Se trata de una paciente de 73 años de edad que acude a consulta ginecológica por metrorragia . A la exploración no se observa patología ginecológica y es derivada al servicio de urología para estudio . La paciente tiene antecedentes personales de histerectomía previa hace 20 años por leiomiomas , y acude a consulta de urología desde hace cuatro años por cuadro de dolor , hematuria e infecciones urinarias de repetición , habiéndose realizado en las primeras consultas estudio urológico que incluye citoscopia con biopsia múltiple con el resultado anatomopatológico de inflamación y displasia urotelial . Posteriormente ha seguido revisiones periódicas , incluyendo citologías y citoscopias de control con biopsia fría , sin evidencia de neoplasia . Al ser derivada por la consulta a ginecología , se realiza estudio ecográfico en el que se observa una imagen hipoecoica adyacente a la vejiga , aconsejándose TAC . En el TAC pélvico se describe una tumoración ovalada , de contornos bien definidos , de densidad partes blandas , ligeramente heterogénea , de unos 5 cm de diámetro máximo , localizada adyacente al margen anterior izquierdo de la vejiga sin comunicación con la luz vesical , presentando unos márgenes mal definidos con aparente infiltración de la grasa perivesical , y que en el margen anterior e inferior presenta una imagen lineal de densidad partes blandas que parece contactar con la pared abdominal . Con el diagnóstico de masa prevesical sospechosa de quiste desmoide o tumoración de uraco persistente , se procede a la intervención quirúrgica . Se practica incisión de laparotomía media con resección del proceso neoformativo prevesical asociada a cistectomía parcial . En el estudio macroscópico de la pieza se describe una formación ovalada de consistencia elástica que mide 8x4 cm , y que al corte parece corresponder a una formación quística llena de material grisáceo y friable . En el estudio microscópico se puede ver que la pared de dicha cavidad está constituida por tejido fibromuscular y partiendo de ella se observa una neoplasia papilar grado III de epitelio transicional , que presenta un crecimiento fundamentalmente exofítico hacia la luz del ducto , sin infiltrar la totalidad de la pared . El tumor infiltra la pared muscular de la vejiga , incluida en uno de los extremos de resección , sin alcanzar la mucosa , no observándose neoplasia urotelial en el epitelio de revestimiento vesical . La paciente cursa sin incidentes destacables tras la intervención , siendo dada de alta hospitalaria y permanece asintomática actualmente .