneras de ver los primeros cien días de una presidencia. Una, la que está más de moda en este momento, es verlos como un período para el cual los candidatos hacen promesas como muestra de lo rápido que van a actuar una vez en el poder. Cuando pasa el período la gente contrasta esas promesas con los resultados que el candidato ganador ha logrado. Esto da una idea de hasta cuánto el nuevo presidente logra cumplir con sus promesas, lo cual es un indicador de cuánto logrará de lo que prometió para su periodo completo. Visto desde esta perspectiva, lo que se puede esperar del equipo presidencial al final del período son muchos esfuerzos para argüir frente a la población que el nuevo presidente ha cumplido con todas sus promesas para los primeros cien días.Otra manera de ver los primeros cien días es considerarlos como el período de la luna de miel, en el cual todo se perdona y se ve con gran optimismo. Visto de esta manera, el fin de este periodo marca el momento en el que el nuevo presidente puede esperar un cambio de humor en la población, que va a comenzar a ver su administración con un ojo más crítico.La tercera manera es verlos como un periodo razonable de ajuste, en el cual las nuevas autoridades conocen en detalle los problemas del estado, dan un diagnóstico, y dan forma a una estrategia y se integran con el servicio civil para poder resolverlos. En esta manera de verlo, el final de este período debe ser un momento de reflexión para considerar los aciertos y los errores inicialmente cometidos y para realizar un ajuste de las ideas y de las personas para poder enfrentar el resto del período presidencial.En la realidad, aunque últimamente se da mayor importancia a la primera interpretación de los primeros cien días, el gobierna haría bien en realizar que estos tienen algo de cada una de las tres maneras de verlos. Especialmente, debe darse cuenta de que dan una oportunidad de calibrar sus planes y sus expectativas de lograrlos dadas las limitaciones que inevitablemente la realidad impone. Dada la especial tolerancia de esos primeros cien días, la oportunidad es de oro, porque todavía el gobierno no está inmerso en uno de los procesos que pueden ser más destructivos para una administración: las cadenas que errores previos van estableciendo para acciones subsecuentes si estos errores iniciales no son reconocidos, y más bien se trata de justificarlos o negarlos. A través de estos procesos de justificación y negación, estos procesos se convierten en multiplicadores exponenciales de los errores iniciales, o de cualquier error en el camino, de tal manera que un error que pudiera haberse corregido en un instante, termina desviando al fracaso proyectos, programas o el accionar del gobierno entero.Por eso, los gobernantes sabios siempre se han cuidado de mantener abiertos sus canales de comunicación, de tal manera que pueda conocer las opiniones buenas y malas, las alabanzas y las criticas que sus acciones están provocando en la población, y así, identificar los errores apenas se cometen. Saben que esto es sano no sólo porque estas críticas les permiten calibrar mejor sus políticas y acciones, sino también porque dan una salida segura y moderada a los sentimientos de descontento. Todo el mundo sabe que cuando esas salidas no existen los descontentos no desaparecen sino que revientan de pronto en resultados no esperados en las elecciones.Pero hay otras tres razones por las cuales los gobernantes sabios dejan que la crítica y las confrontaciones con la realidad fluyan sin impedimentos. Como en el caso de poder corregir errores, estas tres razones actúan como mecanismos de defensa para la presidencia misma. Son defensas esenciales para mantener el poder en el funcionario que ha sido electo, evitando su captura sicológica por grupos cercanos a él. Los ejemplos de estos peligros pueden tomarse de toda la historia universal.Las guardias pretorianas Es de todos conocido que cuando hay un funcionario que detenta poder (digamos, el Presidente), mucha gente siente la tentación de rodearlo no solo para ir compartiendo el poder con él sino también para írselo arrebatando poco a poco y trasladándolo a lo que en El Salvador se ha llamado históricamente “la rosca”. Lo esencial en ese proceso es aislar al presidente de toda influencia externa a la rosca, con lo cual le controlan toda la información que le llega y toda la gente que se le acerca. Controlarle la información lleva inevitablemente a controlarle sus acciones y decisiones.En este punto es esencial notar que cuando se habla de la sabiduría de mantener la libertad de información esta es más importante para el Presidente que para el pueblo. Al fin y al cabo, el pueblo tiene infinitas maneras de mantenerse informado aún en los regímenes más tiránicos. El que fácilmente se puede aislar cuando se reprime la libertad de expresión es al Presidente mismo, que no tiene manera de contrastar lo que le dice su rosca.Así, pues, la regla número uno para evitar la usurpación del poder es mantener la libertad de prensa. La número dos es estar al día con la critica y las observaciones allí expresadas.La segunda razón adicional para dejar que fluya la crítica para evitar la usurpación del poder se orienta a cortar uno de los mecanismos principales usados por las roscas para dominar al que tiene el poder legítimamente —aunque haya libertad de prensa.Memento MoriEste mecanismo es la adulación, que puede ser tan fuerte como un muro de piedras para aislar del contacto con la realidad a cualquier líder legítimamente electo. Es tan fuerte que puede funcionar aun con libertad de prensa. Es tan fuerte que solo personas con mucho carácter y seguridad en ellos mismos lo pueden controlar, y eso solo haciendo esfuerzos muy conscientes para apartarse de la dulce tentación de la soberbia. Es bueno que lo hagan porque la adulación es el camino más fácil para arrebatarle el poder a alguien que lo tiene.Los romanos, que conocían mucho las debilidades humanas, tenían métodos muy propios para combatir la adulación. Cuando sus generales tenían un triunfo decisivo para Roma, les dedicaban un “Triunfo”, en el que el general del caso desfilaba por la ciudad con su guardia y los tesoros y prisioneros que había conquistado, mientras toda la población lo vitoreaba. La impresión de cientos de miles de personas vitoreándolos, enmarcados en la grandeza de Roma, con las águilas doradas brillando al sol, era capaz de sacar a cualquiera de sus cabales. El homenajeado confrontaba esto en una cuadriga en la que solo iba él con un hombre atrás que le decía continuamente, Memento Morí (recuerda que eres mortal). Ese mensaje era para beneficio de él, para que no se perdiera en las selvas sin salida de la vanidad.Este no es el primer artículo en el que menciono Memento Mori. Lo he usado un par de veces como advertencia a personajes y partidos salvadoreños que se sintieron invencibles cuando yo estaba escribiendo estos artículos y que, por sentirse así, fueron vencidos. Todo el mundo ha visto pasar esto, no una sino varias veces, en nuestro país, y todos los que lo entienden saben que ellos no hubieran perdido como han perdido como partidos y como personas si no se hubieran cegado por la adulación. No hay remedio más bueno contra la adulación que la libertad de prensa.Las defensas institucionales La tercera razón adicional para apoyar la libertad de prensa en términos del poder presidencial es que la mejor defensa de este, cuando ha sido obtenido legítimamente, está en todas las instituciones constitucionalmente establecidas del estado. El poder lo da el pueblo no directamente, sino a través de la Constitución, condicionado en el juramento de la presidencia al cumplimiento de ella. Sabiamente, la Constitución defiende la libertad de prensa. Subvertirla es subvertir la fuente misma de la legitimidad de la presidencia. Es abrir la puerta para los usurpadores. Sin la legitimidad de las instituciones, cualquiera puede usurpar el poder.La ReflexiónEstos son temas sobre los que el Presidente Nayib Bukele puede reflexionar ahora que sus primeros 100 días han terminado, con algunos resultados prometedores —como la reducción de los asesinatos y las desapariciones, como el nuevo ambiente positivo para la inversión y los negocios, como la reorientación positiva de la política exterior—, con algunos no tan prometedores y con una perspectiva ominosa: los ataques que han recibido la crítica, la oposición y la libertad de prensa en estos primeros 100 días. Estos ataques se han encarnado no sólo en la prohibición de entrada de dos medios opositores a una importante conferencia de prensa del Presidente sino también en la actitud agresiva contra cualquier persona que exprese aún dudas sobre lo que el Gobierno está haciendo.Los primeros 100 días no son determinantes. La presidencia Bukele todavía tiene frente a sí una página en blanco. Es crucial que vea su experiencia en estos primeros 100 días, acentúe sus éxitos, corrija sus errores y mantenga maduramente el mandato que legítimamente le ha dado la población, protegiendo los derechos de ésta y su propio derecho de conocer la realidad.
De “Falta muy grave” a reducir conductas no deseadas generando ingresos para el Estado.
“San Salvador, a los cuatro días del mes de mayo del año dos mildiez” se hace una reforma por medio del Decreto Legislativo No 326 que en su Art.2 se hace la adición al Art. 117 del numeral 102-A, correspondiente a lasinfracciones muy graves de la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y SeguridadVial de nuestro, esta adición ser refería a la siguiente infracción muy grave:“Conducir manipulando o haciendo uso de teléfono celular, radio decomunicación, agenda de cualquier clase, dispositivo o aparato electrónico, asícomo sosteniendo en las manos, dedos o llevando entre los brazos o sobre laspiernas a otra persona, animales o cualquier otro objeto o cosa, que dificulteel manejo, limite la visibilidad u ocasione o posibilite la distracción en elconductor.” El infringir esta disposición se multará por un valor de $57.14.Por un lado podemos decir que lo que busca esta disposición esdesincentivar una conducta no deseada ya que para el estado y en términos delas estadísticas de accidentes de transito un gran porcentaje de estos se debenpor las distracciones al volante, como es el caso de llamadas por celular ycualquier manipulación del mismo, lo cual se traduce muchas veces en gasto ycosto público para atender estos accidentes.He tenido la oportunidad de participar de varias actividades derecaudación de fondos en las calles de San Salvador y diariamente recorro granparte de San Salvador debido a la distancia de mi hogar al trabajo y viceversa,en los semáforos uno tiene tiempo para pensar y observar muchas cosas, enparticular me ha intrigado la cantidad de personas que hablan por celular almanejar y incluso manipulando sus celulares inteligentes(smartphones), en unade las actividades de recaudación fondos en la que participé hice un pequeñoejercicio en el cual al menos 4 de cada 10 personas hablaba por celularmientras pasaba por el semáforo de la intercepción del casino colonial enAntiguo Cuscatlán.Actualmente no contamos con un sistema lo suficientemente fuerte,eficiente y representativo de la policial de transito que pueda monitorear demanera permanente esta conducta. En este momento puede hacer todas susvaloraciones éticas pertinentes si es necesario tener al policía encima paradejar de hacer esa práctica no deseada, la situación actual todo indica que ungran porcentaje de los automovilistas sigue/seguimos haciendo esta malapráctica.Un cambio de enfoque para enfrentar el uso de celular mientras semaneja sería que se cree un dispositivo de registro de llamadas en conjunto conlas telefónicas, Viceministerio de Transporte y cualquier instituto detecnología local o en el extranjero. Este dispositivo de bajo permitiríaregistrar cualquier tipo de llamada entrante o saliente, mensajería, ocualquier tipo de envió de información desde un teléfono o dispositivo móvil todocon la finalidad de aplicarles un impuesto y que este impuesto se vea reflejadoen la factura de consumo telefónico. Los beneficios de este cambio de enfoquees que estamos tomando como base la realidad de tener una escasa estructura institucionaly de personal para velar por el cumplimiento de la disposición de no hablarmientras se maneja, y en segundo lugar que al taxar el uso del celular mientrasse conduce podría reducir considerablemente la conducta de hablar mientras seconduce, ya que el conductor tendrá claramente dos opciones: pagar el impuesto quese puede traducir en mas fondos para el sistema de salud, o la otra opciónsería parquearse y apagar el automotor para que el dispositivo electrónico deregistro de llamadas no le registre su llamada o envió de mensajería/datos.Este tipo de dispositivos vinculados a cobros por uso de algún servicio públicoo privado ya existe en otros países como en Chile en donde los automovilistaspara hacer uso de algunas carreteras privadas tienen que pagar por esteservicio, y el cobro se realiza por medio del control de un dispositivo electrónicoque registra las veces que uno ocupa esa carretera y esta factura llega a finalde mes a el hogar del conductor.Habría que resolver problemas técnicos como por ejemplo de cómohacer que el que no conduce no se le cobre el impuesto, aunque siendo rigurososen el análisis, cuando sucede un accidente y van personas acompañando alconductor las consecuencias las sufren todos, y por lo tanto el Estado invierteen todos los afectados por igual y nosolo en el conductor, por lo que no descartaría que todos los que abordan elvehiculo se sometan al registro de llamadas de este dispositivo electrónico.
El dinero perdido de las FARC
El archivo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) asedia al presidente de Ecuador, Rafael Correa, y ha puesto al rojo vivo las relaciones entre Bogotá y Quito. Primero los ordenadores de Raúl Reyes, número dos de la guerrilla; luego, un vídeo del Mono Jojoy, su jefe militar, y ahora un supuesto diario personal del propio Reyes dan cuenta de las relaciones clandestinas de la guerrilla con el equipo de Correa y la financiación de su campaña electoral en 2006.(lea el artículo completo en El País)
Un nuevo compromiso para El Salvador. Una propuesta a ARENA que no ha sido aprovechada
El siguiente es un documento que por razones fuera del control de sus autores ha sido manejado con mucha secretividad. Fue elaborado, entre enero y marzo del 2010, por un grupo de intelectuales convocados por Roberto Murray Meza: Luis Mario Rodríguez, Federico Hernández Aguilar, Salvador Samayoa, Claudia Cristiani y Paolo Luers. Ninguno de los seis integrantes estaba ejerciendo militancia activa en ARENA en este momento, tres de ellos jamás la habían tenido; dos más bien previenen de militancia en la izquierda.Los seis integrantes acordaron aceptar un reto político e intelectual difícil, pero fascinante: hacer al partido ARENA, en profunda crisis luego de la derrota electoral del 2009 y la subsiguiente separación de muchos de sus cuadros de dirección, una propuesta coherente de renovación de su ideario.En largas sesiones de trabajo, con discusiones muy complejas y extremadamente enriquecedoras, se llegó a escribir, editar y consensuar un documento que fue entregado a Alfredo Cristiani, con el propósito de servir como punto de arranque e instrumento catalizador (obviamente no como resultado) para el necesario debate que tenía que impulsar ARENA entre sus militantes y con la sociedad salvadoreña.Hasta la fecha, todos los autores del documento hemos respetado la confidencialidad del documento que entregamos a ARENA. Sin embargo, a la luz de la imperiosa necesidad que el debate interno de ARENA no se siga postergando, yo personalmente he tomado la decisión de publicar este documento. Este esfuerzo intelectual y político no puede cumplir su función si sigue en secreto y sin debate.Muchos de los conceptos plasmados en este documento necesitarán actualización o corrección a la luz de los últimos 5 años. Pero en el fondo, mantiene vigencia. Que sirva para el debate, para la renovación, para el relevo y para la apertura de ARENA. Cualquier partido que se renueva y se democratice es un aporte a la consolidación de la democracia del país. (Paolo Luers)Un nuevo compromiso para El SalvadorARENA vivirá y será un Partido fuerte mientras mantenga su audacia, su capacidad de renovarse, su compromiso con el bienestar de los salvadoreños y su decisión de impulsar las reformas económicas y políticas que el país necesita.Muchos piensan que la audacia más grande de ARENA fue haber asumido, en medio de la guerra, la defensa de la libertad pero el logro más audaz de ARENA fue otro: escuchar el clamor popular por la paz, terminar la guerra y encabezar la más profunda y democrática reforma de nuestro sistema político.Esta es la audacia que ARENA debe recuperar ahora. Y debe hacerlo reconociendo que después de encabezar durante más de 20 años la defensa de las libertades democráticas, la reconstrucción nacional y las reformas que posibilitaron un progreso sin precedentes en la calidad de vida de millones de salvadoreños, ARENA ha perdido en los últimos años mucho de la audacia de la capacidad de renovación que la convirtieron en la primera fuerza política del país.Es la hora de recuperar el orgullo de los areneros por todo lo que han aportado a la Patria, a la paz, a la democracia, a las libertades y al crecimiento económico del país, pero también es hora de mostrar la capacidad autocrítica necesaria para reconocer y superar los errores del pasado.Ante los peligros para la democracia, ARENA propone más democracia. Ante la crítica que el FMLN hace a la democracia representativa, proponiendo modelos autoritarios como los de Cuba y Venezuela, ARENA se compromete a reformar las instituciones democráticas para preservarlas y fortalecerlas.La reforma es la mejor defensa que podemos hacer de nuestro sistema de libertades y contra las amenazas autoritarias de la ‘derecha populista’ y del ‘Socialismo del Siglo XXI’. Por eso, ARENA se declara como el Partido que defiende las libertades públicas y promueve las reformas democráticas.DEMOCRACIA Y REFORMA POLÍTICAPoco más de 20 años han pasado ya, desde que ARENA alcanzó por primera vez el poder ejecutivo, mediante un proceso electoral que, si bien se dio con la guerra como telón de fondo, fue reconocido como un proceso limpio y ejemplar.Para El Salvador era de suma importancia que la guerrilla depusiera las armas y se integrara al sistema político fundamentado en la democracia representativa. Pero estábamos conscientes que nuestro modelo político necesitaba una reforma y un verdadero proceso de democratización, porque se había convertido en un modelo excluyente, fundamentado por décadas en la fuerza de las armas y en la restricción de las libertades públicas, una de las principales causas que originaron el enfrentamiento armado.Si bien es cierto que ya en 1983 habíamos iniciado nuestra participación en ese proceso de reforma, a través de la nueva Constitución Política, y que, producto de las elecciones de 1984, un civil había sido electo presidente, esta reforma no era completa y, aunado a la corrupción imperante en aquel primer gobierno civil, de facto, continuaba el predominio del poder militar.Para lograr la paz, había que profundizar el proceso de reforma de nuestro sistema político. Ese fue el objetivo del proceso de negociación auspiciado por las Naciones Unidas: lograr la paz, mediante el inicio de la más profunda reforma política que haya ocurrido en nuestra historia. Se trataba de re fundar la nación, en base al consenso, sobre el reconocimiento del derecho de todos a participar en la construcción de la misma. ARENA asumió este reto con audacia, a pesar de grandes riesgos, empecinadas resistencias muy arraigadas desconfianzas.El segundo gran desafío para ARENA era el cumplimiento de los Acuerdos de Paz: la creación de nuevas instituciones, la reducción de la Fuerza Armada y subordinación al poder civil, la reforma de las instituciones de seguridad pública, y la reconstrucción y recuperación de la economía.Pusimos fin a la guerra y creamos un sistema plural, al cual la izquierda se pudo insertar sin restricciones. Desde entonces, ARENA y el FMLN han venido librando una batalla política, en la cual dos visiones del mundo totalmente diferentes se han sometido al escrutinio de la voluntad popular. En cuatro ocasiones los salvadoreños votaron mayoritariamente por ARENA, lo cual produjo el más largo período de estabilidad democrática, paz y progreso de la historia del país.DESARROLLO ECONÓMICO Y DETERIORO INSTITUCIONALEn este período de estabilidad, bajo la responsabilidad de ARENA y, a pesar del boicot permanente del FMLN, se produjo una ampliación sin precedentes de las capas medias urbanas; se redujo la pobreza; se ordenaron las finanzas públicas; se mejoró significativamente la infraestructura; aumentó la oferta y mejoró la calidad de los servicios públicos, sobre todo las carreteras y caminos, y los servicios de salud y educación; hasta el punto de traducir su impacto en un considerable incremento del índice de desarrollo humano.Esos logros son innegables. Están a la vista de todos. Pero también se cometieron muchos errores. Hubo aspectos sociales del crecimiento económico a los que no se les dio la debida importancia. Uno de estos aspectos fue la desprotección del ciudadano ante instituciones y conglomerados empresariales que abusaron del régimen de libertades, castigando sistemáticamente a las familias de menores ingresos con injustos contratos de servicios, comisiones voraces y cobros indebidos. Además de la tolerancia del gobierno a los abusos empresariales, también contribuyó al sentimiento de frustración e indignación ciudadana el descuido de las instituciones del Estado y su evidente utilización al servicio de los que detentaban el poder. Este comportamiento, muy pronunciado en los últimos años, afectó gravemente la cultura de la legalidad hasta situar al país ante el riesgo de infiltración del crimen organizado en sectores decisivos de los tres Órganos del Estado.Ante tal situación, mucha gente comenzó a creer que ya era hora de un cambio en el gobierno, y este fue, sin duda, uno de los factores determinantes de nuestra derrota electoral.DERROTA ELECTORALUna derrota electoral no es una tragedia. No es, por sí misma, factor de división, motivo de vergüenza o desmoralización. Todos los partidos ganan y pierden elecciones. De eso se trata, precisamente, el juego político democrático. Los partidos pueden perder la confianza o la preferencia de los electores por razones de índole diversa.Las derrotas preocupantes, vergonzosas o desmoralizantes son las que se producen por cualquier forma o modalidad de autoritarismo o de corrupción, tanto en la dirección interna del Partido como en el ejercicio del poder gubernamental. ARENA no perdió ante el planteamiento del adversario. Perdió por el desempeño de sus propios dirigentes y por la desmotivación que ellos produjeron en amplios sectores de su base social. En ese sentido, la derrota electoral sufrida por ARENA debe motivar una profunda reflexión porque conlleva un juicio popular sobre el desempeño del Partido en el poder, pero también porque el partido ganador, el FMLN, aún y cuando llevó a un candidato fuera de sus filas, sigue siendo un partido marxista y simpatizante del antidemocrático proyecto bolivariano que impulsa desde Caracas Hugo Chávez.LA CRISIS QUE ESTAMOS SUPERANDOLa crisis de ARENA no comenzó con la derrota electoral, sino con la derrota de la democracia interna en años anteriores. Tampoco la crisis se agudizó con la salida del Partido del grupo que antes dominaba. Por el contrario, ahí empezó el proceso de superación de la crisis.Hay dos axiomas en política: el poder desgasta y el poder corrompe. Precisamente por ello es que existen pesos y contrapesos en un sistema democrático. Por ello es necesaria la rendición de cuentas. Durante el largo ejercicio del poder ARENA perdió mucho de su mística y ética de los primeros años, no combatió con suficiente fuerza escandalosos hechos de corrupción, y no hizo lo suficiente en otros temas importantes, como la profundización de la reforma política iniciada en 1992 y el fortalecimiento de la institucionalidad.La mancha en la conducción del PartidoEn el último quinquenio, ARENA llegó a un importante punto de inflexión: los dirigentes pasaron por encima de los mecanismos básicos de democracia interna en los que se asentaba la cohesión y la renovación permanente del partido. Este desvío de la tradición y de las buenas costumbres marcó una etapa de decadencia y de posterior derrota electoral. En ese período, la gestión del Partido y del gobierno se saturó de lemas publicitarios orientados a promocionar la falsa imagen de una ‘derecha popular’ para favorecer el continuismo de los dirigentes y justificar la total exclusión de sectores sociales y cuadros históricos del Partido. El desastroso manejo del proceso interno para seleccionar al candidato a la presidencia de la República terminó siendo el detonante final del proceso de desmoralización y descomposición que las estructuras del Partido ya venían sufriendo.El grupo que manejó ARENA lo entregó quebrado, con deudas millonarias, desmoralizado y con quintas columnas encargadas de minar el poder territorial del Partido con el cáncer de las intrigas y la compra de voluntades. La primera gran acción política de ese grupo, que por cinco años tomó el Partido, fue intentar dividir a la derecha, argumentando una falsa dicotomía entre ‘derecha popular’ y ‘derecha elitista’, mientras el verdadero conflicto se desarrollaba entre una derecha con ética y una derecha corrupta, entre sectores históricos genuinamente democráticos y sectores oportunistas.Sin embargo, debemos reconocer que todos los areneros tuvimos la responsabilidad de lo ocurrido en los últimos cinco años. Porque todos permitimos que un individuo y su grupo manejaran a su antojo el Partido y el Estado. Cometimos el error de caer en el chantaje frecuentemente utilizado por populistas de derecha cuando se ven amenazados por sus antípodas de izquierda: “los comunistas o yo, ustedes eligen”. Por temor de perder aceptamos tolerar toda clase de violaciones a los estatutos del Partido, la corrupción, el caudillismo. Al final, de todas formas perdimos las elecciones y además estuvimos a punto de perder el alma del Partido.La mancha en la conducción del gobiernoEl último gobierno de ARENA fue dominado por un grupo de amigos y compadres, que no rendían cuentas a nadie y que manejaron a su antojo las cuestiones de estado y del Partido. ARENA tiene que reconocer la escandalosa corrupción ocurrida en los últimos cinco años y el envilecimiento de las instituciones del país mediante la compra de voluntades.Y a pesar de todo, hicimos cosas buenasNo todo fue malo en el último gobierno de ARENA. Hubo gestiones importantes como la obtención de fondos de la “Cuenta del Milenio” para el desarrollo de la zona norte, el inicio del programa “Red Solidaria”, la creación de la Defensoría del Consumidor y de la Superintendencia de Competencia, el impulso de políticas sectoriales, particularmente en el rubro agropecuario, además de algún nivel de mejoría en servicios como FOSALUD. En este mismo plano general de beneficios a la población puede situarse la política de subsidios del último gobierno. Aunque tuvo errores importantes de focalización y puso en riesgo la estabilidad macroeconómica, fue una expresión de la sensibilidad social característica en los gobiernos de ARENA, ya que el subsidio a servicios esenciales como el agua, la energía eléctrica, el transporte y el gas propano, alivió en gran medida la situación de las familias más pobres. Pero eso era lo menos que se podía esperar de un cuarto gobierno de ARENA, que ya no tenía que lidiar con la guerra, la reconstrucción y la recuperación económica. MIRAR HACIA DELANTENo es suficiente reconocer los errores. Hay que crear los mecanismos necesarios para que no se repitan. Debemos construir y fortalecer la democracia interna de nuestro Partido. Debemos fortalecernos como derecha democrática frente a la derecha populista y debemos fortalecernos como derecha con ética frente a la derecha corrupta. Este es el verdadero contenido de la renovación actual de ARENA.ARENA debe salir lo más rápido posible de la situación negativa en la que se vio inmerso el Partido en los últimos meses. El primer paso es entender que los problemas no comenzaron con la derrota electoral, sino con el deterioro de la democracia interna años antes. Por tanto, para salir adelante, ARENA tiene que regresar a sus raíces y principios de alianza, republicanismo y pluralidad interna.Debemos mirar hacia delante. Los que siempre han querido destruir el sistema democrático están envalentonados y hablan ya de cambiar los artículos pétreos de la Constitución y promueven la ‘democracia directa’ y plebiscitaria, siguiendo fielmente el guión escrito en Venezuela.Hay mucho trabajo por hacer. El Partido no puede perder un solo día más en un debate estéril con los oportunistas. Hay que echar mano ya a la renovación y el fortalecimiento, no sólo del Partido, sino de la oposición democrática en su conjunto.ARENA debe renovar su forma de relacionarse con la gente, modernizar su estilo de trabajo, recuperar la mística, y abrir las puertas a todos aquellos patriotas identificados con la democracia representativa como único sistema que garantiza las libertades y el desarrollo económico. ARENA, UN PARTIDO LIBERALARENA es un partido liberal en el sentido más clásico de la palabra, no como una ideología cerrada, sino como una forma de ver y vivir la vida. Confiamos en la libertad. Ponemos por encima de todo a la persona humana y su dignidad. Ponemos al Estado en función de las personas y no las personas en función de un todopoderoso Estado.Apostamos por el imperio de la ley y por la libertad económica. La historia ha demostrado que donde más dinámica y libre es la economía, es donde hay menos pobres. Sólo los individuos libres son capaces de desarrollar plenamente sus facultades creativas y esforzarse por alcanzar su propio bienestar. En ese esfuerzo toda la sociedad sale beneficiada. El Estado debe garantizar la equiparación de oportunidades y debe ocuparse de aquellos que no pueden valerse por si mismos.Si los que estamos dispuestos a defender y desarrollar el sistema democrático y la economía social de mercado nos unimos, construyendo un Partido con auténtica democracia y pluralidad interna, podemos llevar nuevamente a El Salvador al sendero de la sensatez, el crecimiento y el desarrollo humano.Declarar ARENA un partido liberal no significa que abandonamos nuestras raíces históricas. El liberalismo siempre ha sido la motivación que sustenta su lucha por las libertades y en contra del autoritarismo en cualquiera de sus manifestaciones. ARENA seguirá siendo Republicano, porque seguirá dispuesto a defender el sistema de democracia representativa. ARENA seguirá siendo Nacionalista, porque siempre pondrá el interés de la nación y de la Patria encima de cualquier forma de interés particular. Y ARENA sigue siendo Alianza porque está constituida por diversos sectores que son expresión de todos los componentes de la sociedad y que tienen participación y representación orgánica en las estructuras del Partido. Esto hará funcionar a plenitud el pluralismo interno y aspira a la unidad basada en el respeto a nuestra diversidad y el interés común de la nación.ARENA no es un Partido conservador, porque está comprometido con la reforma como instrumento mediante el cual las sociedades se adaptan a nuevas realidades y necesidades. ARENA es el Partido que promoverá la reforma política, institucional y social como mecanismo para oponerse a los que quieren obviar nuestro legítimo derecho a la libertad, cambiar el sistema democrático representativo que es nuestra garantía para la defensa de la pluralidad y sustituir nuestra economía social de mercado por cualquier alternativa que lleve a más pobreza y miseria. TAREAS Y COMPROMISOSRECUPERAR LA VITALIDAD Y LA MÍSTICALa primera exigencia del momento actual es sacudirnos la modorra, recuperar la vitalidad, el entusiasmo, la mística, el compromiso y, sobre todo, la disponibilidad para trabajar por el fortalecimiento del Partido en todos los niveles, en todos los sectores, en todo el territorio nacional. Si los cuadros y los militantes no ofrecen su tiempo, su capacidad y su esfuerzo, no podremos salir adelante. A los dirigentes les corresponde incentivar la participación y canalizar la energía, pero la energía debe desatarse en las bases, especialmente entre los jóvenes, para volver a ser un Partido rebosante de vitalidad.Ya pasó la hora de los lamentos. Ya pasó el momento en que algunos se sentaron a esperar, a ver cómo se resolvía la pugna interna del Partido. Es hora de trabajar. El que tenga críticas que las haga, pero con ánimo constructivo, con lealtad y ganando con su trabajo el derecho de hacerlas.RECUPERAR LA UNIDAD DEL PARTIDODebemos recuperar la vida partidaria institucionalizando internamente la democracia y el pluralismo. Sólo así podemos poner fin al divisionismo en nuestras filas y a la escandalosa compra de voluntades en las estructuras territoriales. Por eso decimos: El antídoto a la erosión de la democracia es más democracia. El antídoto al divisionismo es regresar al principio de nuestros fundadores: la alianza de sectores que no es más ni menos que el pluralismo interno.DEFENDER LA DEMOCRACIA Y EL SISTEMA DE LIBERTADESNuestro Partido debe construir una alianza nacional para defender la Constitución de la República como garante de la democracia representativa y el sistema de libertades. Para esto, ARENA debe abrirse hacia todas las fuerzas democráticas, incluyendo las del centro y las de la izquierda democrática, como democratacristianos, socialcristianos, y socialdemócratas. ARENA debe luchar y lograr que todos los partidos políticos y fuerzas vivas de la nación se comprometan de una vez por todas a respetar el sistema de libertades, la Constitución, el sistema democrático y el Estado de Derecho. Sobre estas bases firmes e innegociables, los partidos debemos continuar profundizando la reforma política que iniciamos en 1992 con los Acuerdos de Paz para hacer de nuestro país una nación cada vez más justa, más libre y más próspera.Nuestro Partido está llamado a impulsar y liderar ese esfuerzo. Para ello es clave que un bloque democrático liderado por ARENA logre la victoria electoral en las elecciones parlamentarias del 2012 y en las presidenciales del 2014. Sólo de esa manera se abrirá la posibilidad de que nuestros adversarios, hoy en el poder, pasen a la oposición nuevamente y se vean obligados a revisar a fondo sus dogmas marxistas y renunciar a sus ilusiones totalitarias.REGRESAR A LA CONTIENDA ELECTORALARENA debe afinar las estrategias para las próximas batallas electorales, lo que implica dos tareas paralelas: comenzar de inmediato un trabajo territorial intenso para fortalecer a nuestro Partido y, al mismo tiempo, sentar las bases para alianzas amplias y fuertes con todas las fuerzas dispuestas a defender nuestro sistema republicano de democracia representativa y nuestra sistema de economía social de mercado.Para ambas tareas debemos abrir los espacios a los nuevos liderazgos que garantizarán que nuestro Partido sea unido, plural y capaz de asumir su rol de motor de las reformas políticas y sociales que necesita el país.En política, los grandes retos y el trabajo concreto constituyen el verdadero crisol en el que se depuran las ideas y se forja el carácter y el valor de los dirigentes y de los militantes. ARENA debe plantearse desde ahora, sin vacilación, el reto de ganar las elecciones de 2012. Este desafío será determinante para recuperar la vitalidad y la unidad del partido.FORTALECER LAS CAPACIDADES DE LOS MUNICIPIOSDebemos fortalecer las municipalidades en su institucionalidad y en su capacidad de responder a las necesidades de la población. Sólo así podremos contrarrestar la estrategia del FMLN de establecer desde los diferentes ministerios gubernamentales ‘comités populares’ o ‘comités de barrio o cantón’ controlados por el partido comunista, que solo sirven de base para la llamada ‘democracia directa’. Esta no es otra cosa que un aparato territorial de control político a través del cual se sostendrá la represión política que indudablemente impondrán si completan su asalto al poder.DETENER EL SECUESTRO DE LAS INSTITUCIONES DEL ESTADODebemos ejercer un papel vigilante ante la estrategia del FMLN de tomar control de las instituciones del Estado –como la Policía Nacional Civil, los sistemas de salud y educación, el Ministerio de Gobernación, la Dirección de Protección Civil y otras entidades públicas– con el fin de establecer un poder partidario paralelo al del gobierno actual y al de cualquier futuro gobierno que no sirva incondicionalmente a sus intereses. RECUPERAR LA CONFIANZA EN EL SISTEMA DEMOCRÁTICO Las constantes amenazas y los falsos análisis que hace el FMLN en contra del sistema democrático para desprestigiarlo y justificar la construcción de un Estado totalitario y represivo, encuentran eco en todos los que no perciben mejoras en su calidad de vida. Sin embargo, si bien es cierto que existen carencias importantes que no han sido resueltas, debemos afirmar con mucha convicción que la dificultad para superarlas no es atribuible al sistema democrático, sino a nuestra falta de voluntad para mejorarlo y utilizarlo adecuadamente.En ese sentido, debemos tener la claridad política necesaria para reconocer que, a pesar de ser todavía imperfecto y susceptible de manipulación, no nos hemos equivocado de sistema y que este ha dado frutos innegables a nuestro país. La tarea pendiente no es sustituirlo por otro, sino retomar el camino de su construcción y fortalecimiento a través de la reforma política permanente y visionaria, para hacerlo cada vez más efectivo y más justo. Así podremos validar nuestro compromiso de ser el Partido que defiende las libertades públicas y promueve las reformas democráticas. Habiendo aprendido las lecciones de su paso por el gobierno y por la oposición, ARENA deberá centrar su mensaje a la nación en la erradicación de la delincuencia criminal; la erradicación de los factores económicos y sociales que producen inseguridad; el combate frontal y ejemplar contra la corrupción en las estructuras del Estado; el repudio a los pactos oscuros que permiten que grupos de interés se apoderen de instituciones del Estado; la prohibición del uso de fondos discrecionales sin su debida rendición de cuentas por parte de la presidencia de la República; la transparencia sin excusas de la gestión gubernamental; y la realización de una reforma electoral profunda que dé a los ciudadanos el pleno derecho de elegir a los diputados de su preferencia en vez de ratificar planillas partidarias.Para lograr estos objetivos, ARENA debe proponer una Asamblea Legislativa y un gobierno con los mejores hombres y mujeres de El Salvador, pero de verdad, no como el presidente de los rojos, que hizo una promesa parecida y terminó nombrando el peor gabinete de gobierno de la historia de El Salvador. ARENA debe asegurar un gobierno que devuelva en obras de beneficio los impuestos que pagan los salvadoreños. Los salvadoreños no pueden seguir pagando triples impuestos por su seguridad: al Estado, a los servicios privados de seguridad, y a los delincuentes. Los servicios de salud del Estado deben buscar la excelencia y dejar de ser el coto de organizaciones políticas disfrazadas de gremios y sindicatos. Las calles, avenidas y carreteras del país deben mantenerse en perfecto estado. En su próximo gobierno ARENA debe completar totalmente la electrificación del país y hacer las inversiones para proveer la seguridad energética que necesita el desarrollo nacional. La calidad y la distribución del agua potable deben mejorar y la educación de muy buena calidad debe estar realmente disponible para todos los salvadoreños. Sobre todo, el Estado debe crear un clima propicio para que el capital nacional y externo invierta en El Salvador creando puestos de trabajo. Para ello, el Estado debe garantizar a los inversionistas transparencia, seguridad pública, seguridad jurídica y políticas públicas claras y previsibles.Para lograr todo ello, los salvadoreños debemos lograr un pacto fiscal basado en la transparencia, la eficiencia en la gestión gubernamental, la rendición de cuentas y la disposición de todos los sectores a financiar el desarrollo del país. Esta reforma fiscal tiene que simplificar el sistema tributario para hacer posible su aplicación a los sectores actualmente informales de la economía.SUPERAR LA POLARIZACIÓN, PROMOVER EL DIALOGO Y BUSCAR EL CONSENSOARENA debe buscar el dialogo permanente con toda la sociedad, incluyendo sus adversarios políticos, para buscar los entendimientos que sean necesarios a fin de mejorar la calidad de vida de todos los salvadoreños. Una vez puesto a prueba el sistema con la alternancia en el poder, ya no habrá espacios para la protesta violenta, las acciones ilegales y el vandalismo como forma de expresión y extorsión política. ARENA no ha sido ni debe ser nunca un partido miope o mezquino. Cuando ha sido necesario, ha asumido con vigor la confrontación política, y lo seguirá haciendo cada vez que sea necesaria la defensa de valores y principios inclaudicables. Pero nuestro Partido entiende la política como una negociación permanente con todas las fuerzas vivas, en la que siempre tiene que haber concesiones de todos, sin que por ello se sacrifique en lo más mínimo el sistema de libertades, la democracia y el Estado de Derecho. ERRADICAR LA POBREZAARENA reafirma su compromiso con la erradicación de la pobreza como mandato primordial del Estado, de los partidos políticos y de todos los miembros de la sociedad. No podemos hablar de desarrollo ni de justicia si no erradicamos la pobreza. Debemos comenzar por la pobreza económica, pero no podemos dejar a un lado las otras dimensiones de la pobreza. La pobreza económica no podrá superarse de forma sostenida si no erradicamos su principal sustento: la marginación. Nadie puede negar que el único sistema que ha comprobado ser eficaz y eficiente para la creación de riqueza, es aquel que se desarrolla en un marco de libertad económica. ARENA no debe vacilar en la defensa de este marco. Así mismo, ARENA debe contribuir de forma permanente al mejoramiento y democratización de las condiciones jurídicas y sociales que hacen su funcionamiento posible. El desarrollo económico requiere que todos podamos apelar a la seguridad jurídica contra las arbitrariedades, los abusos y la corrupción. También requiere que dispongamos de seguridad física. La erradicación de la pobreza no puede disociarse del combate a la delincuencia común y el crimen organizado.A la derecha se le reconoce siempre su eficacia en la creación de riqueza, pero se le acusa de no poner el mismo empeño en la superación de la pobreza. Esta acusación no es del todo cierta, pero cuando el río suena es porque lleva piedras. Ahora nos corresponde asumir el combate a la pobreza con la misma responsabilidad y seriedad con que asumimos la creación de riqueza. El día que aprendamos a hacer bien las dos cosas seremos invencibles y el pueblo no se detendrá ni un instante a escuchar mentiras y promesas de falsos redentores.DEFENDER AL CIUDADANO ARENA entiende que en las sociedades modernas no solo el Estado y sus instituciones pueden cometer abusos contra los ciudadanos. Si no hay claras políticas públicas de regulación y supervisión, los individuos y grupos empresariales, tanto los grandes como los pequeños, también pueden caer en la tentación de abusar de las personas más indefensas. Para evitar estos abusos, y siendo consecuentes con nuestro principio que reconoce al ser humano como objetivo primordial de cualquier sociedad; ARENA defenderá, implementará y hará efectivos los mecanismos que, respetando el Estado de Derecho y la libertad económica, garanticen la protección de los ciudadanos contra los abusos de cualquier índole. Y nos referimos con exactitud a abusos de cualquier índole, porque no se trata solo de los que sufrimos como consumidores. Sufrimos abusos y vejaciones intolerables también como vecinos, como transeúntes y como peatones. ¿A quién no le ha instalado un pequeño o gran empresario, porque le da su santa y real gana, un taller o un camión en la entrada de su colonia, sin importarle en lo más mínimo el perjuicio a los vecinos? Y sufrimos también abusos como ciudadanos que deben gozar de todos los derechos que prescribe la ley, comenzando por el derecho a que no nos roben y no nos mientan los funcionarios y los empleados públicos.ARENA no debe confundir los intereses de algunas empresas con el desarrollo económico del país. El desarrollo económico debe sustentarse siempre en la libertad creativa de los individuos y reconocemos que el impacto del esfuerzo de las empresas y empresarios que las lideran sostienen la creación de la riqueza nacional, pero el desarrollo económico también debe sustentarse siempre en la dignidad y derechos de todos los ciudadanos. Así como lucharemos contra el chantaje político, así también lucharemos contra el chantaje económico. ARENA, UN PARTIDO VERDEEl desarrollo ecológicamente sostenible es una deuda que ARENA tiene con la nación. Luego de haber entendido y comprobado plenamente que tanto los modelos del capitalismo salvaje como los modelos socialistas sólo arruinan y dañan de manera profunda el medio ambiente, ARENA establecerá un claro compromiso con la recuperación y protección de nuestros recursos naturales. El quinquenio que marque el regreso de ARENA al poder deberá ser el de la descontaminación de la mayoría de nuestros ríos y lagos, la recuperación de nuestros bosques y la limpieza de nuestro aire. Esto no se logra con discursos, sino con inversiones estratégicas. Ello será de alta prioridad para el nuevo gobierno de ARENA.En muchos países han surgido partidos verdes, debido a que los partidos tradicionales no han reaccionado a los retos ecológicos. En El Salvador, ARENA acepta este reto y se convertirá en el partido verde que sepa conciliar economía y ecología, desarrollo y defensa del medio ambiente.LA ÉTICA EN LA POLÍTICAARENA asume un renovado compromiso con la ética como elemento central de su renovación y fortalecimiento. La ética no sólo como compromiso de trabajar apegados a la ley, sino como compromiso de ir más allá de lo que exige la ley. Todas las leyes son susceptibles de interpretación y pueden ser manipuladas para justificar actos que son cuestionables, aunque sean legales Por eso debemos aspirar más alto. Este compromiso no sólo obliga a ARENA a trabajar por una sociedad en la que impera la ley, y por un Estado que la hace valer sin excepciones. Este compromiso nos obliga a actuar en nuestra vida privada y en nuestra vida pública con apego a valores y a rigurosos criterios de honestidad, responsabilidad, justicia, solidaridad, transparencia y decencia, más allá de lo que la ley prohíbe o permite.En este sentido, como una consecuencia de nuestro compromiso con la ética, hablamos y nos comprometemos con la democratización y con el ejercicio del pluralismo al interior de nuestras filas, pero también nos comprometemos con la rendición de cuentas, no solo ante nosotros mismos sino ante la sociedad entera. En igual sentido hablamos y nos comprometemos con la defensa de los ciudadanos contra los abusos de cualquier tipo y a cualquier nivel; con la protección del medio ambiente; con el combate a la delincuencia y, sobre todo, con la lucha contra la corrupción en todas sus formas y manifestaciones. ARENA debe colaborar de manera permanente en la construcción de una cultura de legalidad, que empieza con el respeto a las leyes de tránsito y llega hasta el rompimiento con la impunidad de políticos y empresarios que se alían con el crimen común y organizado. La ética, como la ley, o es para todos igual o pierde vigencia.MANOS A LA OBRAAnclados firmemente en estos principios y compromisos, ahora ARENA tiene que terminar la tarea de renovar y fortalecer el partido. A partir de ahí, ¡manos a la obra de asumir nuestro rol de defensa de nuestro sistema democrático y de la economía social de mercado! Si esta defensa requiere que asumamos nuestro papel de oposición, ARENA sabrá luchar. Si esta defensa requiere que asumamos nuestro papel de construir gobernabilidad, ARENA sabrá negociar y concertar. Pero nuestra tarea a largo plazo no sólo es defender el sistema, sino mejorarlo a través de reformas políticas y mediante la construcción de estabilidad y crecimiento. Para esto es indispensable que, junto con las alianzas que sepamos construir, ganemos las siguientes elecciones y volvamos a asumir el compromiso de conducir el país.(Marzo 2010) Lea el único artículo que se ha escrito sobre el documento: http://www.elfaro.net/es/201008/noticias/2314/
José Luis Merino o "Ramiro"
SAN SALVADOR, El Salvador -- Messages in the computer of a Colombian guerrilla leader suggest Jose Luis Merino, a senior figure in El Salvador's main opposition party and a supporter of Venezuela's Hugo Chavez, may have helped the guerrillas try to procure weapons for use in their battle to overthrow the Colombian government.Emails found in the computer of Raul Reyes after he was killed by Colombian forces in March say someone in El Salvador code named "Ramiro" helped the Revolutionary Armed Forces of Colombia, or the FARC, contact two Australian arms dealers.Senior Colombian, Salvadoran and U.S. officials say the Ramiro cited in the emails is Mr. Merino. During El Salvador's civil war in the 1980s, Mr. Merino led the Communist Party's guerrilla contingent and was known by his nom de guerre, Ramiro Vasquez. In El Salvador, Mr. Merino is still known as Ramiro.Mr. Merino, 55 years old, is considered the dominant force in the Farabundo Marti National Liberation Front, or FMLN, a party that evolved from the Marxist guerrilla groups that battled the U.S.-backed El Salvador government for more than a decade in one of the world's bloodiest Cold War battlegrounds.Mr. Merino, who has given only a handful of interviews in his political career, declined to comment. Mauricio Funes, the FMLN candidate in the March 2009 presidential elections, said Mr. Merino had assured him he had nothing to do with the FARC, which is considered a terrorist group by the U.S. and the European Union. "There is no reason why I shouldn't believe him," said Mr. Funes, a former news broadcaster who is leading in opinion polls against the candidate of the ruling right-wing Arena party.Mr. Merino has also forged an alliance with Venezuelan President Chavez, whose ambition is to add El Salvador to a bloc of Latin American countries -- Bolivia, Ecuador and Nicaragua -- that view Washington with suspicion and are tightly allied with Caracas.In 2005, Mr. Merino told the online newspaper El Faro that El Salvador should model itself after Mr. Chavez's Venezuela. He spoke with longing about the vanished Soviet Union, which he called "one of the most just" political systems on earth.In 2006, Mr. Merino helped negotiate a deal with Mr. Chavez under which mayors from the FMLN in El Salvador get cut-rate diesel from Venezuela's state oil company. The deal allows the FMLN, which now sells about 20% of the diesel fuel sold in the country, to sell the fuel at 30 cents a gallon less than other dealers -- and possibly win the hearts of voters.U.S. and Salvadoran officials say they fear the deal also provides the FMLN with cash it can plough into the 2009 election. In February, U.S. Director of National Intelligence Michael McConnell warned Congress that Mr. Chavez will provide "generous campaign funding" to the FMLN this year."Chavez . . . sees the potential of an FMLN win as an important step forward," a senior U.S. official said. An increase in Mr. Chavez's regional influence would be a setback for the U.S., since Mr. Chavez opposes free markets and is urging the region to turn its back on the U.S.Since March, intelligence analysts in Colombia and elsewhere have been poring over the thousands of documents recovered from the late Mr. Reyes's computers. The documents indicate a wide network of support for the guerrillas and a close alliance between the FARC and Mr. Chavez, who emails indicate offered the FARC money, arms and diplomatic support. At first, Mr. Chavez said the documents were fabrications, but he soon changed his rhetoric and called on the guerrillas to disarm. Interpol and U.S. intelligence services said the documents are genuine.The FARC computer documents, reviewed by The Wall Street Journal, include an email written in September by Ivan Marquez, the guerrillas' main contact with the Venezuelan government. In the email, Mr. Marquez says he met two Australian arms dealers "thanks to Ramiro (Salvador).""The friends of Ramiro," writes Mr. Marquez, "have everything we need at very favorable prices: rifles, PKM machine guns, Russian Drugunovs with sights for snipers . . . and missiles. Everything Russian and Chinese made. . . . They have a thermobaric grenade that destroys everything in closed spaces, (like the bombs the gringos use against al Qaeda hiding places) for $800." Also available, according to the email: the latest Chinese ground-to-air missiles, at $93,000 each.It is unclear whether the weapons deal, which was to have gone through Venezuela, was consummated. The email did not name the Australian dealers.The documents could complicate the FMLN's campaign to convince voters it has left behind its violent past. Already the governing Arena party has seized on the issue, which came to light shortly after the computer was found in March."We are worried about the FMLN's involvement in the arms trade," El Salvador President Tony Saca said in an interview. "We are talking about the most important person in that party," he said, referring to Mr. Merino. El Salvador's attorney general is probing the allegations, he said.Mr. Merino, the son of a farm foreman, joined the Communist Party's youth wing, studied intelligence at an elite Soviet military academy and guerrilla warfare in Cuba, former guerrillas say. During the war, the Russian-speaking Mr. Merino fielded some 400 fighters on volcano slopes near the capital. There, he demonstrated his penchant for secrecy. When a television news crew showed up in 1991, Mr. Merino sent a lieutenant to play the role of commander while he looked on a short distance away, a former guerrilla recalls.Mr. Merino also commanded urban cells that carried out assassinations and kidnappings of high-level Salvadoran officials, according to other guerrillas and former Salvadoran security officials. The guerrillas demobilized after a 1992 peace deal, ending a war that claimed more than 75,000 lives. But the Communist Party kept Mr. Merino's network of safe houses intact and continued to kidnap for ransom, intelligence officials and former guerrillas say.In 1995, kidnappers grabbed 15-year-old Andres Suster, the son of a prominent businessman, and kept him in a tiny underground chamber for 354 days before his father secured his release by paying a $150,000 ransom. Raul Granillo, Mr. Merino's top lieutenant during the war, was convicted in absentia for that kidnapping as well as two others.According to Salvadoran intelligence reports and former security officials, El Salvador's security agencies have believed since then that Mr. Merino was one of the masterminds behind the abductions. He was never charged. Former officials involved in the investigation say the probe was stymied by pro-FMLN judges. A witness was murdered days after agreeing to testify against FMLN leaders, the officials say.Over the years, Mr. Merino apparently kept contact with the FARC, emails indicate. Mr. Reyes recounts a visit in 2005 from Ramiro, who boasts that he has gained full control of the FMLN and reoriented the party to "the conquest of real power."Emails indicate the two organizations were pursuing joint ventures. A 2003 email from Mr. Reyes appears to propose a joint kidnapping operation in Panama, to fund the FMLN's 2004 presidential campaign. "We can suggest they gather intelligence on an economic target in Panama for 10 or 20 million dollars that we can do jointly and split the profits down the middle," the email says. There is no record of such a kidnapping taking place at the time.A 2004 email written by an unknown FARC official tells of a meeting in Caracas with Ramiro and a Belgian associate about the possibility of the FMLN and the FARC obtaining, through front companies, Venezuelan government contracts in areas including waste management and tourism. "We agreed to split the profits, between . . . FMLN, the Belgians, and us," the FARC official wrote.In El Salvador, intelligence officials say, Mr. Merino oversees Capsa, a company that operates the country's second-largest landfill and has garbage-removal contracts with 52 municipalities. The officials say Capsa is used to generate revenue for the FMLN's political campaigns.Capsa's director is Mr. Merino's half-brother, Sigfredo Merino, 40. The younger Merino said his brother isn't involved with Capsa and the business does not fund the FMLN.Orlando Mena, the mayor of Santa Ana, El Salvador's second-largest city, disagrees. Mr. Mena says Jose Luis Merino sought him out in 2003, when the mayor was a member of the FMLN, to renew Santa Ana's $1 million garbage contract. "He said 15% would go to the FMLN," Mr. Mena says. "He told me it was the municipality's contribution to the party."Mr. Mena did not renew. Shortly after, he was drummed out of the party. "In the FMLN, they do what Ramiro says," Mr. Mena says.(The Wall Street Journal, 28 August 2008).
Doce mitos de la guerra contra el narco
Una nube de mitos flota alrededor de la guerra de mayor impacto político en la últimas décadas:desde aquellos que dictan que no se debió confrontar al crimen organizado, hasta aquellos que indican que la participación del ejército en las actividades antinarcóticos es negativa. En estas páginas Joaquín Villalobos desmonta los argumentos de una mitología que impacta en la opinión a partir de estadísticas pobres y comparaciones discutibles Desde la Revolución de 1910 México no había conocido una violencia con tanto impacto político como la que vive actualmente. A finales de la década de los ochenta Estados Unidos tuvo éxito en reducir el volumen de droga que se movía por la ruta Caribe desde Colombia a Miami. Esta ruta permitía a los cárteles colombianos exportar mariguana y cocaína directo a Estados Unidos, sin intermediarios. México pasó así a ser el territorio más importante para el tránsito de drogas hacia la Unión Americana y se produjo una expansión del narcotráfico, que rompió con el largo periodo de paz en que habían vivido los mexicanos.Entender, debatir y estar dispuestos a pagar los costos que implica reducir el poder del crimen organizado y frenar su violencia, todo ello bajo condiciones democráticas, es algo nuevo para una sociedad acostumbrada a la poca deliberación y al orden impuesto desde arriba que vivió México durante varias décadas. Esta condición histórica ha creado dificultades para entender la información y los resultados de la guerra que está librando el Estado mexicano contra los narcotraficantes, y ello ha dado lugar al surgimiento de mitos sobre la guerra y la violencia. Algunos de estos mitos resultan del indispensable y justo debate político democrático. Sin embargo, aunque se trata de un problema complejo que requerirá tiempo para ponerlo bajo control, no hay razones para ser pesimistas.1. “No se debió confrontar al crimen organizado” Cuando la violencia comenzó a crecer por la guerra entre cárteles, el gobierno del presidente Fox dio inicio a la intervención de fuerzas federales en los primeros estados que tenían problemas (Tamaulipas, Guerrero, etcétera). Frente al agravamiento de la violencia en otros estados el gobierno del presidente Calderón decidió combatir frontalmente al narcotráfico y dio continuidad a la intervención federal. Surgieron entonces críticas sobre falta de inteligencia previa, se calificó de reactivas las operaciones e incluso se dijo que el gobierno actuaba por interés político y que las operaciones gubernamentales habían empeorado el problema. Algunos consideraban que lo mejor era tapar los efectos mediáticos de la violencia y dejar que todo continuara manejado por supuestos “acuerdos locales”. Sin embargo, esos “acuerdos” no eran entre iguales, sino entre criminales y funcionarios intimidados por la ley de “plata o plomo” que estaba dejando policías asesinados y presidentes municipales y gobernadores atemorizados. La idea de no combatir de frente al narcotráfico supone, ingenuamente, que éste no es contagioso ni expansivo, y que no alcanzaría al Distrito Federal. La realidad es que una de las primeras batallas ha sido recuperar el aeropuerto de ciudad de México que para los narcos es tan importante como Nuevo Laredo o Ciudad Juárez.México está atrapado entre el mayor consumidor de drogas del mundo, al norte, y la región más violenta del mundo (Guatemala, Honduras y El Salvador), al sur, a consecuencia del tráfico de drogas. Por lo tanto, resulta muy difícil pensar que es posible aislarse, abstraerse del problema y suponer que no pasaría nada. El narcotráfico es un delito global que está extendiéndose en casi toda América Latina, afectando también a Europa del Este, al norte de África y algunas regiones de Asia. El crecimiento de las clases medias urbanas y el aumento del consumo de drogas están directamente relacionados, no hay una razón sólida para que las clases medias mexicanas puedan ser excluidas del incremento en el consumo, algo que ya está afectando seriamente a Brasil. No hacer nada podría haber llevado a México a una situación similar a la que enfrentó Colombia a finales de los ochenta. Son muchos los ciudadanos y funcionarios colombianos que aceptan, abiertamente, que la situación en su país “tocó fondo” porque esperaron demasiado tiempo para actuar.El nivel de violencia actual en México deja bien claro que el monstruo era real, fuerte y peligroso. Ante un escenario así hay dos principios fundamentales para actuar: determinación y velocidad. Determinación para no retroceder frente a la reacción violenta de los cárteles y frente al temor que se abriría en la sociedad; y velocidad para contener y recuperar terreno. En realidad no hacía falta inteligencia previa, los cárteles actuaban en las calles con una impunidad cínica. El primer paso era quitarles ventajas, tranquilidad y oportunidades a sus “negocios”, se habían abierto tanto que la presencia de fuerzas federales en el terreno produciría resultados inmediatos, tal como ha ocurrido. En una primera fase lo masivo debía privar sobre lo cualitativo. Ahora se están abriendo retos más complejos como la reconstrucción policial y el componente social de la estrategia, pero sin ganarle terreno a los cárteles no puede pensarse ni en la reconstrucción de instituciones ni en planes integrales. Es necesario actuar para hacer transitar al narcotráfico de amenaza a la seguridad nacional a un problema policial.2. “México está colombianizado y en peligro de ser un Estado fallido”Estas afirmaciones se realizan sin usar datos comparativos serios. México sufre una violencia localizada en seis de sus 32 estados y tiene una tasa nacional de 10 homicidios por cada 100 mil habitantes. Venezuela tiene 48, Colombia 37, Brasil 25, Guatemala, Honduras y El Salvador están arriba de 50. El estado de Chihuahua, el más violento de México, está en este momento en su punto más álgido con una tasa de 143 homicidios, le siguen Sinaloa con 80, Durango con 49, Baja California 44 y Michoacán 25. A inicios de los noventa Medellín, la ciudad más violenta de Colombia, mantuvo una tasa de 320 durante varios años y, en ese mismo periodo, Cali tenía 124, Cúcuta 105 y Bogotá, la capital, 80. Colombia ha vivido dos guerras en 25 años, las cuales le han costado más de 200 mil muertos y dos millones de desplazados, y continúa en conflicto.El volumen, extensión, raíces históricas, códigos culturales y complejidad de la violencia colombiana ha sido —y todavía es— muy superior a la que vive México. En Colombia los niveles de penetración que alcanzó el narcotráfico en la política, el ejército, la policía, los negocios y la sociedad fueron mayores a los que existen actualmente en México, donde no se puede hablar de una narcopolítica. Los cárteles y narcoguerrillas colombianas golpearon con actos terroristas a personajes e instituciones de los poderes políticos, económicos y mediáticos vitales del país. En 1989 Luis Carlos Galán, candidato a la presidencia, fue asesinado por el narcotráfico y tres candidatos más fueron asesinados en ese periodo. El propio presidente, Álvaro Uribe, ha sobrevivido a varios atentados y el vicepresidente, Francisco Santos, estuvo secuestrado por Pablo Escobar. Hechos como éstos no han ocurrido y es muy difícil que ocurran en México, donde no han existido territorios con ausencia de Estado durante 40 años como en Colombia; el Estado mexicano ha sido más bien omnipresente y fuerte y el colombiano ausente y débil.En Río de Janeiro, Brasil, de enero a junio de 2009 murieron 65 policías en enfrentamientos con criminales y su tasa de homicidios es de 38 por cada 100 mil habitantes; recientemente los narcotraficantes derribaron en combate un helicóptero policial en barrios del norte de la ciudad y murieron 12 policías. En 2006 Sao Paulo sufrió ataques simultáneos a puestos policiales, oficinas de gobierno y puntos de interés económico por parte de las pandillas dedicadas al narcomenudeo. El Distrito Federal, en contraste, tiene una tasa de sólo cinco homicidios por cada 100 mil habitantes y jamás han ocurrido hechos tan graves como los de las ciudades de Colombia o Brasil. México tiene un problema de seguridad en la periferia de sus centros vitales y Brasil lo tiene, y muy grave, en sus dos principales ciudades: Río Janeiro y Sao Paulo. Sin embargo, Río será sede de los Juegos Olímpicos y no se dice que allí hay una guerra o que Brasil pueda ser un Estado fallido. Si la idea de territorios fuera de control del Estado se empleara mecánicamente para definir Estados fallidos, habría más de una decena de éstos en el continente americano y tendría, incluso, que revisarse cuál sería la condición de algunas zonas de ciudades estadunidenses que albergan a un millón de pandilleros. México tiene una resonancia mediática y una importancia geopolítica superior a la de Colombia, Venezuela o Brasil, por lo tanto, lo que ocurre en su territorio impacta mucho más sobre la percepción dentro y fuera del país. No es lo mismo Medellín o Río de Janeiro que Ciudad Juárez, la proximidad con Estados Unidos hace una enorme diferencia. Un ejemplo de esto fue la llamada “insurrección o guerrilla zapatista”; si comparamos militar, política y socialmente ese movimiento con las insurgencias armadas de Sur y Centroamérica, el “zapatismo” no podría ser considerado guerrilla y mucho menos insurrección. Sin embargo, logró un gran impacto mediático nacional e internacional con una sola acción armada en 1994.3. “El intenso debate sobre la inseguridad es señal de agravamiento” El debate y la complejidad en los procesos de toma de decisiones en las democracias avanzadas son señales de estabilidad, pero en las democracias emergentes son percibidos como debilidad e incertidumbre, porque todavía se añora el orden de forma consciente o inconsciente, que sin deliberación se lograba por vía autoritaria. El debate sobre las estrategias que se diseñan para enfrentar los problemas de seguridad son normales en un entorno democrático y ese debate es más intenso y libre cuanto menor es la amenaza a los poderes vitales del país. La oposición, los intelectuales y la prensa necesitan y deben actuar críticamente de oficio, esto es parte de la democracia.El narcotráfico es un fenómeno que coopta o destruye las instituciones, que elimina las libertades democráticas y que somete a los ciudadanos a los poderes mafiosos. Donde el crimen organizado es fuerte no hay crítica ni libertad de expresión. Por lo tanto, cuando hay debate, cuando los ciudadanos y los líderes de opinión pueden criticar al gobierno, significa que el poder del Estado domina sobre cualquier poder mafioso. En México los poderes centrales no están afectados ni inhibidos por los cárteles, esto ocurre de forma parcial sólo en unos pocos estados.En Colombia, cuando se estaban diseñando indicadores para medir el nivel de éxito de la estrategia de seguridad democrática en zonas que durante largo tiempo habían estado dominadas por diversidad de grupos armados, se concluyó que uno de los mejores indicadores de éxito de los planes de seguridad era aquel que medía las demandas y quejas de los ciudadanos, ya que esto comprobaba que se había derrotado al miedo y restablecido a los ciudadanos sus libertades democráticas. Es un error pensar que la existencia de un amplio y álgido debate sobre la seguridad y los métodos para enfrentar la violencia son, por sí mismos, una señal de gravedad y de deterioro, cuando en realidad lo grave sería el silencio.4. “Los muertos y la violencia demuestran que se está perdiendo la guerra” El narcotráfico es un enemigo bien armado, muy violento, sin barreras morales y con un gran poder corruptor. Creer que este problema se puede resolver sin confrontación y sin violencia es una gran ingenuidad. A este enemigo sólo es posible someterlo usando la fuerza del Estado y, cuando ello ocurre, se incrementa su resistencia y se agudizan sus propias guerras internas; con lo cual aumenta, inevitablemente, el número de personas que pierden la vida.En toda guerra hay muertos y éstos son un indicador del estado de la guerra misma. Las guerras se ganan generando bajas al enemigo y se pierden cuando se tienen más bajas de lo que el entorno político social propio puede tolerar. Es comprensible que éste sea un tema difícil para ser explicado ante la opinión pública por los funcionarios del Estado, pero la realidad es que quien está teniendo más muertos, capturas y deterioro moral en sus filas es quien va perdiendo la guerra, y en el caso de México son los narcotraficantes.La lucha contra el narcotráfico no puede leerse como una guerra “clásica” en la cual hay contendientes claramente definidos; los cárteles son un enemigo fragmentado, que genera una violencia anárquica; son múltiples grupos que combaten al mismo tiempo entre sí y contra el Estado. La mayor parte de las bajas de los delincuentes resultan del proceso de autodestrucción de los cárteles, que se profundiza cuando el Estado los confronta. En este tipo de guerra esto es un progreso, en Medellín los cárteles se autodestruyeron bajo el acoso del Estado, por razones que fueron desde disputas por territorios, control de rutas, hasta problemas personales. El proceso de autodestrucción atomiza a los cárteles y obliga a que su reclutamiento comience a descender hacia grupos de jóvenes marginales más inexpertos y ambiciosos, y con ello aumenta su violencia y se acelera su autodestrucción.El problema es que, en la fase intermedia de la guerra, la presión política demanda una reducción de la violencia, y esto no ocurre hasta que se cumplen tres premisas: 1. Que el Estado tenga mayor dominio social y territorial que los cárteles en sus zonas de operación; 2. Que los delincuentes se hayan debilitado en su capacidad de reciclar sicarios; 3. Que esta debilidad los convierta en un problema marginal para el Estado. En el caso de México todavía falta tiempo para que se reduzca la violencia. Pero hay un proceso de autodestrucción que se está acelerando y esto es un indicador positivo. El general Naranjo, jefe de la Policía Nacional de Colombia dice que “cuando se sabe que el narcotráfico ha penetrado fuertemente en la sociedad, el principal problema no es la violencia, sino la no violencia” porque ello implica que los narcotraficantes controlan a la sociedad. La creencia de que por cada delincuente muerto surgen dos nuevos es ilógica, la codicia por el dinero no genera capacidad infinita para reciclar pistoleros, éstos también necesitan habilidades, experiencia y preparación que no se repone de un día para otro.5. “Tres años es mucho tiempo, el plan ya fracasó” Igual que con otras afirmaciones, la demanda por resultados rápidos se sustenta en factores emocionales y no en un análisis objetivo de la realidad. En el sentido más general podemos decir que el tiempo que se requiere para controlar el problema es directamente proporcional al tamaño y las raíces históricas del narcotráfico en México, y en ese orden es necesario tener como referentes a otros países que tienen problemas similares. El tamaño del problema del narcotráfico para México está determinado por su vecindad con Estados Unidos, el mayor consumidor de drogas del mundo, y por las consecuencias de esto en términos de demanda, flujos de dinero y armas. En cuanto a las raíces del fenómeno, el problema comenzó a gestarse, en algunos estados —particularmente en Sinaloa—, desde hace muchos años, pero la mayor expansión de los cárteles comenzó hace 15 años por el cierre de la ruta Caribe. En el caso de México los referentes para comparar tiempos podrían ser países como Colombia, Italia, Brasil y quizás algunos del norte de África.Colombia sigue en guerra y a Medellín, su ciudad más violenta, le ha costado 16 años y 70 mil muertos comenzar a revertir una situación de deterioro que tuvo a la sociedad en vilo; Italia lleva muchas décadas de lucha contra las mafias sin que ésta haya llegado a su fin; Brasil, durante ocho años de gobierno de Lula, no pudo resolver, todavía, el problema de las pandillas, y en el norte de África el deterioro es ascendente y casi sin control. Teniendo en cuenta lo anterior podemos afirmar con propiedad que México, en tres años, ha obtenido progresos más rápidos con costos más bajos que todos estos países. Los resultados de las operaciones en México en los últimos tres años constituyen récords mundiales. Se han destruido 227 laboratorios, decomisado 389 millones de dólares, 30 mil 500 armas de guerra, 24 mil 900 armas cortas, 409 aeronaves, 310 embarcaciones, 22 mil 900 vehículos y cinco mil toneladas de drogas que incluyen 90 mil kilogramos de cocaína, 4.8 millones de kilogramos de mariguana, cuatro mil 500 de metanfetaminas, 27 mil de efedrina y 18 mil de pseudoefedrina. Se han extraditado 286 narcotraficantes, la gran mayoría de ellos a Estados Unidos, y capturadas 89 mil 500 personas que incluyen siete líderes, 47 financieros, 60 lugartenientes, dos mil 61 sicarios y 600 funcionarios involucrados. El dinero es casi el monto del Plan Mérida; para cargar la droga se necesitarían varios trenes o 250 furgones; las armas son más que las de los ejércitos de El Salvador y Honduras juntos; las aeronaves equivalen al 50% de la flota de American Airlines; las embarcaciones son el doble de la armada de México y los vehículos superan a las flotas de policía y ejército de todo Centroamérica. Los primeros logros de un plan son los golpes a las estructuras delictivas, no la reducción de la violencia, sin lo primero no se puede alcanzar lo segundo.6. “Los ataques que realizan los narcos prueban que son poderosos” En todas las guerras el azar y la casualidad juegan un papel, a veces en contra y a veces a favor. En toda guerra se ganan y se pierden batallas, pero a la larga, lo que determina el resultado es quién tiene la iniciativa estratégica y quién está golpeando la moral, las fuerzas y los medios materiales de su contrario. En el caso de México todos estos factores están a favor del Estado, aunque de forma esporádica los cárteles sorprendan con acciones y golpes que generan temor y tienen un gran impacto mediático y político. Los ataques de los cárteles son reactivos, sin una lógica racional estratégica y producto de venganzas irracionales. La regla básica en toda guerra es que el acoso y la presión sobre un enemigo conducen a éste a la desesperación, al error e incluso al terrorismo. Los cárteles actúan de forma defensiva y no ofensiva, la política de éstos es cooptar policías, no matarlos. Cuando combaten directamente contra el Estado facilitan el trabajo, porque ayudan a cohesionar moralmente a los miembros de las fuerzas del Estado.En el tipo de conflicto que enfrenta el Estado mexicano los cárteles son fuertes cuando controlan sin combatir y pueden pasar desapercibidos para la mayoría de la población. Por el contrario, cuando reaccionan y se vuelven visibles, su posibilidad de controlar y operar libremente se debilita y los enfrentamientos internos aumentan; esto no es una muestra de fortaleza sino de debilidad, a pesar de que la violencia salga a flote y genere incertidumbre social. Por ejemplo, cuando los cárteles empezaron a usar submarinos para transportar droga se hizo una lectura errada. La percepción simple fue que los narcotraficantes demostraban su enorme capacidad y poderío construyendo submarinos. Sin embargo, lo que no se dijo fue que la capacidad de introducir drogas abiertamente vía puertos y aeropuertos se estaba cerrando, y por ello recurrían a mecanismos más complejos y difíciles de operar que transportaban menos droga. En este sentido “más sofisticado” no implica, necesariamente, una mejoría, no importa cuán impresionante resultase la fabricación de submarinos, que en este caso, por cierto, fue bastante precaria.7. “Primero hay que acabar con la corrupción y la pobreza”En muchos análisis atender y reducir la corrupción y la pobreza son actividades que se consideran como premisas para resolver la inseguridad que genera el narcotráfico, y con ello se invalida el papel que juega la coerción. Este mito parte de un planteamiento cierto: el problema de la seguridad requiere planes integrales que atiendan todas las aristas del asunto, desde la utilización de la fuerza del Estado, hasta la atención de los temas sociales que intervienen en la seguridad. Sin embargo, en una condición de extrema emergencia como la que viven algunos estados de México, si se pone de antemano resolver la pobreza y la corrupción como precondiciones para tener un entorno seguro tendríamos que aceptar que la situación no tiene remedio alguno, ya que estaríamos poniendo la meta de resolver la pobreza como camino para mejorar la seguridad que en este momento es el problema más importante para los ciudadanos. En seguridad la dosis de prevención y represión en un plan depende de la situación. Establecer por definición que lo uno debe privar sobre lo otro es un error que parte de visiones ideológicas de la seguridad en la cual se dice que las derechas priorizan reprimir y las izquierdas prevenir. Cualquiera puede ser el prioritario, pero eso debe determinarlo la realidad, no una posición política.No hay una relación territorial o social entre pobreza y narcotráfico. El narcotráfico es un delito de la codicia que recluta pobres, pero que depende de las ventajas geográficas que proporcionan rutas y territorios con posibilidades para la producción y el tráfico. Busca controlar puntos estratégicos de ventaja para su “negocio”. Las redes de narcomenudeo para distribución sí se ubican más claramente en la geografía de la pobreza urbana, pero el narcotráfico no necesariamente. Por ello el problema más grave está en la frontera norte. Además, no hay una relación directa entre pobreza e inseguridad. Nicaragua es el segundo país más pobre del continente y el tercero más seguro, igual podemos comparar a la India con Estados Unidos o analizar cómo el enorme gasto social de Venezuela va de la mano con el agravamiento de la inseguridad para los más pobres en ese país.Por otra parte, la naturaleza de la corrupción política, y la que genera el narcotráfico son totalmente distintas, la primera puede abrir la puerta a la segunda, pero la corrupción política no supone el riesgo de violencia y muerte, que sí está presente con la corrupción vinculada al narcotráfico. La regla de “plata o plomo” que siempre termina en “plomo o plomo” parte de los tres principios de acción del narcotráfico: violencia, crimen y muerte. Un político corrupto quiere enriquecerse, pero no morirse. Es evidente que la cultura de la corrupción resulta útil a los narcotraficantes, pero no puede pensarse que la corrupción política y la dinámica de cooptación, control, violencia y muerte que imponen los delincuentes son la misma cosa, puesto que responden a lógicas completamente distintas. Es ingenuo pretender que para mejorar la seguridad en el corto plazo se necesita primero una reconstrucción ética que acabe completamente con los códigos de corrupción que se gestaron en América Latina durante un largo periodo. El debate principal es ¿por dónde debemos comenzar en una emergencia? En ese sentido, no se puede entrar a una zona dominada por poderes mafiosos con planes de asistencia tipo “Madre Teresa” y tampoco es previsible incentivar la participación ciudadana en zonas donde el narcotráfico tiene atemorizada a la sociedad. En primera instancia se necesita la recuperación del control por parte de las fuerzas del Estado, es decir, romper el poder intimidatorio de los cárteles, es el centro de gravedad del problema y ello coloca a la coerción como la prioridad. En Medellín la guerra la ganó el Estado hace más de 10 años, y es hasta ahora que se observan los resultados exitosos de los planes integrales, con plena participación ciudadana y cambios culturales en los barrios donde un día gobernó Pablo Escobar.8. “Detrás del narcotráfico hay poderosos políticos y empresarios” Este mito está basado en las teorías conspirativas que no consideran el contexto ni la historia, sino información casi siempre fruto de la especulación. Este tipo de teorías alimenta telenovelas, películas y literatura para el entretenimiento, pero por repetición termina convirtiendo cualquier mentira en una verdad que se vuelve universal sin necesidad de comprobación. Hace algunos años una telenovela muy exitosa y muy bien realizada llamada Nada personal sugería que el capo principal en México era el presidente de la República. Muchos estadunidenses también adictos a estas teorías suponen que “todos los mexicanos son corruptos y sus autoridades son todos capos” y esto es lo que reproduce Hollywood. En contraparte, algunos mexicanos piensan “que el negocio de la droga se maneja desde Wall Street”. Estos argumentos son fáciles de creer y difundir aunque no tengan fundamento racional. El narcotráfico suele surgir de las actividades de contrabandistas de clase media baja con poca educación, que construyen sus organizaciones a partir de grupos familiares como forma de asegurarse lealtades (“la familia”), y reclutan socialmente hacia abajo. Sus organizaciones tienen la violencia y la muerte como forma de dirimir todo tipo de conflictos (personales, de mercado, familiares y territoriales), porque sus actividades no tienen marco legal y, por lo tanto, no pueden usar los tribunales y las leyes. Los castigos extremos y las muertes ejemplares son sus únicos instrumentos de “justicia”. Cuando se fortalecen financieramente se expanden socialmente y entonces comienzan a intimidar, someter o utilizar a funcionarios públicos y/o empresarios. Primero cooptan policías hasta que le quitan al Estado el poder coercitivo y luego van sobre el sistema judicial, la prensa, los poderes económicos y políticos.En ese proceso terminan colocándose arriba de la pirámide social y siendo ellos el poder, pero teniendo la violencia y la muerte como medios de ejercerlo. Así ocurrió en Colombia, en Chicago en los años treinta, en Italia durante décadas, y así ha ocurrido en Michoacán, Sinaloa, Tamaulipas, etcétera. La naturaleza de un empresario o de un político es diferente e incompatible con la del mafioso. Que el segundo pueda someter a los primeros es factible, pero que los primeros puedan convertirse en los segundos no resulta sensato; aunque existan algunos casos aislados, esto no es la regla. Niveles de penetración como los que se han comprobado en Italia ocurrieron luego de muchas décadas de poder mafioso, pero en México el fenómeno delictivo es comparativamente joven.9. “La única salida es negociar con los narcotraficantes” Este mito está relacionado con la creencia de que la negociación fue el método empleado por anteriores gobiernos para mantener la paz, y entonces se concluye que la violencia estalló cuando el nuevo gobierno abandonó este método. Se argumenta que la violencia cesaría si se negocia con los delincuentes. Éste es un enfoque en extremo simplista para entender el pasado y para suponer una solución en el presente.El narcotráfico no ha sido siempre un problema de seguridad nacional. Se transformó en una amenaza estratégica al fortalecerse financieramente a partir de la segunda mitad de los noventa. En el pasado los narcos eran un problema policial de segundo orden y para lidiar con ellos se requería una lógica operacional local y no una estrategia de Estado. Durante muchos años no fueron un tema central ni para México ni para nadie. Durante los setenta y ochenta la tolerancia al problema fue universal y hasta la CIA y Cuba lo instrumentaron y subvaloraron como amenaza. Lo que se conoce como “negociaciones” posiblemente sea parte de las leyendas que dejaron algunos jefes policiales o políticos locales cuando lidiaban, desde un Estado fuerte, con un problema menor.Ahora estamos frente a una realidad distinta en la cual los cárteles buscan imponer su autoridad por encima del Estado con la ley de “plata o plomo”. El narcotráfico es ahora una amenaza estratégica. No se puede decir que algunos posibles arreglos que existieron en el pasado entre mandos policíacos y delincuentes sean equivalentes a una negociación del Estado con los narcotraficantes de hoy y, en segundo término, porque resulta imposible que la autoridad de cualquier país realice acuerdos con delincuentes que rigen su comportamiento por los principios de violencia, crimen y muerte.Una negociación supondría que los cárteles son un enemigo coherente con control sobre sus estructuras y con reglas y límites, pero la realidad es que el narcotráfico es un enemigo fragmentado, sin control sobre su gente y sin reglas en el uso de la violencia. La idea de negociar con los cárteles es una fantasía. Colombia, por ejemplo, negoció con Pablo Escobar y otros cárteles, ofreciéndoles ventajas si se sometían a la justicia y el desenlace fue la ridiculización absoluta de la autoridad y las cárceles convertidas en centros de mando y operación de lujo con protección pagada por los ciudadanos para que Escobar siguiese sembrando violencia y muerte en el país.10. “La estrategia debería dirigirse a la legalización de las drogas” La legalización es un debate sobre cómo aminorar el problema, porque con las drogas no existe camino ideal. Se trata en realidad de escoger entre daños de salud pública o violencia. Su legalización no las vuelve socialmente deseables. Teniendo como punto de partida el principio del mal menor, la idea de legalizarlas es correcta y a futuro seguramente esto dejará de ser un mito. Lo que es un mito en la actualidad es pretender que esta estrategia pueda ser puesta en marcha con éxito por los países afectados por la violencia que genera la producción y el tráfico de drogas. La legalización de las drogas requiere un acuerdo simultáneo con los países consumidores. Sin la participación de Estados Unidos y Europa una estrategia de este tipo, aplicada en México o Colombia, por ejemplo, sería un suicidio para la seguridad de estos países. Esto es injusto, pero el problema no es de ética sino de realidad.No se trata sólo de un conflicto político internacional entre la inseguridad de los países que producen y trafican versus la hipocresía de los países que consumen, sino que la distorsión generada sería altamente explosiva. La disposición de droga en México y Colombia es infinitamente superior a su demanda y la situación en Europa y Estados Unidos es inversa. Por lo tanto, legalizar la droga en los primeros sin que se haya hecho en los segundos supondría un fortalecimiento de estructuras criminales en Colombia y México, porque el negocio central seguiría siendo la exportación ilegal ante la enorme diferencia de precios. Legalizar equivaldría a dar plenas libertades a grupos criminales en países con grandes debilidades institucionales. Si en la condición actual existen pequeños Estados en Latinoamérica y África en riesgo de caer en manos de mafias, esto se agravaría y se multiplicaría con una legalización unilateral.Aunque resulte duro decirlo, la realidad es que Estados Unidos y Europa continúan jugando la carta de la tolerancia al consumo porque los niveles de violencia de los delincuentes dedicados a distribuir drogas en sus calles no se ha convertido todavía en una amenaza estratégica. Pero esa violencia está creciendo, Estados Unidos ha encarcelado a más de dos millones de personas por delitos vinculados con las drogas y tiene un millón de pandilleros, gran parte de los cuales se dedican a la venta de drogas. Quizás cuando esa violencia se vuelva intolerable para Europa y Estados Unidos, la idea de la legalización de las drogas comience a discutirse en serio como estrategia multilateral. Por el momento hay que mantener estrategias de control de daños en nuestros países y denunciar el daño que nos provocan los países consumidores. El tema de la legalización está avanzando con la mariguana, pero aún es un tema difícil como acuerdo entre gobiernos.11. “La participación del ejército es negativa y debe retirarse” El mito sobre la negatividad de la participación del ejército parte de supuestos como: que la seguridad interna no es su tarea; que no está preparado para esas labores; que se pone en riesgo su imagen; que termina violando los derechos humanos; que es peligroso darles poder a los militares, y otras ideas similares. Todos estos y otros argumentos están fundamentados en riesgos potenciales, dudas y desconfianzas que en algunos casos son ideas predominantemente subjetivas. Ninguno toma en cuenta los problemas objetivos que han obligado a usar al ejército: la dimensión de la amenaza que implican los cárteles; el poder de fuego, número de sicarios y nivel de organización de las estructuras delictivas; la crisis moral y los problemas de cooptación de las policías estatales y municipales en las zonas conflictivas; la limitada cantidad de personal de que dispone la Policía Federal; el carácter transnacional del problema del narcotráfico y, finalmente, el arraigo, la fuerza social y el dominio territorial que tiene el crimen organizado en algunos lugares de México. No es lo mismo enfrentar este problema con 30 mil hombres que con más de 200 mil.El narcotráfico plantea un reto que supera el orden policial, constituye una amenaza a la soberanía del Estado que tiene además características transnacionales. Si el ejército se retira los narcotraficantes recuperarían terreno muy rápidamente, la amenaza cobraría dimensiones superiores, la violencia se dispararía y podría alcanzar a la ciudad de México. Paradójicamente, como ya se mencionó arriba, otro tipo de críticas hablan del riesgo de llegar a un “Estado fallido”, pero el mito sobre la retirada del ejército se ubica en el otro extremo, porque supone que el problema no es tan grave y bien podrían resolverlo las policías municipales y estatales. Es difícil imaginar que México pueda, en las décadas venideras, enfrentar otra guerra peor que los narcotraficantes. La solución estratégica es la reconstrucción, reforma y fortalecimiento de las policías, pero mientras eso avanza es indispensable usar al ejército.En toda Latinoamérica los ejércitos pueden ser indispensables para responder al tipo de amenaza que plantea el crimen organizado, y los derechos humanos en la actualidad por encima de requerimientos éticos, se han vuelto parte fundamental de la eficacia operacional tanto para policías como para militares. Las guerras modernas están sometidas, inevitablemente, a una severa fiscalización mediática, política y judicial. El Estado sólo puede preservar la legitimidad en el uso de la fuerza si es capaz de usar el poder coercitivo en esas condiciones. Es decir que esto es ahora una condición universal permanente para emplear la fuerza y no debe ser un obstáculo para no emplearla. Para recuperar seguridad Colombia multiplicó la fuerza de su ejército. Por contraste, Guatemala está cayendo en manos del crimen organizado porque no puede reconstruir al suyo.12. “Lo más efectivo y rápido para combatir al crimen es la justicia por cuenta propia”Entre los cárteles no hay reglas y sus diferencias son resueltas mediante la “muerte ejemplar”. El Estado, por su parte, busca procurar justicia, no asesinar, y debe conservar la ventaja moral y social frente a los delincuentes. El inicio de una violencia paramilitar, basada en el mismo principio de la “muerte ejemplar”, convierte al Estado en otro actor violento y sin reglas que terminaría siendo identificado como tal por el crimen organizado, con lo cual se aceleraría, se agravaría y se multiplicaría la violencia. La idea de que asesinar delincuentes representa una vía más rápida para recuperar seguridad es falsa. El crimen organizado constituye un cuerpo social numeroso; no son individuos, sino grupos con cierto apoyo. Una confrontación letal puede terminar dividiendo más a las comunidades, con lo cual la duración del problema se alargaría en vez de acortarse.Por otro lado, una confrontación de este tipo puede redireccionar gran parte de la acción violenta de los narcotraficantes hacia instituciones, funcionarios públicos y sus familias, con lo cual la violencia del crimen organizado dejaría de ser fundamentalmente autodestructiva. La tarea del Estado es restablecer la autoridad y asegurarse el monopolio de la violencia. La organización de grupos paramilitares constituye una delegación de autoridad a grupos privados que debilita la autoridad del Estado. La experiencia internacional demuestra que el paramilitarismo es un grave error. Los casos de Colombia y Guatemala son muy claros, en el primero se agravó el conflicto y en el segundo el Estado ha sido casi derrotado.(Nexos/México. El autor fue miembro de la Comandancia General del FMLN durante la guerra. Ahora es consultor para la resolución de conflictos internacionales.)
A PROPÓSITO DEL FRÍO
Mucho se habla de que el clima de la tierra está cambiando drásticamente induciendo a la forma de vida conocida a su pronta y total extinción. El efecto de los gases invernaderos es calificado como el primer agente de destrucción. En nuestro medio se han instalado mesas de trabajo para analizar los efectos de este fenómeno y han salido Ministros y funcionarios diciendo que esa es la razón de deterioro de toda nuestra infraestructura. Bonito argumento el que se han encontrado y que desde ya esgrimen para justificar su operancia o su inoperancia. El ciudadano común, acostumbrado al bombardeo permanente de dogmas y mitos absurdos, escucha y sin conocer sobre el tema, asume que lo dicen es algo verdadero escrito sobre piedra. Lamento defraudarlos pero la cosa no es así. Existen innumerables teorías científicas al respecto pero todas coinciden en que es difícil establecer relaciones de causalidad como la afirmación en boga. El nivel de gases de efecto invernadero es alterado a la baja y a la alza por muchos factores tales como el vulcanismo, el movimiento de los continentes, el albedo de la Tierra – capacidad de reflejar la luz solar--, la variación orbital del planeta, el impacto de meteoritos de medianas dimensiones, los cambios en la actividad solar, cambios en las corrientes marítimas, etc. Factores que han estado siempre presentes en la historia natural y que han llevado a la conformación de patrones cíclicos en las variaciones del clima en nuestro globo terráqueo. La última glaciación sufrida por la humanidad se conoce como “la pequeña edad del hielo” y fue hace poco tiempo, fue un período frío que abarcó desde comienzos del siglo XIV hasta mediados del siglo XIX. Puso fin a una era extraordinariamente calurosa llamada “óptimo climático medieval”. Durante el período en cuestión se ha podido determinar que la actividad solar determinada en las “manchas solares” era sumamente baja y se desató una elevada actividad volcánica que aumento el efecto “albedo” evitando la libre filtración de la radiación solar por lo que el clima bajó llegando a su máximo en el año de 1815, que hizo que el siguiente año se conociera como el “año sin verano”, debido a la erupción del volcán de Tambora en Indonesia que cubrió la atmósfera de cenizas generando nieve y hielo en junio y julio en Nueva Inglaterra y el norte de Europa. Sumado a eso la introducción de una gran cantidad de agua fría proveniente del atlántico Norte hizo que la “corriente del golfo” dejara de ser operativa, sumándose al anterior efecto, provocando así las bajas en la temperatura. A partir de 1850 el clima comenzó a cambiar hacia temperaturas más cálidas. Algunos escépticos,--como el que escribe—arguyen que los cambios actuales se deben a la recuperación climática de este último evento glacial, y que por ello, la actividad humana no es la causante de este cambio y como existe la contraparte que dice que la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera por las actividades del hombre genera el cambio climático es que estamos en esta discusión. Sana polémica científica, sin mitos ni dogmas absurdos, con la disciplina y el estudio se podrá determinar las causas y los efectos de las variaciones climáticas. Es difícil el estudio de este “caprichoso” planeta. En la medida que el hombre se adentra en su estudio surgen nuevos retos y nuevas incógnitas a resolver, allí entra la Matemática y la Física Cuántica, el razonamiento ordenado de seres curiosos que buscan desenredar el hilo de la creación. Dios le dio al hombre inteligencia, ocupémosla para honrar su creación, da risa escuchar declaraciones de que el final está tan cerca o de que las carreteras y los puentes se dañan por el cambio climático. No son parte de la creación estas posiciones, más bien parecieran análisis de “eunucos” incapaces de fertilizar nada y ansiosos por destruir todo. La obra creadora debe seguir su camino y abrirse paso ante las adversidades, Einstein decía que: “No se puede concebir a un hombre de ciencia sin esta profunda fe. La situación puede ser explicada por una imagen...La ciencia sin religión es coja, la religión sin ciencia es ciega”. La próxima vez que tengamos frío, sonriamos; los casquetes polares se están fortaleciendo evitando que los mares cubran este amado terruño, y pensemos que la sabia obra producto de la creación, está haciendo su trabajo.
Brutal e insuficiente
(editorial publicado el 12 de enero 2010)Con la devaluación del bolívar decretada el viernes, Hugo Chávez ha logrado un récord mundial. Venezuela es ya el único país del mundo en el que operarán tres tipos de cambio: el que se aplica a alimentos y otros productos de primera necesidad (2,6 bolívares por dólar); el general (4,3) y el del mercado negro (6,20).La devaluación era inevitable, por la continua erosión de la posición internacional de la economía venezolana. Y es aparentemente brutal, por cuanto supone una pérdida de valor de su moneda del 50%. Su magnitud tiene que ver con la tozudez de mantener durante años un tipo de cambio artificial de 2,15 bolívares por dólar, para evitar el coste del ajuste. Aunque, ironía de la realidad, la divisa ha perdido durante el mandato chavista, desde 1999, el 87% de su valor. Pero al mismo tiempo es insuficiente porque el bolívar se seguirá negociando en el mercado negro, con las mismas ineficiencias y corrupciones en los mercados de cambio y en general en las compraventas de productos importados. Es también insuficiente (y, por tanto, efímera) porque no va acompañada de otras medidas, presupuestarias, fiscales y salariales, que son las que afianzan en el largo plazo los beneficios de una devaluación. La medida no se justifica como compensación de los menores ingresos derivados del descenso del precio mundial del petróleo, de 126 dólares en su pico máximo de julio de 2008 al entorno actual de los ochenta, pues el caudillo populista se encontró al inicio de sus mandatos con un precio del crudo entre 10 y 11 dólares el barril. La incompetencia de su política económica se resume así en dos datos: el producto estrella de su exportación se ha multiplicado por ocho, y el valor de su moneda se ha dividido por nueve. A corto plazo, la devaluación duplicará los ingresos públicos derivados de la exportación petrolera, lo que servirá para financiar los gastos sociales del presidente en un año electoral. Pero también alimentará la ya insólita inflación del 25% en perjuicio del consumo popular. Combinada con la obligación legal de solicitar permiso para repatriar dividendos, perjudica desde ya a grandes empresas internacionales instaladas en el país, especialmente las españolas. La inepcia política y la inseguridad jurídica se dan así la mano en desfavor de casi todos, incluidos los ciudadanos, que verán reducido el valor de los salarios a la mitad.
El Salvador
A Centroamérica le ha costado 100 años comprender que al corazón no se le pueden poner fronteras. Ni al corazón ni a los pies de un hombre y una mujer que quiere decirle algo a otro, o que quiere ir a buscar una vida mejor a otro lado de uno mismo. Ahora, cuando ya los países del istmo van a ir, poco a poco, eliminando las fronteras al paso de las mercancías, también es momento de derribar otras fronteras patrioteras, nacionalistas y limitantes que no juegan a favor nuestro. A punto de conmemorar la independencia de las antiguas colonias de España, Centroamérica se está mirando al espejo de sus recelos. En Nicaragua, sin ir más lejos, quedan muchos asuntos pendientes, y entre ellos, que vuelva una justicia independiente de los poderes políticos, un sueño que tiene mucho que ver con la libertad y la decencia de no amparar a las criminales, aunque éstos sean líderes políticos.En varias sesiones de la negociación del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, fui testigo de cómo algunos negociadores se dedicaban a hacer el juego patético de tratar de cerrar acuerdos privados con Estados Unidos, aunque fueran en perjuicio del vecino y hermano país. Y eso que se suponía que a un lado de la mesa estaban los países centroamericanos unidos y al otro EU. Ahora, parece que la dirección apunta hacia otro lado. Pero aún quedan cuestiones muy graves sin resolver. Me refiero a dos guerras inconclusas, llenas de perdedores: las de Guatemala y El Salvador. El próximo 15 de marzo serán las elecciones presidenciales en El Salvador, aunque antes, el pasado domingo se celebrasen las legislativas y municipales. Si hay algún país de todos los de la región que esté más hermanado con Nicaragua, ése es El Salvador, una especie de otra mejilla, donde se ha recibido siempre el mismo golpe. ARENA, el partido más poderoso de El Salvador ha controlado las instituciones con más o menos fuerza durante la última década, y a su último candidato y ahora presidente todavía, Toni Saca, le cupieron dos vergüenzas: una es la de quedarse siendo durante algún tiempo el único país de Centroamérica que aún enviaba tropas a Irak para hacerle el juego rastrero a Bush; otra, la de esa campaña zafia y populista de la “súper mano dura” contra la violencia de las pandillas urbanas, y no sólo no ha conseguido eliminar la violencia sino que el país continúa mostrando los índices más altos de criminalidad de la región. La alcaldía de San Salvador, que hasta ahora controlaba el FMLN, tampoco ha podido detener con rotundidad la violencia, y de hecho ha devuelto la alcaldía a ARENA.Por otro lado, al FMLN le ha costado un largo proceso interno consensuar un candidato moderado, como el actual Mauricio Funes, un periodista que ha dado algunas señalas de por donde querría que su política caminase. Aunque uno tiende a desconfiar de cuando los periodistas se meten a política, parece que Funes al menos le da al FMLN lo que nunca ha podido conseguir, estar cerca de ganar unas elecciones presidenciales, ya que le hubiera sido imposible si sostuviera su discurso dogmático más radical. Sus primeros viajes y contactos han sido con empresarios, como Slim, el mejicano y hombre más rico del mundo; y los líderes de esa otra izquierda más moderada de América Latina, la de Bachelet, la de Lula, o la de Zapatero en España. Queriendo a El Salvador, (quién no lo quiere), a uno le gustaría ver cómo el FMLN gana las elecciones. No porque piense que sea mejor o peor alternativa, ni porque simpatice más o menos, sino por el mero hecho de que la ilusión de que se cierra una guerra que nunca se dio por terminada, a pesar de los acuerdos de paz. Uno espera que si gana este nuevo FMLN, la memoria de tanta gente asesinada reclame la justicia que nunca le llegó, empezando por las masacres de campesinos y terminando por el propio arzobispo Romero. En sus tiempos de poder, la derecha salvadoreña ha sido tan de derecha, que no ha granjeado ninguna simpatía fuera de su minúsculo territorio, para muchos su finca particular. La enorme diferencia entre los que tienen plata y los que no en El Salvador es mucho más discriminatoria que incluso en otros países de la región. Que gane el FMLN, lo haga bien o lo haga mal, es dejar que la memoria siga su curso, dar una oportunidad a la reconciliación y a que algunas esperanzas tengan cabida, en un país demasiado pequeño para matarse. La injusticia social, la violencia, los vínculos con el narcotráfico y otros problemas, seguirán, pero la guerra, ésa que aún se lleva dentro en mucho corazón de Centroamérica sin que se dispare un solo tiro, habrá terminado; se cerrará una herida que sangró por todos los costados de la región.Éste es el peor año para Centroamérica por la crisis económica e institucional de algunos países como Nicaragua, pero es el mejor para iniciar una auténtica Centroamérica unida que gane confianza en sí misma. A nuestro El Salvador, el pulgarcito de América, nuestra otra mejilla, de puro corazón, sólo se le puede desear lo mejor, con el mejor poema de amor que jamás se haya escrito hacia una tierra (al menos de los que yo conozco), aunque parezca mentira: el de Roque Dalton con el que aquí les dejo:franciscosancho@hotmail.comPoema de amorLos que ampliaron el Canal de Panamá(y fueron clasificados como “silver roll” y no como “golden roll”),los que repararon la flota del Pacíficoen las bases de California,los que se pudrieron en las cárceles de Guatemala,México, Honduras, Nicaraguapor ladrones, por contrabandistas, por estafadores,por hambrientoslos siempre sospechosos de todo(“me permito remitirle al interfectopor esquinero sospechosoy con el agravante de ser salvadoreño”),las que llenaron los bares y los burdelesde todos los puertos y las capitales de la zona(“La gruta azul”, “El Calzoncito”, “Happyland”),los sembradores de maíz en plena selva extranjera,los reyes de la página roja,los que nunca sabe nadie de dónde son,los mejores artesanos del mundo,los que fueron cosidos a balazos al cruzar la frontera,los que murieron de paludismoo de las picadas del escorpión o la barba amarillaen el infierno de las bananeras,los que lloraran borrachos por el himno nacionalbajo el ciclón del Pacífico o la nieve del norte,los arrimados, los mendigos, los marihuaneros,los guanacos hijos de la gran puta,los que apenitas pudieron regresar,los que tuvieron un poco más de suerte,los eternos indocumentados,los hacelotodo, los vendelotodo, los comelotodo,los primeros en sacar el cuchillo,los tristes más tristes del mundo,mis compatriotas,mis hermanos.publicado en El Nuevo Diario el sabado 24 de enero de 2009: http://impreso.elnuevodiario.com.ni/2009/01/24/opinion/94048
Ellas
(El País, 17 de junio 2008) Verán, a mí me parece que decir miembra es una estupidez y que nombrar a una mujer muy embarazada ministra de Defensa no es una medida feminista. Lo primero, porque la lengua es una sustancia viva que no se puede cambiar a voluntad sin haber cambiado antes el mundo real; la lengua es como la piel de la sociedad y sigue con estrechísima adherencia todas las mudanzas del cuerpo que cubre, así engorde o adelgace: por ejemplo, se está perdiendo la palabra solterona de manera natural, porque se está quedando vacía socialmente. En cuanto a lo segundo, ver a una mujer con un barrigón avanzadísimo teniendo que ir a Afganistán es el colmo de la superwoman, es decir, de esa exigencia machista que obliga a las mujeres a ser diosas y cortesanas y amas de casa y empleadas del mes y madres perfectas, o sea, que las obliga a ser absolutamente todo para poder aspirar a un lugar social mediano que cualquier señor ocupa con la gorra; como me comentaba un día Elvira Lindo, que es madre y sabe de eso, sería más útil reconocer el derecho que las mujeres tienen a una panza y un parto tranquilos, sin que ello les rompa la vida y la carrera. Pero por otra parte me parece que las críticas que reciben las mujeres ministras no tienen el mismo nivel que las que reciben sus colegas varones. No sólo por la importancia desmesurada que se le da a su aspecto, todo ese parloteo sobre si son guapas o feas que no suele escucharse sobre los hombres, sino por el tono paternalista y socarrón de burla fácil. Sí, claro que hay ministras metepatas, pero también hay hombres. De hecho, las necedades que sueltan los políticos varones son infinitas y normalmente no se les presta semejante atención. La verdadera igualdad, siempre lo dije, llegará cuando las mujeres podamos ser tan tontas como los hombres sin que resultemos más llamativas.
El precio de la ira. De Erika Saldaña
Erika Saldaña, ex-presidsenta del Centro de Estudios Jurídicos CEJPublicado en EL DIARIO DE HOY, 9 septiembre 2019Somos una sociedad violenta. Lo vemos cada día en las noticias de El Salvador, donde no falta el prójimo que irrespeta a los vecinos, que maltrata a su familia, que llega al punto de matar a otro. También lo vemos en las calles, en la persona que le “tira” el vehículo que maneja al resto de carros o peatones, el que pita sin ningún sentido, el que insulta y los que se comportan de manera poco civilizada. Todo es reflejo de refleja la rebeldía e incivilización de una parte de la población salvadoreña, que no ha comprendido las reglas de vivir en sociedad.El último ejemplo representativo de esta incivilización fue el conductor que agredió físicamente a un gestor de tránsito, a quien las buenas costumbres y educación no le alcanzaron en ese momento; no fue hasta que lo detuvo la policía por el delito de lesiones que pidió perdón y entendió que a la autoridad se le debe respeto. Nos cuesta entender de civilidad por las buenas.Ese breve incidente de violencia en los alrededores del monumento al Divino Salvador del Mundo le costó a la persona iracunda una sanción bastante relevante: tres días de detención en bartolinas y $600 dólares en concepto de indemnización. Como reza un popular refrán, “el vivo a señas, y el tonto, a palos”. En una sociedad violenta y en la que hemos estado muy acostumbrados a que este tipo de incidentes no pasan de ser un video viral en redes sociales, esta situación demuestra que cuando se quiere hacer cumplir la ley, se puede. Y todos deberíamos sacar una lección de la misma.En El Salvador no necesitamos más leyes ni que se endurezcan las penas para la infinidad de delitos y faltas que ya han sido creados. Lo que más urge a nuestra sociedad es que las leyes existentes se hagan cumplir sin peros, sin brindar prerrogativas, privilegios y sin hacerse del ojo pacho. Es sumamente necesario que las sanciones ya establecidas sean ejecutadas y que de verdad se conviertan en disuasivos a los infractores para realizar los actos que se encuentran prohibidos. Si no sabemos comportarnos de manera civilizada por educación y convicción propia, es hora que las leyes se hagan cumplir para obligarnos a respetar a los demás.El caso de la agresión al gestor de tránsito debería servir de ejemplo para todos los ciudadanos, que si incumplimos la ley y no nos manejamos de manera adecuada dentro de la sociedad, eso tendrá una consecuencia, pagaremos un precio por no saber respetar los derechos de los demás. El mismo suceso debería servir de ejemplo a las autoridades, que cuando quieren centrar esfuerzos en hacer cumplir la ley y volver efectivas las penas, pueden hacerlo. Esa es la lógica de las leyes: si alguien comete una conducta prohibida, se le sanciona. Y esto sirve de disuasivo para que el resto de personas nos comportemos de manera civilizada.Insisto, todas las personas debemos comenzar por dar el ejemplo desde nuestro círculo cercano, para después exigirle cumplimiento a toda la sociedad. Irrespetar las leyes de tránsito, de convivencia, evadir impuestos, entre otras responsabilidades individuales, son semillas que posteriormente pueden desembocar en actos que afectan a la sociedad. Ahora es momento que adquiramos conciencia, por las buenas, de que existen reglas de conducta que se deben respetar y su incumplimiento acarrea una sanción. Con suerte, el precio de la ira o de las infracciones a la ley no pasa de ser un tema monetario o sanciones leves; no permitamos que estas actitudes se conviertan en tragedias graves para las familias salvadoreñas.
El país de las Maravillas: La corte de los milagros
Prodigios y conjuros Atrapado entre la obsesión reeleccionista y los efectos desastrosos de la lluvia, Daniel Ortega ha recurrido a “refundir” la Constitución, convocar a una sesión ilegal de la Asamblea y a hablar con el propio Dios, para que no quede dudas que él como su majestad divina, es omnipresente (está en todos partes), es omnipotente (puede hacer lo que le da la gana) y es omnisciente (sabe todo). Su consorte, que preside el Ministerio de la Magia aseguró -teniendo como testigos a una bancada de reverendos evangélicos y a un cardenal católico de planilla- que “Dios nuestro Señor opera milagros porque desde el jueves pedíamos que este fenómeno que nos amenazaba (el huracán) se desviara”. Algo perfectamente normal dado que según afirmó “Nicaragua es un país donde se producen milagros y prodigios todos los días”. Casi podía oírse en el fondo los arpegios de cítaras y arpas cuando Ortega en el momento cumbre alzó en su mano la Biblia y contó que había pedido a Dios que alejara la tormenta. Dicho y hecho: “Dios mandó a desaparecer el huracán”, dijo Ortega, lo que provocó las exclamaciones y el aplauso de los pastores que le hacían coro. Tras estas declaraciones se espera que renuncie el director de INETER y se denuncie la meteorología como una falsa ciencia por haber mostrado en la tele con anterioridad la ruta de desvío del huracán, desmintiendo el milagro. Pero sobre todo, por dejar en entredicho el conjuro “¡Meteolojinx recanto!” usado por Harry Potter y lanzado con disimulo por la primera dama para desviar al Matthew. Indulgencias y bendiciones Si Martín Lutero hubiese visto al grupo de líderes protestantes (¿?) usando la Biblia y el huracán de pretexto para vender indulgencias para el continuismo de Ortega en el poder, seguramente les hubiese hecho tragar sus 95 tesis contra el abuso y la avaricia. La indulgencia era el perdón de los pecados por la iglesia, a cambio de dinero que se colectaba tras contemplar reliquias “santas”. Así, se mostraban frascos con la leche de la Virgen María, paja del pesebre del niño Jesús y hasta el cadáver de un bebé masacrado por Herodes en la iglesia de Wittemberg, misma donde un indignado Lutero clavó su protesta. Era tal el negocio que se decía que “tan pronto como una moneda en los cofres suena, un alma del purgatorio escapa de su pena”. Ante semejante estafa, Lutero mandó a los Papas al carajo y dijo que de ahí en adelante, lo único que valía era la Biblia y la fe en Cristo, declarando que “el tiempo de los milagros ha pasado”. Algo de lo que al parecer no se han enterado ni Ortega ni los reverendos, quienes le dieron sus `bendiciones’ a cambio del respaldo oficial y privilegios: títulos de propiedad de los templos, un “parque de la Biblia” y 25 mil biblias de regalo. Como diría el artífice de la Reforma: “La superstición, la idolatría y la hipocresía cuentan con grandes salarios, la verdad es mendiga”. Dementores y simonías Se ha dicho que la magia es el arte de efectuar prodigios por medio de sortilegios y que la magia se halla en todas las religiones, en forma de milagro. De ahí que Daniel y su consorte no tengan ningún problema en ir y venir de la magia a la religión, siendo que la principal diferencia entre ambas según Durkheim es que la religión tiene siempre una iglesia, mientras que el mago trabaja para sí mismo. En el caso de nuestro presidente, más que en la categoría de mago entraría en la de Dementor esa criatura viscosa y oscura, guardián de la prisión de Azkaban, que absorbe la esperanza y la alegría de la gente y persigue implacablemente a Harry Potter. Mala cosa esta de que los pastores evangélicos no hayan aprendido nada de la experiencia de Simón el Mago –de donde deriva la palabra simonía- que quiso comprar a los apóstoles el poder de transmitir el Espíritu Santo y que significa un verdadero beso del Dementor pues deja a la persona sin alma y sin prestigio (sólo basta ver como quedó el cardenal). Les tocaba pues haber respondido como el apóstol Pedro: "vaya tu dinero a la perdición y tú con él pues has pensado que el don de Dios se compra con dinero” o al menos, repelerlo con el encantamiento de Harry Potter: “¡Expecto Patronum!” Pentecostalismo orteguista Que Daniel Ortega afirme que mantiene una biblia en su cuarto para “consultarla permanentemente” y haya leído el Salmo 91 es cosa increíble hasta para una saga potteriana y sólo comprable por crédulos o tartufos. Se trata de una oración de protección que exhorta a tomar a Dios por refugio y si uno lo hace, será guardado por el cielo, librado de los poderes de las tinieblas, cuidado por ángeles y triunfará sobre los enemigos. La parte que le repica al señor presidente es la que dice: “No temerás los miedos de la noche, ni la flecha disparada de día, ni la peste que avanza en las tinieblas, ni la plaga que azota a pleno sol. Aunque caigan mil hombres a tu lado y diez mil a tu diestra, tu permaneces fuera de peligro; su lealtad te escuda y te protege”. Con este salmo, que a mi me suena como a la Oración del Puro que invocan delincuentes y ladrones, Ortega abrió la rogativa que -como en una corte medieval- se realizó con los predicadores para alejar la tormenta. Como la biblia es la palabra de Dios y “nuestro presidente la tiene” según dijo un pastor, entonces está salvo por la magia de la fe de estos pentecostales y se “sacraliza” la política del poder. No sé por qué esto me recuerda aquello que dijo Jesús a sus discípulos: “No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos, no sea que las huellen con sus patas, y volviéndose os despedacen”.(Confidencial/Nicaragua)
Matar y morir por Hugo Chávez
"Bienvenidos a La Piedrita en paz. Si vienes en guerra, te combatiremos. Patria o muerte". Ni la policía ni la Guardia Nacional están autorizadas a entrar en los dominios del Grupo de Trabajo La Piedrita en el barrio 23 de Enero de Caracas, uno de los más populosos y duros de la capital venezolana, ubicado apenas a kilómetro y medio de Miraflores, el Palacio de Gobierno. Sólo en días concretos, como esta semana pasada cuando el presidente Hugo Chávez fue de visita para celebrar un acto de campaña, los combatientes de La Piedrita admiten con cierto recelo que haya en su zona otras armas distintas a las suyas, las de la Guardia de Honor presidencial. Lo hacen como una cortesía más hacia la revolución, por la que los integrantes de La Piedrita -y de otros cinco colectivos del barrio que cumplen funcionen parapoliciales- dicen estar dispuestos a morir y a matar. "Somos un colectivo que hace trabajo social, pero también, como dijo nuestro comandante Hugo Chávez], estamos armados y dispuestos a defender esta revolución por la vía de las armas", asegura Valentín Santana, líder del grupo. La Piedrita cuenta sólo con unos 50 hombres, pero controla un área de bloques de hormigón, casas humildes y ranchos en los que viven unas 3.000 personas. Ése es también su campo de entrenamiento. Así como la policía respeta los límites de su territorio, Santana también respeta el espacio de otros "colectivos" que hacen vida en el barrio y que están tan comprometidos con el Gobierno y algunos casi tan armados como el suyo: la Coordinadora Simón Bolívar, el grupo Carapaica, el colectivo Montaraz, los Tupamaros, Alexis Vive y, en el centro de la ciudad, el partido Unidad Popular Venezolana.El 23 de Enero es sinónimo de revolución; su nombre conmemora la caída de Marcos Pérez Jiménez -el 23 de enero de 1958-, el último dictador venezolano que durante 10 años se reeligió en el poder.Santana admite sin reparos y con "dignidad revolucionaria" que fueron ellos quienes, a principios de esta semana, arrojaron bombas lacrimógenas contra la sede del Vaticano en Caracas y contra la residencia de Marcel Granier, director de la televisión privada RCTV. También reconoce la autoría de ataques anteriores contra el canal de noticias Globovisión, contra el Arzobispado de Caracas y contra la casa de Miguel Henrique Otero, director del diario El Nacional.No era un secreto, tampoco. Públicamente, La Piedrita ha declarado "objetivos militares" a todos los medios de comunicación contra los que ha actuado. Santana dice, incluso, que él estaría dispuesto a llegar más allá: "Ellos están conspirando de manera abierta contra la revolución bolivariana y ya está bueno de que le falten el respeto a nuestro presidente. Y sí, son objetivos militares. Si nosotros los llegamos a pescar, ten por seguro que los vamos a ajusticiar. Si agarramos, por ejemplo, a Marcel Granier director de RCTV], lo vamos a pasar por las armas, sin vacilación lo vamos a hacer". Correrían la misma suerte el director del diario El Nacional y el director de Globovisión, si se los cruzara por la acera.Pero desde hace 23 años, cuando fundó su grupo, Valentín Santana rara vez se mueve del barrio. "Aquí estamos en guerra, compañera", afirma. Asume que las calles, los centros comerciales, están vedados para él. Sólo sale del barrio para ir a su trabajo -vaya paradoja- como supervisor de seguridad de la Universidad Central de Venezuela (UCV), uno de los dos centros públicos de Caracas que más se ha movilizado contra el Gobierno de Hugo Chávez. Desde los años sesenta y hasta que la revolución llegó al poder, la UCV solía ser una trinchera de los grupos radicales de izquierda del 23 de Enero. Pero los tiempos han cambiado. Santana ya no comparte las causas políticas de estos estudiantes, las combate y mantiene con ellos una especie de pacto de caballeros que le permite hacer su trabajo: "Yo les he dicho: ustedes se meten conmigo, y yo les vuelo la cabeza. Yo hago mi trabajo de seguridad, si se meten conmigo, ten por seguro que no me quedo tranquilo", recalca.El Gobierno tiene una relación ambivalente con La Piedrita. En una ocasión, el presidente Hugo Chávez les llamó "terroristas", pero la semana pasada les envió un saludo, como parte de los colectivos sociales que trabajan en la campaña por la enmienda constitucional. A propósito de los ataques con gases lacrimógenos de la última semana, el ministro de Interior y Justicia, Tarek El Aisami, ha pedido que no se estigmatice a La Piedrita. En cambio, la defensora del pueblo y ex diputada del PSUV, Gabriela Ramírez, dijo que pediría al Ministerio Público que investigara los atentados y las agresiones contra marchas estudiantiles, porque cree que "las peleas electorales se ganan con votos y no con balas".Tanto los directores de los medios como sus trabajadores ya han denunciado la amenaza de estos grupos en la Fiscalía General de la República, y desde hace un par de años están amparados por medidas cautelares de protección emitidas por la Corte Interamericana de los Derechos Humanos. Pero eso no les ha eximido de seguir siendo un "objetivo militar". Además de las razones políticas, Santana tiene motivos personales pendientes para que sus objetivos no cambien: "Cuando hablo de matar a una persona, hablo del enemigo. Esos carajos nos obligaron a activarnos de esa manera. Los primeros cinco años de La Piedrita eran pura cosa cultural. Pero la derecha empezó a avanzar. A mí me mataron a un hijo, la derecha lo mató. Eso nos obligó a entrenarnos, a prepararnos. Y desde que me quitaron a mi hijo, una parte mía se convirtió en un monstruo".(El País, Madrid, 26 de enero 2009)
Our Reality Has Not Been Magical
An interview with Horacio Castellanos Moya With a newly-elected leftist government in El Salvador, exiled Salvadoran novelist Horacio Castellanos Moya is optimistic about the future of a country that once responded to his novels with death threats. One night in the summer of 1997—a week after the publication of his third novel, Revulsion: Thomas Bernhard in San Salvador—Horacio Castellanos Moya’s mother received a midnight phone call: “We’re going to kill your son.” The message was a wake-up call not just for Castellanos Moya’s mother, but also for a writer who, like many of his peers, had hoped the conclusion of his country’s civil war might usher in a new era of dialogue and peace. In twelve years of violence, from 1980 to 1992, armed conflict between leftist guerrillas, the Farabundo Martí National Liberation Front (FMLN), and an arch-conservative party of merchants and military men, Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), had nearly beaten the nation’s collective head into a coma: right-wing death squads raped nuns and gunned downed priests in their pulpits; college students dropped their books so they could shoot at each other with automatic rifles; revolutionary leaders, in a paroxysm of passion and confusion, executed the country’s beloved revolutionary poet, Roque Dalton; the tortured bodies of peasants who’d supported the wrong side appeared regularly on rural roads. Seventy-five thousand graves were dug during those twelve years. Despite the signing of peace accords in 1992, in the years following the civil war many more bodies were still to be buried—a result of soaring poverty, rampant crime, and gang violence, one of the most corrupt military and police forces in the world, and politicians who still seemed trapped in a state-of-siege mentality. Receiving threatening phone calls in the years after the war, says Castellanos Moya, “did not make you special.” Born in 1957 in Tegucigalpa, Honduras, Castellanos Moya moved to San Salvador at the age of four and lived there until 1979, when he left to attend York University in Toronto. On a visit home to his mother in 1980, he got his first real taste of the violence of war. In downtown San Salvador one day, he recalls, he found himself at a demonstration of unarmed students and workers. He watched the massive procession from the sidewalk. Suddenly, snipers—government “security” officers—appeared on rooftops and opened fire on the marchers. At least twenty-one people were killed. Like many in the crowd, Castellanos Moya ran. He left El Salvador that March and did not go back to Canada to resume his studies. Instead, he traveled to Costa Rica and Mexico, where he found work as a journalist, writing sympathetically about the student and worker organizations that had joined forces to form the FMLN in the wake of the January massacre. But soon, as he supported the guerrillas and their rebellion from afar, he became disillusioned by violent in-fighting within the party and what he describes as its gradual “Stalinization.” In 1991, he returned to El Salvador to start a magazine, hoping to take advantage of the new space for dialogue he imagined would be opened by the end of the civil war. The right hated the publication, the left wanted nothing to do with it, he says. The magazine eventually folded. In nine novels, written in rented rooms and friends’ apartments as he worked as a journalist abroad, Castellanos Moya has voiced the sense of loss and frustration felt by an entire generation of Latin Americans in the aftermath of the revolutionary conflicts of the nineteen eighties. From Senselessness, a twisted and poetic descent into one man’s confrontation with the recent history of genocide in Central America (published in English by New Directions last May), to The She-Devil in the Mirror, which follows the murder of a high-society Salvadoreña into the shadowy corners of political power (to be published in English this September, also by New Directions), to Revulsion: Thomas Bernhard in San Salvador, in which the Thomas Bernhard-esque main character, Edgardo Vega, returns to El Salvador after eighteen years to deliver a 119-page diatribe against his country of birth—Castellanos Moya has captured the disappointment of post-war El Salvador. “Human stupidity has no limits, particularly in this country,” says Vega, in an especially vitriolic section of Revulsion, in which the founder of ARENA is a “criminal psychopath killer of archbishops turned into a heroic forefather,” FMLN politicians are “rats that traded their preaching about justice for any crumbs that fell from the table of the rich,” and the national university is a “turd expelled from the rectum of the militaries and the communists.” It was lines like these, in fact, that so enraged some Salvadorans they took to the nation’s op-ed pages and demanded the book be banned. They threw the novel out windows and into fires and onto trash heaps. They called up Castellanos Moya’s mother and told her they would kill her son. They convinced the author, finally, that in El Salvador there could be neither saviors nor critics. Nothing, Castellanos Moya thought, would ever change. And so once again he left the country, this time for good. But this March 16, in an historic presidential election, something did change in El Salvador. Led by former journalist Mauricio Funes—a man who wears sleek sport coats in place of olive combat fatigues and who has commented on other nations’ civil wars as a wildly popular CNN en Español host, but has never fought in one himself—the FMLN accomplished what they were never able to do with guns: take power from ARENA. Now, Funes and the FMLN will inherit a country in which the terror of war has been replaced by the terror of constant crime, where gangs and political death squads slay civilians on the streets of San Salvador regularly, and the implementation of free-market policies like CAFTA have done little to bolster a national economy that provides less than half of the country’s population with adequate food or shelter. Will the party be able to save the country this time? What has changed since the civil war? What will the future hold for El Salvador? I spoke with the acclaimed author by telephone the night after the election, from his apartment in Pittsburgh, where he’s lived since 2006 as part of a city-sponsored “Writer-In-Exile” program. When I called, he answered in a jovial voice that seemed at odds with the glowering author photos adorning the backs of his books. He was on a long-distance call with his mother in El Salvador, he said, could he call me back in twenty minutes? When I spoke with him later, he apologized and explained that even after twelve years of her son living in exile, “She still worries when the phone rings late at night.” -Wes Enzinna for Guernica Guernica: What was your mother’s reaction to the elections? Horacio Castellanos Moya: Oh, she doesn’t care about politics. Guernica: What was your reaction? Horacio Castellanos Moya: I think the fact that ARENA accepted the results is incredible. I mean, wow. I was shocked they accepted defeat so easily. Guernica: You were worried they might stage a coup, you mean? Or try to rig the results? Horacio Castellanos Moya: Yes, it would not have surprised me. I mean, you’ve got to remember the history of ARENA. They’ve ruled the country for the past twenty years. The party was created by the core group of people responsible for creating the death squads; it was a kind of fascist party from the beginning. Of course, it’s changed a lot, they’ve brought in new faces, a lot of younger people, technicians, newer politicians with different ways of thinking... They’ve evolved a lot, but there is a kind of ideological element in the party that is still very fascist... I mean, have you heard their anthem? [Singing] El Salvador will be the tomb where the Reds meet their end!... I mean, that’s their anthem to this day. Guernica: And what about the FMLN? They’re not exactly “reds” anymore, are they? Horacio Castellanos Moya: Well, no. You have to remember that the FMLN was originally created as a kind of defensive organization. Any time there was an opposition party that wanted to fight for power through democratic means, the military destroyed this party, their leaders were tortured, their leaders were killed. This was the story in the thirties, in the forties, in the fifties and sixties. So it was very natural that in the seventies, after so many decades of not having any possibility of participation or winning an election, it was very normal when the new movement decided, okay, here there is no democratic way, the only way is to take weapons against these guys, because these guys only understand the language of weapons. Guernica: But you were eventually disillusioned with the FMLN. How did that happen? Horacio Castellanos Moya: The killing! ARENA, of course, was responsible for a lot more violence on the whole, but the FMLN committed their share, too. They were a guerilla army. And of course, you start to read... I started to learn about the history of the communism and all the killing of Stalin and how this system didn’t work... but, at the same time, you see that inside the FMLN, they had all these crises in their own ranks. In 1983, with what happened between [Ana Melinda] Montes and [Salvador Cayetano] Carpio [in January of that year, these two high-level FMLN commanders were killed in a bizarre murder/suicide after a doctrinal dispute within the party], I say, fuck, these guys are crazy. So that’s when I thought, wow, this is very easy to just to get the same kind of shit that you are criticizing of your enemy. Guernica: And what about Roque Dalton? Were you aware of who he was before he was murdered? You had read his poetry already? Horacio Castellanos Moya: Yes, of course. I mean the big contradiction for the Salvadoran writer of the seventies and eighties was the fact of belonging to the left and knowing that the left had—well, “the left” is a really general way of saying it—the left had an armed organization that had killed Dalton in a very horrible way, without any common sense around the killing, just passion and rivalry. Guernica: And how has the FMLN changed between then and now? Horacio Castellanos Moya: Well, the FMLN was created as a socialist organization, to build socialism—and by and large, the idea of socialism was defeated when the Soviet Union collapsed. It was a boon. Not only for them, it was a problem for all of the Latin American left. Their political identity, to say the least, was in crisis. Besides that, the FMLN has had so many factions, so many splits, and people have defected. For a long time, the party was controlled by a group of leaders that, for me, represented the worst creation of the old communist ideology, in the sense that these leaders were educated in the time of Brezhnev and they represented that old Stalinism. So I think the fact that in this election, the FMLN had the intelligence and the audacity of proposing Funes as their candidate, that could only happen because the old communists have died out. It’s a renovation of the party, a new attitude, a new openness. They are becoming a much more modern, contemporary leftist party. Now they are a lot more like Lula [da Silva] in Brazil or [Michelle] Bachelet in Chile, for example, than like Castro.Guernica: Does this mean they’ve given up their effort to really change Salvadoran society, to redistribute wealth in some substantial way, for example? I was just listening to Funes’s acceptance speech and was surprised to hear him invoking liberation theology, talking about how the country was going to follow the “preferential option for the poor.” Horacio Castellanos Moya: I don’t think there is going to be any attempt to redistribute wealth, no. The liberation theology stuff, I think, is just rhetoric. Of course, a big challenge for Funes is going to be with his own party, with the old guard members who are still committed to some of the revolutionary ideals of the civil war. But I think now they are a minority. What we’ll probably see instead is that [the FMLN] will actually try to tax the rich in the country. This is the big challenge for many societies that have been ruled by rightwing parties, fiscal reform, tax reform, because in those societies, rich people don’t pay taxes... I don’t know if you remember a couple years ago when all the Salvadoran banks were sold to international banks? They didn’t pay a single cent in taxes, because all the assets of the Salvadoran banks were registered as the property of entities in these little islands in the Caribbean. That’s the idea of “nation” these people have. Guernica: What about Revulsion? What prompted you to write it? And why did you think Thomas Bernhard would be a suitable voice for describing these things about El Salvador, all these things you were frustrated with?Horacio Castellanos Moya: This was the thing with Revulsion. I didn’t do any planning, just one day, the last day of 1995, it was six o’clock and I was just in a very bad mood, expecting to go to a New Year’s Eve party, and I was in Mexico at that moment and this kind of, this frustration that we were talking about, I started to write and at the time I had been reading Thomas Bernhard, and his voice had infected me, had infected my mind, so I thought, I’ll get it all out. So I wrote that book, in three weeks or something like that, and then I put it in my drawer. Three years later it was published. But I was not thinking about it; it wasn’t that I decided, “Bernhard is the voice for El Salvador!” Guernica: But Vega’s criticisms of the country are so vivid, they’re sort of maniacally specific. I mean, it seems like they must have come easy to you as you were writing the book. Horacio Castellanos Moya: Okay, well, when I was writing, I suddenly discovered not only that I had all these ideas in my head, but I discovered I had this character through whom I could tell all the biased prejudices, all the phobias, that I heard in El Salvador. This character is a kind of cocktail of every complaint I’ve ever had or heard about El Salvador. But people think that because of that book that I don’t like pupusas [a thick corn tortilla snack popular in El Salvador, which Vega describes as tasting like feces]. I like pupusas. Or they think I don’t eat chuco de canchas. I love chuco de canchas. Guernica: What about your disappointment in the failure of the revolutionary promises of the eighties, especially your disappointment over the relationship between, I don’t know what you’d call it, the cultural and political left? I mean, that’s a theme in El asco [Revulsion], and in lots of your other books too, especially your first one [La diáspora, which tells the story of a group of young exiled Salvadoran intellectuals living in Mexico City]. Horacio Castellanos Moya: Yes, that is a great concern. For me and for others, we thought that the creation of new political movements, new political institutions, would open up the possibility of having democracy after the civil war. And at the same time, we thought this meant there was going to lead to a creation of cultural institutions that were going to create a new kind of society, right? We thought we could do that; we started a newspaper [Primera Plana, which ran from 1994-1995]. But after a few years, we discovered that Salvadoran society was just exhausted, there was nothing new in a cultural way. We tried to do things in a new way, but the political forces, on the left and the right, they ignored us, they didn’t want to have anything to do with us. They just wanted to share the cake. So all the things we thought about how peoples’ consciousnesses might be changed, well, it wasn’t true, not only in El Salvador, but everywhere—it doesn’t happen like that in society. I think we were very naïve. So that’s the frustration. Guernica: That seems to be a core experience of your generation of Latin American writers... I’m thinking of Élmer Mendoza or Rafael Menjívar Ochoa, who seem to have similar experiences of political disenchantment or exile. And Roberto Bolaño, too, of course. You were friends with Bolaño, right?Horacio Castellanos Moya: Yes, a little bit. We exchanged letters. He said some very nice things about my books. Of course, his books are incredible. Guernica: Would you say that you feel like part of a particular generation of Latin American writers? And what are the primary concerns of your generation? Horacio Castellanos Moya: Yes, I think that I am part of that generation of Latin American writers who still had a kind of political approach to our societies, we supported the forces of change in those societies. For us, we wanted to create a new kind of society but politics were just a little bit of that, politics was just a little part. We were very disappointed that the political revolutions didn’t mean that, well, they didn’t mean the total change of society we wanted, they didn’t mean the change of peoples’ mentalities. After all these political conflicts ended, we said, why? What was all this for? Guernica: How do you respond to that in literary terms? Horacio Castellanos Moya: Well, that’s the big challenge, I don’t know. Everyone tries to do their own work on that. It just happens to you, you have to have your own way... Guernica: But what about in specific ways? I mean, specific attempts to deal with the new political realities, or the loss of old political ideas, in formal terms—for instance, the turn in recent years away from testimonio literature, or the turn away from magical realism? How were these shifts an attempt to deal with the failure of revolutionary politics, or how did they come out of your experience of disillusionment, how were they formal responses? Horacio Castellanos Moya: That was very important. In terms of magical realism, I think that the Latin American writers of my generation, we are much closer to American writers in the sense of how we understand the world and what we talk about, than we are to magical realism. The universe or the world that García Márquez describes, for me it’s like he’s talking about Africa or Persia. I’m much closer to literature that has to do with Los Angeles or some other American city than I am to Macondo. I mean, what does our reality have to do with magical realism? Our reality has not been magical. But testimonio literature [the most famous example of which is probably I, Rigoberta Menchú, an autobiography written by the indigenous Guatemalan guerrilla, Rigoberta Menchú], of course, was a very important genre of the seventies and eighties. But for my generation of writers, we thought that testimonio had become a kind of new church, a new genre, that you were supposed to write if you were political, and you were supposed to believe in the truth of these novels, the literal truth... Why? Because the backbone of testimonio is historical truth. You know, “I was the victim, and I suffered that, and you have to hear me, and once you hear me, you will accept or adopt my political position, and my story is the truth.” And what was our reaction? We rejected all this. We rejected this type of narrative. Guernica: But what was the problem you saw with it? Did you think there was some connection between this type of writing, this claim to truth-telling and the way it was being used, and the way revolutionary politics were done in the eighties, the way parties put forth their own narratives, revolutionary parties trying to sell you, trying to convince you, with their ideology? Did they seem like they were trying to tell the same types of narratives? Horacio Castellanos Moya: Yes. Exactly. What we realized was that reality is more complex... There is not one true narrative... It’s when you believe that there is, believe it totally, that’s when you end up with problems.Guernica: And this, for you, was a new problem in literature, right? I mean, at this time, there was plenty of suspicion about the truth-telling narratives that were represented by something like testimonio, and maybe by modernism in general, and yet you weren’t trying to not do it in an apolitical fashion, or removed from immediate political concerns, in the way that the American postmodernists like maybe Barth or Coover or whoever were doing it. So you were trying to respond in your work to the problems created by the crisis in modernism and realism, but also trying to do it with some of the immediate political concerns still intact? Horacio Castellanos Moya: That’s the challenge for me, yes, because what I’m trying to say in my work is, we have this kind of society, we have these kinds of political problems, with this kind of deep injustice, this is the kind of society we have. And I’m going to create fiction based on this kind of society, but who are the goods and who are the bads, it doesn’t depend on which party they belong to... In fiction, you deal with each character as a human being, you value them because of their particular motivations and passions, and not just because of ideology. Testimonio wanted to assign value to people based on their ideology. The value of testimonio is based on ideology. And it was the same with revolutionary politics. Both were ways of understanding reality and there was a problem with the way we interpreted reality in our literature, and the way we interpreted reality with our politics, and the way we interpreted reality in our heads... They were all connected. Guernica: And so does Funes’s election in some way represent a break with this old way of understanding things, a break with the old ideologies? Is there some correspondence there, between what’s happened in the literature and what’s happened in politics? Horacio Castellanos Moya: Well, maybe. Salvadoran society has experienced two different historical periods in the last thirty years. Twelve years of civil war, and then eighteen years of post-war malaise—I don’t know exactly what you’d call it—but not democracy. Remember, ARENA was created in order to fight communism, not to create democracy. And the FMLN was formed to make socialism, not to create democracy. Funes is, I suppose, a sort of compromise—he’s trying to open a new kind of stage of history, maybe doing away with ideology. He represents, I hope, a new way of looking at things. A new way, maybe, of being plural. But you’ve got to take into account that, in this election, 51 percent voted for Funes, but 49 percent voted against him. So we shouldn’t overestimate how much things have changed.(Entrevista de Wes Enzinna. Publicado en Guernica-a magazine of art and politics)
Mientras Detroit dormía
Cuando pienso en nuestro intento de sacar de apuros a Detroit no puedo evitar reflexionar sobre lo que, desde mi punto de vista, es la norma empresarial más importante en el actual mercado mundial, integrado y digitalizado, en el que el conocimiento y las herramientas para la innovación están tan ampliamente repartidos. Es ésta: todo lo que pueda hacerse, se hará. La única duda es si lo hará uno o se lo harán. Pero no piensen ni por un momento que no se hará algo. Si tienen una idea en Detroit o Tennessee, prométanme que lucharán por ella, porque si no, alguien en Dinamarca o en Tel Aviv lo hará un segundo después. ¿Por qué saco esto a colación? Porque alguien del sector de la automoción en Dinamarca y Tel Aviv ya está desarrollando una alternativa real para el modelo empresarial de Detroit. No sé si esta alternativa a los coches que utilizan gasolina funcionará, pero sé que puede hacerse, y Detroit no está haciéndolo. Y, por tanto, se hará, y apuesto a que, al final, será rentable.Y cuando lo sea, nuestra ayuda de emergencia a Detroit se recordará como el equivalente de verter miles de millones de euros de dinero público en el negocio de la venta por catálogo en vísperas del nacimiento de eBay. Se la recordará como se recuerda el verter miles de millones de euros en el negocio de la música en discos compactos en vísperas del nacimiento del iPod y de iTunes. Se la recordará como se recuerda el verter miles de millones de euros en una cadena de librerías en vísperas del nacimiento de Amazon.com y el Kindle. Se la recordará como se recuerda el verter miles de millones de euros en mejorar las máquinas de escribir en vísperas del nacimiento del ordenador personal e Internet.¿A qué modelo empresarial me estoy refiriendo? A la cadena de coches eléctricos de Shai Agassi, llamada Better Place. Justamente la semana pasada, la empresa, con sede en Palo Alto, California, anunció una alianza con el estado de Hawai para probar en carretera su plan empresarial tras haber firmado ya acuerdos similares con Israel, Australia, la zona de la bahía de San Francisco y, sí, Dinamarca.El sistema de recarga del coche eléctrico de Better Place consiste en generar electrones a partir de una fuente de energía tan renovable como sea posible (como la eólica y la solar) y, posteriormente, introducir esos electrones limpios en una infraestructura nacional para la recarga de coches eléctricos. Ésta está constituida por puntos de carga de electricidad con salidas en forma de enchufe -los primeros se han abierto esta semana en Israel-, además de estaciones para la sustitución de baterías repartidas por el país en cuestión. Luego, todo el sistema se coordina desde un centro de control del servicio, que integra y elabora las facturas.Con el modelo de Better Place, los consumidores pueden comprar o alquilar un coche eléctrico del fabricante francés Renault o de empresas japonesas como Nissan (General Motors despreció a Agassi) y luego comprarle a Better Place kilómetros para sus baterías eléctricas, del mismo modo en que ahora se compra un móvil a Apple y los minutos a AT&T. De esa forma, Better Place, o cualquier empresa de automóviles que se asocie con ella, se beneficia de cada kilómetro que se recorre. General Motors vende coches. Better Place vende kilómetros de movilidad.Está previsto que los primeros coches eléctricos de Renault y Nissan circulen por Dinamarca e Israel en 2011, cuando todo el sistema debería estar listo y en funcionamiento. El martes, el ministro de Medio Ambiente de Japón invitó a Better Place a unirse al primer proyecto para coches eléctricos dirigido por el Gobierno junto a Honda, Mitsubishi y Subaru. Better Place fue la única empresa extranjera invitada a participar y a trabajar con las principales empresas automovilísticas de Japón en la construcción de una estación de recambio de baterías para coches eléctricos en Yokohama, el Detroit de Japón.Lo que me parece interesante de Better Place es que está construyendo una empresa de automóviles a partir de la nueva plataforma industrial del siglo XXI, no de la del siglo XX, exactamente lo mismo que hizo Steve Jobs para revolucionar el negocio de la música. ¿Qué es lo que Apple fue el primero en entender? Para empezar, que la plataforma tecnológica actual permitiría que cualquiera que tuviese un ordenador pudiese grabar música. Segundo, que Internet y los reproductores de MP3 permitirían que cualquiera pudiese transferir música en formato digital a otra persona. Los CD y las compañías discográficas ya no serían necesarios. Apple no hizo más que tomar todas esas innovaciones y reunirlas en un sistema único de creación, compra y reproducción de música que alteró completamente el negocio de la música.Lo que dice Agassi, el fundador de Better Place, es que hay una nueva forma de generar movilidad, no sólo música, empleando la misma plataforma. Lo único que hace falta es la clase apropiada de batería de coche -el iPod en esta historia- y la clase apropiada de red nacional de recarga -la tienda de iTunes- para hacer que el modelo empresarial funcione para los coches eléctricos a tres céntimos el kilómetro. El estadounidense medio está pagando hoy día unos seis céntimos por kilómetro recorrido usando gasolina, lo que también contribuye al calentamiento global y consolida el poder de los petrodictadores.No esperen que una innovación así salga de Detroit. Recuerden que, en 1908, el consumo del modelo T de Ford (10,5 kilómetros por litro) era mejor que el de muchos modelos de Ford, General Motors y Chrysler fabricados en 2008. Pero no se sorprendan de que provenga de un lugar diferente. Puede hacerse. Se hará. Si desaprovechamos la oportunidad de ganar la carrera del Coche 2.0 porque seguimos empeñándonos absurdamente en salvar nuestro Coche 1.0, no se podrá culpar a nadie más que a los nuevos accionistas de Detroit: nosotros, los contribuyentes. (Thomas L. Friedman es columnista del diario The New York Times. La versión en español salió en El Pais, Madrid)
EL DIARIO DE HOY exhibe repudio a censura de Casa Presidencial contra Factum y Faro
OEA y periodistas rechazan bloqueo de Bukele a mediosEl relator de libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, Edison Lanza, condenó que se impidiera acceso de periodistas de El Faro y Factum a conferencia de prensa.POR ÓSCAR IRAHETA SEP 07, 2019- 20:45Un grupo de periodistas a quienes la Presidencia les negó el ingreso a un evento donde Nayib Bukele anunció el lanzamiento de una comisión contra la impunidad y corrupción calificaron el hecho como un acto grave y preocupante contra la libertad de prensa que marca un retroceso en la búsqueda de la democracia en el país.Los profesionales, junto a sus jefes de redacción, exigieron ayer al presidente una explicación sobre las restricciones que tuvieron para entrar a Casa Presidencial a un evento de carácter internacional.Al llamado también se unió el Relator Especial para la Libertad de Expresión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Edison Lanza, quien comentó desde su cuenta de Twitter “que los gobiernos deberían ser neutrales frente a la línea editorial de los medios”.“El día que el Presidente de El Salvador @nayibbukele presenta comisión para investigar corrupción con @OEA_oficial, Casa Presidencial impide acceso de @_ElFaro_, uno de los principales medios de investigación”, expresó el especialista en libertad de prensa.El viernes por la tarde, militares del Batallón Presidencial y empleados de la Secretaría de Prensa de la Presidencia impidieron el ingreso a Gabriel Labrador y Víctor Peña, periodista y fotoperiodista de El Faro, respectivamente, y al periodista Fernando Romero de la Revista Factum.Los periodistas detallaron que a las 3:25 de la tarde, cuando se ordenaron para hacer el ingreso al último portón, antes de llegar al salón donde el mandatario brindó la conferencia de prensa junto a una misión de la OEA para lanzar la CICIES y explicar sus detalles de funcionamiento, se les negó el acceso sin ninguna justificación.Sin embargo, a las 9:57 de la noche, el presidente Bukele publicó un tuit donde escribió : “Los de Factum y El Faro se están haciendo las “vístimas”, pero esta es la realidad”. Junto al mensaje, Bukele envió un comunicado donde justificó la restricción a los periodistas aduciendo “un mal comportamiento”.“Desafortunadamente en la última conferencia del gabinete de Salud, un periodista de El Faro irrumpió en el evento con gritos sin motivo alguno y sin control. Este mal comportamiento no ha sido el único, ya que en otra conferencia de prensa, también se tuvo un hecho similar con un periodista de la Revista Factum, quien se dirigió de manera irrespetuosa y petulante a personal de la Casa Presidencial”, reza el comunicado.Agrega que “esta medida se mantendrá en firme hasta que no exista un compromiso serio por parte de los medios de comunicación restringidos este día“.Para el jefe de redacción de la Revista Factum, César Fagoaga, la actitud del Ejecutivo se debe al malestar sobre preguntas incómodas que se le realizan a un gobierno que es alérgico a la crítica.Fagoaga añadió que en varias ocasiones los periodistas de Factum han tenido que alzar la voz porque se les ha negado el derecho a preguntar a pesar de estar anotados en la lista y seguir protocolos establecidos.“Nos preocupa mucho que se venda la idea en el comunicado que ese es un castigo por hacer nuestro trabajo. Alzar la voz para cuestionar no es una falta de respeto, lo vamos a seguir haciendo. Es lamentable que en un evento donde se persigue la transparencia, donde se busca echar luz donde hay oscuridad y corrupción, se limite a los periodistas a realizar nuestro trabajo”, expresó el jefe de redacción de Factum.Fagoaga lamentó la actitud del presidente en ridiculizar el tema y la actitud infantil en publicar ese tuit junto al comunicado.“Queremos que se rectifique y se nos diga cara a cara una explicación clara y precisa. Hoy fuimos nosotros, mañana serán otros colegas y eso no puede ocurrir para el periodismo libre. El presidente está mintiendo y eso es preocupante”, razonó.Por su parte el director de El Faro, José Luis Sánz, declaró que es un precedente gravísimo, sobre todo si considerando que el Gobierno apenas está dando sus primeros pasos, además de que se trataba de un evento en el cual se iba a presentar una de las principales apuestas del presidente actual.“Vamos a tomar las medidas a nuestro alcance para que esto no se repita y trataremos de hacer valer nuestros derechos y los de nuestros lectores. Y esperamos que el ejecutivo rectifique y además se disculpe en público por lo sucedido”, señaló Sánz.La organización Acción Ciudadana difundió un comunicado donde calificó la decisión del gobierno como “una censura gubernamental a medios de comunicación que vulnera los derechos y principios constitucionales y que no promueve una sana convivencia democrática”.“Exhortamos al presidente a que respete irrestrictamente la libertad de prensa, manteniendo un posicionamiento neutral ante la línea editorial de los medios, tanto como los que son afines como aquellos que no”, detalla el documento.No es democrático excluir a los medios que incomodan. De Salvador SamayoaNo está claro si excluir de la conferencia de prensa en casa presidencial a dos relevantes medios digitales, El Faro y Factum, fue una orden del presidente o de su secretario de prensa. En cualquier caso es inaceptable.Si fue el presidente debe rectificar. Si fue el secretario, lo deben reprender. La exclusión completamente antojadiza vulnera en su esencia el derecho a la información y la libertad de expresión.Es una conducta antidemocrática. Es un mensaje nefasto a través del cual se deja claro a todos los medios que si hacen reportajes incómodos para el poder serán castigados por el poder. Eso es censura. Es una conducta propia de los que rechazan el pluralismo, de los que quieren sepultar cualquier forma de oposición, de los que temen la crítica de los independientes y la rebeldía de los valientes, de los que saben que su posición se desmorona si se somete a una buena argumentación. Además es una señal de cobardía política y debilidad. Los gobiernos que así proceden, aquí o en cualquier parte, luego toman otras medidas para suprimir la prensa independiente.Además, deben saber que esas conferencias de prensa a las que no dejan entrar no son fiestas privadas que dan en su residencia particular. Son actividades que pagan con nuestro dinero, el de todos, no solo el de sus amigos, cuyo único propósito legítimo es que la gente se informe a través de los medios que más le gusten, no a través de los medios que más le gusten al gobierno. Las puertas de la presidencia no deben tener matones de discoteca decidiendo a quién no dejan pasar.El presidente Bukele no necesita estos enfrentamientos con los medios de comunicación. Ha arrancado con buena imagen nacional e internacional. Tiene todo para triunfar, pero la prepotencia de sus asesores lo puede perjudicar.#YEstoApenasEmpieza. De Paolo LuersLas tendencias autoritarias de los gobiernos prosperan hasta donde nosotros (los ciudadanos, los medios de comunicación, las organizaciones civiles, la oposición) estemos dispuestos a permitirlo.La decisión de Casa Presidencial de negar el acceso a una conferencia de prensa conjunta de la presidencia con la OEA a dos medios (El Faro, Revista Factum) es una grave restricción a la libertad de prensa. La forma en la que Casa Presidencial luego justifica esta medida en un comunicado oficial y declara que la va a sostener en el futuro la vuelve aun más preocupante. El hecho que el presidente de la República reprodujo este comunicado con el comentario cínico “Los de Factum y el Faro se está haciendo las ‘vístimas’, pero esta es la realidad” convierte un error de su secretario de prensa en un escándalo de su presidencia.Los periodistas de otros medios, a quienes hasta la fecha no se ha negado el acceso a la conferencia de prensa, podríamos decir que Revista Factum y El Faro son medios que han criticado fuertemente lo que llaman el ‘periodismo tradicional’ que ejercen nuestros medios, y por tanto que no tenemos porque defender sus derechos.Esto sería una muestra de gran miopía. Si nos pronunciamos en contra de esta actitud autoritaria del gobierno, no lo hacemos en favor de El Faro o Factum, sino porque nosotros seríamos los siguientes blancos de este tipo de atropellos. Las diferencia de concepción editorial entre nuestros medios no tiene ninguna relevancia a la hora de pintarle la raya a un gobierno que está probando hasta dónde puede llegar con sus tendencias autoritarias.Por esta razón, es nuestro deber como comunicadores enfrentarnos juntos, sin consideración de diferencias políticas o competencia editorial, a cualquier intento de restringir la libertad de prensa, como en el caso de la exclusión de dos medios de las conferencias en Casa Presidencial.La democracia muere en la oscuridad. De Ricardo AvelarEn materia de libertad de prensa, al igual que en otras actitudes democráticas como la probidad o la honestidad, o se es respetuoso siempre o simplemente no se es. La apertura con los medios equivale a la disposición de transparentar la gestión pública y mostrar cómo se transforman las ideas en proyectos para la ciudadanía y el país. Esta apertura no admite peros o excusas y no debe ser circunstancial o utilitaria, dando la cara únicamente a quienes hacen coberturas amigables y cerrando las puertas a quienes incomodan con buenas preguntas en los momentos adecuados.El rol del periodismo no es quedar bien con quienes gobiernan o ser caja de resonancia de las iniciativas presidenciales sin matices o contrastes. Por el contrario, su rol y contribución a un sistema democrático es el de llevar luz a la ciudadanía en temas esenciales, como la forma en que se ejecutan los fondos públicos, las prioridades del gobierno, cómo pretenden solucionar los principales problemas o quiénes proveen bienes y servicios al Estado, entre muchas otras áreas.Un gobierno que bloquea a medios incómodos no está afectando a periodistas o editores, sino a una ciudadanía que tiene derecho a saber cómo se maneja la cosa pública. Además, al obstaculizar la luz que trae el periodismo, abre la puerta a abusos, excesos y contubernios. En resumen, como dicta el lema del Washington Post: “la democracia muere en la oscuridad”.
Carta a los oficiales de la PNC: ¿Una Tandona 2
Estimadosamigos:Circula entre los oficiales de la PNC un proyectolegislativo llamado “Ley de Compensación por Retiro para Personal de Carrera dela PNC”. Detrás de este título bombástico se esconde algo mucho más sencillo:el intento de un grupo de comisionados de negociar su salida dorada, antes deque los echen..Es obvio que el próximo presidente va atener que hacer muchos cambios en la PNC, incluyendo de dirección. Es obvio quemuchos de los comisionados, sobre todo los que durante años han sido responsablesde estrategias policiales fracasadas, se tendrán que ir.Con este proyecto de Ley tratan derecetarse una salida dorada: retiro voluntario con una pensión equivalente al100% de su último salario. Pero esto no es todo: una “compensación” de 200 mildólares (para el que haya sido Director General 260 mil; para SubdirectorGeneral 250 mil; para Subdirectores 240 mil). Y como todavía no fuerasuficiente, además se recetan “el uso de armas, municiones, vehículos ypersonal de seguridad”, por 5 años a partir del retiro. Es cierto que se necesita un plan deretiro para la PNC, sobre todo para los oficiales de más alto rango, pertenecientesa las tres promociones “fundadoras”. No solo porque varios de ellos hanfracasado, o porque han sido protagonistas de la excesiva politización de laPNC, sino también porque estas promociones hacen un tapón, que no permite elascenso al poder de las siguientes promociones. Con razón en la PNC los llaman “LaTandona 2”, en comparación con la famosa promoción de militares que al final dela guerra acaparró todo el poder en las Fuerzas Armadas. Sus integrantes porcierto recibieron “compensaciones” similares para aceptar y no obstaculizar ladepuración y a reducción de la Fuerza Armada. Muchos dijeron que eran sobornos,otros hablaron de extorsión.Estoy de acuerdo que hay que darles unasalida digna a los comisionados. Pero tampoco hay que aceptar ningunaextorsión. Ellos han acumulado mucha información, que podría complicarle lavida al gobierno que salga electo, igual que a todos los partidos. Además tienencapacidad de estorbar el proceso necesario de reorganización de la PNC. Algunos jefes policiales quieren usar el poder quetienen ahora para obligar al Estado a concederles privilegios que irían muchomás allá de una salida digna. Esta salida dorada es indigna, porque escorrupta. No hay que hacer caso a esta extorsión. Y los oficiales decentes y profesionales,que quieren asumir responsabilidades en la PNC, deben distanciarse claramentede este chantaje. Saludos y Feliz Año Nuevo, (MAS! y EL DIARIO DE HOY)
¡Basta ya! mexicano
En México capital y en otras 55 ciudades del país azteca estaban convocadas anoche -madrugada en España- grandes movilizaciones ciudadanas contra el horror cotidiano del crimen organizado, el narco, el secuestro, la corrupción policial, responsable de buena parte del crimen y de la impunidad que cubre a los criminales: casi 3.000 asesinatos de este tipo desde enero (más que en todo el año anterior) y sólo el 1,7% de los delitos llega a los tribunales. El ¡basta ya! mexicano se desencadenó con el secuestro y asesinato de un chico de 14 años, hijo de un empresario que había pagado el rescate ignorando con buen criterio a la policía, puesto que uniformados eran los asesinos. En México se producen miles de secuestros y muertes violentas al año, lo que incluye la de 320 policías en 2008, pero en su mayoría no en cumplimiento del deber, sino como parte del crimen mafioso. Los últimos, 12 cadáveres en Yucatán.El precipitado de tanta conmoción es un plan a tres años del Gobierno de Calderón, que implica a los tres poderes: el ejecutivo federal y de los Estados, con la purga de la policía, la construcción de cárceles y un presupuesto extraordinario para seguridad en 2009; el legislativo, con el endurecimiento de las penas contra el secuestro; y el judicial, con la formación de magistrados especializados en la lucha contra el nuevo crimen globalizado.El Acuerdo Nacional para la Legalidad y la Seguridad está apoyado por la totalidad de los medios de comunicación, entidades ciudadanas, fuerzas económicas y partidos. El problema no es sólo del Gobierno federal, ya que el 80% de las fuerzas policiales depende de los gobernadores y alcaldes. El problema es estructural. El PRI, con su dictadura perfecta, fabricó una legalidad a su servicio, desde la ley a la policía, que se revela incompatible con la democracia. Refundar México no es sólo votar cada sexenio.
El apostol de los indignados
Nació en 1917 en medio de los horrores de la Primera Guerra Mundial, y fue combatiente de la resistencia francesa contra el nazismo en la Segunda. Prisionero de guerra, fue enviado por la Gestapo al campo de concentración de Buchenwald. Dado que su vida se puede leer como una novela de suspenso, es pertinente consignar que logró escapar 48 horas antes del día de su ejecución. Con tan prolongada y singular historia, cualquiera estaría resignado al retiro confortable. A los 93 años de edad, no obstante, Stéphane Hessel se ha convertido en el apóstol de los indignados. Nacido en Berlín, fue criado desde niño en Francia, y esto explica su participación en la resistencia. Para completar el perfil del personaje, baste anotar que fue uno de los 12 redactores de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, aprobada por Naciones Unidas en la Asamblea General celebrada en París, en 1948. Un pequeño panfleto de 50 páginas, editado en varios idiomas, se ha convertido en una especie de biblia de los indignados que, en varias ciudades europeas, protestan contra las banalidades del debate político. No todo es obra de Hessel, desde luego, pero sus brevísimos textos pasan de mano en mano y parecen estimular o justificar a quienes acampan en la Puerta del Sol en Madrid y en otros lugares del Viejo Mundo. El pequeño panfleto lleva por título ¡Indígnate! La edición que leo, Destino 2011, tiene prólogo del español José Luis Sampedro, también nacido en 1917, también indignado. Al terminar de leer los siete brevísimos textos de Hessel, la pregunta es obvia: ¿por quién doblan las campanas? Doblan contra la indiferencia, contra la pasividad, contra la resignación. El primer capítulo se titula "Indígnate", y es como una autobiografía mínima pero intensa del personaje. Hessel no necesita demasiadas palabras. Leamos: "Noventa y tres años. Es algo así como la última etapa. El final ya no está muy lejos. ¡Qué suerte poder aprovecharlos para recordar lo que fueron los cimientos de mi compromiso político: los años de resistencia y el programa elaborado hace 66 años por el Consejo Nacional de la Resistencia". Stéphane Hessel mira al pasado con absoluta confianza. O mejor, con orgullo. Reivindica los principios sustentados y sostenidos entonces, cuando la democracia se contraponía al totalitarismo de Adolfo Hitler. Entre esos postulados, el de una prensa independiente era una condición indispensable para la democracia. "La resistencia ­anota Hessel­ propuso una organización racional de la economía que garantice la subordinación de los intereses particulares al interés general, libre de la dictadura profesional instaurada a imagen de los Estados fascistas". Protagonista de su siglo, para él no fueron ajenas las tormentas políticas e ideológicas que florecieron a partir de la posguerra. Un dilema tras otro ponía a prueba a los demócratas franceses, vinculados con la izquierda. Primero la resistencia, que no planteaba dudas. Luego la independencia de Argelia. Y en lugar no deleznable, las relaciones o simpatías con la URSS. Llegó un momento en que este dilema fue resuelto: "Desde que tuvimos noticia de los grandes procesos estalinistas de 1935, y aunque hacía falta un oído atento al comunismo para contrarrestar el capitalismo estadounidense, la necesidad de oponerse a esta forma insoportable de totalitarismo se impuso de manera muy clara". Otros capítulos rezan: "La indiferencia, la peor de las actitudes". "Mi indignación a propósito de Palestina". "La no violencia, el camino que debemos aprender a seguir". Y, finalmente: "Por una insurrección pacífica". La cuestión de la lucha pacífica enfrentó en un momento a Stéphane Hessel con su amigo Jean Paul Sartre. En un momento, el autor de Las manos sucias simpatizó con ciertas prácticas terroristas, pero terminó aceptando que eran a la larga totalmente contraproducentes. Ningún recurso es más poderoso que la rebelión pacífica. Al criticar los excesos de la sociedad contemporánea, lo que llama las políticas del "siempre más", Hessel reivindica el pasado. No alienta el nihilismo en su pensamiento ni en su actitud frente a la vida. Ni porque tenga 93 años y vislumbre el final de la aventura. Mira el mundo de 1948, cuando trabajó en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, y anota los progresos y las grandes conquistas. Veamos algunos episodios: la descolonización, el fin del apartheid, el derrumbe del imperio soviético, la caída del Muro de Berlín. En la primera década del siglo XXI, el autor de ¡Indígnate! advierte retrocesos: la presidencia de George W. Bush, el 11 de Septiembre, etc. Y concluye: "Nos hemos encontrado con esta crisis económica, pero no hemos aprovechado la ocasión para iniciar ninguna nueva política de desarrollo". En suma, indignarse, sí, pero no basta indignarse. Es preciso saber por qué nos indignamos, y también preguntarnos por qué somos o hemos sido indiferentes. La biblia de los indignados también los interroga. Para indignarse no bastan los gestos. Moraleja: Nadie espere que otros le saquen las castañas del fuego. (El Nacional/Venezuela; el autor es subdirector de El Nacional. Como cancillero venezolano fue protagonista de los Acuerdos de Paz de El Salvador)
La forma hace la diferencia. Segunda Parte
El año pasado escribí un artículo sobre el despido de altos funcionarios públicos, que fueron en su momento los titulares de la SIGET, el ISTA y la Lotería Nacional, en dicho artículo mencionaba que hasta para despedir a alguien hay que hacerlo con estilo, la salida de un funcionario o empleado público debe ser apropiada y la forma hace la diferencia. Traigo a cuenta lo anterior, por que hace unos días fue despedida de la Dirección General de Impuestos Internos la Licenciada Daysi Lanza, una persona que durante 35 años le sirvió por entero a esa Dirección General, los que la conocen pueden dar fe de los que estoy diciendo, una técnica de alto nivel con profundos y sólidos conocimientos de la Administración Tributaria, y sobre todo de una honradez a prueba de fuego, de eso doy fe ya que tuve el honor de trabajar con ella por varios años en el Ministerio de Hacienda. Al igual que yo, muchas personas pueden ratificar lo que estoy diciendo, no podemos decir que es una funcionaria de la administración de ARENA, en todo caso hace 35 años gobernaba en El Salvador el PCN, entonces podemos decir que era una funcionaria pecenista. La Señorita Lanza como era conocida por todos en el Ministerio de Hacienda, fue despedida (le pidieron la renuncia) hace unos días, ella se encuentra incapacitada desde hace más de un año por un grave accidente que sufrió en las oficinas de las tres torres, lamentablemente no se ha podido recuperar, pero el deseo de incorporarse a trabajar la impulsaba a recuperarse físicamente. Ella presentó a principio de este año el documento que le ampliaba la incapacidad, a fin de seguir con la esperanza de incorporarse en un futuro cercano a su trabajo que por tanto tiempo desarrolló, aunque la incapacidad fuera sin goce de sueldo, sin embargo no le tramitaron dicha incapacidad. El Subdirector Administrativo le pidió a que se incorporara al trabajo inmediatamente, a lo cual ella le expreso que una vez se termine la incapacidad lo haría, pero en este momento físicamente le era imposible, por lo que le pidió entonces que interpusiera su renuncia, lo cual así lo hizo, dejando atrás 35 años de entrega total al Ministerio de Hacienda y especialmente a la Dirección General de Impuestos Internos, sin ningún reconocimiento por las actuales autoridades. Pues bien, semejante funcionario público no se dignó siquiera a recibirla y preguntarle después de un año como había estado su convalecencia, menos mal que dicho funcionario del actual gobierno es un técnico de carrera del Ministerio de Hacienda y que conoce muy bien a la Señorita Lanza, y en vez de hacer su trabajo delegó en el Subdirector Administrativo, para que en forma diplomática le solicitara la renuncia a la señorita Lanza. En otras empresas públicas y privadas se acostumbra a reconocer la fidelidad de sus antiguos empleados con pergaminos y relojes de oro. En Impuestos Internos la señorita Lanza ni siquiera tuvo la suerte de ser saludada por el FLAMANTE subdirector de Impuestos Internos, mucho menos por la Directora de Impuestos Internos que tampoco me acuerdo de su nombre, quizás por que están pasando desapercibidos por toda la población, o sea sin pena ni gloria. Creo sin temor a equivocarme que la Señorita Daysi Lanza conoce más de impuestos que los dos funcionarios juntos (Directora y Subdirector), creo que es importante que el Señor Ministro de Hacienda y el Señor Viceministro de Hacienda, conozcan la clase de funcionarios que ha nombrado, que no tienen ni la más mínima idea que el recurso más importante de una empresa es el recurso Humano y que la señorita Lanza merece un reconocimiento público por sus 35 años de labor que realizó con mucha capacidad y meritos en la Dirección General de Impuestos Internos, vaya para ella un humilde reconocimiento de este su amigo. Y por último solamente se me ocurre una pregunta, señor presidente Funes ¿este es el cambio que usted prometió?Miguel Angel Espinoza email: maespinozal@yahoo.com.mx
Ledezma y la OEA
La huelga de hambre del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, arroja más luz sobre un tema que el sistema interamericano, es decir la OEA, va a tener que considerar muy pronto, si es que no desea pasar a ser totalmente irrelevante como organismo internacional. Ledezma está reclamando que la OEA eche un vistazo al golpe de Estado del cual él ha sido víctima. La Alcaldía Metropolitana de Caracas es, en nuestro país, el segundo cargo electivo en importancia. Sin embargo, ha sido despojada de su sede, de sus atribuciones y de su presupuesto por decisión del presidente de la República. Este acto se une a otros semejantes, cometidos contra varios gobernadores de definición opositora. ¿Estos atropellos, que desconocen resultados electorales absolutamente legítimos y legales, cuándo es que entran en el radar de la OEA? ¿Cuándo es que se puede aplicar la Carta Democrática? ¿Sólo cuándo se producen golpes militares que derrocan presidentes? ¿Pero, los presidentes poseen algún tipo de inmunidad que les permite atropellar sus propias constituciones y a los demás poderes públicos sin que la OEA se dé por enterada? Lamentablemente así ha sido hasta ahora. A mediados de mayo tuve ocasión de conversar con Insulza, en su oficina en Washington, por invitación suya, dicho sea de pasada. Nos habíamos encontrado en la presentación de un libro y me pidió que lo visitara al día siguiente. Lo hice, acompañado de un amigo venezolano, que fue testigo de la conversación. Era la víspera de la reunión en la cual la OEA iba a considerar el tema de Cuba. Explicándome el asunto, me dijo Insulza que, en el fondo, no podíamos ponernos “demasiado exquisitos” con lo de Cuba porque “en el continente hay al menos siete gobiernos que no pasarían el examen de la Carta Democrática”. Dada la gravedad de lo que está ocurriendo en Honduras, me siento obligado a cometer la infidencia de transcribir lo que me dijo de seguidas: “Entre ellos el de tu país”. De modo que Insulza (y la OEA en su conjunto) sabe perfectamente qué es lo que está ocurriendo en nuestro país en materia de vulneraciones a la vida democrática. De todos modos, le relaté, muy detalladamente, todo lo que había ocurrido con la Alcaldía Metropolitana así como con Rosales y lo que estaba ocurriendo con las gobernaciones de Miranda, Zulia y Táchira. Allí fue cuando cambió el tercio y pasó a hablar de la reunión sobre Cuba. El punto es que el sistema interamericano tendrá que pasearse con mucha seriedad sobre los alcances reales de la Carta Democrática. Por ahora tiene las manos amarradas. Pero, así como aquella debe proteger a los gobiernos frente a los golpes de Estado, también tendrá que proteger a los demás poderes elegidos por el voto popular frente a los golpes de estado presidenciales contra ellos. Fujimori disolvió el Congreso y la Corte Suprema de Perú y eso no movió a la OEA. Chávez desconoce a gobernadores y alcaldes elegidos democráticamente; desconoce a la Corte Interamericana de Derechos Humanos y la OEA no ve ni oye ni habla. Celebro que la OEA haya reaccionado como lo hizo ante el golpe de Honduras. Sólo pido trato igual para Venezuela ante los golpes de Estado que Chávez le ha dado al Alcalde Metropolitano de Caracas y al de Maracaibo, al cual, como hicieron los militares hondureños con Zelaya, obligó a irse del país. Lo que es igual no es trampa. (El autor es director del periódico TalCual en Venezuela)
The Big Idea: Creating Shared Value. How to reinvent capitalism - and unleash a wave of innovation and growth
The capitalist system is under siege. In recent years business increasingly has been viewed as a major cause of social, environmental, and economic problems. Companies are widely perceived to be prospering at the expense of the broader community. Even worse, the more business has begun to embrace corporate responsibility, the more it has been blamed for society’s failures. The legitimacy of business has fallen to levels not seen in recent history. This diminished trust in business leads political leaders to set policies that undermine competitiveness and sap economic growth. Business is caught in a vicious circle. A big part of the problem lies with companies themselves, which remain trapped in an outdated approach to value creation that has emerged over the past few decades. They continue to view value creation narrowly, optimizing short-term financial performance in a bubble while missing the most important customer needs and ignoring the broader influences that determine their longer-term success. How else could companies overlook the well-being of their customers, the depletion of natural resources vital to their businesses, the viability of key suppliers, or the economic distress of the communities in which they produce and sell? How else could companies think that simply shifting activities to locations with ever lower wages was a sustainable “solution” to competitive challenges? Government and civil society have often exacerbated the problem by attempting to address social weaknesses at the expense of business. The presumed trade-offs between economic efficiency and social progress have been institutionalized in decades of policy choices. Companies must take the lead in bringing business and society back together. The recognition is there among sophisticated business and thought leaders, and promising elements of a new model are emerging. Yet we still lack an overall framework for guiding these efforts, and most companies remain stuck in a “social responsibility” mind-set in which societal issues are at the periphery, not the core. The solution lies in the principle of shared value, which involves creating economic value in a way that also creates value for society by addressing its needs and challenges. Businesses must reconnect company success with social progress. Shared value is not social responsibility, philanthropy, or even sustainability, but a new way to achieve economic success. It is not on the margin of what companies do but at the center. We believe that it can give rise to the next major transformation of business thinking. A growing number of companies known for their hard-nosed approach to business—such as GE, Google, IBM, Intel, Johnson & Johnson, Nestlé, Unilever, and Wal-Mart—have already embarked on important efforts to create shared value by reconceiving the intersection between society and corporate performance. Yet our recognition of the transformative power of shared value is still in its genesis. Realizing it will require leaders and managers to develop new skills and knowledge—such as a far deeper appreciation of societal needs, a greater understanding of the true bases of company productivity, and the ability to collaborate across profit/nonprofit boundaries. And government must learn how to regulate in ways that enable shared value rather than work against it. Capitalism is an unparalleled vehicle for meeting human needs, improving efficiency, creating jobs, and building wealth. But a narrow conception of capitalism has prevented business from harnessing its full potential to meet society’s broader challenges. The opportunities have been there all along but have been overlooked. Businesses acting as businesses, not as charitable donors, are the most powerful force for addressing the pressing issues we face. The moment for a new conception of capitalism is now; society’s needs are large and growing, while customers, employees, and a new generation of young people are asking business to step up. The purpose of the corporation must be redefined as creating shared value, not just profit per se. This will drive the next wave of innovation and productivity growth in the global economy. It will also reshape capitalism and its relationship to society. Perhaps most important of all, learning how to create shared value is our best chance to legitimize business again. Moving Beyond Trade-Offs Business and society have been pitted against each other for too long. That is in part because economists have legitimized the idea that to provide societal benefits, companies must temper their economic success. In neoclassical thinking, a requirement for social improvement—such as safety or hiring the disabled—imposes a constraint on the corporation. Adding a constraint to a firm that is already maximizing profits, says the theory, will inevitably raise costs and reduce those profits. A related concept, with the same conclusion, is the notion of externalities. Externalities arise when firms create social costs that they do not have to bear, such as pollution. Thus, society must impose taxes, regulations, and penalties so that firms “internalize” these externalities—a belief influencing many government policy decisions. This perspective has also shaped the strategies of firms themselves, which have largely excluded social and environmental considerations from their economic thinking. Firms have taken the broader context in which they do business as a given and resisted regulatory standards as invariably contrary to their interests. Solving social problems has been ceded to governments and to NGOs. Corporate responsibility programs—a reaction to external pressure—have emerged largely to improve firms’ reputations and are treated as a necessary expense. Anything more is seen by many as an irresponsible use of shareholders’ money. Governments, for their part, have often regulated in a way that makes shared value more difficult to achieve. Implicitly, each side has assumed that the other is an obstacle to pursuing its goals and acted accordingly. The concept of shared value, in contrast, recognizes that societal needs, not just conventional economic needs, define markets. It also recognizes that social harms or weaknesses frequently create internal costs for firms—such as wasted energy or raw materials, costly accidents, and the need for remedial training to compensate for inadequacies in education. And addressing societal harms and constraints does not necessarily raise costs for firms, because they can innovate through using new technologies, operating methods, and management approaches—and as a result, increase their productivity and expand their markets.Baje el PDF del essay completo del Harvard Business Review
Estado de los derechos humanos en Venezuela
Como si Hugo Chávez no contara ya con suficientes problemas -la caída del precio del petróleo, la expulsión del embajador de Estados Unidos en Venezuela, y la del venezolano en Washington, el registro de su país por cuarto año seguido en la lista negra norteamericana de cómplices del narcotráfico, el estallido inflacionario local, y las dudas sobre la suerte de su partido en las próximas elecciones- recibe un nuevo golpe. El 18 de septiembre, la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW, de cuya Junta Directiva me confieso orgullosamente miembro) hizo público en Caracas un informe demoledor sobre Una década de Chávez. Describe, analiza y condena las repetidas amenazas, restricciones y violaciones a los derechos humanos en Venezuela desde el triunfo chavista en las elecciones presidenciales de diciembre de 1998. El subtítulo del informe lo dice todo: "Intolerancia política y oportunidades perdidas para el progreso de los derechos humanos en Venezuela". Por fin una organización seria, independiente y acreditada en el mundo, se aboca a este tema en Venezuela, y emite una opinión fundamentada y desprovista de estridencias o exageraciones.El informe de HRW, dado a la luz en la capital venezolana por José Miguel Vivanco (a quien nadie puede acusar de chavofobia; se ha convertido en un némesis de Álvaro Uribe por su oposición al Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos), se centra en cinco grandes capítulos del estado que guardan la democracia, la justicia y la libertad en la cuna del libertador. Aunque no alcanzó a incorporar los últimos atropellos de Chávez al inhabilitar a centenares de candidatos de oposición, incluyendo a Leopoldo López, el alcalde de Chacao y probable triunfador en los comicios por la Alcaldía Mayor de Caracas de haber podido contender, HRW enumera el conjunto de episodios de "discriminación política" cometidos por el Gobierno desde 1998. Proporciona ejemplos concretos, contrasta estos hechos tanto con los derechos inscritos en la Constitución venezolana de 1999 (ya redactada por el propio Chávez) como con los tratados internacionales firmados por el país desde tiempo atrás. La discriminación política consiste, ante todo, en la aplicación de criterios políticos (es decir, de filochavismo) a la contratación, despidos, otorgamiento de créditos en las empresas o actividades del Estado, y sobre todo, al funcionamiento de la empresa petrolera PDVSA.El segundo capítulo se refiere a la situación del poder judicial, y cómo, paulatinamente, Chávez ha ido subordinando al poder político a los jueces y tribunales venezolanos, en franca violación de la Constitución y de los instrumentos internacionales y regionales (como la Convención Americana de Derechos Humanos y la CartaDemocrática Interamericana, firmada por el Gobierno de Chávez). La reciente ratificación por el Tribunal Supremo de la inhabilitación de los candidatos opositores constituye un nuevo y grave ejemplo de esta subordinación.Como lo ha sido la actuación de los tribunales en los conflictos relativos a los medios de comunicación, el tercer capítulo del informe de Human Rights Watch. Para la ONG, la polarización de los medios, el endurecimiento de los delitos que penalizan expresiones determinadas, la regulación de los contenidos de los medios, el control sobre la difusión de radio y televisión, y la falta de protección judicial a la libertad de expresión, representan manifestaciones del carácter cada vez más antidemocrático del régimen chavista, en un ámbito decisivo. El informe de HRW muestra no sólo las cortapisas impuestas a la libertad de expresión en Venezuela, sino también la forma en que se han ido legalizando las restricciones, al avalarlas el poder judicial.La estructura del siguiente apartado, a saber, aquel dedicado a la libertad sindical y al desempeño de los sindicatos, es la misma. En primer término, HRW expone las obligaciones contraídas al respecto por el Estado venezolano ante la comunidad internacional: tratados y principalmente convenios de la OIT; inmediatamente después, explica las disposiciones legales internas, para luego denunciar cómo durante de "la década de Chávez" se han ido mermando los derechos sindicales. Tanto en lo referente a la libertad de asociación, como de huelga y de negociación colectiva, así como a las represalias ejercidas contra los trabajadores de PDVSA que se fueron al paro en 2003, el informe documenta los abusos, las intenciones y la "falta de protección judicial de la libertad sindical". En un país con una tradición sindical -corporativista, en ocasiones corrupta y burocrática, sin duda, pero combativa y democrática también- se trata de un retroceso mayúsculo.Por último, Human Rights Watch aborda el tema de la sociedad civil, con la misma óptica: las normas internacionales y venezolanas vigentes, los atropellos contra defensores de derechos humanos, ONG, los ejemplos de abuso judicial y, de nuevo, las limitaciones a la protección judicial. Este capítulo resulta tal vez el más importante, porque conduce a las conclusiones que se desprenden de esta labor excepcional.Ya lo han dicho otros colaboradores en estas páginas. La sociedad civil venezolana, de tiempo atrás una de las más dinámicas y vigorosas de América Latina, ha resistido hasta ahora con éxito a la embestida autoritaria de Hugo Chávez. Venezuela hoy no es una dictadura; no es Cuba, no es Chile bajo Pinochet, no es Arabia Saudí. Pero esto no se debe a las buenas intenciones de su presidente, sino más bien al contrario: a la fuerza y firmeza de una oposición desunida en lo político y electoral (hasta hace poco), pero feroz en la defensa de sus conquistas civiles de antaño. No sólo esa sociedad rechazó las pretensiones autoritarias de Chávez en el referéndum de diciembre; no sólo echó abajo la refundación del aparato de inteligencia y seguridad; no sólo protestó contra el cierre de RCTV y logró que en Internet cuente con un público superior a otras televisoras; sobre todo ha sabido mantener, a pesar de todo, la vigencia de las libertades. Pero, como lo demuestra de manera palmaria Human Rights Watch, nada está escrito. La tentación, la deriva, la ambición, están todas presentes.La segunda conclusión reside en la importancia de la normatividad jurídica internacional. HRW insiste una y otra vez en que a través de los abusos descritos, el Gobierno de Chávez viola compromisos internacionales contraídos libremente por su país. En todo caso por ello, aún si aceptáramos la tesis castro-chavista-priísta de que la soberanía nacional se sitúa por encima de valores universales como los derechos humanos, la firma de dichos instrumentos por Venezuela hace que lo que en ese país suceda no sea únicamente asunto de los venezolanos. Incumbe a todos los Gobiernos y ciudadanos de los países que también suscribieron esos tratados, y que se acogen a ellos cuando han agotado instancias jurídicas internas sin lograr defender sus derechos fundamentales. Cuando Chávez viola repetidamente el derecho a la protección judicial consagrado en un sinnúmero de convenciones, arremete no sólo contra los venezolanos, sino contra todos aquellos que en algún momento necesitarán, o requirieron de, dichas convenciones. Como alguien que, hace unas semanas, logró que, por primera vez en la historia, el Estado mexicano fuera condenado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos por violar, justamente, su derecho a la protección judicial inscrito en el artículo 25 del llamado Pacto de San José, hablo con conocimiento de causa.EL PAÍS - Opinión - 19-09-2008
Why Oliver Stone is wrong about Venezuela
The filmmaker Oliver Stone's documentary of Venezuelan President Hugo Chavez has re-energized a long-running debate about the future of Venezuela and what it means for democracy in other countries. Mr. Stone argues the assault on human rights is of secondary concern, saying: "Why do you seek out the dark side when the guy is doing good things?" After all, "Most peoples' lives in this country have improved under Chavez." Unfortunately, for the vast majority of Venezuelans, this statement could not be further from the truth. If you are among the millions living in barrios, you no longer trust that you will be protected, that services will be delivered, that your lights will stay on or that you will have access to clean water. As a mayor for eight years of the commercial district of Caracas, I have seen firsthand how dreams have become more elusive for average Venezuelans, replaced by a dangerous sense of frustration and hopelessness. Venezuela is now the murder capital of the western hemisphere -- with a 320 increase in homicides and a 1,400 percent increase in kidnappings since 2000. This pervasive state of insecurity affects all Venezuelans, especially those living in poverty. Shelves are bare, and Venezuela's production capacity has deteriorated so much that we have had to increase food imports by 700 percent -- including goods such as meat and coffee that were once 100 percent locally produced. Prices are 650 percent higher since Chavez first took office. The recent discovery of 81,000 tons of rotting food in a government-controlled storage facility only added to the sense that this is a problem that the president has created. Access to clean water and electricity is a similar story. Power outages are now a daily fact of life. Many government agencies have to close early in the afternoon because there is not enough electricity. These worsening conditions have opened the door to more sinister developments, especially in the border regions with Colombia, where people speak of an alarming growth in guerrilla activity, including the FARC. Last week I visited el Alto Apure in this region and heard a mother of four describe the new reality: "As mothers we fight a silent war against the recruitment of our children by the elenos or the boliches (the ELN and the FBL guerrilla groups)," she told me. "If we say something we risk our lives, walls listen in El Nula." The government officially denies the presence of these groups in Venezuelan territory. However, those who live here say the groups are so pervasive that they now have absolute control of everything from gasoline distribution to the management of the health centers and the police. A middle aged shop owner who survived a recent kidnapping told me, "If you want something to get done you need to speak with the guerrillos, everything you tell the police or the army they will know, so its better to speak directly with them." The most shocking testimony was given by a 17 year old boy who said many of his fellow students in school have been recruited as members of the guerrilla groups and go to school as informants. "They don't want to learn, they only go in order to inform the elenos what is happening in our school. [The guerillas] the offer them a salary and a motorcycle, and off they go." I asked him if any had been killed recently. The boy's 16-year-old friend looked him for permission to respond and said, "yes two weeks ago Jose Andres was killed, they said that it was an accident, but we know he died during a conflict between guerrilla groups. That happens all the time." The difficulties here go beyond insecurity and guerrilla. This region was once one of the most productive meat production territories in Venezuela. More than 50 small, medium and large productive farms in this area alone have been confiscated and are currently controlled by the government. Production has plummeted. Land that had been full of the best cattle is now empty. The pain has certainly undermined public confidence in Chavez, which is now at an all time low. In 2012, Venezuela will hold its next presidential election, and polls show that a majority of citizens believe it is time for a change. But change is by no means inevitable. We in the opposition must first take responsibility for our own historical failings, and apply important lessons. It is not enough to be against Chavez. People need to hear how we will make their lives better in basic terms of safety, shelter, and a better chance to achieve dreams. We must also be a more organized majority. In the past, we in the opposition have been our own worst enemy. Backroom decision-making and political infighting reminds the people of a past they do not want to return to. We need to show them something different: new leaders, transparent processes and ways to engage people directly in our decision-making processes. Finally, the international community must be more engaged. The approach to Venezuela must not be unilateral but multilateral - led by institutions such as the Organization of American States. What happens in Venezuela will have profound consequences for Latin America - and for global stability. If the playbook being used today in Venezuela is allowed to succeed without condemnation, it will be replicated not just in Latin America, but also in Africa, Asia and the Middle East. And for the average citizen, access to dreams would diminish even more. Leopoldo Lopez was mayor of Chacao from 2000 to 2008. He won Transparency International's Award for the most transparent municipality in Venezuela. In 2009 he founded Voluntad Popular, a social organization with the goal of promoting democracy and human rights.(The Huffington Post)
Los idus de noviembre
Al llegar a launiversidad, lo que vi fue espantoso. El mal olor inundaba el ambiente, y unamortaja negra de moscas cubría parcialmente los cadáveres; coágulos de sangreennegrecida, pedazos de hueso y trozos de masa encefálica estaban esparcidosalrededor de las cabezas; la pared del fondo del jardín, salpicada de sangre.Afuera solo había cuatro cuerpos: Ellacuría, Montes, Martín Baró y AmandoLópez. Al cadáver del padre Moreno lo arrastraron al interior de una de lashabitaciones. El padre López y López estaba por casualidad allí, pues no pertenecíaa esa comunidad; se despertó con elruido de la balacera cuando mataron a sus compañeros jesuitas, y salió a verqué pasaba. Uno de los soldados losiguió adentro del cuarto y lo mató. La esposa del jardinero Julia Elba y suhija, quienes esa noche estaban durmiendo en una salita de la residencia de lospadres, al oír las descargas salieron a ver, y las mataron.A los padres nose les veía la cara porque estaban boca abajo sobre la grama del jardín. Alpadre Moreno, lo habían arrastrado hacia el interior de una de las habitacionesdejando un macabro reguero de sangre. Era el cuarto del padre Sobrino, quienestaba en Tailandia: no le tocaba morir. Vi la cara del padre Moreno, la teníallena de pliegues, ya que todos los huesos de su cabeza fueron destruidos y losmúsculos y la piel no tenían dónde sostenerse. Cuando los soldados hicieronmaniobras para meter el cuerpo del padre Moreno en ese cuarto, movieron unalibrera de la que cayó un libro: era “El Dios crucificado” del teólogo alemánMoltman que quedó empapado con la sangre del padre Moreno.Yo sentí un grandolor, y una tristeza profunda me invadió. No pude rezar, no pude pensar, nopude hacer nada, solo llorar. Los padres fueron mis maestros durante mi carreraen la UCA, fueron mis amigos que compartieron mis alegrías y me dieron consueloen mis momentos de dolor. Después de un rato, el padre Ormaechea me dijo:Señora, ¿qué está haciendo aquí? Yo le contesté: “Acompañando a los muertos y alos vivos”. Esa fue mi oración: una oración de acompañamiento. Me parecía unapesadilla y que pronto iba a despertar, pero aquello era real. Fue el hecho más horroroso que me tocópresenciar. Más adelante pensé que todo estaba perdido, que nuestro sueño de unpaís diferente fue solo un sueño, que todos íbamos a morir tarde o temprano.Era el fin para El Salvador. Este país ya no tenía salvación.Pero este hechoespantoso fue el cumplimiento de un plan que se inició muchos años antes. Teníarazón el padre Montes cuando me dijo en una conversación que tuve con él: “Amonseñor Romero los militares le dieron tres años, a nosotros nos han dadotreinta, pero ellos serán nuestros asesinos”.Todo empezó conel Concilio Vaticano II quien dio los lineamientos que, en las conferencias de Medellín y Puebla, seconcretaron para Latinoamérica como laopción preferencial por los pobresque, como dice el padre Sobrino, “es el punto de la praxis donde Dios serevela en la historia”. Este sería el ejepara la vida de los católicos y permearía todos los aspectos de sus vidas.El padreEllacuría, aquí en El Salvador, y un grupo de jesuitas abrazaron con entusiasmola tarea de poner en práctica las enseñanzas del Concilio. Desde siempre,trabajar por la justicia ha sido un imperativo en las enseñanzas de la Iglesia.Así que los padres empezaron por trabajar por la justicia en El Salvador.Fueron llamados teólogos de la liberación:liberación del hambre, de la miseria, de la injusticia, de la marginalidad. Elpadre Sobrino lo resume así: “La teología de la liberación parte de los pobrescomo lugar de la comprensión de la fe que permite llegar a la misericordia conlas víctimas”. Corría el año 1973, empezaron por proponer los cambios en laeducación que impartían en su colegio para que los alumnos conocieran larealidad de su país, y que, en el futuro, implementaran las políticas que ElSalvador necesitaba para iniciar el camino hacia la democracia. El 11 denoviembre de 1989, el FMLN (Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional)inició una ofensiva contra San Salvador, el centro del poder político,económico y social del país. Esta ofensiva fue parte de una guerra en la que ungrupo de salvadoreños peleaban para romper el poder militar sobre la políticanacional. Se inició en los años ochenta. El objetivo de la guerrilla en estaofensiva fue demostrar su fuerza militar para obligar a la otra parte a pactaruna paz negociada para el conflicto. Una explosión defuegos artificiales verdes y rojos iluminó el cielo de San Salvador, fueproducida por las balas trazadoras y por las bengalas con las que el Ejércitosalvadoreño trataba de ubicar a la guerrilla atrincherada en el volcán quecobija a la capital y en las zonas periféricas de dicha ciudad. Era la ofensivaHasta el tope.Se les llamatandas a los grupos de graduados de la Escuela Militar, pero a esta promoción,que estaba en puestos del gobierno de Alfredo Cristiani, por ser tan numerosa,se la apodó La Tandona. Los militaresque formaban La Tandona fueron losque dirigieron al Ejército en el enfrentamiento con la guerrilla en la ofensivallamada Hasta el tope. Al día siguientedomingo, traté de ir a la universidad, pero estaba rodeada por el Ejército. Nadiepodía entrar, pero agazapada en la residencia de los padres se encontraba lamuerte esperando a sus víctimas.Yo decidí ir alhospital Rosales a ayudar con los heridos que llegaban allí. Estuve tres días. Llegabanen camiones, pick-ups, ambulancias y taxis. Mi trabajo consistió en limpiar lasheridas para que los médicos pudieran ver exactamente con qué se encontraban. Noteníamos agua. Limpié dichas heridas conla misma agua y con los mismos trapos. La contaminación fue tremenda. Atendí aheridos que venían de la periferia pobre de San Salvador bombardeada por elEjército. Para evitar los bombardeos, la guerrilla empezó a entrar a SanSalvador por la colonia Escalón. Allí, el Ejército ya no bombardeó.Los días quepermanecí en el hospital me impidieron darme cuenta de lo que sucedía en elexterior. Hubo una cadena radial, con aparente micrófono abierto, en la que losciudadanos culpaban a los jesuitas de la ofensiva y de las muertes causadas pordicha ofensiva, pero todo fue un montaje. El Gobierno decretó la ley marcial yel toque de queda. Para las zonas en donde estaba la guerrilla, el toque dequeda era de veinticuatro horas. Para el resto de San Salvador, era de seis dela tarde a seis de la mañana.El padreEllacuría no se encontraba en San Salvador, pues una organización catalana leconcedió el Premio Comin por su incansable defensa de los derechos humanos delos ciudadanos de este país y sus esfuerzos por impulsar una paz negociada alconflicto salvadoreño, ya que él consideraba que una victoria militar paracualquiera de los dos bandos era imposible. Estando en España, recibió unallamada de parte de uno de los allegados al presidente Cristiani para pedirleque regresara a El Salvador, ya que el presidente lo había nombrado parte deuna comisión que investigaría la masacre perpetrada contra la federación desindicatos Fenastras, el 31 de octubre de ese año; en ella murieron nuevepersonas y cuarenta resultaron heridas.El lunes 13 denoviembre regresó Ellacuría a El Salvador. Llegó a la universidad unos minutosantes de las seis de la tarde. Al principio no lo dejaban entrar, pero unoficial lo reconoció y le abrieron la puerta. Esa noche practicaron un cateo(registro realizado por el Ejército o por la Policía) en la residencia de lospadres dentro de la universidad. Fue un cateo diferente a otros que se habíanhecho anteriormente en la UCA, pues la única información que les interesaba erasaber quién dormía en cada cuarto. En la mañana del14, los jesuitas tuvieron una reunión a la cual asistieron padres de otrascomunidades, pues se iba a decidir qué hacer debido al cateo y a la situaciónreinante en San Salvador, con la ley marcial, el toque de queda y la ofensiva.Se discutió mucho, algunos padres querían dejar esa casa e irse a otrascomunidades de jesuitas en San Salvador. Varias familias amigas de los padresles ofrecieron sus casas, pues sentían el peligro en que se encontraban debidoa la cadena radial en la que los culpaban de la ofensiva y de los muertos queestaba causando. Cuenta uno de los padres que asistió a esa reunión, pero queno pertenecía a esa comunidad, que otro jesuita de los habitantes de esa casale comentó que quien dirigía el cateo no se dejaba ver, parecía que no queríaque lo reconocieran. Los soldados llevaban la orden de registrar toda launiversidad, pero el rector les pidió que regresaran al día siguiente, ya queno tenía a mano las llaves y no quería que le destrozaran las cerraduras. Lossoldados no regresaron.En dichareunión, el padre Ellacuría dijo: “Estamos en un lugar rodeados por elEjército, han hecho un cateo y no han hallado nada, estamos en el mejor lugaren que nos podemos encontrar”. Uno de los padres de esa comunidad no se quisoquedar allí y se fue a Santa Tecla, a la comunidad de la iglesia del Carmen.Fue uno de los que se salvó.El miércoles erael día en que los padres de la UCA iban a jugar frontón a una cancha en SantaTecla. Cuando quisieron salir de San Salvador, los soldados no se lopermitieron. San Salvador estaba cercado por el Ejército y nadie podía entrarni salir de la ciudad.El miércoles 15,los padres Amando López y Juan Ramón Moreno salieron de la UCA por la casa queda a la calle Cantábrico, como a las tres de la tarde y fueron a visitar a suscompañeros que vivían en una casa de la colonia Jardines de Guadalupe, fueradel campus de la universidad. Allí vivían el padre Tojeira, provincial de losjesuitas de Centroamérica, el padre Ibizate, el padre Estrada y otros padres.Se quedaron hasta las cinco y, cuando se iban, los jesuitas de la casa lespidieron que se quedaran a dormir esa noche allí. Ellos les contestaron que no podíanporque Ellacuría, Martín Baró y Montes estaban muy solos. Se regresaron a launiversidad a su cita con la muerte.En launiversidad, como a las cuatro de la tarde, el padre Martín Baró recibió unallamada de la empleada que hacía la limpieza en el edificio de Rectoría. Laseñora se llama Lucía de Cerna. Le pidió al padre posada para pasar la noche enla universidad, ya que no pudieron entrar a su colonia, ella, su marido y suhija, por el toque de queda. Martín Baró accedió a la petición y les arreglóunos colchones en una casita, propiedad de la universidad, la cual tieneventanas que dan al campus. El resto de las viviendas es de propietariosparticulares por eso no tienen comunicación con la universidad. Sin embargo,tienen un lugar para asolear la ropa en el segundo piso desde el cual se puedever el campus de la UCA. Durante la noche del quince y la madrugada del dieciséisde noviembre nadie pudo subir porque tenían soldados apostados en cada tejadode dichas casas.El jardinero dela casa de los padres vivía en una casita a la entrada de ese predio, pared depor medio con el muro que linda con el andén. La noche del martes catorce, enel enfrentamiento que se daba en la calle, incendiaron un “jeep” que reventó enllamas con gran estruendo. Julia Elba, esposa del jardinero, llegaba a dormirtodas las noches a esa casa, pero después de los enfrentamientos al otro ladodel muro, le dio miedo dormir allí. Pidieron permiso a los padres de ir adormir a una salita, contigua al comedor de ellos, cerca de la puerta de salidaenfrente a un costado de la capilla. La noche del quince de noviembre estabadurmiendo allí con su hija Celina de quince años de edad.Según el auto deprocesamiento del Juzgado Central de Instrucción, número 6 de la AudienciaNacional de España, “la orden directa de asesinarlos (a los jesuitas) se diodurante la tarde del 15 de noviembre, pero es el resultado de una discusión,planificación y autorización previas”. (pág. 15)El presidenteCristiani estaba alojado en el Estado Mayor, pero no se sabe si asistió a lasreuniones que allí se realizaron. Cristiani como presidente era el comandantegeneral de la Fuerza Armada, debía haber sido consultado o debía haber tomadoparte en esas reuniones. No se sabe si los militares decidieron el asesinatopor su cuenta y no le consultaron al presidente, o si el presidente estaba deacuerdo con lo que sucedió.El relato de lamasacre lo dan los oficiales y los soldados que la perpetraron, según las declaracionesextrajudiciales que dichas personas dieron en la Policía Nacional cuando losapresaron y acusaron del asesinato de los padres el día trece de enero de 1990.“El indiciado Antonio Ramírez Ávalos Vargasdice que tiene cinco años de estar en el batallón Atlacatl, y que se hace cargode haber participado en el delito, (...) al declarante lo apodan Sapo o Satanás”.“El encausadoTomás Zarpate Castillo dice que se hace cargo del delito que se le imputa, (...)que el teniente Espinoza le dijo que se iban a movilizar a la universidaddebido a que se tenía conocimiento que la gente que ahí permanecía eraterrorista y que había que eliminarla...”. “El encausado José Ricardo Espinoza Guerradice que no se hace cargo de los hechos que se le imputan, (...) que recibióorden por radio de reconcentrarse con su unidad en las instalaciones de laEscuela Militar (...) con las patrullas Satanás, Maldito, Rayo y Acorralado; (...)que recibió orden de presentársele al señor director de la Escuela Militarcoronel Benavides (...) quien les dijo (a él, al teniente Yussy MendozaVallecillos y al teniente Cerritos): ‘Esta es una situación en donde son elloso somos nosotros, y vamos a comenzar por los cabecillas dentro del sector nuestro−launiversidad’−y al declarante le dijo: ‘Vos hiciste el registro y tu genteconoce el lugar, usá el mismo dispositivo del día del registro y hay queeliminarlos y no quiero testigos, El teniente Mendoza va a ir con ustedes comoel encargado de la operación para que no hayan problemas’. Espinoza le dijo alcoronel Benavides que ‘eso es un problema serio’, el coronel respondió: ‘No tepreocupés tenés mi apoyo”.“El imputadoÁngel Pérez Vásquez (dice) que el soldado Amaya Grimaldi, alias Pilijay,llevaba la misión de asesinar a los que ahí (UCA) se encontraban y que lo haríacon un fusil AK Cuarenta y siete...” “El imputadoÓscar Mariano Amaya Grimaldi (alias Pilijay) manifestó que se hace cargo dehaber participado en la muerte de tres padres jesuitas (...) el declarante nosabía a quién iban a asesinar, pero sí suponía que verdaderamente se trataba dedirigentes terroristas (...) el oficial de la Escuela Militar le dijo: ‘Vos sosel hombre clave’, entendiendo el dicente que él se encargaría de matar a las personasque se encontraban en ese lugar”.Antonio RamiroÁvalos Vargas: “Cuando llegaron a la UCA, a los diez minutos de estar golpeandolas puertas y las ventanas (de la residencia de los padres jesuitas), salió unseñor chele que vestía pijama (...) quien les dijo que no siguieran golpeando laspuertas y ventanas porque ellos estaban conscientes de lo que les sucedería,luego el dicente condujo al señor a la parte de enfrente de esa residencia (...)observando que en esos momentos también salían por la puerta otros cuatroseñores”.José RicardoEspinoza Guerra: “...que como a las cero horas con quince minutos del mismodieciséis, observó que el personal comenzó a llevar a un grupo de curas (...) yles ordenaron que se tendieran en el gramal frente al edificio, por lo que alver esto el dicente optó por retirarse poco a poco de ese edificio debido a quese sintió mal por lo que estaba observando, retirándose con los ojos llorosos...”“En cuanto alimputado Yussi René Mendoza Vallecillos (...) confiesa su participación en losmismos hechos (...) agrega el deponente que cuando se encontró con el tenienteEspinoza por el pasillo techado en las instalaciones de la UCA , después dehaber escuchado los primeros disparos, le preguntó: ‘¿Qué pasa aquí?’ a lo queEspinoza le contestó: ‘Vámonos, vámonos, aquí le están dando a unos cabecillasterroristas”.Antonio RamiroÁvalos Vargas: “...dice que el teniente Espinoza Guerra le dijo: ‘¿A qué hora vasa proceder?, entendiendo el exponente como una orden para eliminar a los cincoseñores que tenían boca abajo, (...) que luego se acercó al soldado AmayaGrimaldi y al oído le dijo en voz baja: ‘Procedamos’, por lo que de inmediatoAmaya Grimaldi con el AK Cuarenta y siete comenzó a dispararle a los tresseñores que tenía enfrente (Ellacuría, Segundo Montes y Martín Baró) y elexponente con un fusil M Dieciséis de equipo comenzó a dispararles en la cabezay al cuerpo a los dos restantes que tenía enfrente a él (Amando López y MorenoPardo), (...) (luego) escuchó que delinterior de una habitación pujaban unas personas, (...) por lo que le dijo alsoldado Sierra Ascencio que fuera a ver (...) estando la puerta abierta, el declaranteencendió un fósforo, (...) observando que se encontraban dos mujeres tiradas enel suelo y quienes estaban abrazadas pujando, por lo que le ordenó al soldadoSierra Ascencio que las rematara, de tal manera que el indicado soldado con sufusil M Dieciséis disparó una ráfaga (...) hasta que ya no pujaron”.Óscar MarianoAmaya Grimaldi: “(...) que no recuerda si esas personas dijeron algunas palabrasantes de darles muerte (...) también en esos instantes escuchó la voz delteniente Espinoza que le dio la orden al cabo Cota Hernández, diciéndole:‘Metelos para adentro, aunque sea de arrastradas’ (...) también en ese momentovio que una sexta persona también del mismo sexo salía de esas instalacionespor el pasillo quien dijo: ‘No me vayan a matar porque yo no pertenezco aninguna organización’ y de inmediato este se regresa hacia adentro (...) luego eldeclarante (...) escucha varios disparos en el interior de los locales, o sea allado donde se había metido la persona (...) que los disparos fueron supuestamentede fusil M Dieciséis...” (esa persona era el padre Joaquín López y López)José RicardoEspinoza Guerra: “... que luego (de haberse retirado del edificio) escuchó unasvoces que decían ‘Rápido, rápido, démole rápido’, acto seguido comenzó aescuchar varios disparos, (...) momentos después (de regresar a la EscuelaMilitar) el señor coronel Benavides le dijo: ‘¿Qué te pasa? Estás preocupado’,y el dicente respondió: ‘Mi coronel no me ha gustado esto que se ha hecho’, yél le dijo: ‘Calmate, no te preocupés, tenés mi apoyo, confía en mí”.El tenienteEspinoza Guerra fue alumno del Externado San José, y se bachilleró en 1979. Elpadre Segundo Montes fue su profesor y rector del colegio mientras él estuvoallí. Conocía al padre Ellacuría , pues él les había dado la charla a losfuturos bachilleres con el tema de la elección de carrera. Espinoza Guerradirigió el cateo que se hizo en la residencia de los jesuitas el 13 denoviembre por la noche, por eso conocía el lugar y la ubicación de los cuartosde los padres que habitaban en esa residencia. También fue de los oficiales quedirigían el operativo para el asesinato de los padres.El dieciséis denoviembre, a las siete de la mañana, recibí una llamada telefónica, −Algoterrible les ha pasado a los padres de la UCA. Han matado a Ellacuría, aMontes, a Martín Baró, a Juan Ramón Moreno, a Amando López y al padre López yLópez. Antes de que terminara de decir los nombres, yo estaba llorando agritos. Avisamos a algunos compañeros de trabajo de la UCA, y nos fuimos parala universidad en donde nos encontramos con la escena macabra que no podréolvidar jamás.El premio que ledieron al padre Ellacuría era de cinco mil dólares. Él los trajo en efectivo,en una valija café. Los tenía en su cuarto porque, en esos días, todos losbancos estaban cerrados. El teniente Yussy René Mendoza Vallecillos, en sudeclaración extrajudicial, recuerda que “cuando se encontraron por el portón dela UCA, observó que un soldado desconocido llevaba una valija color café claro,según alcanzó a distinguir, ignorando el contenido y destino de dicha valija”.La señora Lucíade Cerna, a quien el padre Martín Baró dio posada en una de las casas propiedadde la universidad que servía de depósito de libros de la imprenta, cuando oyóel ruido de la fusilería que los soldados hicieron al entrar al prediouniversitario, se fue a uno de los cuartos de la casa que tiene ventanas haciael campus de la universidad, y vio a los soldados. Fue la única testigo delcrimen del dieciséis de noviembre. Lucía escuchó al padre Martín Baró gritar:“Esto es una injusticia, ustedes son carroña”.Los padresjesuitas pensaron mandar a Lucía con su familia a España, como una medida deprotección, pero el embajador que estaba aquí en ese momento no quisocolaborar. Personas de la embajada de los Estados Unidos dijeron que ellosllevarían a Lucía a Estados Unidos y que allá se la entregarían a los jesuitasnorteamericanos quienes le darían protección y trabajo. Pero la entregaron alFBI. Allí la interrogó un militar salvadoreño, amenazándola con hacerle daño ala familia que había quedado en El Salvador si no decía que era mentira quehubiera visto a los soldados. Lucía atemorizada negó todo lo declaradoanteriormente, pero cuando estuvo bajo la protección de los jesuitas volvió aafirmar lo que vio la madrugada del dieciséis de noviembre.No se sabe silos padres dijeron algo antes de morir. Una vecina, cuya casa linda con elpredio donde los mataron, asegura que ella escuchó una salmodia, parecía quelos padres rezaron antes de presentarse ante su Creador. No opusieronresistencia, pues comprendieron que era inútil. Solo el padre Martín Baróexpresó su indignación gritando: “Esto es una injusticia, ustedes son carroña”.Por eso, Lucía, quien estaba frente a la ventana, lo escuchó, y “carroña” no esuna palabra que tenga en su vocabulario la humilde empleada que limpiaba lasoficinas del edificio de Rectoría. Esto es una prueba que sí escuchó a MartínBaró y que vio a los soldados.El asesinato delos padres jesuitas marcó el final de la guerra. Este crimen brutal hizo queEstados Unidos cesara la ayuda de hasta cuatro mil millones de dólares que esepaís mandó al Ejército salvadoreño, enel conjunto de la contienda, para mantener la guerra; también inició unainvestigación de lo ocurrido por medio de un comité encabezado por elcongresista Joe Mockley.La muerte de losjesuitas, por ser intelectuales conocidos internacionalmente, fue el toque deatención para que el mundo supiera lo que estaba sucediendo en El Salvador.Ellos fueron hombres de bien que solo querían la justicia y la paz para elpaís. Trabajaron incansablemente para alcanzar ese fin, por ello pagaron unenorme precio: sus vidas, las que se suman a las ochenta mil vidas queofrendaron los salvadoreños para que su país tuviera, al fin, la oportunidad deiniciar el camino hacia la democracia.
Broken Laws, Broken Lives
La organización Physicians for Human Rights (Médicos por los Derechos Humanos) presentó un informe científico sobre torturas practicadas por personal militar y de inteligencia de Estados Unidos a prisioneros en Guantanamo y en Irak. El informe está disponible en el sitio http://brokenlives.info/. La introducción al informe la escribió Antonio Taguba, un general mayor norteamericano quien dirigió la investigación oficial del ejército de Estados Unidos de las torturas en Abu Ghraib, Irak.Reproducimos en Siguiente Página el texto del general mayor Antonio Taguba.PREFACEThis report tells the largely untold human story of what happened to detainees in our custody when the Commander-in-Chief and those under him authorized a systematic regime of torture. This story is not only written in words: It is scrawled for the rest of these individual’s lives on their bodies and minds. Our national honor is stained by the indignity and inhumane treatment these men received from their captors. The profiles of these eleven former detainees, none of whom were ever charged with a crime or told why they were detained, are tragic and brutal rebuttals to those who claim that torture is ever justified. Through the experiences of these men in Iraq, Afghanistan, and Guantanamo Bay, we can see the full-scope of the damage this illegal and unsound policy has inflicted —both on America’s institutions and our nation’s founding values, which the military, intelligence services, and our justice system are duty-bound to defend.In order for these individuals to suffer the wanton cruelty to which they were subjected, a government policy was promulgated to the field whereby the Geneva Conventions and the Uniform Code of Military Justice were disregarded. The UN Convention Against Torture was indiscriminately ignored. And the healing professions, including physicians and psychologists, became complicit in the willful infliction of harm against those the Hippocratic Oath demands they protect.After years of disclosures by government investigations, media accounts, and reports from human rights organizations, there is no longer any doubt as to whether the current administration has committed war crimes. The only question that remains to be answered is whether those who ordered the use of torture will be held to account.The former detainees in this report, each of whom is fighting a lonely and difficult battle to rebuild his life, require reparations for what they endured, comprehensive psycho-social and medical assistance, and even an official apology from our government.But most of all, these men deserve justice as required under the tenets of international law and the United States Constitution. And so do the American people.
Immigration and the Unions
The very idea that unions would endorse legalizing illegal immigrants, as the country’s two big labor federations did this month, strikes some as absurd. Americans have a hard enough time competing with cheap foreign labor. Why undercut them within our own borders? Especially with millions of citizens losing their jobs? These questions deserve an answer since the bad economy will only strengthen the stiff winds of opposition that President Obama will have to fight if he is going to win the sweeping immigration overhaul he has promised. Legalization was already politically treacherous thanks to the tireless work of restrictionists who have spent years denouncing illegal immigrants as harmful to the country’s health. They have long compared the undocumented to invaders and parasites; it’s a very short distance from there to scabs. To understand why that view is misguided, it helps to remember that the country has largely bought that argument and spent decades and billions to seal the border as tightly as possible. It stages raids to pull people off assembly lines and out of their beds and cars. It has added hundreds of thousands of prison beds to hold illegal immigrants and enlisted local police officers to enforce federal laws. It has done everything it can to make illegal immigrants miserable in the hope that they will abandon their jobs, houses and citizen-children and tell everyone back home to forget about America. And how has that worked? It hasn’t. The agricultural work force is still overwhelmingly undocumented, as are the workers doing other dirty or dangerous jobs in places like hotels, carwashes and restaurants. Soaring unemployment has hit both skilled and unskilled workers hard. But laid-off construction workers have not been lining up to plant onions or pick tomatoes, and a hidden population of 12 million undocumented immigrants has not begun a mass exodus anywhere. Nor have the forces of global economic migration magically adjusted to fit the American mood. Thousands of workers still cross the border, although the numbers are down — a sign of the downturn, particularly in home building. When the economy recovers, the flow will revive. (Economic forces are dynamic, even if our immigration policies are not.) The unions, at least, understand that there is a better way. They see immigration reform as an issue of worker empowerment. If undocumented immigrants undercut wages and job conditions for Americans — and many do, by tolerating low pay and abuse and bolstering an off-the-books system that robs law-abiding employers and taxpayers — it is because they cannot stand up for their rights. “Workers don’t depress wages. Unscrupulous employers do,” said Terence O’Sullivan, president of the Laborers’ International Union of North America. Unemployment in his industry is above 21 percent. Nearly two million construction workers are out of work. So what does Mr. O’Sullivan want? Reform that allows immigrants to legalize. “If we can free them so they can come out of the shadows, we can not only improve their lives, but all workers’ lives,” he said. Eliseo Medina, the international executive vice president of the Service Employees International Union, agreed. “First and foremost, this is an economic argument,” he said. Making the pro-union case for reform is not necessarily going to be easy. Even as immigration has changed the face of many American unions, hostility to foreigners remains a problem among some of the rank and file. Mr. Medina said union leaders were going to have to work hard to make members understand that false populism was not on their side. “You may not want to do this because you like José Rodríguez,” Mr. Medina said, “but this affects you. Your standard of living is not going to improve, and you’re not going to be in a stronger position to solve your problems as long as you have all of these people out there without any rights — without any ability to contribute. Things will only get worse, not better.”(The New York Times Editorial)
Noticia bomba
(José Miguel Larraya es defensor del lector de El País) Tomo sin ironía el título en español de la maravillosa novela sobre periodismo que escribió Evelyn Waugh. Noticias como las basadas en los papeles del comandante Reyes no llegan todos los días, ni todos los meses, a las páginas de un diario. Recapitulemos. El pasado 1 de marzo, comandos colombianos se internaron en territorio de Ecuador y atacaron un campamento de la guerrilla de las FARC. La operación se saldó con la muerte del jefe Raúl Reyes y una veintena de guerrilleros. Los militares colombianos se incautaron, además, de tres ordenadores del jefe guerrillero, un botín electrónico cuyo contenido tenía, como se supo después, un alto voltaje político y diplomático. El escándalo internacional fue inmediato. Ecuador rompió relaciones con Colombia por violación de su territorio. A la protesta se sumó inmediatamente Venezuela, cuyo Gobierno aparece en los documentos aprehendidos como financiador e intermediario en la compra de material de guerra -misiles tierra-aire- para la guerrilla colombiana. En medio del escándalo internacional, con intervención de la Organización de Estados Americanos (OEA), Bogotá puso en manos de la Interpol los ordenadores intervenidos para que acreditasen que no habían sido sometidos a ninguna manipulación en su contenido. Maite Rico, redactora de la sección Internacional, especializada en América Latina, ex corresponsal en México, cubrió, como enviada especial del diario, la crisis entre Ecuador y Colombia que se generó por el ataque del Ejército colombiano al campamento de las FARC. Su trabajo en esas fechas le abrió puertas que imagino -el Defensor no pregunta por las fuentes de los periodistas- le facilitaron la exclusiva de los papeles del comandante Reyes, sobre la que ha escrito tres reportajes publicados entre el 10 y el 12 de mayo.Como la mayoría son documentos reservados, que no están escritos para ser publicados, los papeles de Reyes están llenos de datos incómodos que sacan a la luz lo que debe permanecer en las tinieblas de las operaciones secretas. Y el paisaje político-diplomático-terrorista que describen es, por lo menos, inquietante.Pero algunos lectores, que en su mayoría no ocultan su hostilidad al Gobierno de Colombia que preside Álvaro Uribe, han escrito al Defensor para protestar por los reportajes de Maite Rico. Dos ejemplos. Jaime Balaguer dice estar "conmocionado por la falta de rigor y de honestidad de la serie de Maite Rico sobre Colombia y las FARC", y la acusa de que en sus informaciones no hay "contraste de fuentes". Este lector afirma que "ir a Colombia y contar las 'confidencias' de los militares colombianos no es periodismo". José Ángel García, por su parte, afirma que existe una "confusión inaceptable entre la opinión, la calificación y la descripción periodística de los hechos". Es casi tan molesto, añade, "como la ausencia de precisión sobre las fuentes, de la más mínima verificación de los supuestos datos supuestamente encontrados en un supuesto ordenador personal de un guerrillero".Maite Rico considera que la fuente no puede ser más precisa: son las propias FARC. "Es evidente que si no hubiera estado segura de la autenticidad de los documentos, no los habría publicado. En primer lugar, los contactos merecían toda mi confianza. En segundo lugar, la lectura de los cientos de páginas a las que tuve acceso no dejaba lugar a dudas, como tampoco tuvieron dudas los expertos (no sólo colombianos) a los que consulté. Pero es que, además, los datos ofrecidos por los ordenadores se han ido corroborando puntualmente desde el primer momento: desde el hallazgo de zulos y dinero -recuerden los 480.000 dólares en Costa Rica- hasta las reuniones clandestinas reconocidas por ministros venezolanos y ecuatorianos"."Con Raúl Reyes no podía cotejar nada por razones obvias, y las FARC guardan un silencio elocuente. Pero los lectores 'conmocionados' pueden estar tranquilos: Interpol ha disipado cualquier duda al certificar que los ordenadores no fueron manipulados y que pertenecen a Reyes"."En resumen", concluye Rico, "creo que la 'falta de honestidad' habría que buscarla en aquellos que apelan al 'rigor profesional' para acallar verdades que les incomodan -cosa que sucede con frecuencia, por cierto, cuando se escribe sobre Hugo Chávez-. Frente a realidades tan pavorosas (un gobernante usa los presupuestos de su país para armar a un grupo catalogado como terrorista) no caben los pretextos ideológicos".Las exclusivas nunca son inocentes. En la inmensa mayoría de los casos, los periodistas no roban las noticias, sino que las reciben de fuentes interesadas en su difusión. Es la relevancia de la información la que cuenta, como también ocurrió con los datos contenidos en el ordenador del jefe paramilitar Rodrigo Tovar, alias Jorge 40. En aquel caso, los nexos no eran con el chavismo, sino con políticos colombianos. La crisis colombiana, con sus repercusiones continentales, es de por sí compleja. Cualquier información que ayude a comprenderla mejor debe ser bienvenida.<El Defensor del Lector es una figura creada por la Dirección de EL PAIS para garantizar los derechos de los lectores, atender a sus dudas, quejas y sugerencias sobre los contenidos del periódico, así como para vigilar que el tratamiento de las informaciones es acorde con las reglas éticas y profesionales del periodismo. Puede intervenir a instancia de cualquier lector o por iniciativa propia. Los lectores pueden escribir al Defensor del Lector por carta o por email (defensor@elpais.es), o telefonearle al número: 91 337 78 36>
Haití en el corazón
Cuando en marzo del año pasado el avión se alejaba de Puerto Príncipe para poner proa hacia el mar Caribe iluminado por los fuegos de la mañana, sentí, no sin melancolía, que dejaba atrás un territorio de sombras y desesperanza. Había pasado allí una semana, empeñado en preparar un reportaje bajo encargo del diario EL PAÍS y Médicos sin Fronteras (MSF), dentro de la serie Testigos del horror, y horror había encontrado suficiente al recorrer las calles desbordadas de gente en convivencia con las cloacas y los mares de basura; al visitar los mercados y los puestos callejeros de alimentos donde se venden tortas de lodo aderezadas con sal y margarina, que es un alimento corriente de los más pobres entre los pobres en Haití; al visitar las escuelas derruidas por la vejez, los hospitales hacinados y mal equipados, las clínicas de MSF sembradas en medio de la miseria desolada donde los médicos y enfermeras hacían esfuerzos sobrehumanos por procurar salud a miles de visitantes cada día.Hoy, tras la tragedia inconmensurable del terremoto, pienso en Haití en medio de sus carencias, ya damnificado de antemano por décadas de injusticia y de pobreza, de dictaduras, la última de ellas la de la familia Duvalier, y de violencia, de corrupción, de anarquía, de golpes de Estado, de proyectos mesiánicos, de intervenciones militares.El terremoto no ha hecho más que alzar ese lienzo de olvido y desinterés tendido sobre el cuerpo lacerado del país, para enseñarnos sus heridas multiplicadas por la nueva tragedia causante de miles de muertos y millones de víctimas que se vienen a sumar a las muertes y damnificados que ya habían dejado los últimos huracanes en serie tras los cuales quedaron viviendo en campamentos más de 300.000 personas en el área rural, destruidos sus hogares.Los problemas políticos crónicos, las contradicciones entre líderes de facciones, las penurias y las carencias, la falta de recursos, habían hecho que el Estado haitiano no pudiera afrontar los graves problemas de seguridad nacional, y dejara los asuntos de orden público en manos de una policía internacional al mando de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH), a cargo de lidiar con el narcotráfico, con las pandillas juveniles violentas y con los secuestros, tres grandes males del país.Ahora, el jefe de esa misión, el diplomático tunecino Hédi Annabi, con el que me entrevisté largamente en su despacho del quinto piso del Hotel Christopher, su cuartel general, ha muerto al derrumbarse el edificio entre cuyas ruinas quedaron atrapados decenas más de miembros de la MINUSTAH. Sus palabras, al terminar la entrevista, cuando le pregunto por el fin de la misión que encabeza, fueron, como consigno en mi reportaje: "Habrá que irse, pero irse para no regresar".Es decir, irse cuando el gobierno del presidente René Préval hubiera conseguido los elementos de estabilidad suficientes, cuando existiese un nivel aceptable de consolidación de las instituciones y de funcionamiento pacífico del Parlamento, cuando el sistema judicial dejara de ser el remedo que es, cuando el Estado pudiera asumir las funciones policiacas, incluido el control de las cárceles. Todo esto estaba previsto que fuera revisado en el año 2011. ¿Y ahora?El terremoto resquebraja las posibilidades de conseguir un gobierno estable y consolidar la existencia de un Estado nacional, capaz de organizar la Administración pública y de tener poder coercitivo. En semejantes circunstancias, la palabra soberanía se borra por sí misma.El gobierno no ha podido siquiera, en estas condiciones trágicas, ejercer el control del aeropuerto internacional de Puerto Príncipe, en manos ahora de Estados Unidos, ya no se diga ejercer el control de la ayuda humanitaria. A los 8.000 soldados de la MINUSTAH se han agregado ya 10.000 más de Estados Unidos, que se quedarán cuanto sea necesario, según declaraciones de la Casa Blanca.Para Washington, además, las emigraciones masivas desde Haití son consideradas un problema de su propia seguridad nacional, y buscará evitar que se den nuevas avalanchas de expatriados hacia su territorio.Lo peor falta aún por venir, con millones de hambrientos, sin electricidad ni agua potable, sin viviendas, sin hospitales ni escuelas.Los reflectores fijados hoy sobre Haití se apagarán necesariamente, y las cámaras de televisión se irán reclamadas por otros asuntos sensacionales en el mundo. Toda ayuda humanitaria es temporal, y llegará un momento en que para los países que han acudido en auxilio de Haití se acabará la situación de emergencia. Pero el país seguirá impotente, inválido, destruido, y sin posibilidad ninguna de subsistir por sus propios medios. Ésta es una tragedia aún mayor, la del olvido.Es entonces cuando habrá que escuchar a Haití, esa tierra doliente y sombría.(El País, Madrid)
Letting Scientists Off the Leash
I thought I would start this blog by describing what life is like for a scientist at a modern research university, and the more general consequences for science and creativity. I spend much of my time teaching, although only a small fraction of that is in the classroom. The majority of my teaching is with the graduate students and postdocs who have joined my group to learn hands-on science — the model to keep in mind is apprenticeship, like in a medieval guild. We work together to advance the frontiers of knowledge, and I try to help them develop intellectual independence and a sense for how to develop their own creative research program. This talented group of people are the actual hands in the lab doing experiments (it has unfortunately been a while since I have had the time to do experiments with my own hands; typically these days I am more involved in helping debug problems and analyze data, and writing up the results – and writing grants, of course). Where does the money come from to pay for our science? Mostly from the federal government — your tax dollars at work — and non-profit foundations. Income from grants written by professors is the single largest contribution to the Stanford University budget (the second largest is endowment income, and student tuition is a distant third). Stanford has an enormous endowment ($17 billion before the market crash) but applies it in a heavily leveraged manner — in other words, they tend to use it to prime the pump and not to support ongoing research programs. When a university hires a professor, they typically agree to provide a start-up package to support that professor’s research over the first few years, after which the professor must seek external funding. This funding is needed to buy research supplies, pay stipends and tuition for graduate students, and even to support the salary of the faculty member. In fact, the university rarely pays the full salary of the professor — depending on the department, the professor must find between 25 percent and 75 percent of his or her salary from outside grants. It strikes me as one of the ironies of modern life that professorial faculty, who by and large lean to the left politically, accept such a brutal free-market approach to their livelihood. If they can’t raise grants to support their research every year, they won’t get paid. So not only do they have to worry about publish or perish, it’s also funding or famine, in the very real sense that without a grant there might not be food on the family dinner table! It’s almost like a small business — each faculty member is essentially running an enterprise for which he or she must find revenue (grants), manage finances, balance the books and pay expenses like salaries, tuition, rent and even taxes to the university for the space used. Such a system does not come without its own perils. It is not so easy to ask our young scientists to think out of the box when a significant portion of their salary (and mortgage payments) depends on guaranteeing a steady source of funding. Consequently, professors become highly attuned to the institutional priorities of various funding agencies — often at a cost to their own creativity and desired research directions. Science at its most interesting is provocative, surprising, counter-intuitive and difficult to plan — and those are very difficult values to institutionalize in an organization or bureaucracy of any size. I have seen my own grant proposals get chewed up and rejected with comments like “typically bold, but wildly ambitious,” and wondered why it is wrong to be ambitious in one’s research — but perhaps that is a conclusion fully consistent with science by committee. Fortunately, at key points in my career I lucked into special awards when conventional funding was not available. These awards — from the David and Lucile Packard Foundation, the National Institutes of Health and the Howard Hughes Medical Institute – all represented turning points in that they allowed me to pursue ideas that were rejected as too crazy by the ordinary grant process. These include using discoveries from my basic research in single molecule biophysics to develop a new kind of DNA sequencer, plunging into the world of prenatal diagnostics by inventing a non-invasive alternative to amniocentesis and inventing microfluidic plumbing devices for biological applications as diverse as protein crystallography and single cell analysis. So it is working out O.K. for me — for now — but there are many more creative scientists out there than there are special awards. In economic terms, I worry about the “opportunity cost” not only of the ideas not pursued and discoveries not made, but also of the time spent trying to convince very conservative review panels to fund one’s research — each minute spent writing or administering grants is a minute that wasn’t spent thinking deep thoughts about the frontiers of knowledge. You may have noticed that one of my lifelines actually came from the N.I.H. — an agency not known for taking risks. I could write pages about the last presidential administration’s disastrous approach to science. However, for whatever reason (and I suspect it was dumb luck: the exception that proves the rule) George W. Bush appointed an N.I.H. director who was both visionary and an adept leader — Elias Zerhouni. Dr. Zerhouni changed the process for awarding grants, which had become inbred and conservative. Among other steps, he created a series of special awards — for “Pioneers” and “Innovators” — to fund highly risky research, and it is one of these that I was the recipient of. As we think about how to heed President Obama’s call to “put science back in its rightful place,” I wonder if this should also be the time to rethink the basic foundations of how science is funded. Could we stimulate more discovery and creativity if more scientists had the security of their own salary and a long-term commitment to a minimal level of research support? Would this encourage risk-taking and lead to an overall improvement in the quality of science? As we consider the monumental challenges facing our generation — climate change, energy needs and health care — and look to science for solutions, it would behoove us to remember that it is almost impossible to predict where the next great discoveries will be made — and thus we should invest broadly and let scientists off their leashes.(Públicado en NYTimes February 10th, 2009) http://judson.blogs.nytimes.com/2009/02/10/guest-column-letting-scientists-off-the-leash/?8ty&emc=ty
Un vuelo de gansos mancha el azul celeste
Algunos piensan que hay reelecciones buenas y reelecciones malas en América Latina, dependiendo del color del cristal ideológico con que se mire. Que lo que hace el ganso no tiene nada que ver con lo que hace la gansa. Me parece un error. De acuerdo con la tradición agitada del continente, toda reelección ha dejado siempre un rastro negativo de violencia y desconcierto, quizás porque la voluntad arbitraria sigue oponiéndose tercamente al ideal en nuestra historia, y lo que se consuman son siempre los hechos aciagos. Pero el ideal suele volver por sus fueros, y nunca de manera pacífica ni ordenada. Es una especie de cadena perpetua, que va repitiendo sus eslabones, como si nunca se aprendiera de las lecciones de la realidad.Es lo mismo con los golpes de estado. No hay golpes buenos y golpes malos. No hay asalto militar a los palacios presidenciales que merezca aplausos, ni nobleza alguna en sacar de su cama a un presidente. Porque cuando los sables se alzan contra la democracia, cualesquiera que sean las circunstancias, las instituciones sufren heridas graves que cuesta mucho sanar, no importan los deméritos de los presidentes derrocados.Estamos, por desgracia, en una etapa de nuestra historia en la que los cambios constitucionales, que pretextan reformar las estructuras políticas para volverlas más abiertas, pasando de la democracia representativa a la participativa, llevan consigo necesariamente la prolongación de la estancia en el poder de los mismos presidentes que promueven esas reformas, una prolongación que se vuelve indefinida. Es como decirles a los pueblos que la pretendida modernidad constitucional lleva siempre al cuello la rueda de molino de la tiranía. Porque no hay prolongación de poder a largo plazo que no termine sacrificando la libertad.¿Por qué no puede haber proyectos políticos que representen cambios justos de fondo, apertura de las estructuras institucionales, ampliación de los espacios de participación ciudadana, y que al mismo tiempo aseguren la alternancia en el poder?La presencia indefinida del caudillo corrompe las aguas de la democracia, cualquiera que sea el contexto ideológico en que se dé la prolongación del mandato presidencial forzado por medio de reformas constitucionales. Es la ambición mesiánica de poder la que hace al caudillo buscar como quedarse a toda costa, sea de izquierda o de derecha, crea en el populismo benefactor o en el orden público y la seguridad nacional, sea en una situación de paz o de guerra. Es su idea obsesiva de que sin su presencia en la presidencia el proyecto que él representa se verá frustrado, porque nadie más tendrá la habilidad, o las agallas, para llevarlo adelante.Es lo que he pensado ahora que se plantea, en apariencia ya de manera irreversible, la reelección por segunda vez del presidente Álvaro Uribe, fin para el cual se está moviendo toda la maquinaria institucional de Colombia. Un triple mandato que no se repite desde los tiempos del presidente conservador Rafael Núñez, quien pudo concentrar en sus manos todo el poder posible en los finales del siglo XIX.Electo por primera vez en 2002, el presidente Uribe hizo pasar ya a la Constitución Política de Colombia por una reforma que le permitió la primera reelección, y ahora lleva adelante otra, mediante el complejo proceso de dictámenes de la Corte Constitucional y de la Corte Suprema de Justicia, y votaciones en ambas cámaras del poder legislativo, para hacer posible un tercer mandato. Todo el poder del estado ha sido puesto al servicio de esta causa, un esfuerzo que merecería mejores motivos.Y sucede entonces lo inevitable. Que comienzan a alzarse rumores de corrupción, de compra de votos entre los diputados y senadores, de violencia en contra de la libre voluntad de quienes están llamados por la ley a decidir. El dirigente del Partido Liberal, adverso a Uribe, Rafael Pardo, aspirante él mismo a la presidencia, ha denunciado que se están invirtiendo más de cien millones de dólares en la compra de votos legislativos para allanar el camino a la reelección.En este contexto, las reformas terminan siendo legales pero no llegan a ser legítimas, por mucho que se amparen en el respaldo popular. Porque nadie duda de que el plebiscito que se necesita para sancionar las reformas sería ganado ampliamente por el presidente Uribe, quien tiene un apoyo cercano al 70% en las encuestas de opinión; y que lo mismo ganaría las elecciones presidenciales de 2010, seguramente en la primera vuelta.Pero es allí donde reside precisamente la calidad del estadista, en saber rechazar las tentaciones del poder en la cumbre del poder mismo, y en la plenitud de la popularidad, como ocurre con el presidente Ignacio Lula da Silva del Brasil, que no tendría, sin duda, ningún problema para perseguir su tercer periodo, con más respaldo de los electores que el propio Uribe. Ya ha dicho que no, sin embargo, con gran sabiduría.Frente a las necesidades éticas de América Latina, y en tiempos en que lo que se requiere son ejemplos de recta conducta en la política, ¿qué diferencia separa entonces al presidente Chávez del presidente Uribe, si ambos buscan quedarse en el poder a toda costa?Si la reelección es mala para el ganso, tiene que serlo también para la gansa.(El País, Madrid. El autor es escritor y ex-vicepresidente de Nicaragua)
Caballo de Troya
Publicado en Siglo XXI de Guatemala
Moscú vuelve al Caribe
Vuelve Moscú donde solía. Desaparecido el marxismo leninismo como la propia URSS a fin de los años ochenta, quien hoy regresa al Caribe es Rusia. Y aunque no tiene vínculos ideológicos con el comunismo residual de La Habana o el llamado socialismo del siglo XXI de Caracas, no por ello despliega menos una política de gran potencia en el presunto patio trasero de Estados Unidos. No es una nueva guerra fría, pero sí una prenda de realpolitik.El presidente ruso, Dmitri Medvédev ha aprovechado su asistencia a la cumbre de la APEC en Lima, para visitar con medido tiralíneas político, Perú, Brasil, Venezuela y Cuba; un firme aliado occidental, un líder latinoamericano, y dos Estados de la izquierda radical. La recuperación del status de gran potencia había sido ya política del anterior presidente Vladímir Putin y continúa siéndolo hoy que éste ocupa, nominalmente bajo Medvédev, el cargo de primer ministro.En Venezuela, el mandatario ruso firmó con el presidente Chávez un acuerdo de cooperación nuclear, que debería culminar en la construcción de una central atómica venezolana, para la producción de energía eléctrica, según asegura el líder bolivariano. Las similitudes con el caso de Irán, de quien Estados Unidos y Occidente temen que persiga la obtención del arma nuclear, son evidentes, aunque Caracas aún no haya iniciado ese camino. Y a ello se suma la celebración de maniobras navales conjuntas en el Caribe. Son unos ejercicios relativamente modestos, menos de 10 buques y unos 2.000 efectivos, pero Medvédev no ignora que para Chávez el único enemigo en lontananza es el vecino Estados Unidos.La visita a Cuba, donde el ruso se ha entrevistado con el presidente Raúl Castro, pero, sobre todo, ha sido recibido por el paterfamilias Fidel, de quien se ha deshecho en unos elogios que no casan con la imagen que Medvédev quiere dar de gobernante liberal y modernista, ha sido en realidad un reencuentro. En el último año, las relaciones comerciales entre los dos países, que habían caído a cero tras la autovoladura de la Unión Soviética en 1989-1991, han recobrado un buen tono que no deja de consolidarse rápidamente.Moscú, con el viaje, lo que ha hecho es decir aquí estoy y voy a donde quiero; Chávez se ha servido de ello para sus intereses más locales; y los Castro recuperan, quizá, un viejo aliado, pero sabiendo que ya nada puede volver a ser lo mismo.
An Overlooked Force in Iran
Women in sunglasses and headscarves, speaking through megaphones, brandishing cameras, carrying signs: When they first appeared, the photographs of the 2005 Tehran University women's rights protests were a powerful reminder of the true potential of Iranian women. The images were uplifting; they featured women of many ages; and they went on circulating long after the protests themselves died down. Now they have been replaced by a far more brutal and already infamous set of images: The photographs and video taken this past weekend of a young Iranian woman, allegedly shot by a government sniper, dying on the streets of Tehran. I don't know whether the girl in the photographs is destined to become this revolution's symbolic martyr, as some are already predicting. I do know, however, that there is a connection between the violence in Iran over the past week and the women's rights movement that has slowly gained strength in Iran over the past several years. In the United States, the most America-centric commentators have somberly attributed the strength of recent demonstrations to the election of Barack Obama. Others want to give credit to the democracy rhetoric of the Bush administration. Still others want to call this a "Twitter revolution" or a "Facebook revolution," as if zippy new technology alone had inspired the protests. But the truth is that the high turnout has been the result of many years of organizational work, carried out by small groups of civil rights activists and above all women's groups, working largely unnoticed and without much outside help. Since 2006, the One Million Signatures Campaign has been circulating a petition, online and in print, that calls for an end to laws that discriminate against women and the enactment of laws that provide equal rights for women in marriage, equal rights to divorce, equal inheritance rights and equal testimony rights for men and women in court. Though based outside the country, the Abdorrahman Boroumand Foundation, founded by a pair of sisters, translates and publishes online fundamental human rights documents; it maintains an online database of the names of thousands of victims of the Islamic Republic as well. In the past decade, Iranian women have participated in student strikes as well as teachers' strikes, and in organizations of Bahai, Christian and other religious groups whose members are deemed "heretics" by the regime. Not Obama, not Bush and not Twitter, in other words, but years of work and effort lie behind the public display of defiance and, in particular, the number of women on the streets -- and their presence matters. Their presence could strike the deepest blow against the regime. For at the heart of the ideology of the Islamic Republic is its claim to divine inspiration: Its leadership is legitimate, as is its harsh repression of women, because God has decreed that it is so. The outright rejection of this creed by tens of thousands of women, not just over the past weekend but over the past decade, has to weaken the Islamic Republic's claim to invincibility, in Iran and across the Middle East. The regime's political elite knows this well: It is no accident that the two main challengers to President Mahmoud Ahmadinejad in the Iranian presidential campaign promised to repeal some of the laws that discriminate against women, and it is no accident that the leading challenger, Mir Hossein Mousavi, used his wife, a political scientist and former university chancellor, in his campaign appearances and posters. The Iranian clerics know that women pose a profound threat to their authority, too: As the activist Ladan Boroumand has written, the regime would not bother to brutally repress dissidents unless it feared them deeply. Nobody would have murdered a peaceful, unarmed young woman in blue jeans -- unless her mere presence on the street presented a dire threat. The regime may succeed. Violence usually succeeds, at least in the short term, in intimidating people. In the long term, however, the links, structures, organizations and groups set up by Iranian women, not to mention the photographs of the past week, will continue to gnaw away at the Iranian regime's legitimacy -- and we should take note. I cannot count how many times I've been told in recent years that "women's issues" in the Islamic world are a secondary subject: Whether the discussion is of the Afghan constitution or the Saudi government, the standard line among most commentators has always been that other things -- stability, security, oil -- matter more. But regimes that repress the civil and human rights of half their population are inherently unstable. Sooner or later, there has to be a backlash. In Iran, we're watching one unfold.(The Washington Post)
Could Obama Say a Few Words for Democracy in El Salvador?
We all know that President Obama has a lot on his plate. On the other hand, as candidate Obama reminded us, "words matter," especially the words spoken by the President of the United States, and with El Salvador facing a watershed Presidential election on March 15, President Obama could do a lot for the people of El Salvador and the future of U.S. relations with Latin America simply by saying something along the following lines between now and March 15:"The United States government will remain neutral in El Salvador's March 15 presidential race, will respect the election results, and will work toward a positive relationship with whichever party is elected."If you haven't been following the recent history of U.S. relations with Central America in general and El Salvador in particular, that might seem like a pretty banal statement. But in the context of the actual history of massive U.S. interference in the region's political processes, such a statement would be revolutionary.Before El Salvador's 2004 presidential election, Bush Administration officials attempted to influence the vote by suggesting that if the opposition party won, the status of Salvadoran immigrants in the U.S. would be threatened and remittances sent to El Salvador by Salvadorans working in the U.S. could be ended. These remittances have been estimated to comprise 10-20% of El Salvador's GDP, likely surpassing official development assistance, foreign direct investment, and tourism as a source of foreign exchange for El Salvador. These threats were widely reported in the Salvadoran press and have contributed to a lingering belief that the U.S. will not permit the opposition to win the election - a belief currently being stoked by right-wing campaign ads in the country, which are recycling the threats from 2004.If the U.S. makes no statement that it will remain neutral and respect the results, the practical effect will be to preserve the enduring legacy of past interference, and thereby to effectively intervene against the opposition. An official statement is needed to clarify for Salvadoran public opinion that the U.S. will remain scrupulously neutral.Representatives Raul Grijalva and Marcy Kaptur are sending a letter this week to President Obama urging him to affirm U.S. neutrality in the election. The letter says:U.S. immigration policy should not be made into a political instrument used to influence foreign elections. Similarly, we reject the suggestion that the US government would seek to financially punish Salvadorans, in this country or in El Salvador , for exercising their right to elect a government of their choosing. As members of Congress, we will not support any such measure.Could Obama say a few words for democracy in El Salvador? It would take him 30 seconds to do so. But it would be a big step towards repairing the damage of the last 30 years of U.S. policy.Robert Naiman is National Coordinator of Just Foreign Policy. http://www.huffingtonpost.com/robert-naiman/could-obama-say-a-few-wor_b_171191.html
¿Adiós a la CICIES? Primera parte: La situación actual. De Rubén Zamora
Publicado en LA PRENSA GRAFICA, 7 septiembre 2019Las posibilidades de tener realmente una Comisión Internacional Contra la Impunidad en El Salvador (CICIES), si bien sería muy útil para el saneamiento del Estado, sin embargo pareciera irse esfumando por los tuits del presidente, las afirmaciones del vicepresidente y bajo la presión a ambos del próximo cumplimiento del plazo para el que prometieron a bombo y platillo tenerla funcionando el 8 de septiembre; el panorama actual se caracteriza por la confusión: por un lado una fuerte discusión en los ámbitos políticos acerca de su viabilidad y por el otro, afirmaciones contradictorias entre el presidente y su vicepresidente, el primero declarando que va a crear una comisión contra la corrupción, sin informar de cosas tan necesarias como su naturaleza ya sea de Comisión del Órgano Ejecutivo o Comisión Internacional, sus atribuciones y duración, y el segundo afirmando rotundamente "LA CICIES VA", sin soltar la más mínima información al respecto, pero dando a entender que se trata de una Comisión Internacional, y todo esto acompañado de proclamas de funcionarios de gobierno que lo único que hacen es enturbiar la discusión sobre el tema y demostrar desconocimiento de lo que la Constitución manda.Si tomamos como punto de partida para el análisis la rotunda declaración del vicepresidente de la República afirmando "LA CICIES VA", es claro que se refiere a un modelo similar al de Guatemala, es decir, de COMISIÓN INTERNACIONAL; esto significa un acuerdo formal ya sea con instituciones multilaterales como ONU, OEA o con gobiernos extranjeros y cualquiera que fuere el acuerdo con ellos estará sujeto ineludiblemente a la aprobación de la Asamblea Legislativa, pues va más allá de una mera cooperación e implica materia jurisdiccional.Por su parte, el vicepresidente ha añadido que se ha explorado a la ONU y a la OEA, pero ninguna de las dos ha respondido o tomado medidas exploratorias del tema; esto es importante de señalar conociendo los procedimientos que estas organizaciones utilizan para llegar a un acuerdo, todo empieza por una o varias misiones de esos organismos explorando, en el terreno, la posibilidad de involucrarse en una Comisión Internacional, sobre todo cuando el tema es altamente controversial, tal y como lo confirman las recientes Comisiones de Guatemala y Honduras. Tanto la ONU como la OEA son organizaciones, altamente burocratizadas y jerárquicas, pero que saben que en definitiva, es su secretario general quien debe responder ante su correspondiente Asamblea General por lo que se haga o no se haga.Una vez la Organización estima que es factible y conveniente involucrarse, empieza el complicado proceso de acordar los términos de su papel en la CICI y si algo va a exigir el organismo internacional es la garantía de que tendrá completa autonomía en las decisiones y métodos que implemente, lo cual es obvio, pues si se trata de combatir la impunidad de la corrupción, los funcionarios del Órgano Ejecutivo serán sujetos de investigación y no pueden ser juez y parte, así mismo tendrán que asegurarse que su trabajo no contraríe nuestra legislación, especialmente serán muy cuidadosas de evitar que su compromiso viole la Constitución del país. He señalado solo estos dos puntos por ser cruciales, sin embargo, el documento abarca una gran cantidad de otros temas, administrativos, de temporalidad, de garantías diplomáticas que tienen que discutirse y acordarse antes de iniciar la ejecución del programa.Es útil traer a colación el caso del gobierno anterior que en su intento por desarrollar un acuerdo nacional solicitó la cooperación de la ONU y antes de dar respuesta, envió tres misiones diferentes a evaluar si había condiciones favorables para hacerlo; los informes fueron positivos en el sentido que gobierno, partidos y personalidades diversas de la sociedad civil aceptaban el papel de la ONU y estaban dispuestos a participar en el acuerdo y sobre esa base el secretario general de ONU decidió nombrar a su representante personal, para "impulsar un acuerdo nacional en El Salvador"; este proceso tomó más de un año para empezar a ejecutarse.Veo improbable que en las próximas 3 semanas se logre que una CICIES pueda empezar a trabajar en San Salvador, tal y como lo proclama el gobierno del Sr. Bukele; el plazo de 100 días que se auto estableció el nuevo gobierno es no solo una muestra de la urgencia de enfrentar este problema, sino de la ignorancia de los personeros gubernamentales de cómo se hacen las cosas.
Hamelín. De Cristian Villalta
Publicado en LA PRENSA GRAFICA, 18 agosto 2019Primero se lleva a las ratas para ahogarlas en el río Weser, al son de unos hermosos bemoles; cuando los habitantes deciden no pagarle por haberlos librado de aquella plaga, el extraño regresa con su flauta y 130 niños del pueblo lo siguen hipnotizados para nunca más volver.La narrativa corta es seductora. ¿O a poco ustedes no tienen amarrado a sus recuerdos el temor, la desazón y el alivio de nuestra niñez al escuchar uno de esos cuentos en los que brujas pavorosas perseguían a los desobedientes hijos de un pobre leñador? Cuando se revisita esas lecturas, es imposible no sobrecogerse: la bruja de Hansel y Gretel era caníbal, el corazón del Príncipe Feliz es tirado a la basura junto al cadáver de la golondrina, y el lobo se come a Caperucita, al menos en la versión de Charles Perrault que luego los Grimm corrigieron, sentimentalones.Sí, el de los cuentos es un mundo primario, en blanco y negro, fácil de entender, el máximo bien contra el máximo daño, de gran utilidad pedagógica, memorable en la psiquis infantil. En contraste, el mundo adulto está saturado de gris e incluye verdades indiscutibles, mentiras que distraen, horrores que se vuelven rutina.El mundo de los grandes parece tratarse de todo menos de la esperanza. Es que hay verdades dolorosas con las que es imposible dormir. La injusticia repetida, que no todos valemos lo mismo, o que hay historias de pecado, despojo y violencia sin moraleja, crímenes sin castigo, una tierra a la que ni el llanto ha vuelto fértil.Por eso, nuestro primer reflejo es mirar hacia la luz, aunque sea artificial; seguimos temiendo a la oscuridad.En nuestro país, no hace un mes que unas personas asumieron el poder con la promesa de acabar con la oscuridad, o al menos con la versión de ella que se llama corrupción: es que tres de nuestros últimos cuatro presidentes fueron acusados de delitos contra la gente, de robarse dinero que era nuestro, de volverse rateros.Si lo estamos contando, si lo sabemos, si procesarlos fue posible se debió entre otras cosas a que declararon de buenas a primeras el patrimonio con que entraban al gobierno. No lo hicieron porque quisieran sino porque es una obligación de ley, precisamente una protección contra los ladrones.Tristemente, a los nuevos funcionarios esta obligación les parece irrelevante. El presidente todavía no lo hecho, tampoco la mayoría de los ministros. Esta semana, el vicepresidente ha hablado de la lucha contra los corruptos con un entusiasmo contagioso, pero a él tampoco le ha quedado tiempo de cumplir con su obligación constitucional.¿Cómo es posible que actúen con esa incongruencia chabacana y aun así nos saluden viéndonos a la cara?La frescura de los nuevos señores es posible porque somos unas gentes muy distraídas. Hemos convivido con la mentira muchos años, algunas veces nos la creímos, quizá las más de las veces. Pero hoy, no solo es que nos están inundando de cuentos; hemos perdido el apetito por la verdad.Es posible también porque al ser depósito de su esperanza, muchos ciudadanos creen que a los funcionarios de la nueva ola debe disculpárseles todo, incluso las ilegalidades. Su cuento es poderoso y seductor solo si no hay interrupciones, no digamos las de la crítica, ni siquiera las que nacen de la más natural curiosidad.De la mía, de mi curiosidad, solo una pregunta para Bukele y Ulloa. ¿Dónde estaban ustedes la última vez que un presidente nos robó? Esas historias comenzaron con un salvadoreño creyéndose la excepción.
¿Quién embaucó a quién?
No cesan las paradojas en el nuevo mundo valiente de la crisis. Todos, absolutamente todos, se felicitaron por el tenor de la Cumbre de las Américas, celebrada en Trinidad hace dos semanas, por la nueva política hacia América Latina de Barack Obama y por la nueva dignidad latinoamericana. Todos, salvo dos: la derecha estadounidense y Fidel Castro, extraños compañeros de trinchera. Para entender este sorprendente giro geopolítico es preciso explicar lo que sucedió durante el periplo del nuevo presidente norteamericano, o por lo menos sugerir un par de hipótesis. Ya después veremos por qué Fidel y conservadores como Newt Gingrich comparten el mismo descontento.Una de dos: o bien Obama pecó de una increíble ingenuidad en su trato con los líderes latinoamericanos reunidos en el Caribe (y antes de ello, con el presidente Felipe Calderón en la capital mexicana), o bien les tomó perfectamente la medida.La primera posibilidad es la más obvia, y menos verosímil. Debido a su bisoñez, Obama se habría comprometido con la guerra optativa de Calderón contra el narco, con la probidad, eficacia y perseverancia de sus colaboradores, con la comentocracia mexicana que se deshizo en elogios al nuevo ocupante de la Casa Blanca. No habría entendido que así como Calderón emprendió su cruzada por motivos estrictamente políticos, la puede suspender por los mismos; que al igual que con sus predecesores, los "valientes y honestos" luchadores contra la droga de hoy pueden resultar ser los cómplices de mañana, y que el anti-americanismo proverbial de las élites mexicanas (intelectuales incluidos) volverá por sus fueros a la menor provocación.En cuanto al llamado eje del bien (Chávez, Morales, Ortega, Correa y Lugo), habría sucedido lo mismo. Le dieron a Obama por su lado, después, por supuesto, de haberle leído la cartilla sobre todos los pecados habidos y por haber cometidos por Estados Unidos en América Latina. Chávez no se comprometió a dejar de apoyar -según fuentes oficiales colombianas, más que nunca- a las FARC en Colombia y al FMLN en El Salvador (mas no a Mauricio Funes), ni a restaurar los programas de cooperación con Washington en la lucha antinarco, ni a dejar de nacionalizar a empresas nacionales y extranjeras sin compensación (el caso de la mexicana Cemex, entre otras), ni a cesar de cerrar medios de comunicación, ni a perseguir a opositores, ni a pervertir al poder judicial. Morales no se comprometió a suspender su apoyo al cultivo de hoja de coca, ni a volver a acoger en Bolivia a un embajador de Estados Unidos y al equipo antidrogas de la DEA; Correa, de Ecuador, noaceptó mantener la base de la DEA en Manta. Y Ortega ni sueña con detener su persecución de opositores, su involucramiento con los salvadoreños y sus diatribas antiamericanas.Y sobre todo, ninguno de los mencionados, ni los más sensatos como Lula, Calderón, Bachelet, etcétera, jamás le pedirán a La Habana que ponga su parte en la danza de concesiones mutuas con Washington: ni que abrogue el impuesto sobre remesas, ni que libere a los presos políticos, ni que suprima la tarjeta blanca y la prohibición de viajar, ni mucho menos que negocie la devolución o compensación de las propiedades americanas expropiadas en 1959-1962. Nunca aceptarán que, de la misma manera que presionan, con razón, a Obama para que levante unilateralmente el embargo a Cuba, deben hacerlo con Castro para que por fin se establezca un régimen democrático en la isla. En esta hipótesis, los latinoamericanos le habrían visto la cara a Obama, y éste, con toda inocencia, se habría dejado embaucar.Huelga decir que la hipótesis alternativa se antoja mucho más creíble. Consiste en pensar que fue Obama quien les tomó el pelo a los latinoamericanos, al comprender que por muy izquierdosos que sean unos, y muy modernos que parezcan otros, esta camada de líderes de la región conserva el perfil ortodoxo, incluso clásico, del político tercermundista. Con algunas palmaditas en la espalda, algunas palabras consabidas y fatigadas, y un lenguaje corporal apropiado, se dan por muy bien servidos.Como dijo Teodoro Petkoff, el ex guerrillero venezolano, "Chávez terminó calificando la reunión como 'casi perfecta'. Y todo porque Obama le dio la mano y cruzó unas palabras con él. Está visto que Chacumbele no aguanta una picada de ojos de un presidente gringo". Desde tiempos inmemoriales, los iberoamericanos le profesan una verdadera reverencia a "lo dicho" y a las formas, al contrario de los norteamericanos, para quienes "prometer no empobrece". Para los nuestros, la sustancia es secundaria; los ritos, todo. Obama los observó con creces. Dijo cuantas veces fue necesario que venía a escuchar y a aprender; que no había socios menores ni mayores en la zona, sino iguales, y que él buscaba ante todo brindarle respeto a sus colegas, aun cuando no coincidiera con ellos.Claro: no se comprometió con Lula a levantar el embargo a Cuba, o el arancel sobre el etanol, o a apoyar su pretensión de ocupar un escaño permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU; no se comprometió con Álvaro Uribe a buscar la aprobación del Acuerdo de Libre Comercio con Colombia; no se comprometió con Calderón a restaurar la prohibición de la venta de fusiles de asalto o a incrementar la Iniciativa Mérida; ni con los centroamericanos y caribeños a proponer una reforma migratoria integral. Es decir, se limitó a sonreír para la foto con Chávez, a escuchar impávido y estoico la arenga de Ortega, a recibir libros del siglo antepasado, y a solidarizarse con Evo en la denuncia de atentados indemostrables. Nada más.Gracias a todo ello, fue fuertemente aplaudido por los latinoamericanos y severamente criticado por su derecha interna... y por el único líder latinoamericano que ha superado, a un costo inaudito para su país, los tradicionales complejos de los políticos del área: Fidel Castro.La oposición conservadora de Estados Unidos le ha reclamado a Obama dejar pasar insultos y ofensas contra sus predecesores (desde Bush hasta Kennedy, y a diferencia de Zapatero y Juan Carlos I), ser demasiado cordial con Chávez sin plantear un solo tema de la agenda propia, y permitir que lo sermonearan ad náuseam sin jamás responder. Fidel Castro, por su parte, le enmendó vigorosamente la plana a Obama... y al boquisuelto de su hermano, que cometió varios pecados discursivos imperdonables. Éste es el meollo del asunto.En su reflexión del 22 de abril, el Castro mayor subrayó que "el presidente interpretó mal la declaración de Raúl" al pensar que cuando dijo en Venezuela, el 15 de abril, que "todo está sobre la mesa", incluyendo derechos humanos, presos políticos, migración, narcotráfico, etcétera, hablaba en serio.Obviamente, no: la mera mención por Raúl de "presos políticos", por exaltado que se encontrara (basta ver las imágenes de los ocho minutos de su discurso en YouTube para entenderme), constituye una herejía para Fidel. Jamás ha aceptado la existencia de presos políticos en Cuba, ni piensa hacerlo. Tampoco, por supuesto, aceptó eliminar el impuesto sobre las remesas, ni, según portavoces oficiosos, la llamada "tarjeta blanca" para salir de Cuba. En otras palabras, le recetó a Obama lo que los franceses llaman "une fin de non-recevoir": nada de nada.Para los latinoamericanos, bastaron carisma, cordialidad y cariño; para Fidel, sólo bastará que Obama se rinda, se disculpe, y pague la penitencia por los pecados de sus predecesores. El mandatario estadounidense sedujo a sus colegas presentes en Puerto España, salvo al que no es su colega, y que estaba ausente.(El País, Madrid)
El cesarismo democrático en América Latina
La última campaña electoral ha confirmado en la Argentina el papel inagotable del cesarismo en las naciones que aún tienen instituciones débiles en América Latina. Es decir, casi todas. Si se toma la definición de Antonio Gramsci, "el cesarismo expresa siempre la solución arbitraria, confiada a una gran personalidad, de una situación histórico-política caracterizada por un equilibrio de fuerzas de perspectivas catastróficas".Para el marxista italiano puede haber cesarismos progresistas -Julio César y Napoleón I- o regresivos -Napoleón III y Bismarck-, pero en todos los casos se trata de una salida encabezada por un líder militar, aunque no sólo militar, a una situación desesperada y excepcional.De ahí que la figura -llámese cesarismo, bonapartismo, bismarckismo- sea tan familiar en América Latina, donde, desde las revoluciones independentistas, la mayor parte de las naciones, castigadas por sucesivas crisis políticas y escenarios de transición, conocieron más caudillos que soluciones institucionales.Esas tierras han sido fértiles en autócratas de gran popularidad que, en los tiempos modernos, han ido expandiendo y afianzando su poder mediante el control de la corrupción, de la policía y de la facultad para repartir los recursos del Estado como les conviene.No hay mayor símbolo de cesarismo democrático que el régimen del venezolano Juan Vicente Gómez, uno de cuyos ministros, Laureano Vallenilla Lanz, estableció la validez del término en un libro de 1919. Gómez inspiró a Gabriel García Márquez el personaje del dictador de su sexta novela, El otoño del patriarca, y es la encarnación favorita del hombre fuerte de las tierras pobres para artistas plásticos como Fernando Botero y Pedro León Zapata.Cuando llegué a Venezuela en 1975, la figura de Gómez seguía ocupando el centro de la imaginación nacional, y ahora, que ha encontrado en Hugo Chávez a su mejor discípulo, casi no pasa semana sin que la oposición invoque el término. Gómez creció al lado de su predecesor, Cipriano Castro, quien inició el siglo XX enfrentando una poderosa amenaza internacional al no poder pagar la deuda contraída con empresas extranjeras expropiadas. Buques de bandera inglesa, italiana y alemana bloquearon el puerto de La Guaira en 1902 y Venezuela logró zafarse de la asfixia cuando invocó la Doctrina Drago, que dictamina la ilegalidad del cobro violento de las deudas por parte de las grandes potencias en detrimento de la soberanía, estabilidad y dignidad de los Estados débiles.Al convertirse en adalid del nacionalismo, Gómez pudo dar el salto a la vicepresidencia. Cuando Cipriano Castro debiósometerse a una cirugía delicada en Alemania, lo traicionó con un golpe que lo instaló en la jefatura del Gobierno durante 27 años. Allí, en el sillón patriarcal, murió en 1935.Su ideólogo Vallenilla Lanz, un sociólogo positivista, intentó argumentar que pueblos como el venezolano no estaban capacitados para respirar una atmósfera republicana; sólo "el gendarme necesario" -como definió a su modelo de César- podía sacarlos de la miseria y de la anomia. Dictaminó que "el Caudillo constituye la única fuerza de conservación social" y que "el gendarme electivo o hereditario de ojo avizor" es una necesidad fatal "en casi todas estas naciones de Hispanoamérica, condenadas por causas complejas a una vida turbulenta".Como eficaz vocero de la ideología oficial, Vallenilla Lanz no se refiere a Gómez en su ensayo de manera directa. Se ampara en cambio en la figura tutelar de Simón Bolívar, quien propuso la presidencia vitalicia. Escribe que Bolívar "nunca abrigó la más ligera esperanza" de que "aquellas constituciones de papel" pudieran establecer el orden. Sus críticos, como el exiliado Rómulo Betancourt, del Partido Revolucionario Venezolano -luego presidente constitucional-, lo llamó "Maquiavelo tropical empastado en papel higiénico". Lejos de ofenderse, Vallenilla Lanz agradeció la comparación con el autor de El Príncipe.Chávez no es el único heredero de la idea de un César avalado periódicamente por elecciones libres. Decidido a concentrar férreamente todo el poder en sus solas manos, lleva por ahora 10 años en el Gobierno, el mismo tiempo que Carlos Menem.Figuras como Alberto Fujimori o Álvaro Uribe, por distintas que sean, han visto en la perpetuación presidencial el vehículo para modelar sus países a la medida de sus deseos. Qué decir de Fidel Castro, quien no logró hallar un sucesor que no llevara su sangre.Si Brasil ha logrado superar, con los Gobiernos de Fernando Henrique Cardoso y Luiz Inácio Lula da Silva, la herencia del autoritarismo populista de Getulio Vargas, en la Argentina el ejemplo de Perón impregna demasiado al partido que él fundó y que ya se confunde con el Estado.Ayudan, y mucho, las torpezas de una oposición que muestra menos interés en la construcción de la democracia que en el asalto a los privilegios que confiere la cosa pública, así como parece tener menos convicción para reintegrar a los marginales al mundo de la ciudadanía que en reemplazar a un firmante de los Decretos de Necesidad y Urgencia por otro que haga lo mismo.Néstor Kirchner, como Gómez, ha intentado prolongar sus planes de hegemonía alternándose con sus parientes en el Gobierno, tal como hizo al decidir la candidatura de la actual presidenta, su mujer. Ahora sale a defender el modelo agitando el fantasma de un conflicto de intereses entre grupos y clases que sólo una figura providencial, el César, podría contener. "Tengan en claro", declaró el líder del justicialismo antes de las elecciones de este domingo pasado, "que (...) no es una elección más. O es la vuelta al pasado para tratar de imponer proyectos que no tienen nada que ver con el pueblo, o es la consolidación de un proyecto nacional y popular que devuelva la justicia social".Ese juego al todo o nada fue explotado ya por Carlos Menem en 2003. Es, de alguna manera, el juego bonapartista, una de las formas del cesarismo. Luego de las revoluciones de 1848, Luis Bonaparte fue elegido -el primer voto universal en Europa- presidente de la Segunda República Francesa. Sus constantes convocatorias a referendos desnaturalizaron la representatividad republicana y cimentaron su popularidad. El 2 de diciembre de 1851 aplastó a la creciente oposición monárquica al llamar a un plebiscito con la pregunta "¿Queréis ser gobernados por Bonaparte? ¿Sí o No?". Un año más tarde, previa reforma constitucional, se convirtió en emperador autoritario.La presidenta Cristina Fernández conoce bien la historia de Napoleón III, pues ha citado la obra de Carlos Marx sobre su golpe de Estado, El 18 Brumario de Luis Bonaparte, evocando la famosa frase según la cual, cuando la historia se repite, primero lo hace como tragedia y luego como farsa. La influencia del estilo cesarista de su marido, para quien disentir equivale a traicionar, amenaza la estabilidad institucional tanto como la falta de ideas de la oposición.Desde su púlpito partidario, el ex presidente Kirchner no ha vislumbrado otros futuros que el caos o la continuidad del modelo impuesto por la voluntad del César. Nada se ha empobrecido tanto en la Argentina como la imaginación de sus políticos.(El País, Madrid)
El Watergate guatemalteco
Hace 36 años, unos fontaneros, sorprendidos mientras husmeaban en el cuartel de la oposición, fueron la primera pieza del dominó que terminó con la renuncia del presidente de EE.UU., Richard Nixon. Esta pista marcó el inicio de una investigación que llevó a dos reporteros del Washington Post, Woodward y Bernstein, a descubrir el mayor escándalo político en la historia de EE.UU.La difusión de esta investigación periodística desbarató la falsa creencia de que lo que conviene al Gobierno de turno se confunde con los intereses supremos del Estado y, por ende, el público siempre debe quedar condenado a la desinformación y a la ignorancia. Una connivencia de este tipo entre prensa y Gobierno es tierra fértil para la corrupción y el crimen.El periodismo investigativo debe ser un contrapoder al servicio del gobernado. Esa es su maravillosa esencia. Tiene que desconfiar de la verdad oficial y darla por falsa mientras no se demuestre lo contrario. La prensa independiente debe ser fiscalizadora del Gobierno. Ese es el periodismo que es útil para la democracia. Sin ese compromiso la prensa termina convertida en vehículo de publicidad o propaganda de los poderosos.En América Latina ha habido investigaciones periodísticas que han puesto al descubierto a ídolos de barro, especialmente sus abusos como gobernantes. Algunos de estos pararon en la cárcel, en tanto que otros evadieron el castigo a través de la impunidad judicial, pero no pudieron eludir el juicio de la historia.Los casos de Alberto Fujimori Fujimori (Perú), Rafael Ángel Calderón Fournier (Costa Rica), Miguel Ángel Rodríguez (Costa Rica), Carlos Saúl Menem (Argentina), Arnoldo Alemán Lacayo (Nicaragua), Carlos Salinas de Gortari (México), Carlos Andrés Pérez Rodríguez (Venezuela) y Lucio Gutiérrez Borbúa (Ecuador), son grandes victorias patrióticas del periodismo de investigación.Las denuncias del malogrado abogado Rodrigo Rosenberg Marzano son terreno fértil para un periodismo de investigación comprometido con la democracia institucional guatemalteca, por lo que la prensa independiente no debe escatimar esfuerzos en desentrañar la verdad.En todo caso, la verdad no debe ocultarse en una genuina democracia; la verdad es libertad positiva, es esencial para el crecimiento y la vida, es fundamento de la integridad espiritual. Una sociedad que no privilegia la verdad, está en bancarrota moral.(El Periódico, Guatemala)
Los nuevos escuadroneros. De Gerardo Muyshondt
Gerardo Muyshondt, publicista y cineasta Publicado en El DIARIO DE HOY, 9 octubre 2019Lo mismo que le provoca a alguien mínimamente ligado a la izquierda escuchar el término ‘escuadrón de la muerte’, le provoca a alguien mínimamente ligado a la derecha escuchar el término ‘comando urbano’ ”, me dijo Geovanni Galeas, ex miembro de la guerrilla salvadoreña y actual asesor del presidente salvadoreño Nayib Bukele, cuando tuve la oportunidad de entrevistarlo para la trilogía documental El Salvador: Archivos Perdidos del Conflicto.Viéndolo en retrospectiva, estos grupos tenían dos objetivos principales. El primero era eliminar a la oposición. Si existía una figura que estaba “del otro lado”, pues se lo quebraban en un intento de debilitar al enemigo. El segundo gran objetivo era mandar un mensaje claro a los demás: “Si te metés en esto, ya sabés lo que te va a pasar”.Lo hacían los dos lados. Unos más asolapados que otros, ambos creyendo que el fin justificaba los medios.Hoy, como siempre, hay gente que apoya a los que gobiernan y hay gente que no. Eso es normal, y si me preguntan a mí, es sano. Se llama democracia y no es un sistema perfecto, pero vale la pena recordar la frase de Winston Churchill, ex Primer Ministro del Reino Unido y Premio Nobel de Literatura: “La democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre, con excepción de todos los demás”. Concuerdo con él.En la frágil y juvenil democracia de El Salvador es fácil caer en la tentación de repetir nuestra historia. Somos intolerantes. Nos cuesta aceptar y, sobre todo, respetar a los que piensan diferente a nosotros. Muchos creen que cuando alguien no piensa igual a nosotros son rivales o, peor, enemigos. Igual que en la guerra.Se nos olvida que tenemos más cosas en común que diferencias. Por eso, sustituimos el escuchar con el pelear. Priorizamos nuestras diferencias, a nuestras similitudes. Reemplazamos el respeto con el totalitarismo.Menos mal que hoy no usamos balas para solventar nuestras diferencias, porque en la era de las redes sociales, donde todos podemos publicar nuestras posturas, todos estuviéramos muertos.No usamos balas, pero las ganas de silenciar a los opositores siguen prevaleciendo. A pesar de que en el pasado no funcionó el matar a los que pensaban diferente, sino más bien radicalizó a cada bando, hoy los políticos de turno quieren hacer lo mismo que en los 80. No matarnos literalmente en el sentido físico, pero sí socialmente, aniquilando la credibilidad de cualquier voz que se alza, con la intención de no tener oposición.Hoy, si un periodista escribe un artículo de opinión o una pieza de periodismo investigativo, si un joven publica un tuit o una ama de casa escribe en su Facebook una crítica al gobierno, la primera reacción de los que apoyan al actual presidente es írsele encima para desprestigiarlo y humillarlo. A más relevante la voz que se alza, o en tiempos modernos, a más seguidores o resonancia en redes sociales pueda tener el crítico, más recios y organizados los ataques.Yo no soy político, ni muchos menos una figura pública relevante, pero hablo con propiedad al decir que he sido tratado así. Me han intentado amedrentar a través de la difamación y las mentiras. Desde inventarse que yo he sido grabado insultando a miembros del actual gabinete hasta insultar a mi valiente hijo de 6 años que lucha contra el cáncer desde que tenía 2.La historia está repitiéndose. A los que tenemos la valentía de fijar una posición basada en creencias y valores nos quieren silenciar. Algunos han preferido la auto-censura para proteger a sus familiares. Otros están esperando que los demás se pronuncien para dar un tímido like o retuit. Tristemente, dentro de la política hay quienes hasta se hincan ante la temporal popularidad de quienes nos gobiernan, para asegurar su continuidad.En lo personal, mis principios son inamovibles. Abierto a los que piensan diferente, sí. Pero no soy de los que se va a callar por miedo. Al contrario, siempre he creído que si uno solo se rodea de los que piensan igual a uno, uno deja de pensar. Por eso, hoy más que nunca los leo a todos y trato de entenderlos, sin buscar irrespetarlos. Pero no puedo callar lo que siento.A los troles, que cobran un sueldo para intentar silenciar voces, o los que lo hacen de gratis por su nivel de fanatismo, les recuerdo que en el pasado, usando balas, no funcionó... y hoy tampoco. Ustedes son los nuevos escuadroneros.Ustedes son una historia repetida. Pues ¿saben qué? Yo también. Ustedes como los que quisieron silenciar una voz, y yo, como una de esas voces que no se van a callar.Y sé que no estoy solo...
¿Son los bitcoins la moneda de la libertad, o la burbuja estallará pronto? DER SPIEGEL
La revista alemana DER SPIEGEL public un interesante ensayo sobre las criptomonadas. Siguiente Página publica una traducción Google del alemán. El ataque a Ucrania es también una criptoguerra. Los ucranianos recolectan bitcoins para comprar armas, los rusos los usan para salvar su riqueza. Cómo las criptomonedas están revolucionando y poniendo en peligro la economía global.De Marcel Rosenbach, Michael Brächer, Martin Hesse, Tim Bartz, Uwe Buse y Hauke Goos25.03.2022, DER SPIEGEL 13/2022Quizás los aspectos misteriosos y deslumbrantes del mundo criptográfico, tanto el optimismo como el apocalíptico, puedan explicarse bastante bien en la guerra de Ucrania, aunque suene cínico. Porque desde el principio, esta guerra ha hecho que tanto las esperanzas como los temores asociados con las monedas digitales sean más visibles que casi cualquier otro evento anterior. Mykhailo Fedorov es el Viceprimer Ministro de Ucrania, tiene 31 años y es el Ministro de Transformación Digital de Volodymyr Zelenskyy. Así que para el futuro. En realidad, debería adelantar las start-ups en el país y la administración digital, el “estado en el smartphone”. Ahora Fedorov también se ha convertido en una especie de Ministro de Guerra. Inmediatamente después del comienzo de la invasión rusa, lo que probablemente sea la campaña de donación de criptomonedas más grande desde que comenzaron las monedas digitales. Primero, distribuyó direcciones de donación para las principales monedas como Bitcoin y Ethereum a través del canal oficial de Twitter de Ucrania. El país ahora opera un sitio web que permite a los usuarios de todo el mundo enviar dinero a Ucrania en 13 monedas digitales diferentes, destinadas a la ayuda humanitaria y al ejército. Incluso se aceptan monedas divertidas como Dogecoin. A mediados de esta semana se habían recaudado más de 60 millones de dólares solo a través de este canal, incluidas donaciones individuales de varios millones. Por solidaridad, algunos también envían »Tokens no fungibles« (NFT), imágenes digitales que a veces se intercambian por sumas inmensas. Memecoins e imágenes coleccionables para dispositivos de visión nocturna, primeros auxilios médicos y armas: crowdfunding digital para la guerra. Nunca ha sido tan fácil pagar un cofre de guerra rápidamente y más allá de las fronteras. La semana pasada, el presidente Zelenskyj firmó una ley que legaliza oficialmente Bitcoin and Co. en Ucrania. Los intercambios de criptomonedas en Rusia también experimentaron un auge después del comienzo de la guerra. Aparentemente, muchos rusos intentaron eludir la devaluación de su propia moneda sacando rápidamente dinero del país, o reteniéndoselo a las autoridades. La semana pasada, varios senadores estadounidenses introdujeron una legislación destinada a dificultar que Rusia use criptomonedas para eludir las sanciones. El ministro digital de Ucrania, Fedorov, también pidió a los principales intercambios de criptomonedas que dejen de atender a los clientes rusos a través de Twitter. Es crucial, argumentó, reunirse no solo con políticos sino también con ciudadanos rusos. Importantes lugares comerciales como Coinbase, Binance o Kraken inicialmente rechazaron dicha prohibición de criptografía. Sin embargo, se comprometieron a implementar las sanciones contra las personas y empresas que figuran en la lista. Todavía no está claro a quién ayudarán más los centros financieros secundarios digitales, a los ucranianos o a los rusos. Una cosa es segura: la batalla por Ucrania también se librará en el mundo de las criptomonedas, por primera vez en la historia. De hecho, las criptomonedas han sido controvertidas desde que se inventaron. Desde el principio, surge la pregunta de si son una maldición o una bendición, o ambas. El hecho de que existan innumerables pruebas para ambas afirmaciones no facilita las cosas. Entonces, un breve resumen de noticias de los últimos meses, ya que Bitcoin subió por primera vez a un nuevo máximo de $ 67,559 y luego volvió a caer en picado, hasta $ 36,495 antes de presentar una modesta recuperación en los últimos tiempos. Los titulares dan una imagen bastante precisa de dónde se encuentra el mundo en los grandes temas "Locura de Bitcoin" y "la burbuja más grande de todos los tiempos": "Bitcoins por valor de 3.600 millones de dólares estadounidenses confiscados" (Golem.de)"Fácil como un pastel: una niña brasileña de 4 años obtiene una ganancia del 6500 por ciento con su primer Bitcoin" (Cointelegraph.com)»Una enfermera ganó todos sus ingresos diarios en su hora de almuerzo con criptomonedas: renunció a su trabajo y ahora está ganando millones« (Businessinsider.de)Pronóstico de Bloomberg para 2022: Bitcoin en camino a la marca de $ 100,000Matemático financiero: "Bitcoin vale exactamente cero" (Msn.com)Alrededor de 13 años después de la invención de Bitcoin, el mundo está dividido en al menos tres campos: algunos se han enriquecido con criptomonedas, a otros les gustaría enriquecerse con criptomonedas. Otros aún desconfían profundamente del dinero criptográfico, siguen cada aumento en el precio con incredulidad y esperan que todo el proyecto se derrumbe con una gran explosión lo antes posible. Todos los días llegan noticias nuevas y difusas. Políticos, entusiastas de las criptomonedas y expertos de todo tipo proclaman y afirman, predicen y condenan. Los gobiernos están considerando los impuestos y la regulación, los ambientalistas lamentan el alto consumo de electricidad de la "minería" de nuevas monedas, mientras que los fondos de pensiones han comenzado a asignar algunos de sus depósitos a las criptomonedas porque los rendimientos deseados no se pueden lograr solo con bonos. El multimillonario e inversor John Paulson, por otro lado, describe todas las criptomonedas como "un suministro limitado de nada": un suministro limitado de nada. Las criptomonedas también aumentan cuando caen otras clases de activos, ese fue el credo durante mucho tiempo. En ese mismo momento. Porque la demanda es mayor que la oferta (que está artificialmente limitada en el caso de Bitcoin, por ejemplo); porque los dólares y el oro son el pasado y bitcoin y compañía son el futuro brillante. La guerra en Ucrania ahora está desafiando esa creencia. Hasta ahora, en las primeras semanas del conflicto, los criptomercados (al igual que con el colapso de Corona en marzo de 2020) se han movido en gran medida en paralelo con los intercambios; nadie sabe si las criptomonedas podrían escapar de una tendencia bajista general. Algunos expertos ahora incluso creen que el estallido de la criptoburbuja podría desencadenar un colapso en los mercados financieros, como el colapso de Lehman Brothers en 2008. Entonces, ¿el criptocosmos se ha convertido desde hace mucho tiempo en un riesgo para el sistema? La respuesta: difícil. Todavía no existen modelos racionales para la cuestión de cuándo estallará un mercado irracional, es decir, una burbuja. Puede mirar gráficos y cifras clave, dibujar líneas y comparaciones históricas, pero al final solo sabe cuándo terminó una fiesta. Tal vez una buena oportunidad para un experimento mental: ¿qué pasaría si todo el alboroto, los registros de Bitcoin, la emoción de Twitter y las sensaciones de NFT terminaran siendo solo los titulares? ¿Qué aprenderían los arqueólogos e historiadores de todas las conversaciones y murmullos sobre el mundo de principios de la década de 1920, sobre nuestros sueños, nuestros miedos, nuestros anhelos? Nueve observaciones sobre el tema del dinero criptográfico. I.Bitcoin es una de las historias de éxito más improbables de la historia Érase una vez un hombre llamado Satoshi Nakamoto, así es como comienza el cuento de hadas de Bitcoin. O una mujer. O un grupo de programadores y expertos en criptografía, nadie lo sabe con certeza hasta hoy. Había dos problemas por resolver, ese era el reto: ¿Cómo transfieres valor digitalmente? Entonces, ¿cómo se asegura de que una cantidad que cambia de manos no se pueda gastar dos veces? En el mundo analógico que todo el mundo conoce, es sencillo: un billete de 20 euros está aquí o allá, pero nunca aquí y allá al mismo tiempo. Y: ¿Es posible evitar que siempre haya un intermediario entre los socios en una transacción, un corredor, un banco, una especie de síndico que, en el mundo análogo, se encargó durante siglos de que uno pagara sus deudas y el otro obtuviera ¿su dinero? Era un sueño, un desafío para la mente también: la búsqueda de un nuevo sistema financiero descentralizado, ilimitado y sin precedentes que estaría libre del control y la manipulación del estado, del interés propio y la corrupción.A fines de octubre de 2008, cuando los conocidos fideicomisarios acababan de llevar al mundo al borde de una catástrofe financiera global, se encontró la solución, compuesta por alrededor de 31,000 líneas de código. Siguió un anuncio en Internet, llamado »Libro Blanco«, y partimos. La solución de Nakamoto es simple, intelectualmente impresionante y estéticamente agradable: cada transacción se registra en una cadena que es monitoreada y visible para todos. Una especie de libro de caja, pero digital, no en papel. Gobernado solo por reglas lógicas, por software y matemáticas, no por los motivos a menudo políticos de los bancos centrales, ni siquiera por intereses humanos. El libro de caja se actualiza constantemente. No se puede cambiar ninguna entrada. Actualizar este libro de caja requiere principalmente poder de cómputo; como recompensa por poner su poder de cómputo a disposición de los participantes de la red, reciben bitcoins. Una idea brillante: Nakamoto creó un incentivo dentro de su red que hizo que la gente quisiera mantener esta red en funcionamiento. Bitcoin fue la primera moneda digital en funcionamiento en 2009 y, hasta la fecha, es la más grande y conocida. Su éxito se produjo en un mercado estrictamente regulado y considerado soberano por todos los gobiernos del mundo. El blockchain, como se llama a la tecnología del libro de caja digital, podría hacer superfluos bancos, bolsas de valores e intermediarios de todo tipo, y su código ya es posiblemente el algoritmo más exitoso de todos los tiempos. Es por eso que John Paulson, el inversionista y multimillonario, tiene casi razón en su crítica. Bitcoin no es un suministro limitado de nada, es casi nada. Satoshi Nakamoto ha logrado inventar la escasez digital. II.Que nadie sabe quién es el inventor de Bitcoin es un golpe de genialidad - y una monstruosidad. Bloque Génesis, así se llaman los primeros 50 Bitcoins jamás creados, una palabra de la Biblia. Génesis es la historia de la creación. Estas 50 monedas están intactas y no se pueden intercambiar. Algunos partidarios de Bitcoin llaman a esto la "Inmaculada Concepción". El bloque Génesis prístino es algo así como la piedra angular de la criptoiglesia. Las 980.000 monedas restantes que Satoshi Nakamoto "minó" tampoco se han tocado. Según el precio actual de la bolsa, tiene un tesoro de alrededor de 40 mil millones de dólares. El hecho de que alguien no robara ni falsificara dinero ni lo ganara, sino que simplemente lo inventara, era bastante nuevo. Era inaudito que una persona desconocida escribiera la historia técnica y financiera, derrocara un sistema que había sido probado durante siglos y pareciera completamente desinteresado en la fama y la fortuna. Dejar 40.000 millones de dólares tirados por ahí es un inquietante gesto de desprecio y una expresión de gran libertad. Suponiendo que Nakamoto no solo perdiera las credenciales. Mientras tanto, la búsqueda de la identidad de Nakamoto se ha convertido en un género propio. Los expertos examinaron las nueve páginas del libro blanco en busca de anomalías (encontraron que los autores mezclaron ortografía británica y estadounidense, posiblemente el escritor no era un hablante nativo de inglés o había varios autores). Junto a Shakespeare y Jack el Destripador, Satoshi Nakamoto se ha convertido desde hace tiempo en una figura mítica, un Banksy del mundo digital. Al mismo tiempo es un vacío. Un programador con ese nombre era desconocido para el mundo antes de Bitcoin, la dirección de correo electrónico que usó no se podía rastrear, casi parecía que estaba jugando con el mundo. "La cara detrás de Bitcoin" anunció "Newsweek" en su portada en 2014, la foto del artículo mostraba a un hombre de 64 años cuyo nombre era Satoshi Nakamoto. No era lo que estaba buscando. Por otro lado, el anonimato de Nakamoto es consistente. La confianza en su sistema debe alimentarse únicamente del propio sistema: del código que todos pueden ver, de las transacciones que se registran abiertamente para todos. El sistema de Nakamoto expresamente no necesita ninguna autoridad, ni las de un gobierno ni las de un inventor. Es posible que Nakamoto ya no esté vivo. También es concebible que siga la búsqueda de su identidad, irritado y un poco divertido. Ahora se dedicaría a otras cosas, escribió en abril de 2011. Desde entonces ha permanecido en silencio. III.Sin el inframundo criminal, las criptomonedas nunca serían tan exitosas Érase una vez un hombre llamado Ross Ulbricht, así que el cuento de hadas de Bitcoin continúa. Si Satoshi Nakamoto es el lado luminoso de la revolución de la cadena de bloques, Ulbricht es el lado oscuro. La verdad es: sin el entusiasmo de los delincuentes, la nueva tecnología no se habría vuelto tan popular tan rápido. Ulbricht, un joven tejano, probó por primera vez una tienda de libros usados ​​en línea en 2009. Cuando el comercio de libros fracasó, probó un mercado negro de la web oscura llamado Silk Road, donde apareció bajo el seudónimo de "Dread Pirate Roberts". En poco tiempo, Silk Road se convirtió en un importante centro de comercio de drogas en Internet. La única forma de pago que aceptaba Silk Road era bitcoin, que en ese momento era poco conocida. Por cada trato, Ulbricht recibió una comisión máxima de alrededor del diez por ciento; eso lo hizo rico en primer lugar y en segundo lugar un pionero del dinero digital. Debido a que los usuarios de Silk Road tenían un gran interés en permanecer sin ser detectados, hubo un fuerte incentivo para comprometerse con Bitcoin y abrir billeteras, billeteras digitales para criptoactivos. Hasta el día de hoy, el crimen es un factor clave de la cripto escena; Bitcoin, como muchos de sus vástagos y sucesores, es una de las principales monedas del inframundo. Debido a que los pagos son comparativamente discretos (si acaso no tienen rastro), los modelos comerciales como el chantaje se han convertido en un fenómeno masivo, especialmente las empresas que chantajean a las empresas que utilizan troyanos de cifrado. La Oficina Federal de Policía Criminal (BKA) habla de una tendencia. "Sin las criptomonedas, estos ataques difícilmente podrían llevarse a cabo con tanta frecuencia y éxito", dice Carsten Meywirth, jefe del departamento de delitos cibernéticos de BKA. En los últimos años, las demandas de rescate han aumentado, al igual que las ganancias obtenidas por los perpetradores de ransomware. Afecta a municipios como el distrito de Anhalt-Bitterfeld y empresas como Brenntag, pero también a hospitales. Los piratas informáticos introducen de contrabando programas maliciosos en las computadoras que impiden que el propietario acceda a sus datos. Debido a que el daño suele ser mayor que el rescate exigido, la mayoría de las víctimas pagan, especialmente porque los perpetradores a menudo se encuentran en Rusia y difícilmente pueden ser arrestados. La BKA alemana ahora cuenta con investigadores especializados en blockchain. Cuando el nuevo departamento de delitos cibernéticos se estableció allí el año pasado, la oficina creó su propia área por primera vez, que trata el tema de las criptomonedas, dice el jefe del departamento, Meywirth. Los expertos en TI y los oficiales de policía trabajan en estrecha colaboración. Debido a que el área se está desarrollando dinámicamente, dice Meywirth, es necesario un "ajuste constante de los métodos de investigación". Uno de los mayores éxitos fue el golpe a los operadores del entonces mercado clandestino alemán más importante, Wall Street Market, en 2019. En momentos, la plataforma contó con más de 5.400 vendedores con 1,15 millones de clientes, y cannabis, cocaína y metanfetamina. todos fueron vendidos a través de ellos mundo vendido. Los investigadores asumieron el papel de compradores de prueba y pudieron identificar a tres operadores sospechosos. Según sus propias declaraciones, la BKA finalmente incautó 2257.3 Bitcoin y 4884.7 Monero en sus billeteras electrónicas. Un éxito provisional, nada más. Otros proveedores llenaron rápidamente el vacío, prometiendo a los clientes disfrazar sus flujos de criptopagos (a cambio de una comisión) de tal manera que las autoridades ya no puedan asignar delitos penales. Ross Ulbricht sigue el triunfo de bitcoin en prisión. Cuando policías encubiertos lo dominaron frente a su computadora abierta en una biblioteca pública en 2013, el FBI confiscó 127,000 bitcoins. Según los investigadores, un total de 614.000 bitcoins fluyeron a Silk Road como comisión. En 2015, Ulbricht fue condenado a dos cadenas perpetuas por un tribunal estadounidense. Habló desde la prisión en junio del año pasado a través de una entrevista telefónica grabada. "Estamos cambiando la economía global", dijo. »Hemos llevado el sabor de la libertad y la igualdad a rincones lejanos del mundo. Sé que también podemos cambiar el sistema de justicia. IV.Cripto es un movimiento de avivamiento – con rasgos cuasi-religiosos. Bitcoin Conference 2022 comienza el 6 de abril en Miami Inversionistas, especuladores y creyentes se reunirán una vez más para predicar el evangelio de las criptomonedas, y será como todos los años anteriores: una reunión de personas muy estadounidenses y preparadas para el futuro que toman el optimismo por fuerza y ​​la duda por debilidad. En la Bitcoin Conference 2021, alrededor de 12,000 participantes se mejoraron para conferencias, charlas junto a la chimenea y fiestas en yates en la antigua zona de libre comercio de Miami, la capital de la capital, como dijo el alcalde de Miami, Francis Suárez, en la bienvenida. "La capital de la capital", sonaba bastante seguro. Como siempre en este tipo de convenciones, se tratará del futuro de Bitcoin, el futuro de América, el futuro de la humanidad: una especie de seguridad en sí mismo, exuberante y solemne al mismo tiempo, se puede ver en YouTube. Los organizadores habían colocado un enorme cartel detrás del escenario que mostraba una playa bajo palmeras. En el medio, donde cuelga la cruz en las iglesias, tiene un enorme bitcoin clavado en la arena. En la lista de oradores, entre otros: el empresario Michael Saylor, que es empleado de MicroStrategy, plantea más de 124.000 Bitcoin a multas del año pasado; el exboxeador Floyd Mayweather; luego el jefe de Twitter, Jack Dorsey; el excandidato presidencial y congresista Ron Paul; El inversor de Bitcoin, Tim Draper. Y, por supuesto, los gemelos Winklevoss, Tyler y Cameron, quienes una vez discutieron con Mark Zuckerberg sobre quién fue la idea de Facebook. Invirtieron parte del dinero que Zuckerberg les pagó en 2008 en Bitcoin en 2013. En este momento, el precio de un bitcoin es de 120 dólares. No está en la lista de oradores, pero sigue siendo omnipresente: Elon Musk, el fundador de Tesla, quien primero tuiteó el precio de Bitcoin al alza y un poco más tarde a la baja. Cuando Max Keizer, cineasta, bloguero y pionero de Bitcoin, irrumpió en el escenario con un traje blanco y gritó: "¡No estamos vendiendo! ¡A la mierda Elon!" Bitcoin, según Michael Saylor, está desarrollando la cordura como sistema financiero. "Devuelve la libertad y los derechos de propiedad a la humanidad". Bitcoin, todos estuvieron de acuerdo, significaba “esperanza para ocho mil millones de personas”. Bitcoin, dijo Tyler Winklevoss, es "la mejor cobertura del mundo contra la inflación". El mayor impulsor de la inflación es la Fed, su hermano Cameron llamó, la Reserva Federal de EE.UU. Luego se puso de pie y mostró su camiseta con el edificio de la Fed impreso y el eslogan "Rabia contra la máquina". La ira por lo probado y verdadero es un poderoso impulsor en todas las empresas criptográficas. Ira contra los bancos centrales, los reguladores o los gobiernos que han fallado y, por lo tanto, han traicionado la confianza depositada en ellos. El gráfico de curso de cada criptomoneda es siempre una especie de curva febril que muestra lo poco (o mucho) que los ciudadanos confían actualmente en el sentido común de la acción estatal. Era un servicio de la iglesia. Celo misionero, espíritu de optimismo, expectativa de salvación, todo estaba allí. Aunque Bitcoin fue originalmente diseñado principalmente como un medio de pago, la mayoría de sus seguidores lo ven principalmente como un objeto de especulación. Habrá 21 millones de Bitcoin, Nakamoto ha establecido este límite superior. Cuanto más nos acercamos a este límite, más compleja se vuelve la prospección. Es la escasez sobre todo lo que está impulsando el precio. La mayoría compra bitcoins para cambiarlos por dólares, euros o renminbi tras la esperada explosión de precios. "Libertad más confianza es igual a bitcoin", dijo uno de los oradores. ¿El precio objetivo? 500.000, tal vez un millón, visto durante tres o cuatro años, un tapiz vinculaba la Estatua de la Libertad con el discurso lunar de Kennedy. Y Tyler Winklevoss exclamó felizmente: "Es súper temprano". V.Los estados hace mucho perdieron el momento para prohibiciones. En Europa, Bitcoin casi tenía su futuro detrás de él este mes de marzo. En el Parlamento Europeo circulaba un borrador que, en opinión de sus partidarios, habría supuesto una prohibición de facto. Se trataba de un marco legal y más protección al consumidor cuando se trata de "servicios criptográficos". Sin embargo, los Verdes, la Izquierda y los Socialdemócratas habían hecho campaña a favor de la prohibición de todos los servicios criptográficos que no se basen en mecanismos ecológicamente sostenibles. Lo que se quería decir era el proceso con el que, entre otras cosas, funciona la cadena de bloques de Bitcoin ("prueba de trabajo") y que es responsable de su enorme consumo de energía. Al final, los eurodiputados de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios optaron por una propuesta alternativa sin estos pasajes. “Las prohibiciones tecnológicas no son una buena idea”, dice el director fundador de la Agencia estatal para la Innovación Disruptiva, Rafael Laguna de la Vera. »Si prohibimos las nuevas tecnologías en Europa, nos privamos de futuras investigaciones. Las mentes más brillantes y mejores y las nuevas empresas migrarían, nuevas y mejores aplicaciones surgirían en otros lugares.« Es uno de los efectos secundarios más sorprendentes en la historia de las monedas digitales que los estados y sus reguladores financieros hayan permanecido de brazos cruzados durante tanto tiempo. En una de las áreas de la vida más estrictamente reguladas, de todas las cosas, un mercado en la sombra global, en gran parte no regulado, ha podido establecerse durante más de diez años. Es como el "Salvaje Oeste", dijo el director de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos el verano pasado, casi asombrado; fue solo en enero de este año que contrató a un "asesor senior" para problemas de criptografía. La inactividad se vuelve comprensible cuando entiendes Bitcoin and Co. como una nueva tecnología; Una historia similar sucedió con las empresas de Internet ahora dominantes como Facebook, Apple o Google: el deseo de contención política solo surgió cuando esto prácticamente ya no era posible. Esto ahora parece estar repitiéndose. Hace siete años, alrededor de 3 millones de personas usaban Bitcoin, hoy hay más de 81 millones. Ahora hay más de 18 000 criptomonedas utilizadas por más de 300 millones de personas, y el número crece cada día. Desde el punto de vista de los seguidores de Bitcoin, no puede haber leyes estatales efectivas o incluso prohibiciones contra su dinero supuestamente "libre de censura" de todos modos. Eso es exactamente contra lo que Nakamoto protegió su invento. Bitcoin, que está asegurado en medios de almacenamiento especiales (y no en intercambios en línea, por ejemplo), es la única propiedad que no puede ser incautada o confiscada, creen. No es tan fácil. Los estados, como China el año pasado, pueden prohibir la minería y el comercio de criptomonedas en su territorio. Nueve países han prohibido por completo el comercio de criptomonedas, según un informe de la Biblioteca del Congreso, mientras que 42 al menos lo han restringido. El Salvador, por su parte, fue el primer país del mundo en declarar a Bitcoin su medio de pago oficial el pasado mes de septiembre. Un punto débil en el mundo de las criptomonedas son también las bolsas de valores privadas, empresas que están sujetas a la legislación de sus ubicaciones y sin cuyos servicios es difícil cambiar las monedas a euros y dólares. Aquí, después de todo, los gobiernos han aprobado regulaciones. Prácticamente todos los principales centros comerciales ahora requieren que sus clientes proporcionen una prueba de su identidad ("conozca a su cliente"), de manera similar a como lo hacen los bancos cuando abren una cuenta. Todos aquellos que anteriormente tenían el monopolio de la creación de nuevo dinero están siguiendo al nuevo dinero de manera particularmente crítica: los vigilantes de la moneda en los bancos centrales. Agustín Carstens conoce su camino en este mundo, sabe lo que sucede cuando la gente pierde la confianza en una moneda. Carstens es economista, trabajaba en el banco central de México cuando su país de origen cayó en el caos durante la "crisis del tequila". Una combinación de errores políticos y circunstancias desafortunadas desencadenó la fuga de capitales a finales de 1994. El Banco de México desvinculó el peso del dólar y la moneda nacional se depreció. En última instancia, dice Carstens, se trata de en qué tipo de dinero confía la gente. Ahora está en el Banco de Pagos Internacionales (BIS) en Basilea, una especie de representante de clase para los banqueros centrales del mundo. Por eso y por la experiencia de 1994, considera superfluas las criptomonedas: Debido a que fluctúan tanto, no son adecuadas como depósito de valor; debido a que apenas se aceptan, no son un medio adecuado de intercambio. Bitcoin, dice Carstens, solo sirve para dos cosas: “para la especulación y para el pago de rescates”. El destino futuro de las criptomonedas debería estar determinado por cómo decida el gobierno de los EE. UU. A principios de marzo, la ministra de Finanzas, Yellen, indicó en un comunicado que allí tampoco eran inminentes prohibiciones estrictas de las criptomonedas. Inmediatamente después, el precio de Bitcoin subió un ocho por ciento. VI.Casi todas las críticas a las criptomonedas son correctas. Aún así... Es bien sabido que el valiente nuevo mundo criptográfico también tiene un problema sucio: su equilibrio climático es devastador. Investigadores de la Universidad de Cambridge estiman que la red Bitcoin por sí sola consume más electricidad anualmente que Noruega o Ucrania, sin contar otras criptomonedas. "El consumo de electricidad corre el riesgo de convertirse en un problema existencial para Bitcoin", dice el investigador de Cambridge Michel Rauchs, que está tratando de medir los requisitos de energía de Bitcoin con sus colegas. La razón del hambre de electricidad son los complicados cálculos que pretenden proteger la red de Bitcoin de la manipulación: “Prueba de trabajo” es el nombre del concepto en el que los mineros de Bitcoin compiten para resolver complicadas tareas aritméticas. Cualquiera que descifre los acertijos matemáticos será recompensado con nuevos bitcoins. La potencia informática concentrada garantiza que los atacantes no puedan secuestrar fácilmente la red Bitcoin; también consume grandes cantidades de energía. “Cuanto más sube el precio de bitcoin, mayor es el incentivo para los mineros de bitcoin y, por lo tanto, la necesidad de electricidad”, explica Rauchs. Se refiere a estudios según los cuales alrededor del 39 por ciento de la energía debería provenir de fuentes renovables. Pero eso también significa que la mayoría de los bitcoins se extraen con combustibles fósiles. El enfrentamiento de uso intensivo de energía de los mineros de bitcoin podría evitarse. Esto es posible gracias al llamado método de prueba de participación, en el que los usuarios depositan sus acciones como garantía en lugar de superarse en potencia informática. En Ethereum, el nuevo procedimiento se introducirá este año. El investigador de Cambridge, Rauchs, considera poco probable que Bitcoin también cambie. La competencia de los mineros es un verdadero dogma para la red, dice. Y los buscadores de oro tendrían un problema muy práctico si abandonaran el sistema: "Sus costosas computadoras se volverían prácticamente inútiles". De todos modos, los criptodiscípulos no están impresionados por la discusión climática: el sistema bancario global y la minería de oro consumen mucha más energía, argumentan. VIII.El futuro apenas ha empezado. Fabian Gompf, a quien todo el mundo llama simplemente "Fabi", le da la bienvenida a un patio trasero de Berlín, en una sala de conferencias moderna y minimalista. La sede de su empresa Parity Technologies está rodeada de arquitectos, consultores y una escuela de danza. Gompf y sus colegas han ideado otro sistema monetario, uno de tercera generación que usa significativamente menos energía. Lo llamaban polkadot, como el patrón de la tela, debe haber un poco de ironía. La puesta en marcha de Berlín y su nuevo producto son conocidos por los fanáticos de las criptomonedas en todo el mundo, lo que se debe a los fundadores. Gavin Wood y Jutta Steiner, quien desde entonces dejó la empresa, también formaron parte del equipo fundador de Ethereum, ahora la segunda criptomoneda más valiosa después de Bitcoin. Cuando se ofrecieron los primeros Dots en 2017, se vendieron más de $144 millones en unidades. La capitalización de mercado es actualmente más de 20 mil millones de dólares. Wood ha llegado a la cima nuevamente: el undécimo lugar entre miles de criptoactivos. La historia de los inventores de dinero atrae talento, gente como Gompf. Estudió ingeniería industrial en Aquisgrán y luego comenzó en el departamento de desarrollo de Porsche. Al igual que el cofundador Steiner, quien una vez trabajó para McKinsey después de completar su doctorado, Gompf renunció a su carrera en el mundo de los negocios tradicionales por el proyecto del futuro criptográfico. Es un cosmos diferente, un mundo paralelo. ¿Qué impulsa a la gente de Parity? Insatisfacción con la web convencional, dice Gompf, insatisfacción con sus estructuras de poder: "No tenemos nuestra vida digital bajo control, queremos cambiar eso". No les gusta el modelo de negocio de las grandes plataformas digitales porque significa mucho poder y mucho dinero para unos pocos y apenas derechos y cogestión para los usuarios. El nombre de la empresa Parity significa igualdad en inglés. El individuo debe volverse más soberano, quiere que la red sea más justa. "Tenemos que arreglar Internet", escribió Walter Isaacson, biógrafo del fundador de Apple, Steve Jobs, poco después de que Donald Trump fuera elegido presidente de los Estados Unidos. Necesitamos arreglar el internet. Cuarenta años después de su invención, según Isaacson, “Internet ha comenzado a corroerse: tanto a sí misma como a nosotros”. Una especie de proyecto de reparación, impulsado por la idea comunitaria. Habría que crear una Web 3.0, más descentralizada que antes, para todos los que quieran una Internet más justa, mejor, diferente. De hecho, aquí se esconde la mayor promesa de la tecnología blockchain: no reemplazar monedas tan conocidas como el dólar o el euro por algo nuevo, sino el propio Internet llamado bitcoin y blockchain. Polkadot, dice Gompf, se puede imaginar como una especie de base para una nueva economía web sin bancos, Amazon o Spotify. Por ejemplo, en este mundo podría haber una plataforma de transmisión de música donde las bandas vendan sus canciones directamente a los fanáticos, o galerías virtuales de tokens no fungibles. Los propios creadores, los creativos, deberían beneficiarse más de su trabajo, se eliminan los intermediarios (y las comisiones), esa es la idea. También se trata de nuevas formas de préstamo de dinero, productos financieros y seguros.Y nuevas formas de participación. VIII.Cripto es pop.Y un movimiento de protesta: por un mejor internet, por una sociedad más justa. La palabra de moda es “tokenización”: participación (a pequeña escala) en la economía; en casi todo. Gompf y otros quieren olvidarse de Bitcoin y las demás criptomonedas por un momento y centrarse en la tecnología subyacente, la cadena de bloques. Qué significa, qué podría ayudar a mejorar: Monitorización de cadenas de frío para vacunas, por ejemplo, registros electrónicos o la gestión de datos de pacientes en hospitales. También en el mundo financiero, se han explorado durante mucho tiempo posibilidades que van mucho más allá de la idea de Bitcoin de Satoshi Nakamoto: casi todo, desde cromos de fútbol hasta arte raro y apartamentos, se puede asignar a un propietario a través de blockchain, se puede intercambiar y, por lo tanto, invertir. La tokenización significa que los valores reales reciben una imagen digital que se puede negociar y especular. “No todo el mundo puede comprar un cuadro completo de Chagall, pero usted podrá permitirse una pequeña parte”, dice Carlo Kölzer, fundador de la start-up 360X. La empresa de Frankfurt, en la que Deutsche Börse y Commerzbank tienen acciones, quiere convertir objetos en objetos de inversión digital a través de blockchain. El arte y los bienes raíces deberían ser solo el comienzo, se planean más clases de activos. Kölzer no es un soñador, ya ha hecho grande una empresa: vendió su empresa de comercio de divisas 360T a la bolsa de valores alemana por 725 millones de euros. Carlo Kölzer elogia las posibilidades de los »gemelos digitales«. Los museos podrían recaudar capital fresco emitiendo fichas por las obras de sus colecciones y vendiéndolas a los entusiastas. Las acciones deberían ser tan fáciles de negociar como las acciones. Y con cada reventa, los autores de las obras de arte deberían beneficiarse: "Y no sólo cuando se hayan hecho famosos en la vejez". Un banco suizo ya ha fileteado la "Fillette au béret" de Pablo Picasso. La obra de arte pertenece directamente a los compradores de los 4000 tokens en total, pero permanece en un depósito seguro. Por lo tanto, es más probable que los compradores vean su acción de Picasso como un objeto de especulación, con la esperanza de que la próxima parte interesada pague precios aún más altos por ella. Durante la pandemia de corona, el mercado de NFT literalmente explotó: se pagan cantidades increíbles por la prueba de propiedad en la cadena de bloques. Las imágenes generadas por computadora de los chimpancés cómicos del "Bored Ape Yacht Club" o los Cryptopunks cambiaron de manos por montos de seis cifras en dólares. La tendencia se ve impulsada por el desarrollo paralelo de nuevos mundos virtuales como Decentraland, donde se puede crear todo lo posible con sus propias nuevas criptomonedas: desde Louis Vuitton hasta Gucci y el fabricante de artículos deportivos Nike, los fabricantes de artículos de marca hace tiempo que sacaron sus propias criptomonedas. colecciones NFT. En el mundo virtual no solo puedes comprar terrenos, también puedes equipar tus propios avatares con los dispositivos portátiles digitales. El fundador de 360X, Kölzer, cree en un cambio fundamental. Casi cualquier cosa puede ser invertible, dice. »Veremos una democratización de la inversión y la participación.« Otros son más escépticos. Las criptomonedas, como enfatiza repetidamente el crítico fundamental británico Stephen Diehl, tuvieron 13 años para identificar un problema que pudieran resolver. No habrías encontrado ni uno solo. Cada criptomoneda, dice Diehl, está en su propio camino hacia cero. Según Diehl, la web 3.0 es una »mierda«. IX.Cripto despierta los mejores instintos. Y las más bajas. Puedes aprender mucho sobre la naturaleza humana de la historia de la aparición de las monedas digitales: sobre el deseo de cosas nuevas, sobre la alegría de correr riesgos, sobre la necesidad de cambiar las cosas. Y gran parte de este movimiento sigue siendo lúdico, partidista, sucediendo. Al mismo tiempo, la diversión de la exageración, de la media seda, es también un claro rechazo al sentido común de generaciones anteriores, que soñaban con una modesta prosperidad con la ayuda de planes de ahorro, bonos federales, cualquier bono del Tesoro y sobre todo el poder. de interés compuesto. Crypto es: velocidad, inteligencia, un monopolio digital global. Una historia de extremos. Creatividad y solidaridad por un lado. Pero también genial cálculo y codicia. Un último ejemplo de la guerra de Ucrania. El Ministro Digital Fedorow y su gente habían ideado algo, un pequeño estándar de la industria gracias a todos los donantes. Todos debían recibir un token digital como reconocimiento: habría sido el primer lanzamiento aéreo de un estado. Pero luego, antes de la fecha límite anunciada, cantidades de pequeñas donaciones llegaron repentinamente a las direcciones de solidaridad en Ucrania, algunas de diferentes billeteras de los mismos "donantes". Aparentemente, algunos querían asegurar la mayor cantidad posible de tokens de Ucrania, con la esperanza de que los tokens digitales de agradecimiento emitidos por el estado algún día valdrían significativamente más que las donaciones en sí. Al menos un grupo incluso preparó una ficha falsa diseñada para imitar y adelantarse a la ficha oficial de Ucrania. Poco antes de la distribución anunciada, Fedorov canceló la campaña nuevamente. Algunos de los que querían enriquecerse y fueron sorprendidos haciéndolo no se avergonzaron ni se avergonzaron, se quejaron. Este es el primer "tirón de alfombra" estatal, un esquema de fraude generalizado en la escena, en el que los responsables del proyecto no cumplen sus promesas y muchas veces desaparecen sin dejar rastro con las ganancias. Sin embargo, el país continúa dependiendo de las donaciones de la cripto escena. Después de una cuidadosa consideración, no se emitirán tokens transferibles, se dice. En cambio, Ucrania ahora creará y venderá sus propios NFT. Un grupo liderado por una cantante de la banda punk y crítica del Kremlin, Pussy Riot, ya lo ha demostrado. Recaudó alrededor de $ 7 millones en una venta a principios de este mes para comprar acciones en un NFT de la bandera de Ucrania.
Brigadas de Comunicadores Sociales venezolanos se dirigirán a Honduras
También se activará la Artillería del Pensamiento, es decir, jornadas de comunicadores en luchas, foros, talleres y debates que tendrán como eje de discusión el tema: "Socialismo o Barbarie". Para romper el cerco mediático de Honduras, brigadas de comunicadoras y comunicadores sociales venezolanos partirán hacia Honduras. Así lo anuncio en rueda de prensa, Modaira Rubio, integrante del Consejo Nacional de Comunicadores Socialistas.Asimismo, indicó que también partirán brigadas internacionales de solidaridad con 36 médicos y médicas. Aseveró que con esto se apoya los esfuerzos de la diplomacia de los pueblos, que se propone desde los movimientos sociales.Modaira Rubio indicó que también se activará la Artillería del Pensamiento, es decir, jornadas de comunicadores en luchas, foros, talleres y debates que tendrán como eje de discusión el tema: "Socialismo o Barbarie".Señaló que se discutirá el Alba como alternativa precisamente a esa barbarie. "Porque el ataque no es contra Honduras, sino contra el Alba y contra el liderazgo continental del presidente Chávez".Informó que el Consejo Nacional de Comunicadores Socialistas, tiene una reunión de emergencia, para organizar la logística de las brigadas.Destacó que desde que se inició el fascismo en Honduras, el Consejo se ha activado y emitido tres comunicados, uno de repudio al golpe, otro de respaldo a telesur y el último condenando el asesinato del periodista víctima de la violencia en Honduras. Ministra Eeckhou: El golpe de Honduras es contra el ALBA La titular del MinCI rechazó y condenó las acciones violentas suscitadas en Honduras y manifestó su apoyo irrestricto al presidente constitucional Manuel Zelaya. “El pueblo venezolano liderizado por el presidente Hugo Chávez condena y rechaza el golpe de Estado perpetrado por la oligarquía y la fuerza armada que ha violado la democracia y la libertad de expresión de los hondureños”.Así lo afirmó la ministra del Poder Popular para la Comunicación y la Información (MinCI), Blanca Eekhout, este martes, durante una rueda de prensa que ofreció desde su despacho.Eeckhout, sostuvo que el atentado a la nación centroamericana es una amenaza contra “la Alternativa Bolivariana de los Pueblo de Nuestra América (ALBA) y del comandante Hugo Chávez como líder continental, que tiene como propósito la unión de los países y la consolidación de la igualdad, equidad y de la felicidad del soberano”.Por otra parte, aseguró que el imperio norteamericano ha adoptado una conducta hipócrita por su doble discurso, puesto que tienen bases militares en ese país, desde las cuales se han planificados diversos ataques en contra de quienes están en pro del socialismo.En este sentido, la Titular del MinCI, expresó que “la falta de estrategia del imperio, generó su orden de mantener la violencia, a pesar del pronunciamiento de condena al golpe de Estado por parte de los países del mundo (...) Sólo con la organización, la integración de los pueblos se puede combatir la violencia de quienes se resisten al progreso de los países del Sur”.Eeckhout manifestó que el único delito del presidente Manuel Zelaya fue dignificar el sueldo mínimo de su país e implementar programas de alfabetización, educación y alimentación, iniciativas adoptadas por los países miembros del ALBA, quienes tienen como finalidad garantizar los derechos de sus pueblos para lograr dignificar su calidad de vida.Medios de comunicación clave del golpe de EstadoLos canales de televisión y radios del Estado hondureño fueron militarizadas para evitar el acceso del pueblo a la información, mientras que “los medios de comunicación internacionales como CNN se encargaron de armar una orquesta de mentiras, acerca de la realidad de lo que está sucediendo entorno al pronunciamiento del soberano que respaldó a Zelaya y además se han dedicado a satanizar la imagen de Venezuela internacionalmente y a nuestro Presidente”, afirmó la ministra Eeckhout.De igual manera, destacó que el ataque persistente de las organizaciones comunicacionales y sectores adversos a un modelo político como el socialismo, y la Revolución Bolivariana, “se debe a que los países de la región ha tratado de aplicar la propuesta constituyente para romper con la oligarquía y el imperio (...) Los medios se han convertido en instrumentos para agredir y fomentar la guerra entre los pueblos”.La ministra Blanca Eekhout manifestó que para enfrentar la mentira mediática se debe hacer una revisión del espectro radioeléctrico, el cual ha sido utilizado para incitar a la violencia hasta lograr un golpe de Estado.“Ejemplo del poder de los medios es la masacre de Ruanda en 1994 que dejó 800 víctimas, como consecuencia de la cadena de radio y televisión “Las Mil Colinas”, organización que utilizaba sus espacios para difundir información incitando a la violencia para enfrentar las etnias Hutus y Tutsis”.Al referirse a la manipulación de los medios de comunicación social, la Ministra aseguró que la campaña emprendida por los medios acerca de la violación propiedad privada y la patria potestad de lo niños, tiene como finalidad fomentar la violencia y la desestabilización social.“El gobierno Bolivariano tiene como prioridad garantizar la propiedad social y brindar una mejor calidad de vida a los menores que no cuentan con familias, mediante la asignación de un hogar que les permita su desarrollo y crecimiento en armonía”, sentenció Eeckhout.(Fuente: Minci)
The Accountability Question. The right way to deal with torture's legacy
THE APPARENT confusion within the Obama administration about whether to prosecute officials of the previous administration for committing torture is not surprising. Two fundamental principles are colliding in this matter, and it's not easy to achieve a fair outcome that reconciles both. On one side, you have the sacred American tradition of peacefully transferring power from one party to another every four or eight years without cycles of revenge and criminal investigation. It's one thing to investigate Richard Nixon for authorizing wiretaps and burglaries in secrecy, outside the normal channels of government, for personal political gain. It's another to criminalize decisions authorized through all the proper channels, with congressional approval or at least awareness, for what everyone agrees to be the high purpose of keeping Americans safe from terrorist attack. Once you start down that road, where do you stop? Should Bill Clinton, Sandy Berger and their team have been held criminally or civilly liable for dereliction of duty 3,000 people died in the Sept. 11, 2001, attacks, given that they knowingly allowed Osama bin Laden to flee Sudan for sanctuary in Afghanistan? What if the next administration believes that Barack Obama is committing war crimes every time he allows the Air Force to fling missiles into Pakistan, killing innocent civilians in a country with which we are not at war? Such concerns are heightened when the country is at war, as we in fact are, though in the daily life of most Americans it might not seem so. Al-Qaeda terrorists still plot to inflict great damage, perhaps on a scale far larger than in 2001, and the country needs its guardians in the armed forces, the CIA and elsewhere to focus on defending the country against that threat, not themselves against legal action. The Obama administration needs to attract the best possible talent into government, and then expect from those who serve unflinching advice on hard calls. Neither will happen if public service routinely is followed by the need to hire private attorneys and empty one's bank account. AND YET, on the other side, we have this: American officials condoned and conducted torture. Waterboarding, to take the starkest case, has been recognized in international and U.S. law for decades as beyond the pale, and it was used hundreds of times during the Bush years. Eric H. Holder Jr., the attorney general of the United States, has stated flatly that it is illegal. In a country founded on the rule of law, a president can't sweep criminality away for political reasons, even the most noble. When the United States sees torture taking place in other parts of the world, it issues some pretty simple demands: Stop doing that, and punish -- or at least identify, and in some way hold accountable -- those responsible, so that the practice will not be repeated. How can a country that purports to serve as a moral exemplar ask any less of itself? The answer does not lie with those congressional Democrats who are eager to put the entire Bush administration on trial. Nor, as President Obama has discovered this week, can it be found in his own wishful calls to look forward rather than dwelling on the past. As other nations have discovered, the past will haunt the present until it is investigated and openly dealt with. And although we have misgivings about international justice intruding on the sovereignty of democratic governments, it's also true that if the United States doesn't examine its own record, other nations will have a better claim to do so. To an extent, such an examination is going on all around us. The Senate intelligence committee is conducting a review. The Senate Armed Services Committee, having been mostly AWOL when it could have made a difference, has issued a useful report. The Justice Department's Office of Professional Responsibility is examing the conduct of Bush administration lawyers. It may seem, after a week of constant news coverage and newly published legal memos, that there isn't much left to learn. But wide holes remain in public knowledge of how torture came to be official U.S. policy and how that policy was implemented. The efficacy of "enhanced interrogation techniques" remains in dispute. We don't know if some interrogations went beyond even what the Justice Department had approved. The extent of congressional knowledge and approbation remains unclear. And as former defense secretary Donald H. Rumsfeld might note, we don't know what we don't know. SO THERE remains, as we have long argued, a need for a bipartisan commission composed of respected leaders to conduct a thorough review. Mr. Obama should take the lead in forming such a panel. It should conduct its work deliberately and issue its findings publicly. In the end, no such panel can answer every question. We will never know what detainees might have disclosed if interrogators had persisted with more humane techniques. We can't measure precisely the damage inflicted on the United States and its soldiers by the fallout from Abu Ghraib and Guantanamo. But a presidential commission could produce the fullest, least-heated account possible. Once it did so, prosecutions would not be the only option. Based on what we know today, we do not believe they would be the best option. For reasons laid out at the beginning of this editorial, we would be extremely reluctant to go after lawyers and officials acting in what they believed to be the nation's best interest at a time of grave danger. If laws were broken, Congress or the president can opt for amnesty. In gray areas, the government can exercise prosecutorial discretion. But the work of the commission should not be prejudged. And the prudence of not prosecuting, if that proves the wisest course, would earn more respect, here and abroad, if it followed a process of thorough review and calm deliberation.(The Washington Post)
UN ACTO FUNESto
Mauricio Funes, lo que hiciste el jueves, sancionar y ordenar la publicación del decreto 743, para que las decisiones de la Sala de lo Constitucional sean por unanimidad de los cinco magistrados fue un acto funesto, es el origen de la ruina de la institucionalidad de El Salvador. En un país donde tenemos personalidades que han acuñado para sí frases tan deplorables como: en política no hay blanco ni negro o en política no se puede decir tajantemente que si o que no a algo. Donde tenemos personalidades como Ciro Cruz Zepeda, Rodolfo Parker, Orlando Arévalo, Sigfrido Reyes, por mencionar algunos y no cansar al lector, porque para mencionar ilustres políticos nacionales por su pequeñez a la hora de gobernar de forma correcta y justa tenemos muchísimos ejemplos. Y mira, que bien has aprendido de ellos en estos dos años, un domingo por la noche inauguras la 41 asamblea general de la OEA hablando de la necesidad de prevenir futuros quiebres a la institucionalidad democrática y tres días antes tú has dado el golpe al cincel para quebrar una de las columnas de nuestra institucionalidad. Te has graduado con honores; ya puedes decirnos en la cara a todos que hay que trabajar porque las cosas sean blancas y por atrás hacer las cosas negras, y, como buen político salvadoreño si las hiciste negras, porqué no trompudas y culonas a la vez. Por supuesto esto no lo has hecho sólo, los partidos políticos también tienen una cuota grande en todo esto. Todos los partidos políticos se rasgan las vestiduras hablando sobre seguridad jurídica, todos son como robot repitiendo que hay que generar un clima de confianza y estabilidad para atraer capital extranjero. Y miren el mensaje que enviamos, que cuando hay una institución que me molesta y no da resoluciones acordes a la voluntad política, entonces los partidos se ponen de acuerdo para anularla ¿Es este un mensaje de que en El Salvador hay seguridad jurídica? O quizás yo lo estoy viendo desde otra perspectiva y el mensaje es, inversionista venga a El Salvador si hay una piedra legal en el camino no se preocupe, con dinero nosotros (los políticos salvadoreños) nos ponemos de acuerdo para solucionarle su problemita. No se dejen engañar, porque todos los partidos políticos son responsables de este acto funesto, no crean que porque el FMLN se abstuvo de votar está libre de pecado, qué significa eso de abstenerse de votar en un tema tan trascendental para el país, eso es querer estar bien con dios y con el diablo, eso es ser una veleta que se mueve con los mejores vientos. Si no se apoya la medida entonces se vota que NO y se dice el porqué, pero esos juegos políticos de no puedo decir abiertamente que no por mis votantes pero tampoco los voy a joder (a los partidos políticos), no se valen. Tenemos a nuestro distinguido diputado independiente Orlando Arévalo que ha votado en contra de la reforma de la Ley Orgánica Judicial, pero no lo ha hecho pensando en el país, su razón es clara, ya que su naciente partido no será inscrito por el TSE y necesitaba de la sala de lo constitucional para buscar vía resolución tenerlo inscrito para las próximas elecciones, ahora definitivamente se ha quedado sin partido. Ahora bien, es sumamente evidente las muchas razones del porque el PCN y el PDC han luchado por la reforma a Ley Orgánica Judicial, si es que las resoluciones de la sala de lo constitucional no los ha beneficiado, en lugar de ello los ha mandado a cancelar. Entonces, como ya hemos visto, en este país las decisiones de nuestros políticos atienden a intereses propios. Por tanto, hay dos grandes preguntas ¿Porqué ARENA ha acompañado esta votación? ¿Qué ha ganado Mauricio Funes? Antes estas preguntas me voy a permitir especular, esto es, voy a formular hipótesis sin tener una base. Será; que ante el tema de la audiencia nacional española en contra de los militares salvadoreños, han saltado miedos en algunos sectores involucrados en el conflicto y han tenido la leve sospecha que la sala de lo constitucional podría ponerse a discutir la famosa ley de amnistía salvadoreña y dar una resolución favorable para la extradición y por consiguiente el juicio de los militares, claro está, sí se enjuicia a los militares porque no hacerlo mas adelante con otros grupos. Será que Funes aprendió bien la lecciones de la administración Saca, y antes de terminar su período mejor comienza a cuidarse las espaldas y a tener contento a todos los sectores políticos posibles para evitar que luego afloren sus casos de corrupción, claro no me consta que hay casos de corrupción en este gobierno, recuerden que estoy especulando. Pero que mas puedo pensar cuando sancionar un decreto de ese tipo lo he calificado como un acto funesto para el país, es claro que si el Presidente está de acuerdo con una reforma a la ley orgánica judicial es porque está ganando algo en otra parte, porque nosotros; los salvadoreños, sólo hemos perdido.
Science-gate
The 2010 Pulitzer Prize WinnersEditorial CartooningAwarded to Mark Fiore, self syndicated, for his animated cartoons appearing on SFGate.com, the San Francisco Chronicle Web site, where his biting wit, extensive research and ability to distill complex issues set a high standard for an emerging form of commentary.http://www.sfgate.com/cgi-bin/article.cgi?f=/g/a/2009/12/09/fiorescience.DTLAlso nominated as finalists in this category were: Tony Auth of The Philadelphia Inquirer for his masterful simplicity in expressing consistently fearless positions on national and local issues; and Matt Wuerker of Politico for his broad portfolio that encompasses the nation’s historic political year, using rich artistry, wry humor and sometimes animation to drive home his deft satire.
Violencia con rostro
Mientras escribo esta columna, veo los rostros compungidos de la familia Rosenberg. Percibo su dolor y su tristeza. Y también su indignación con clamor de justicia al Cielo. Su ira por la pérdida de su ser querido, del papá, del esposo, del hermano, del primo, del socio, del amigo; llorado hoy por todos entre lirios de funeraria y lamentos de dolor. Una víctima más que se lleva el abismo de luto negro que está engullendo a este país en donde el crimen paga y la justicia es nula. La inseguridad nos está matando lentamente, como el batracio que muere porque se acostumbra al calor de la temperatura del agua en donde se encuentra sumergido, hasta que ésta hierve, y ya es muy tarde. El asesinato del abogado Rodrigo Rosenberg Marzano es una demostración palpable de la fragilidad del Estado y su incompetencia en proteger nuestros derechos, nuestras vidas y nuestras propiedades. Son acusaciones muy delicadas y serias que deben ser investigadas con todo el rigor de la ley. Pero no con esa pasmosa ineficiencia que ha caracterizado la mayoría de crímenes que se vienen cometiendo a diario impunemente en nuestro país. Esta investigación deber ser hecha por una “comisión independiente” totalmente desvinculada de posibles manipulaciones e influencias. Y los más interesados en permitirla deben ser los señalados. La difusión el día de ayer del video grabado y del testimonio firmado por el propio Lic. Rosenberg unos días después del asesinato del industrial Khalil Musa, de quien era abogado —video en el que hace una pormenorizada descripción de las causas y las motivaciones de los asesinos para cometer tal crimen— es solo la punta del iceberg de la conspiración, pues también señala con gran vehemencia: “Si usted está leyendo este mensaje, es que yo Rodrigo Rosenberg Marzano fui asesinado por el secretario privado de la Presidencia Gustavo Alejos y su socio Gregorio Valdez, con la aprobación del señor Álvaro Colom y de Sandra de Colom”. “Yo era un guatemalteco de 47 años, con cuatro divinos hijos, con el mejor hermano que uno le puede pedir a la vida, con increíbles amigos y con muchísimas ganas de vivir en mi país, pero no hubiera podido vivir conmigo mismo sin rebelarme, armarme de valor y denunciar a todos los guatemaltecos que tienen principios y valores acerca de las verdaderas razones de la muerte de don Khalil Musa y su hija Marjorie Musa, sin importar las consecuencias y entendiendo que mi vida corría peligro, quise dejar este testimonio en caso me pasara algo, como lamentablemente sucedió”. Fin de la cita. El pasado domingo 10 de mayo será recordado como uno de los domingos más negros de nuestra historia. Un hombre muy valiente fue abatido a tiros por cobardes mercenarios de la muerte. Lo acribillaron mientras andaba en bicicleta tranquila y pacíficamente, anunciándole al mundo que no le debía ni temía a nadie. No puedo sino unirme a la profunda consternación y repudio que este execrable crimen nos causa a toda la sociedad guatemalteca. Las palabras no conjugan ni transmiten el verbo ni el sustantivo de nuestra desesperación. No se puede escribir un epitafio, ni articular moción alguna, sin dejar de sentir un deseo de emitir un grito profundo y gutural nacido en el asiento mismo de nuestra alma. ¡¡Basta ya!! Acaso no es hora de que todos los guatemaltecos nos unamos para hacer valer el estado de Derecho y el imperio de la ley, y como el Lic. Rodrigo Rosenberg lo acota en el último párrafo de su testimonio, rescatemos nuestro país de los ladrones, de los asesinos, de los narcos, y todos juntos recuperemos nuestra Guatemala, nuestros valores y nuestra fe en la justicia de nuevo. Por amor de Dios y de nuestro país.(La Prensa Libre, Guatemala)
Para ser de un club hay que cumplir las reglas
San Pedro Sula no es una comunidad que evoque fácilmente recuerdos de batallas campales o debates decisivos. Pero la ciudad industrial hondureña será, mañana y pasado mañana, la sede de una Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) que muchos quisieran transformar en una reunión histórica, al preparar el terreno para el regreso de la Cuba de los Castro al concierto latinoamericano. El cónclave se antoja épico. Cuba fue suspendida de la OEA en 1962 en Punta del Este, por su adopción del "marxismo-leninismo" y su alianza con la Unión Soviética. En una aplicación absurda y anacrónica de la Doctrina Monroe, ambos hechos fueron considerados "incompatibles" con la pertenencia al organismo hemisférico, y razones suficientes para desterrar a Fidel Castro de la OEA, del BID y de otros entes regionales. Hoy, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, los países del llamado ALBA -Venezuela, Honduras, Nicaragua, Bolivia, Ecuador, que no dan paso sin huarache, es decir, sin línea de la isla- y sus aliados cercanos en el Caribe y América del Sur se han propuesto derogar la resolución de 1962.Sin invitar de vuelta a Cuba, por lo menos buscan permitir la supresión del principal obstáculo ante su posible regreso. Sostienen, con algo de razón, que la decisión de entonces no descansó en convicción democrática alguna, sino simplemente en el propósito de condenar al ostracismo a Cuba por su cercanía con Moscú, por su enfrentamiento con Washington y por su apoyo a movimientos de izquierda en la región.Aunque algunos pueden considerar que una "suspensión de una suspensión" equivale a una reinstalación, y también piensan que los rechazos de La Habana a cualquier retorno al "Ministerio de las Colonias" no se aplican a su deseo desesperado de obtener acceso a los recursos del Banco Interamericano de Desarrollo, es probable que prospere el esfuerzo. La resolución de Punta del Este constituye, en efecto, un vestigio de la Guerra Fría, no posee el menor sentido hoy, y no debe entorpecer el debate de fondo: ¿se debe ser una democracia representativa para pertenecer a la OEA y al BID? Y ¿qué se entiende por democracia?No cabría el reingreso de Cuba a la OEA debido a la vigencia de los diversos instrumentos regionales suscritos por los países miembros desde 1962, y, en particular, al contenido de dos de ellos. El primero es el llamado Pacto de San José, o Convención Americana de Derechos Humanos, aprobado en 1968 y ratificado por la mayoría de las naciones en los años ochenta, y la Carta Democrática Interamericana, firmada en Lima el día 11 deseptiembre de 2001 por todos los Gobiernos de la zona. Esta última estipula claramente que la democracia representativa es una condición sine qua non para pertenecer al concierto latinoamericano. Y proporciona una definición explícita de la democracia representativa: "Son elementos esenciales de la democracia representativa, entre otros, el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales; el acceso al poder y su ejercicio con sujeción al Estado de derecho; la celebración de elecciones periódicas, libres, justas y basadas en el sufragio universal y secreto como expresión de la soberanía del pueblo; el régimen plural de partidos y organizaciones políticas; y la separación e independencia de los poderes públicos". Huelga decir que Cuba no cumple con ninguna de estas condiciones, y, por tanto, que no podrá volver a la OEA aunque quisiera.No pareciera, entonces, existir motivo para oponerse al intento de aprobar una resolución en apariencia meramente simbólica, y que además puede distender las relaciones entre la región y Estados Unidos. Tan se contempla, que incluso circulan versiones según las cuales la propia Hillary Clinton, que acudirá al cónclave de San Pedro, se apresta a votar a favor de la derogación del texto de 1962, o en todo caso a abstenerse. ¿Caso cerrado, o hay gato encerrado?De hecho, surgen varias interrogantes y dudas. En primer término, una cosa es que en esta ocasión el Gobierno de Obama prefiera evitar el aislamiento, solo con Canadá, contra 33 votos a favor de la posible resolución, y otra es que esto se convierta en costumbre. Hay quienes temen que Obama y Clinton nunca van a correr el riesgo de quedarse solos en América Latina, habiéndole apostado tanto a reparar los daños causados por Bush. Nunca podrán convencer a sus aliados en el área para que los acompañen en temas escabrosos como Cuba, Venezuela, Nicaragua, etcétera. Y otros sospechan que Insulza (no es mi caso) y los países del ALBA (sí lo es) no van a conformarse con derogar el documento de 1962; se proponen, desde ahora, forzar una definición mayor, a saber: iniciar discusiones con el Gobierno de Cuba para su reincorporación a la OEA. Lo harían a partir de dos tesis de dudosa pulcritud conceptual, pero no carentes de eficacia.En primer lugar, que a pesar del pasaje citado de la Carta, cada quien es libre de interpretar textos de esa índole como mejor le parezca. Y en segundo término, ¿quién tira la primera piedra? En el pasado, muchos no cumplían ni con la Convención ni con la Carta de Lima, y eran miembros de la OEA, y hoy mismo, su vigencia en varios países es discutible: mejor que vuelva Cuba y sobre la marcha se verá si cumple con los requisitos. Estados Unidos se opondría, quizás en compañía de Costa Rica, Canadá, Colombia y Perú, pero dicha reticencia también revestiría sus ventajas. O queda aislado Obama en la OEA, o el Congreso norteamericano le corta los fondos para pagar las cuotas, y Washington se retira, como lo hizo con la Unesco en los años setenta.¿Qué tendría de malo que Cuba retornara sin cumplir con las condiciones democráticas y de respeto a los derechos humanos que todos los latinoamericanos han aceptado en buena medida respetado desde el 2001? Mucho, pero en síntesis, lo siguiente. América Latina nunca ha podido resolver con claridad la disyuntiva entre valores universales y soberanía. Durante décadas, sus regímenes autoritarios (muchos más de derecha que de izquierda) invocaron la soberanía nacional para rechazar cualquier injerencia externa en defensa de la democracia y los derechos humanos. Y los demócratas latinoamericanos, dentro o fuera del Gobierno, siempre temieron construir un andamiaje jurídico regional injerencista y defensor de estos valores por miedo a ser tildados de "lacayos del imperialismo". Pero en el transcurso del último cuarto de siglo, Iberoamérica ha avanzado a pasos agigantados. Se ha edificado un régimen legal imperfecto, pero en plena mejoría, y se ha aceptado que, efectivamente, existen valores universales por encima de la soberanía.Hacer caso omiso de dicho régimen, crear una nueva excepción cubana, anteponer el pasado al presente y los intereses inmediatos (migratorios, de Estados Unidos, por ejemplo) al objetivo más ambicioso de proteger la democracia en América Latina mostraría una miopía digna de... Punta del Este. Que Estados Unidos levante el embargo, que España insista en su acercamiento, pero ojalá que las democracias latinoamericanas consolidadas sepan ser categóricas: para ser miembros del club hay que cumplir con las reglas, o cambiarlas. Hasta ahora, los Castro no se han propuesto, ni logrado, ni lo uno ni lo otro.(El País, Madrid)
UNA BOFETADA A LA MEMORIA DE HERTY, A LA VIDA DE DORA MARIA
Creo que sabíamos que ya estaba escrito y mandado desde arriba que el CSE le retiraría a los partidos PC y MRS el equivalente a lo que nosotros conocemos como “la cédula de identidad”. Sin cédula de identidad estos partidos pierden todas sus atribuciones legales: no pueden funcionar, no pueden participar en las elecciones municipales, ni nacionales. Éste es, en otras palabras, un decreto de muerte civil para el partido por el que murió Herty Lewites, nada menos.Es un escupitajo, una bofetada a la memoria de Herty. ¡Vergüenza debía de darles!El CSE actúa el guión que le bajaron desde la cúpula: Se trata de borrar del mapa de la “legalidad” política a personas como Dora María Téllez. Se trata de demostrar que no les tiembla el pulso para decretarle la muerte. Se trata de la desaparición del Partido Conservador que, igual que el Partido Liberal, tiene una larga trayectoria en la historia de nuestro país.Quienes dicen que no se meten en política, que piensen en el significado de esto, porque esto es muy serio. Es la culminación de un proceso amañado que ha dejado todo el espacio político copado única y exclusivamente por los agentes del pacto. De ahora en adelante, sólo tienen legalidad los partidos aliados del FSLN o el PLC. Todos los demás quedan fuera del juego. Si quieren seguir existiendo, sólo pueden hacerlo o en la clandestinidad, o bueno, a pura voluntad, pero sin derechos legales.Los argumentos esgrimidos por el CSE, son tan absurdos que dan pena. En el caso del MRS, le quitan el derecho a existir porque dicen que no informó de cambios recientes en la estructura de su Junta Directiva, por no cumplir supuestamente con sus reglas internas. ¿Será posible que semejante minucia burocrática –cuando al PLC y FSLN han tenido fallas más flagrantes- sea argumento para hacer desaparecer un partido cuando ya hasta las listas de sus candidatos para las elecciones municipales habían sido publicadas por el mismo CSE en una separata que salió en los periódicos?Como afirma el IPADE en un comunicado evaluando la actuación del CSE:“El CSE al oficializar el calendario electoral diseño las reglas del juego para la competencia partidaria estableciendo etapas y plazos que en esta ocasión se habían venido cumpliendo de acuerdo a lo establecido, cerrando las posibilidades de cancelación de personalidad jurídica a los partidos o alianzas de partidos que el mismo CSE había oficializado.... Con posterioridad al período establecido en el Calendario Electoral, el CSE dio a conocer argumentos para cancelar la personalidad jurídica al Partido Conservador y del Movimiento Renovador Sandinista, decisión que de por si es sumamente grave, extemporánea, usando argumentos que son débiles y muy debatibles.”Es evidente que preocupaba a estos magistrados el creciente apoyo de la población a Dora María Téllez y a su valiente posición. Por eso han adelantado su absurdo “fallo”. Nos han fallado a todos, con la idea de detener la ola de repudio, con la idea de desanimar a la gente que se ha ido sumando lenta, pero seguramente. Es evidente que la política clientelista tiene un efecto desmovilizador. La gente no quiere perder el favor del CPC que le da los frijoles baratos o que le promete esto o lo otro. El miedo es patente también. Algo que habíamos dejado de ver por algún tiempo. Pero hay mucho apoyo detrás de los ojos quietos de la gente. Y eso lo sabemos quienes ya hemos vivido situaciones semejantes. Como sabemos que estas absurdas patrañas legales serán apeladas por el MRS y el PC y después llegarán a la Corte Suprema, donde imperará sobre la ley, la misma voluntad que ha imperado esta vez: una voluntad obsesionada por el poder y ciega a las consecuencias que sus desmanes traerán consigo.Igual que Margaret Thatcher, la Dama de Hierro, desestimó la huelga de hambre de los miembros del IRA irlandés mandándolos a la muerte, así Daniel Ortega se ha hecho de oídos sordos al valiente llamado de atención de Dora María y ha echado en saco roto la memoria de su antiguo compañero Herty Lewites.Como dijo alguna vez Jean Paul Sartre: “No creo en el revolucionario que es capaz de amar al pueblo y no es capaz de amar a los seres que tiene más cerca”Este régimen ya se reveló. Y ahora es Dora María la que tiene que rebelarse contra una muerte temprana. Tiene que estar lista para el desafío que significa este guante en la cara que nos han tirado a todos y con el que nos están desafiando, al mejor estilo de los villanos feudales, imperiales y capitalistas, a un duelo.
Boletin de Prensa del Comité Técnico (#1) sobre Municipios libre de Violencia
@font-face { font-family: "Times New Roman";}p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal { margin: 0in 0in 0.0001pt; font-size: 12pt; font-family: "Times New Roman"; }table.MsoNormalTable { font-size: 10pt; font-family: "Times New Roman"; }div.Section1 { page: Section1; }Comité Técnico de Coordinación del Proceso de Reduccióndel Crimen y la Violencia enEl SalvadorBOLETIN DE PRENSA #1El Comité Técnico de Coordinación del Proceso de Reduccióndel Crimen y la Violencia en El Salvador, con muchoentusiasmo y optimismo, comunicamos que hemos evaluado que ya existen las condicionespara dar inicio a la segunda fase del proceso, que desde el 9 de marzo de 2012 se vienedesarrollando con resultados exitosos en El Salvador. El Comité Técnico integrado porIa OEA, La Fundación Humanitaria, los facilitadores de del proceso de pacificacióny el Ministro de Justicia y Seguridad Pública como enlace del Gobierno ante el Comité, fueestablecido con el propósito de coordinar el proceso y la recuperación de la paz social,así como la superación de Ia violencia que agobia a Ia sociedad salvadoreña. La segunda fase procura abrirprocesos mediante Ia suscripción de pactos locales por la vida y la paz que tengan porobjetivo Ia recuperación de Ia paz social perdida por el actuar delictivo de miembros depandillas. En ese sentido y en consecuencia a la propuesta lanzada por los facilitadores elpasado 22 de noviembre respecto a la creación de los “Municipios Libres de Violencia”y el beneplácito con que la propuesta fue recibida por los líderes de las pandillas elpasado 4 de diciembre, nos complace dar a conocer los primeros cuatro municipios en los que sedesarrollará la segunda fase del proceso, siendo estos: Ilopango, Santa Tecla, Sonsonatey Quetzaltepeque. El Comité Técnico deCoordinación se complace en transmitir que ya está trabajando para crear las condiciones en los próximosmeses, para que otros municipios que se han destacado por sus altos índicesde violencia se puedan incorporar a este proceso y cuyos nombres se comunicaránoportunamente. En correspondencia de loanterior, invitamos a todas las fuerzas vivas que quieran contribuir con Ia recuperaciónde Ia paz social, a participar en los eventos que serán convocados por los gobiernoslocales y que se llevaran a cabode forma pública en cada uno de los municipios. Con el mismo entusiasmo queremos anunciar que ya hemos sido notificados por los miembros de las diversaspandillas que están en la disposición de realizar una segunda entrega de armas. En consecuencia, el Comité Técnico de Coordinaciónsaluda el gesto de la Asamblea Legislativade propiciar un marco legal apropiado para seguir abonando a la seguridad de ElSalvador. UN PUEBLO TAN SUFRIDO COMO ELSALVADOREÑO, SE MERECE LA PAZ-TRABAJEMOS TODOS POR ALCANZARLA.San Salvador, El Salvador18 de Enero 2013
Green regeneration in Colombia
guardian.co.uk, Friday 30 April 2010 17.00 BST Say it quietly, but the next president of Colombia might not be a guerrilla-obsessed rightwinger. Just about everyone had expected Alvaro Uribe's successor to be a similar hardliner, such as former defence minister Juan Manuel Santos. Instead, Colombians are on the verge of electing a leader who will transform their parasitic political culture. Latin America's most exciting presidential prospect since Lula da Silva has arrived.The great white hope is Antanas Mockus, candidate of the reinvented Green party. He has persuaded Colombians that they can do more than just insult their old-style politicians: they can vote them out.Mockus is a former maths professor who left academia after baring his backside to a group of student protesters. Two years later, he was elected mayor of Bogotá. Politics did not make him much more conventional.Between 1995 and 1997, he revolutionised security in the city, changing public attitudes and police tactics. Homicides dropped by 30%. Mockus refused city councillors' demands for pork-barrel spending, preferring to stall the political process than to buy them off. He launched tax reforms, including an additional voluntary payment for the wealthy, which helped Bogotá's citizens trust their government. While other mayors spent every last peso just for the sake of it, Mockus left behind an unprecedented budget surplus.Put simply, he showed honesty, efficiency and imagination – qualities that progressive politics have been crying out for in Colombia (and Argentina, Venezuela, Peru). Brazil found similar appeal in Lula and his Workers party. But there's at least one key difference.Ask an average Brazilian what's the best thing about Lula and she'll probably say that he has lived in poverty and wants to alleviate it. Ask an average Colombian the same question about Mockus, and the response is that he's a pedagogue, a teacher who encourages citizens to think and discuss. In other words, while Lula brings popular concerns into political debate, Mockus makes political debate into a popular concern. Latin America could use both approaches, but it has rarely if ever had a president like Mockus.Indeed, after finishing his second term as mayor in 2003, Mockus seemed a has-been. He ran for president in 2006, winning only 1.2% of the vote. He wanted to promote "citizenship culture", but ended up in an ad campaign about gas leakages. He was a fading star, the embodiment of the Colombian phrase, "No one is a prophet in their own land".By the time he launched a new presidential campaign in 2009, observers (including this one) had written him off. Colombian voters were demanding a strong leader who would stand up to the Farc, as Uribe had done. Many still rule out voting for a female candidate (Noemí Sanín of the Conservative party) for that very reason. Mockus's academic approach seemed principled but doomed.Then in early April, having won the Green party primary, Mockus, aged 58, revealed he had been diagnosed with Parkinson's disease. Doctors opined his mental abilities would be untouched for 12 years, but surely voters would be put off?Not a chance. Ahead of the election on 30 May, a recent poll puts Mockus in first place with 38% – a 9% lead over ex-minister Santos. That would put Mockus and Santos into a June runoff, where the former mayor could mop up enough votes from two other progressive candidates, Gustavo Petro and Rafael Pardo, to get the 50% needed. Another poll has the two neck-and-neck in the first round, with Mockus winning the run-off.How is such a comeback even thinkable? In retrospect, Mockus's recent weakness was a reflection of Uribe's strength. Competing with a popular incumbent in 2006 was a fool's errand. But Uribe is now a spent force: the constitutional court refused his bid for a third term, and allegations of corruption and his attempts at health reform have damaged his popularity. A victim of Blairite hubris, Uribe is now scrabbling around in search of a legacy.There's something else. Colombians want change. Their politics is not completely dysfunctional – ministries are filled with competent public servants. But the system is laced with corruption. Under Uribe, agricultural subsidies were handed out to powerful families, innocent civilians were killed by the military and dressed up as guerrilla casualties, the government allied with congressmen linked to paramilitary groups, and the security service spied on and intimidated judges and human-rights activists under orders from the presidential palace.Mockus's campaign is an ethical backlash against this anything-goes culture. "I want us to cure ourselves of illegality," he says, proposing "Democratic Legality" to replace Uribe's Democratic Security policy. He labels public funds "sacred". Under Colombian electoral law, Mockus was entitled to £2.5m of state money for his strong performance in the primaries; he refused most of it. Meanwhile, the Santos campaign has allegedly threatened to withdraw state subsidies for those who don't support his rallies.What about other issues? Santos and Uribe have tried to paint Mockus as soft on crime, but the homicide statistics in Bogotá – at one time lauded by Uribe himself – tell a different story. Mockus is out to prove, as he did as mayor, that the government can have more than one priority. He is best placed to expand the political agenda, bringing in social development.Mockus has the backing of three other outstanding former mayors, including Sergio Fajardo, now on his vice-presidential ticket. On Facebook and at campaign events, there is genuine excitement at the alliance. If Uribe's popularity came from people's fear, Mockus's comes from optimism, especially among the young, that Colombia is ripe for a well-considered revolution.Of course, observers of Latin America do well not to worship false idols. If Mockus is elected, he'll have to deal with a congress dominated by Santos's wretched U party, as well as the reality that the drugs war can neither be abandoned nor won. In any case, Colombia's political machines may rev up just in time to nick the presidential race for Santos.For now, however, the momentum is with Mockus, and he has earned it.(The Guardian/London)
Mexico: Growing Terror and Close to Collapse
One of the most amazing things to me in the recent electoral process was the complete absence of serious discussion by either camp of anything relating to Latin America. While Venezuela, Nicaragua, Bolivia and Ecuador have formed a new anti-U.S. and pro-Iranian axis, perhaps the most dangerous developments are taking place directly on our southern border. It is to the point where the Mexican government, despite commendable efforts by the Calderon administration, is barely hanging on. I say this with deep sadness. I lived through the similar Colombian experience where the narco-violence shattered the country, almost took over the state, and claimed the lives of many of my friends, including journalists I worked with. That is part of the reason I cannot understand the lack of attention to the crisis. We are looking at the creation of a series of mini narco-states along our border, and from our border heading south through Central America. Mexico’s own southern border with Guatemala is now awash in cartel violence, and much of Guatemala is no longer under state control. El Salvador is a money laundering sanctuary, as is Panama, and Nicaragua, along with Venezuela, have become black holes where an increasing amount of cocaine transits. This is a clear and present danger not only to the United States, which will (and already has) suffer from the spillover of violence and border security-but to the Mexican state as well. The drug war there is taking an enormous toll. Even hospitals are no longer safe from the violence. Senior police and government officials are assassinated with such frequency their deaths seldom make the news here at all. Some are killed because they are trying to do the right thing, some because they are on the losing side of an intra-cartel battle, but it is shredding the authority of the state. Illegal immigration of non-Latin Americans, including Iranians, Chinese and Turks, is on the rise. Why does this matter? Because the cartels in their many different iterations and factions, thrive on instability, and their ability to move anything (drugs, people, weapons) across our border. Iranians and Turks arriving this way are not here to see the Empire State Building or the Grand Canyon. The situation is grim on many fronts. Journalists are being shot and killed in record numbers, outpacing even Iraq. Those that are not dead-and there are some great and courageious journalists in Mexico-are largely silenced because of the threats. While the United States has just released the first part of its $400 million for the Merida Initiative, the situation continues to be dire, and likely will be for some time. The collapse of Mexico into the hands of drug traffickers is exacerbated by the global financial crisis. Remittances from the United States have dropped sharply, and Mexican migrants are returning home in droves. This has its positive side, but right now it means that more and more people will turn to drug trafficking to make a living, strengthening the narco side of the conflict. This crisis has to be (another) priority for the Obama administration. The Bush administration seemed content to work on the margins and ignore the realities on the ground as long as possible. Obama will not have that luxury.(Douglas Farah fue corresponsal en El Salvador durante la guerra civil)
La sociedad sacrificial
A nivel mundial estamos inmersos en una escalada de violencia de proporciones cada vez mayor. Nuestro país está sufriendo esta escalada de violencia a la que los epítetos de maldita, irracional y cobarde se quedan cortos e insuficientes. Lejos está la violencia actual de ser irracional, tiene una racionalidad y es completamente lógica en el marco de una sociedad sacrificial.En el siguiente análisis sobre la violencia en la sociedad sacrificial quizá podamos encontrar alguna explicación a nuestra agresiva convivencia humana.René Girard en su texto La violencia y lo sagrado (Anagrama, Barcelona, 20054 ) estudia el fenómeno de la violencia como elemento fundamental de las sociedades primitivas en la medida que ante un acto violento se respondía con una venganza de parte de los ofendidos, el ciclo de la violencia podía extenderse hasta acabar con aquella sociedad, es en este punto donde entra la idea de sacrificio porque justo el sacrificio funciona como un engaña-violencia que logra parar, aunque sea momentáneamente el ciclo de la violencia social. Los sacrificios de animales y los sacrificios de humanos cuando las sociedades primitivas los ofrecían era con el fin de poner paro a la violencia, además, entre las cualidades de este engaña-violencia está el atraer la violencia que se dirige a otros (familia, comunidad, sociedad), para evitarla o al menos para distraerla ya que ahí para la venganza ya que ella es una víctima por la que nadie se vengará. Desde la tradición de la literatura trágica de los griegos pasando por la biblia cristiana hasta llegar a los estudios etnográficos recientes el mecanismo sacrificial o engaña-violencia se nos revela como un elemento omnipresente configurando nuestra convivencia social. En la sociedad moderna aparentemente estas prácticas “anti-civilizadas” se han superado pero no es cierto, sí se han refinado las practicas sacrificiales pero no se han abandonado. Es cierto que hoy si alguno de nosotros es ofendido no podemos tomar la justicia por nuestra propia mano, hay un sistema jurídico y legal y un estado de derecho que impide el ciclo de la violencia y de venganza. Dadas las circunstancias críticas en las que asistimos al ocaso del concepto de estado moderno a partir del fenómeno de la globalización económica y sus mecanismos deshumanizantes tengo varias razones para pensar que nuestro país, nuestro continente y en general nuestro mundo colapsado por la ambición económica de unos pocos sigue viviendo de ofrecer sacrificios del tipo engaña-violencia: el sistema económico neoliberal y sus sacerdotes y gurús enquistados en lo alto del poder político exigen tributos y la sociedad no tiene más que evitar su furia, hay que buscar evadir esa furia y violencia, hay que re-dirigirla pero nos preguntamos ¿hacia quién? ¿quién será la víctima sacrificial? ¿sobre quienes caerá la violencia insaciable? ¿quién o quiénes serán los malditos?. Esta sociedad debe buscar su propio engaña-violencia y no nos engañemos todos lo sabemos: son los parias, los excluidos, los desechos humanos que ya no tienen lugar en el engranaje económico que ha encontrado la manera de funcionar mejor sin ellos; en nuestra sociedad salvadoreña son todos los sub-empleados, los que paran en la economía informal, los que deambulan por las calles y ya no nos dicen nada, son como zombies, una especie de muertos-vivientes. Y la razón es sencilla: por ellos nadie clamará venganza. Girard nos dice que una sociedad sacrificial es aquella en la que “el sacrificio tiene una función real y el problema de la sustitución se plantea al nivel de toda la colectividad. La víctima no sustituye a tal o cual individuo especialmente amenazado, no es ofrecida a tal o cual individuo especialmente sanguinario, sustituye y se ofrece a un tiempo a todos los miembros de la sociedad por todos los miembros de la sociedad. Es la comunidad entera la que el sacrificio protege de su propia violencia, es la comunidad entera la que es desviada hacia unas víctimas que le son exteriores” (Pág.15). Todo el estado de derecho se encarga de proteger a unos pocos y de hacer que la violencia de recambio llegue al indicado: casi siempre las víctimas de la violencia pertenecen a un grupo que no es el propio, siempre son ajenos a nosotros...los revoltosos, los pandilleros, los vendedores, los sindicalistas, etc, etc; todos ellos son ajenos a nosotros y hay que dirigir nuestra violencia hacia ellos. Girard introduce la hipótesis de la víctima por sustitución:“todas las características que hacen terrorífica la violencia, su ciega brutalidad, la absurdidad de sus desenfrenos, no carecen de contrapartida; coinciden con su extraña propensión a arrojarse sobre unas víctimas de recambio”(pág.12) el mecanismo de sustitución permite de alguna manera burlar la violencia: “permiten engañar a esta enemiga y arrojarle, en el momento propicio, la ridícula presa que la satisfará” (pág.12). Ante los atentados de las Torres gemelas en NY, ante otros muchos hechos violentos como el recién incendio de un bus con todo y sus ocupantes, todos piden que se pare la violencia con más violencia y es que “existe un común denominador de la eficacia sacrificial (...) Este denominador es la violencia intestina; son la disenciones, las rivalidades, los celos, las peleas entre allegados lo que el sacrificio pretende ante todo eliminar, pues restaura la armonía de la comunidad y refuerza la unidad social” (Pág.16) La pregunta que le hago a esta sociedad civilizada que pide muerte para vivir es si realmente lo vamos a lograr con un estado de derecho excluyente, corrupto y que muchas veces entra en contubernios con los poderes económicos. Bajo el sistema económico actual las víctimas son doblemente víctimas ya que ellos son los afectados directos de la configuración socioeconómica y al mismo tiempo se les convierte en sustitutos de los genuinos causantes de la espiral de violencia, el poder judicial actúa como intermediario entre el poder político y el económico y con ello “la sociedad intenta desviar hacia una víctima relativamente indiferente, a una víctima «sacrificable», una violencia que amenaza con herir a sus propios miembros, los que ella pretende proteger a cualquier precio” (Pág.12) Nuestra civilización moderna es más sacrificial que ninguna otra antes y nuestro país no escapa de esa maldición.
"Sería prudente y patriótico que Zelaya no regrese por el momento"
ENTREVISTA AL CARDENAL DE HONDURASDe 67 años y considerado tras la muerte de Juan Pablo II como uno de los más firmes candidatos a sucederlo, este salesiano nacido en Tegucigalpa y arzobispo de esta capital es de voz suave pero firme en sus convicciones. Cardenal de Honduras desde febrero de 2001, Oscar Rodríguez Maradiaga fue siempre un referente del "ala progresista" de la Iglesia Católica y líder moral y espiritual de toda Centroamérica. Maradiaga recibe a Clarín en un austerísimo despacho de no más de 5 metros cuadrados en la Iglesia La Milagrosa de Tegucigalpa y enseguida aclara que no es verdad que "hayamos apoyado el golpe. Yo no soy golpista", aunque, contradictoriamente, en la declaración que leyó el sábado 4 de julio pidió a Manuel Zelaya que no regresara al poder. "Hemos explicado lo sucedido y no hemos legitimado a nadie", buscó explicar en su diálogo con Clarín.¿Por qué se llegó a este punto que parece ser de no retorno?Porque el presidente comenzó a confrontar. No se puede construir sobre el odio. Este presidente empezó a hacer cosas muy buenas, la primera fue poner en su sitio a las compañías petroleras, que aquí hacían un negocio redondo poniendo cláusulas para ganar más. Trabajé en una comisión, y logramos que el presidente Zelaya, con una gran firmeza, lograra que la multinacionales no cometieran tantos abusos.¿El Vaticano avaló su declaración? ¿Sabía lo que Ud. iba a decir?Sí, claro. El nuncio apostólico estuvo con nosotros durante toda la sesión de un día en la que redactamos el documento.¿Por qué apoyaron el gobierno de facto de Micheletti?Eso no es verdad. Nosotros hemos explicado lo sucedido, no hemos legitimado a nadie. Aquí lo que hay que ver es el proceso y cómo Zelaya estaba violando la Constitución. Dígame ¿para qué tanto dinero para una encuesta? (N. de la R.: Se refiere a la consulta no vinculante sobre una posible reforma constitucional, pautada para el 28 de junio) Están las cámaras del banco central, con fecha, día y hora. Se ve cómo retiran 40 millones de lempiras en efectivo. ¿Cuándo los gobiernos trabajan con dinero en efectivo? Había una corrupción galopante para ese proyecto. No hubo dinero para las víctimas del terremoto pero sí para comprar votos. No es justo. ¿Con qué boca se puede pedir que regrese quien ha saqueado el Estado tan impunemente?¿Por qué cree que el presidente Chávez ha sido tan duro con Ud?No lo sé. Me llamó "loro del imperio" y "payaso vestido de cardenal". Lo peor fue lo que le dijo al pueblo hondureño. Afirmó que quien no estaba con el ALBA era un vendepatria o un idiota. Le hablamos al presidente sobre el peligro que suponía la intromisión de Chávez y él nos comentó: "Yo no soy chavista, pero a mí me sirve el dinero de Chávez". Así dijo.¿No cree que en esta situación Honduras va a quedar aislada?El daño empezó el año pasado. Los fondos de ayuda del FMI ya no llegaron porque no había presupuesto aprobado. Lo mismo pasaba este año con los fondos del Banco Mundial y del BID. Este gobierno se ha sostenido con el dinero de Chávez. Y ahí está.¿Por qué cree que la comunidad internacional condena el golpe?Es que no había información adecuada. Yo soy el primero en rechazar el golpe de Estado.Pero haber sacado a un presidente a la fuerza del país es un golpe...Lo que ven es a un presidente sacado de su casa por los militares y expulsado a Costa Rica. La Constitución dice que ningún hondureño podrá ser expatriado o entregado a un Estado extranjero y eso también lo dijimos en el mensaje del 4 de julio. Todos merecemos una explicación. No podemos aceptar eso.¿Cómo evalúa su encuentro con Insulza, el secretario de la OEA?Una página triste es la actuación de la OEA. Al secretario Insulza lo conozco desde hace tiempo y cuando vino a Tegucigalpa conmigo se portó como un caballero. Le entregué toda la documentación. Ni se molestaron en leerla. Y mire qué paradoja: apenas hace unos cuantos meses, Chávez, Morales, Correa, y Raúl Castro dijeron que la OEA no sirve para nada. Es la doble moral de la OEA.¿Le duele que lo llamen golpista?Naturalmente. Pero si a Jesús, que era hijo de Dios, le acusaron de todo, ¿qué no van a decir de un ser humano?¿Ve posible el regreso de Zelaya al poder?En este momento no, sería más prudente y patriótico que renunciara a regresar inmediatamente con tal de pacificar al país. La polarización es grande, y hay armamento en manos de los civiles.¿Usted podría mediar?Como ya me tienen fichado como golpista no me van a invitar.Hay quienes dicen que con su declaración se terminó su carrera para ser un "papable"...Uno no debe pensar en términos de carrera eclesiástica sino en la verdad, en el bien.¿Se siente un líder en Honduras?Qué voy a ser líder. Ahora Clarín dice que estoy descalificado. Este es un país pobre donde la política ha hecho tanto daño...¿Es verdad que intentó convencer a Zelaya para entrar al seminario?Tenía vocación, sí. Yo le di clases cuando tenía 14 años. Si me hubiera quedado aquí quizá hoy él sería sacerdote, pero salí al extranjero. Era un chico limpio, muy bueno. Yo estuve un año con él y conservamos la amistad desde entonces. Ha sido buen amigo.(Clarin, Argentina)
Bolivia: atisbos de certidumbre
Cómo explicar Bolivia hoy, en medio de este mare mágnum y con vistas a un lector europeo? La gran coreografía del referéndum revocatorio realizado el pasado 10 de agosto, cara en sus costes y llena de malos presagios en su preparación, ha confirmado un par de cosas: primero, la vocación cívica y democrática de la inmensa mayoría de los bolivianos que no han regateado su concurso a la hora de expresarse con su voto. Esto nos permite distinguir entre la mayoría real y las minorías eficientes que han secuestrado a Bolivia en la locura de bloqueos, manifestaciones, huelgas, ultimatos y confrontaciones aisladas pero violentas, que siguen amenazando con desquiciar a la sociedad. En segundo lugar, el importante respaldo nacional que tiene el presidente Morales. El Gobierno esperaba entre un 55% y un 60% de voto ratificatorio y la oposición entre un 51% y un 53%. Evo mostró una fortaleza mayor, ganó con alrededor del 63%, con un promedio de entre 75% y 80% en los departamentos andinos y un promedio de casi el 40% de apoyo en los departamentos del oriente y sur de Bolivia.Por su parte, las regiones que ganaron en 2006 la autonomía (sujeta a la aprobación de la nueva Constitución) y que demandan su aplicación, ratificaron dos cosas: que los prefectos sometidos al revocatorio fueron ratificados (Pando, Beni, Santa Cruz y Tarija) con promedios de entre el 51% y casi el 70% y que el presidente fue derrotado en gran parte de esas regiones.En este absurdo juego de suma cero, el presidente obtuvo un gran triunfo y los prefectos opositores obtuvieron un triunfo: el acto electoral no se tiñó de violencia. Curiosamente -supongo que víctima de la euforia de su 63%-, el presidente no arremetió contra sus adversarios, sino que en su discurso de celebración les tendió la mano para comenzar un diálogo que "armonice" el texto constitucional con los estatutos autonómicos aprobados irregularmente por cuatro departamentos entre mayo y junio de este año, teniendo en cuenta que la Constitución vigente no reconoce la autonomía como entidad jurídico-política del país. La pregunta del millón es si el talante presidencial durará más que lo que tardan en quemarse en el cielo los fuegos de artificio.Bolivia ha reafirmado algo fundamental, que cree en Evo como portador del cambio y que los políticos deben aceptar que el presidente no sólo es un factor clave del juego (obviedad que algunos parecen olvidar), sino que ha capturado a más del 80% del electorado indígena de todo el país que representa por lo menos el 45% de la población total de la nación. Tampoco es posible pensar en un escenario futuro sin su respuesta inteligente y positiva a las demandas de autonomía que llegaron para quedarse.¿Secesión? ¿Un país dividido al estilo de los Balcanes? ¿Una guerra civil? Ninguna de esas hipótesis es válida. Hay que descartar estos escenarios del imaginario internacional. La razón es muy simple: el 95% de los bolivianos quiere un país unido y un futuro compartido; el 80% quiere diálogo, y, además, no hay ningún dato que permita presumir la existencia de sectores armados con capacidad de iniciar una conflagración nacional. Para no mencionar lo más evidente, la inviabilidad económica, política y social de cualquier proyecto divisionista de encarar el futuro con posibilidades y la voluntad expresa de América del Sur de que algo así no suceda. Bolivia es geográficamente el corazón de Suramérica, y una crisis de esa magnitud afectaría a la estabilidad continental.¿Qué queda entonces? Aprovechar los categóricos resultados del referéndum para replantear la lógica de los contendientes. Recuperar la institucionalidad con el nombramiento del Tribunal Constitucional (descabezado por el presidente en 2007) y una Nueva Corte Electoral. Negociar el texto constitucional aprobado exclusivamente por el MAS (el partido del presidente) para recuperar su filosofía de inclusión y búsqueda de equidad, pero peligrosamente cargada de una visión étnico-cultural que desconoce la existencia de la República y la sustituye por un Estado de 37 naciones (más de 20 de ellas con menos de 500 miembros). Niega el pasado colonial y republicano como referente de nuestra identidad colectiva y no establece con claridad las características de la legítima inclusión de los usos y costumbres de la justicia denominada comunitaria y de las autonomías indígenas.Es indispensable hacer comprender a los ideólogos del MAS que el plus indígena rompe la idea de "un ciudadano, un voto", cuestiona la libertad y la conciencia individual como elementos constitutivos del pacto social y asume que los porcentajes de sangre indígena dan a unos más legitimidad que a otros. Repetir la historia de la discriminación no parece la mejor fórmula para resolver el racismo. De lo que se trata es de reconocer nuestro brazo indígena sin arrancarnos el brazo occidental. Para ello hay que revisar varios de los pilares de un texto, que al integrar la deseable idea de comunitarismo y de reciprocidad andina corta lazos con principios universales que siguen siendo centrales en una concepción justa de democracia.Evo, reforzado otra vez por el voto, debe corregir su error principal, negar las autonomías. Aceptarlas implica su inclusión en la nueva Constitución, no de modo tramposo como están hoy contempladas, sino sin regateos y con sentido de cesión de competencias del poder central a los poderes locales, y, además, coordinar la existencia de las autonomías departamentales con las autonomías indígenas y municipales. Las regiones deben entender a su vez que la autonomía plena no puede quitarle al Gobierno central temas como relaciones exteriores, fuerzas armadas y policía, recursos naturales y manejo de la tierra, entre las cuestiones cruciales. Autonomía quiere decir también solidaridad y compensación de los departamentos más ricos a los departamentos más pobres y finalmente, competencias claras y racionales en el tema de recaudación y distribución de los recursos provenientes de los impuestos.Evo es un símbolo y marca en la historia reciente de Bolivia un antes y un después, pero eso no debe llevarlo a confundir revolución con democracia y creer que el pacto del país se puede trabajar sobre la imposición de una hegemonía. Eso lo obliga de una vez a hacer una gestión de gobierno adecuada. Su gestión es mala por la falta de idoneidad de muchos de sus funcionarios, por una ilusión ingenua de que estatismo es sinónimo de mejor distribución de la riqueza y mayor equidad, y que decir no a los procesos "neoliberales" de tratados de libre comercio, sean bilaterales o de bloque, llevarán al "remate" del país. La errática política energética del Gobierno boliviano (en la que la "nacionalización" fue sólo retórica) es la prueba más contundente de que la consigna puede disfrazar por un tiempo los errores y el mal manejo de políticas económicas, pero la factura ya está comenzando a pasarse.Mientras el "socialismo del siglo XXI" siga siendo una entelequia, Evo corre el riesgo de seguir dilapidando el extraordinario capital histórico y popular que tiene. Si el discurso es recuperar dignidad, el argumento vale para todos. A Bolivia no le interesan las dignidades parciales y de bandera, le interesa la recuperación de una capacidad de autodeterminación en el contexto de su mínimo peso internacional, lo que obliga a un mínimo de realismo, que vale para Washington y para Caracas.El problema es que el presidente boliviano está preso de una dependencia psicológica muy fuerte de Fidel Castro y de Hugo Chávez, dependencia vinculada a una identidad de ideas (suponiendo que tengamos claro de qué ideas estamos hablando), y la inaceptable dependencia económica en el uso discrecional de gastos reservados y cheques de bolsillo a bolsillo de Chávez a Morales.Lo que viene es aún complejo y entreverado. Los adversarios siguen atrincherados, pero el referéndum ha puesto en su lugar los tamaños y el horizonte de cada cual. El diálogo no sólo es el único camino posible, sino que quizás hoy sea más viable que ayer. De lo que se trata es de hacer posible una Constitución que sea el pacto social de todos, recuperar el Estado racionalmente y crear nueve autonomías departamentales. Con eso, que no es poco, los bolivianos nos damos por bien pagados.(Publicado en El País, Madrid, el 14 de agosto 2008. El autor es ex-presidente de Bolivia)
The wrecking of Venezuela
Venezuelans are starting to fall out of love with their president. Will they be allowed to vote him out of power?WITH his bellicose bombast, theatrical gestures and dodgy jokes, Hugo Chávez, Venezuela’s president for the past 11 years, has turned himself into one of the world’s most recognisable and controversial rulers. His fans salute him as a saviour for the downtrodden of the planet, a man who is leading a grass roots revolution against American imperialism and its local sepoys. But to many others, including this newspaper, he has come to embody a new, post-cold-war model of authoritarian rule which combines a democratic mandate, populist socialism and anti-Americanism, as well as resource nationalism and carefully calibrated repression.This model has proved surprisingly successful across the world. Versions are to be found in countries as disparate and distinct as Iran, Russia, Zimbabwe and Sudan. In one way or another, these regimes claim to have created a viable alternative to liberal democracy.In Mr Chávez’s case, that claim has been backed up above all by oil. On the one hand, he has deployed oil revenues abroad to gain allies, and to sustain the Castro brothers in power in Cuba. On the other, having kicked out Western multinationals, he has signed investment deals with state-owned oil companies. Last month China agreed to lend Venezuela $20 billion, mainly for oil development. Mr Chávez has armed his revolution with Russian jets, tanks and rifles (albeit bought on tick). Meanwhile, a Spanish judge accuses his government of sheltering members of ETA, the Basque terrorist group. Intercepted e-mails from leaders of Colombia’s FARC guerrillas suggest that they have received help, and possibly arms, through Venezuela. Of course Venezuela’s government denies such claims. So just how much of a menace is Mr Chávez, and what, if anything, can be done about him?Venezuela’s dark ageCertainly his threats against Colombia...Continua en: THE ECONOMIST. http://www.economist.com/opinion/displayStory.cfm?story_id=16109302&source=hptextfeature
Recuerdos de una noche de noviembre
Pudimos ver en directo cómo el caballo de la historia galopaba desbocado, sin jinete. Miles de ciudadanos, armados con picos, palas, martillos o con las manos de su rabia contenida, de su desesperación ante un horizonte cerrado y represivo, derribaban el muro. Era el más simbólico, entre tantos habidos y por haber, el lugar de peregrinación de líderes occidentales, como Kennedy, cuando W. Brandt era alcalde de la parte occidental de aquel Berlín fracturado. Sentí la emoción del momento y la sorpresa, como todos –incluidos los que afirman que lo habían previsto–. Antes de cerrar la noche llamé a Kohl y a Brandt, los dos amigos más representativos para mí de aquella Alemania que había llegado a conocer a través de ellos. Tenía muchos más amigos, casi todos de la generación que había vivido la experiencia de la guerra y la posterior división de Alemania, el prototipo de la separación del mundo en dos bloques ideológicos antagónicos. Los dos políticos, el canciller y el ex canciller, el democristiano y el socialdemócrata, habían pesado especialmente en mi trayectoria como político y como gobernante.No sabía bien qué decirles, más allá de expresarles solidaridad y mostrarles mi convicción sobre el carácter irreversible del acontecimiento que estábamos viviendo para la unificación de Alemania y para el resto de Europa y el mundo. Aunque no sea frecuente en la tarea política, he tenido la suerte de traspasar esa frontera para compartir relaciones de amistad con los dirigentes alemanes. Brandt murió pocos años después y asistí a su funeral en el Reichstag, edificio histórico de la parte oriental de Berlín. Tuve el doloroso honor de hablar en nombre de sus muchos amigos de todo el mundo para despedirlo. Fueron cinco minutos, sin referencias políticas, ni siquiera a aquella noche de noviembre que cambió la historia para todos, alemanes, europeos y ciudadanos del mundo. Hablé más desde el corazón que desde la razón, era el amigo que se había ido. Me recordaban que era la primera vez que tomaba la palabra un extranjero en esa tribuna, recuperada para la representación democrática y con tanto poder simbólico.Helmut Kohl siguió siendo canciller casi una década más. Condujo la unificación con arrojo, asumiendo riesgos en los que había mucha más determinación que cálculo. A lo largo de los años repetía una frase que muchos conocen cuando se refería a mí: “Puedo contar con los dedos de una mano –¡y me sobran dedos!– cuántos dirigentes me llamaron esa noche para ponerse a nuestro lado”. Nunca dejó claro el número de los dedos que le sobraban en aquella mano con la que evocaba la noche de la caída del muro. Él y yo lo sabemos, pero a pesar del tiempo transcurrido sigue quedando en el aire el misterio. La galopada del caballo desbocado y sin control era peligrosa para todos. Por eso apoyé y admiré la decisión de los dirigentes que, como Kohl o Brandt, decidieron que había que cabalgarlo y conducirlo, más allá de las desconfianzas y resistencias de muchos de los socios europeos e internacionales y de no pocos de los representantes políticos de la República Federal. Como el pasado es con frecuencia tan imprevisible como el futuro, hoy, 20 años después, nadie se apunta a la lista de los que estuvieron en contra de la unificación..., ¡pero lo estuvieron! Y a la mano de Kohl le siguen sobrando dedos. Ahora, como entonces, estas palabras son de solidaridad y respeto con el hombre que quería una Alemania europea, no una Europa alemana.(El Pais Semanal)
Resumen de una injusticia
Hace unas semanas, leí con sorpresa y estupor la noticia que daba cuenta de la abrupta expulsión de José Miguel Vivanco, director para las Américas de la ONG Human Rights Watch, de Venezuela. Su expulsión, sin el más mínimo respeto a los derechos humanos del afectado, con un claro tinte autoritario, más propio de países en los que la Declaración Universal de los Derechos Humanos jamás ha sido conocida, ocurría en la capital venezolana, Caracas, y la orden no procedía de ningún juez, ni había sido precedida de un procedimiento judicial. Se había producido, manu militari, con invasión por las fuerzas policiales actuantes del domicilio (habitación de hotel) que ocupaba el interesado, sin su presencia, a escondidas y con nocturnidad. Esta acción de comando respondía al "terrible delito" cometido por el director de Human Rights Watch consistente en la presentación en rueda de prensa en aquella capital del libro titulado Una década de Chávez: Intolerancia política y oportunidades perdidas para el progreso de los derechos humanos en Venezuela.Doy por supuesto que en un país democrático, la libertad de pensamiento y de expresión son valores fundamentales que garantizan la solvencia de ese sistema, para alejarlo del autoritarismo y hacer que prevalezca el Estado de derecho. Cuando esos valores se pierden, en el horizonte de ese país aparecen nubarrones que ensombrecen cualquier posibilidad de credibilidad del mismo y se comienza a intuir un panorama de represión ideológica muy peligroso.Parece claro que la acción del director de Human Rights Watch no era merecedora de la arbitraria respuesta dada por las autoridades venezolanas, que antes de actuar así deberían haber combatido, si les interesaba, con explicaciones y argumentos las afirmaciones-acusaciones que en aquel texto se contenían. La bravuconada de la expulsión, ejemplo de debilidad interna, no conduce más que a la demostración de que la razón de la fuerza se ha impuesto por encima de la fuerza de la razón, y a privar de credibilidad a cualquier respuesta posterior.Es asimismo llamativo que a esta postura, antes que criticarla, se hayan sumado ciertos elementos del mundo político chileno (nacionalidad del señor Vivanco) y de Cuba. Asumo que en este último país las posturas sean casi miméticas a las del Gobierno venezolano, pero lo de Chile sí que me llama la atención porque con ello se demuestra la principal conclusión de libro: la intolerancia de los Gobiernos ante las críticas recibidas en materia de derechos humanos.Con ello, y recuperando los momentos más oscuros de épocas que creía superadas en Latinoamérica, se opta por "matar" al mensajero que denuncia una situación de flagrante violación y desconocimiento de los derechos humanos de miles de ciudadanos, en vez de poner los medios para remediarla, o denunciar la omisión, como el autor hace.Cuando, en este campo, se aboga porque alguien o algunos no se ocupen por los asuntos internos de un país, me vienen a la memoria todos los argumentos que durante décadas se han empleado para justificar la impunidad frente a violaciones permanentes y masivas de derechos humanos. Con ello se olvida que en la defensa de aquéllos -y en breves fechas se celebrará el 60 aniversario de su proclamación- la obligación de denuncia y persecución de los violadores es universal. Por ende, no podemos permanecer silentes antes estos hechos, más propios de quien actúa con miedo y con la amenaza del poder que ostenta, que de quien tiene y defiende la razón.De José Miguel Vivanco sólo puedo decir que lo conozco desde hace ya muchos años, desde el proceso contra la dictadura de Pinochet. Lo he visto actuar con la misma firmeza y coraje frente al Gobierno del presidente Álvaro Uribe en Colombia como frente a la Administración Bush por Guantánamo.Por ello, no me sorprende que él le aplique el mismo rasero al Gobierno de Venezuela que a cualquier otro Gobierno. Puedo decir con total convicción que las acciones de José Miguel Vivanco son coherentes con su compromiso democrático con la causa universal por los derechos humanos y con la rectitud jurídica y moral que lo han caracterizado por igual frente a Gobiernos de izquierda como de derecha.(El País. Baltasar Garzón es magistrado de la Audiencia Nacional de España, famoso por su orden de captura contra el expresidente chileno Pinochet.)
ETA, la costumbre de odiar
Imaginemos una noche de diciembre de 1973. Zona norte de Madrid. Dos jóvenes se despiden de sus anfitriones en el portal. Entre las bromas, una frase: "No os creáis nada de lo que diga la prensa mañana". Una frase genérica de complicidad antifranquista sin más trascendencia. A la mañana siguiente, al escuchar la radio, la frase adquiere una certeza cegadora: el almirante Carrero Blanco ha muerto en un atentado que se atribuye a ETA. Más tarde, las fotografías de los dos jóvenes con quienes cenaron la noche anterior figuran, junto a las de otros cuatro, en las portadas de todos los periódicos de la capital. Semejante escena podría haber sido la del comienzo de un proceso de conciencia que ha durado casi 40 años, en el que la simpatía inicial de algunos hacia ETA derivó hacia un rechazo cada vez más firme, el que ayer volvió a manifestarse tras el bárbaro ataque contra la casa cuartel de Burgos.(lea artículo completo en El País)
Una negociación: la única salida posible para Venezuela. De Alberto Barrera Tyszka
No existe otra alternativa para salir de la crisis en la que se encuentra el país. Lo que está en juego es su supervivencia. Negociar es incómodo, pero también es imprescindible.ImageCreditCreditFoto: Meridith Kohut para The New York TimesPublicado en THE NEW YORK TIMES/español, 25 agosto 2019 Alberto Barrera Tyszka, escritor,guionista y columnistavenezolanoCARACAS — Negociar es un verbo incómodo. En el mundo donde el verbo ganar se impone y extiende cada vez más sus límites, incluso hasta en el terreno de los afectos y de la amistad, una negociación puede ser percibida como una simple versión educada de una derrota. Es obvio que nadie negocia por gusto pero, también, es evidente que en la abrumadora mayoría de los conflictos la única salida es un acuerdo.El caso de Venezuela no es la excepción. Sin embargo, el tiempo pasa, la tragedia para la mayoría de la población aumenta y todos los factores en pugna siguen sin llegar a un acuerdo. En los diferentes bandos, parece haber fuerzas empeñadas en sabotear una negociación. La única posibilidad de salida de la crisis que tiene el país se encuentra en momento muy frágil.Desde hace meses, guiados por la iniciativa del gobierno de Noruega, se viene construyendo en Barbados un espacio posible para un acuerdo. Pero la nueva ronda de sanciones impuestas a Venezuela por el Departamento de Estado estounidense, en agosto, han representado un paso atrás en el camino de una solución concertada a la crisis venezolana. Los representantes de Nicolás Maduro abandonaron la mesa de negociación y, de manera inmediata, como si fuera el dispositivo de una iglesia eléctronica, activaron un viejo truco: la narrativa del bloqueo, la retórica antiimperialista.Una persona pasa por un mural en Caracas, el 6 de agosto de 2019.CreditLeonardo Fernández/Associated PressEl bloqueo gringo funciona como un libreto melodramático. Frente a él, los otros argumentos siempre parecen más complicados y farragosos. Se requieren estadísticas, datos o el respaldo de investigaciones periodísticas para explicar cómo la naturaleza del modelo, la ineficiencia política y la enorme corrupción del chavismo son las causas de la tragedia venezolana. Mucho más fácil es señalar a Donald Trump. Frente a las sanciones, el gobierno tiene un relato. La oposición, no. Y no importa que su relato sea simple o anticuado, sigue funcionando. El presidente de Estados Unidos no es un político. También él está más cerca del estereotipo que de la complejidad. Es un hombre irritante, con opiniones y modos indefendibles.Se trata de un espectáculo simbólico largamente deseado por el chavismo. Forma parte, además, de uno de los escasísimos éxitos de la Revolución cubana: la historia de la isla ha demostrado que la eficacia del relato es más sólida y rentable que la del bloqueo económico. Aunque los arrincone económicamente y tenga efectos devastadores para la población, las sanciones —al menos en términos de discurso y propaganda— solo favorecen al oficialismo. Cuentan, además, con la mirada crítica del resto de la comunidad internacional. La propia Michelle Bachelet, alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, salió alertando sobre las consecuencias que podrían tener estas medidas unilaterales sobre una población ya suficientemente vulnerada por la crisis.Pero además de esto, también hay que contar con el avasallante dominio sobre el flujo de información que tiene el gobierno de Maduro. Su control mediático sobre el país es casi total. El cerco noticioso que impone a la población no solo se basa en la censura sino también en la producción y distribución de una realidad paralela, la creación de una objetividad basada en la ficción. Actualmente, ni siquiera es posible acceder de forma natural a las plataformas de los diferentes medios digitales independientes.Esta semana, en la inauguración de una terminal de autobuses en la costa cercana a Caracas, el gobierno obligó a todas las estaciones de radio y de televisión a transmitir el acto oficial. Nicolás Maduro, acompañado de su esposa y de otros funcionarios, paseó por el local, señalando tiendas y ficcionalizando la vida cotidiana de cualquier ciudadano: aquí pueden venir —decía— y comprarse un pantalón, hacer una diligencia en el banco, adquirir un pasaje para ir de vacaciones. La enorme mayoría de los venezolanos no puede hacer ninguna de estas cosas. Para ese mismo día, el sueldo mínimo mensual era de 2 dólares. La realidad es presentada como un espejismo, como una posibilidad de futuro —obra genial y generosa de la Revolución— truncada por el atorrante míster Trump.¿Está acaso Estados Unidos repitiendo el mismo error que lo ha hecho fracasar, durante décadas, con el régimen cubano? Suponer que la presión cada vez mayor sobre el régimen erosionará la lealtad militar o generará una implosión en contra de Maduro puede ser una estrategia equivocada. Las consecuencias de las sanciones, en una buena medida, dependen también de la naturaleza moral del adversario. El chavismo, desde hace mucho, ha demostrado que puede jugar a la destrucción sin ningún miramento. En política, la falta de escrúpulos es muy eficaz.Es tentador atornillarse en el purismo. Hay quienes, dentro de la oposición, creen que una negociación solo legitima y ayuda al régimen de Maduro. Estos sectores se han dedicado a boicotear cualquier esfuerzo en la dirección de un acuerdo. Es cierto que, anteriormente, en procesos similares, el gobierno solo ha usado el diálogo como excusa, como oportunidad para ganar tiempo. Pero también es cierto que nunca antes el oficialismo se había encontrado tan arrinconado internacionalmente. Por otro lado, las propuestas alternativas a la negociación solo son acciones políticas que dependen de otros: que el propio Maduro renuncie o que haya una invasión militar extranjera. Ninguna de estas dos opciones es viable. La radicalidad también puede ser una zona de confort. Mucho más difícil y complejo es negociar.Lo primero que ha debido enfrentar este proceso de negociaciones en Barbados son las resistencias que hay en todos los bandos, tanto fuera como dentro del país. El problema pasa por situarse en un modo distinto ante el otro y ante la idea misma de un pacto. Hay que entender y aceptar que ninguno de los sectores en pugna obtendrá realmente lo que quiere, lo que busca, lo que necesita. La única manera de ganar es perdiendo algo. Si no hay un futuro repartido, no habrá un futuro para nadie. Lo que está en juego finalmente es la supervivencia del país. Hacer política es ceder. Negociar es incómodo. Pero también es imprescindible.
La gran tentación
La olimpiada en Pekín nos sirve de referente para un cambio global de la distribución de poderes. Los triunfos de China y de Rusia, además de su significado deportivo, señalan la definitiva emergencia de dos grandes potencias mundiales y el fin del pasajero unilateralismo de los Estados Unidos de América. La guerra fría duró medio siglo y enfrentó a dos naciones y a dos sistemas: Estados Unidos y la Unión Soviética, el capitalismo democrático y el socialismo autoritario. Ambos se acusaban de "imperialistas", y para la América Latina, Estados Unidos lo era, como la Unión Soviética lo era para la Europa central. En los márgenes, los "no alineados" -Nehru, Tito, Nasser-, y abajo, el Tercer Mundo de los países débiles o, con gracioso eufemismo, en desarrollo.Estados Unidos ganó la guerra fría porque la Unión Soviética la perdió. Gorbachov reconoció que el poder armado de Moscú ni reflejaba ni resolvía la pobreza de la economía: devoraba la riqueza potencial. China, demonizada por Mao, inició con Deng Xiaoping un camino de gran desarrollo. Pero el fin de la guerra fría dejó un vacío político global que llenó el Estados Unidos de George W. Bush con una arrogancia unilateralista miope, desorientada y falaz que empeñó el prestigio y el presupuesto del país en una guerra "contra el terror" que derrumbó a un tirano dispensable -Sadam Hussein- sin tocarle un pelo de las barbas a Osama bin Laden y los talibanes, refugiados en las fronteras de un aliado de Bush, el Pakistán de Musharraf.Mientras, los norteamericanos violaban no sólo los principios humanitarios, sino las propias leyes de Estados Unidos, creando y manteniendo campos de concentración y de tortura en Abu Ghraib y en Guantánamo y dejando que la guerra "contra el terror" fuese percibida como guerra "contra el Islam", perdiendo así no solo simpatía, sino credibilidad, y ganando enemigos de un punto al otro del mundo musulmán.Mientras Bush se perdía en estos vericuetos del fracaso, Rusia y China se adelantaban a ocupar las posiciones de éxito que hoy resultan evidentes. China se abrió al mundo, pero se cerró a la democracia, creando un modelo de desarrollo rápido que podemos llamar "capitalismo autoritario". El mundo capitalista occidental, que se estima democrático, acudió al llamado de la gran sirena roja, China, regañándola infantilmente por sus travesuras autoritarias, pero aprovechando -¡cómo lo iban a desaprovechar!- un mercado de más de mil millones de clientes potenciales -la quinta parte de la humanidad-.No desdeño los esfuerzos democratizadores que, a la larga, traiga el desarrollo económico aChina. Hoy se ven muy lejanos. En cambio, el autoritarismo se engalana con las olimpiadas, vence cotidianamente a EE UU y propone una vía veloz, eficaz y tentadora hacia el desarrollo: el avance capitalista sin las molestias de la democracia, la rapidez de la expansión sin las demoras de la libertad. ¿A cuántos países en desarrollo no les resultará tentadora -irresistible- esta fórmula? Sobre todo cuando el desarrollo nacional es frenado o interrumpido por la violencia impune, hiriendo- como en el terrible caso del joven Fernando Martí en México- a una ciudadanía inerme rodeada de narcos, policías que son criminales, criminales que son policías, y un ejército al que con razón le repugna hacer labores policíacas. Surge entonces -no lo deseo, pero lo temo- la tentación totalitaria. Sólo un estado más fuerte que el crimen puede abatir al crimen, aunque sea cometiendo crímenes. Indeseable realidad.La "tentación autoritaria" también la ofrece la Rusia de Vladímir Putin. Vencido y desmembrado el imperio soviético casi por "la fuerza de las cosas", Boris Yeltsin confundió la democracia con la debilidad y el capitalismo con la cleptocracia. Las grandes empresas del Estado pasaron a manos de particulares; a veces, los gerentes de aquéllas se convirtieron en los dueños de éstas. Librada al hambre feroz de un capitalismo naciente, Rusia se libró a sí misma a una disminución anárquica.Putin llegó con la clara intención de restaurar el poder de la gran Moscovia. Él es heredero de Iván el Terrible, de Pedro el Grande y del terrible, aunque no grande, Stalin. Putin no se anda con cuentos. Cuando la revista Time, declarándolo hombre del año, le pregunta cuáles son sus deseos, Putin contesta: "Aquí no deseamos. Aquí trabajamos" -posa con torso desnudo para lucir su musculatura-, lanza a Sarkozy frente a las cámaras, tartamudo, con más vodka que el admitido por la razón de estado francesa. Baña de sangre a Chechenia, como ejemplo. Y si el alto dirigente georgiano, Mijaíl Shaakashvili, lo llama Liliputin, el mundo ve al nuevo Zar como un tremendo Ras-Putin o Zar-Putin. Estados Unidos quiere rodearlo de misiles en Polonia y de peleles en Georgia. Putin envía los tanques al sur, no porque le tema a Georgia, sino para advertirle a Europa y al mundo: por aquí pasa el petróleo sin el cual sus economías se desploman. El imperialismo del oleoducto, el poder del gasoducto, convierte al occidente europeo en cliente indispensable de Rusia. ¿Sabrá Putin transformar el petropoder en economía de consumo, productiva y diversificada hacia el exterior y hacia el interior? Todo indica que lo hará, si puede, pero con un régimen de autoritarismo creciente.La implacable Maureen Dowd escribe en el Herald Tribune la lista de los ocho años de errores de Bush. La destructiva obsesión con Irak. La borrachera ideológica del neo-conservadurismo. La satanización de países con los cuales, a la postre, hay que tratar: Corea del Norte, Irán, Siria, Cuba.Y mientras el Gobierno de Bush iba de fracaso en fracaso, China se apoderó de una parte tan vasta de la economía norteamericana que, si la retiraran, EE UU sería "un pato a la pekinesa". Y Rusia se ha transformado de un país mendigo en una potencia mundial.Hay en todo esto un claro llamado internacional para la restauración del derecho, la negociación y la diplomacia. Y hay algo más. Mientras Bush jugaba golf en Texas, el antiguo imperio "de en medio", China, y el antiguo imperio de "la tercera Roma", Rusia, recobraron sus posiciones de fuerza y las adornaron con los prestigios del pasado histórico. No por nada, el fastuoso espectáculo olímpico se inauguró, de manera reiterada, con la memoria de la civilización imperial de China, la gran "cabalgata" a la que se refirió un día André Malraux: la reserva histórica de los imperios que regresan por sus fueros y le imponen al siguiente jefe de Estado norteamericano el deber de negociar con los imperios a partir de la fuerza democrática interna de EE UU. Esto no parece entenderlo McCain, aferrado a las soluciones de fuerza. Parece entenderlo Obama, consciente de las soluciones diplomáticas. Ojalá no le cueste la vida.(El País)